ayer olvidó la cámara en la casa de yongbok.
sabía que algo se le iba por alto, su mente era un torbellino de pensamientos negativos sabor amargo realidad, pero se puso tan nostálgico que llamó a sookyung dos veces a media noche sin recibir respuestas.
estaba arrepentido, más de lo que debería sentirse, ya que había metido la pata en un hueco profundo sin salida más que aceptar que ese lugar lo iban a demoler sin piedad alguna.
¿a dónde irán esos niños? la pequeña liz se levantó llorando debido a la ausencia del mayor y los niños también lo estaban esperando en la puerta con muchas ansias a que volviera.
pero yongbok guardó la cámara para él también buscando devolverla en algún momento.
por suerte, hyunjin tenía el USB original para la evidencia, el otro se lo habían quedado la cámara con fotos de los niños que no saldría a la luz para nadie en ningún informe jurídico.
hablando de su trabajo, el próximo tren a la gran ciudad saldría pronto en unos días por lo que alistó sus maletas para irse, no quería despedirse ahora, era muy pronto.
por lo que nuevamente en la mañana tocó rítmicamente la puerta recibiendo una respuesta inmediata.
era jungwon.
“¡señor! ¡vino en el momento indicado!”
no faltó mucho para sentir un cálido abrazo aferrarse en su pierna, no se necesitaba adivinar el personaje.
jungwon estaba muy alegre de recibir a hyunjin de nuevo así como la pequeña koala de los abrazos, llamó la atención de sus hermanos para recibirlo en su hogar, invitando a pasar y a sentarse en la sala.
“¿y yongbok?”
“está arriba.” ─── respondió jake quién se sentó de primero al lado del mayor.
“creo que le está cambiando el pañal a gaeul, otra vez.” ─── clamó el menor de los tres quien se cruzaba de brazos.
liz estaba aferrada a hyunjin que no lo soltaba, ella lloró cuando se despertó sin sentirlo cerca, se sintió tan asustada y pensó que se había ido sin ella.
“¿quiere jugar al castillo con nosotros?”
“sí, ¡seguro ese juego animará a liz!”
parece que los niños ya estaban intentando subirle los ánimos a la rubia, sin éxito alguno, su único consuelo era ver a su “papá” de nuevo junto a ella para jugar.
“¿y cómo se juega al castillo?” ─── pregunta hyunjin interesado. jake saltó emocionado por explicarle.
“bueno, todos tenemos un rol, jungwon es el dragón, wonyoung es la reina bruja, liz es la princesa, soobin es el caballo parlante y por último yo soy el príncipe pero tú también puedes serlo, ¡yo seré tu fiel amigo en esta gran aventura!.” ─── anunció los papeles del juego que estaban haciendo y ya se imaginaba todos los escenarios graciosos que los niños se inventan.
los niños se reunieron en círculo para explicarle a hyunjin como debía ser un príncipe y las reglas del juego.
yongbok estaba bajando las escaleras con la bebé en mano, tenía un delantal puesto remarcando lo lindo que se veía con su cabello recogido, ver a hyunjin hizo que retrocediera justamente para arreglarse.
su llegada tomó de imprevisto a hyunjin quién aceptó gustoso la invitación de los niños, yongbok saludó.
“hyunjin, hola. pensé que no vendrías.” ─── gaeul hizo un pequeño balbuceo de saludo y extendió sus brazos para que la cargase.
“sí, me vine a pasear por aquí, ayer olvidé...”
“¿esto?” ─── preguntó yongbok mientras sacaba la cámara de uno de los bolsillos del delantal, todavía tenía su USB puesto.
“sí, perdón lo dejé sin querer.” ─── se levantó para tomarlo entre las manos y había una nota puesta dentro de ella.
«ábrelo cuando estés solo.» ¿qué significa? pasó desapercibido por los menores pero yongbok aún así evitando la mirada concentrado en la más pequeña sabía que hyunjin había leído la nota que guardó rápidamente en uno de los bolsillos del pantalón.
no obstante los niños pronto iniciarían sus clases de lectura por lo que en vez de jugar como tenían pensado hacer, los envió dentro del salon donde recibían clases, menos a liz, que no se despegaba de hyunjin.
“ahora voy a darles clases a los niños, puedes venir con nosotros.” ─── invitó.
“ah, claro.” ─── el mayor miró hacia bajo, la pequeña ocultaba su rostro mientras todavía soltaba pequeños sollozos.
el salón de lectura, ya había entrado ahí antes, los pequeños asientos con las mesitas y los pósters de caricaturas pegados en las paredes.
todos se posicionaron al rededor de una mesita y escogieron uno de los libros que estaba en la estantería, yongbok se sentó con todos ellos sentados en el piso junto a hyunjin que los miraba a lo lejos con una mirada curiosa.
eso lo tendría que anotar en alguna parte del informe.
“bueno, hoy le toca leer a soobin.” ─── el menor abrió uno de los cuentos que tenían pequeños juegos como crucigramas y laberintos.
el menor comenzó a leer manteniendo fluida las frases pero aún así no podía leer bien palabras largas sin tener que titubear un poco, liz se sentó al lado de yongbok para poner su cabecita en los hombros del mayor.
“muy bien soobin, ahora separa en sílabas la palabra castillo.”
“cas–ti–llo” ─── respondió rápidamente, hyunjin se sorprendió por lo bien que estaban aprendiendo.
“¿y cuántas sílabas tiene liz?” ─── yongbok miró con mucha dulzura a la pequeña quién estaba un poco confundida por la situación debido al llanto sutil que ocultaba entre sus manos.
ella le cuesta entender que es una sílaba, y también le cuesta la letra r.
“uno.” ─── pensó aún desconfiada viendo a sus dedos, yongbok intentó ayudarla repitiendo la palabra mientras la ayudaba a sacar los dedos para contar. ─── “dos”
aunque el rubio no era maestro, ni tampoco tenía una licenciatura en educación, era muy bueno manejando a los más pequeños y explicarles con ternura y suavidad, hacia ver las clases más entretenidas.
“¡tles!” ─── mostró tres dedos muy entusiasmada con su mano derecha.
“¡bien hecho liz! castillo tiene tres silabas.” ─── afirmó el mayor de todos.
los niños empezaron una ronda de aplausos emocionados debido a que liz sabía la respuesta, ¡adorable!.
las clases transcurrieron con normalidad, era común los aplausos y elogios cuando alguno de ellos obtenía una respuesta correcta, aprendían rápido, unos más que otros pero iban al mismo ritmo.
ya tocaba el tiempo del almuerzo, pero las clases de wonyoung seguían después, justamente una hora antes de la hora de almorzar.
los niños fueron en filas avisándole a hyunjin que después lo invitarían a jugar, subieron con sus caritas adormecidas arrastrando los pies por las escaleras hacia la habitación, su cuerpo les indicaba que ya era hora de descansar antes del almuerzo.
todos abandonaron la sala menos yongbok, se quedó a solas con hyunjin quién esperaba por él parado en la puerta.
“haces un buen trabajo.” ─── de él sale un suspiro, por alguna razón está pensativo y siente como si su actitud hubiera cambiado con el pasar del tiempo, no sabe cuál es ese peso que carga sobre sus hombros o la ansiedad que pasa tras su mente, quiere tratar de leerlo con la mirada, oculta algo.
“gracias, me gusta dar clases.” ─── dijo seguidamente se incorpora. sus pies se dirigen sigilosamente a hyunjin quién tiene las manos en los bolsillos, yongbok dibuja una sonrisa socarrona en sus labios ante la rígida postura del mayor. ─── “¿qué te pasa? estás raro.”
“nada, solo... ” ─── trató de buscar alguna explicación de lo que pasó anoche, el mal trago de que pronto se acabaría todo lo que en pocos días construyó y que todo es su culpa, pero lo esconde con una sonrisa correspondiente. ─── “el trabajo. estoy preocupado.”
yongbok amplía su risa y deja salir una sutil carcajada. ─── “no te preocupes por eso, cuando vuelvas puedes resolver todo lo que quieras. por ahora, solo disfrútalo.”
¿por qué ahora siente que todo está decayendo a su alrededor? cada risa le recuerda lo miserable que la está pasando, por qué más días pasa cerca de ellos, más podía sentir culpable de todo el asunto, pero... ese sentimiento familiar no desaparece, se fortalece y crece, persiste y se queda grabado en su memoria.
yongbok sostiene las manos de hyunjin apretándose en un fuerte agarre.
“entonces... ¿te gustan mis clases?” ─── menciona en un tono juguetón mientras mira de arriba hacia abajo. hyunjin evita la mirada pero aún así se ríe debido al repentino tacto de sus manos.
“sí, son entretenidas.” ─── responde mientras deja un suave roce de sus dedos con los de yongbok. el finalmente le devuelve la mirada fija en él, es tan lindo cuando quiere serlo, podía obtener cualquier cosa fácilmente si tan solo se lo pedía.
pero, ¿hasta donde podía llegar ese poder? sus ojos se pasean por los labios en forma de corazón que observa muy atentamente mojar con su lengua, morder de forma provocativa para luego dejar un leve sonrojo en sus mejillas, era magnífico como cada simple gesto podía llegar a llamar la atención de hyunjin, someterlo en un hechizo jodidamente hipnotizante.
“¿soy entretenido?” ─── juega sonriendo pícaro, él no sabe el tanto mal que se está haciendo a sí mismo tratando de coquetear de esa manera con hyunjin, porque a él le estaba gustando.
y eso era malo.
“lo eres.”
tal vez en alguna parte de sus mentes nunca se cruzó llegar a la vida de otro para alterar sus planes, y darle un giro al camino recto que estaban dispuestos a seguir.
la cercanía que hay entre ellos enciende una llama calurosa que los incendia con el deseo, un ensueño del que ambos se niegan a despertar, inevitablemente pasará pero ninguno de ellos estaba consciente de eso ahora.
tal vez pasaron varios minutos mirándose y admirando el suave tacto que se formó en sus manos como un juego de caricias suaves que se daban.
pero los pasos de la mayor de la camada de niños aparece con un cuaderno amarillo en la mano viendo con desconcierto esta escena.
“¿hoy tengo clases?” ─── pregunta wonyoung parada ahí esperando respuesta, la voz de la menor alerta a ambos de lo que estaba pasando y rápidamente se deshacen del agarre.
“sí, hoy tienes clases.” ─── responde yongbok.
pero ahora más que nunca sus mejillas se acaloraron de la vergüenza que yongbok estaba pasando frente a su hija mayor y hyunjin sentía la incomodidad de su mirar.
“de hecho, yo... ya me iba.” ─── se apresuró en decir para encaminarse hacia la salida tratando de huir de la incomodidad de acto inmediato el pelirubio se alarmó.
“no, no, por favor quédate hasta el almuerzo, te invito a comer con nosotros.” ─── nuevamente toma con su mano la muñeca de hyunjin intentando su ida, por lo que se quedaría un rato más.
tiempo que se le pasó viendo interesado a yongbok dar clases y darle miradas ocasionales.
🌳
llega la hora del almuerzo, hyunjin se ofreció a entretener a los niños y ayudar a servir los platos de comida.
en la cocina estaban pasando diversas cosas al mismo tiempo, la charla de jungwon y liz sobre el cuento de los castillos, jake y soobin jugando con la bebé a ponerle distintos disfraces.
y por último esa dulce mirada de yongbok sobre él, suponiendo que lo está tratando de seducir con ese lindo delantal puesto.
pero él aleja esos pensamientos mientras devuelve la mirada a los más pequeños.
“liz, en los castillos hay un trono gigante donde se sienta el rey a comer pollo.” ─── dijo muy orgulloso. ─── “pero aquí, los reyes toman sopa, ¿sabes quiénes son los reyes?”
“¡yo!” ─── exclama liz muy animada por señalar.
“¿a ustedes les gusta el pollo? en la ciudad es común.” ─── agrega hyunjin, a la menor se le resplandece la mirada al oír hablar de la ciudad. ¿comer pollo? ¡eso es genial!
“sí, a mí me gusta, un día le tomamos prestado a una señora unos de esos pollos grandes, ¡eran los mejores que he probado en mi vida!” ─── hyunjin mira directamente al rubio que se ve ofendido por lo que acaba de decir jungwon inocentemente.
“dios, jungwon, eso no se dice.”
“¿por qué? es verdad. a poco si pasó, ¿no wonyoung? a tí también te gustó.” ─── dijo muy animado haciendo que su papá se pongo muy rojo con un tomate, la mayor asiente afirmando con una sonrisa triunfal.
liz tímida le jala un poco de la camisa a hyunjin para preguntarle algo en secreto, acercándose a su oído para susurrarle una quisquillosa pregunta.
“¿en la ciudad hay reyes que comen pollo?”
“no lo creo. pero puedo traerles comida de la ciudad.”
“¿promesa?” ─── ella saca su dedo meñique en señal de un trato, hyunjin repite el gesto enlazando su dedo con el de la más pequeña.
“promesa de meñique.” ─── ella sonríe satisfecha, ahora puede confirmar que sí es su papá.
“¡hey liz! ¡no sé vale! yo estaba hablando con él primero.” ─── jungwon puchereó con su típico celos cuando alguien más tenía la atención.
ellos almorzaron sopa, la misma comida de siempre, pasaron la tarde jugando y conversando sobre castillos, la ciudad y comida hasta caer casi la noche, que pinta la ciudad de los hermosos atardeceres del pueblo.
🤲🏻 ୵ © aquarelaz ⪦
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro