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{Maratón 1/4}

Un día después de ser juzgado Jungkook se encontraba entrando al centro penitenciario. Sus pies se arrastraban con lentitud y sentía el martilleo de su corazón justo en su garganta.

Estaba tan asustado, su cuerpo enteró temblaba y gruesas lágrimas rodaban sin cesar por sus mejillas. Quería ser fuerte, lo intento una y otra vez sin éxito alguno.

Antes de salir de su departamento por última vez se prometió que no iba a seguir llorando, pero simplemente fue imposible.

No vería el exterior durante cuatro largos años, a la hora de salir no tendría empleó y quizás tampoco un lugar donde vivir.

Sus años de estudio y dedicación se habían ido directamente a la cesta de basura. Pero lo que más le dolía era que no iba a ver a Jimin nunca y menos a su hijo o hija.

¿Cómo estará?

¿sus padres lo lastimarian o quizás su hermano?

Ellos nunca le habían puesto una mano encima a Jimin así que lo dudaba, pero con la actitud que tenían puede que aquello haya quedado en el pasado.

Nunca llego a imaginar que reaccionarian tan mal, creyó que los aceptarían y después de asimilarlo tal vez se podrían felices por su relación.

Por desgracia las cosas no podían ser tan buenas.

Un golpe sobre el mostrador lo hizo saltar del susto. El oficial estaba llamando su atención, al parecer le habían hecho una pregunta.

—Lo siento —aclaró su garganta nervioso y observó al encargado del registró.

—Nombré y edad —habló con seriedad el hombre.

—Jeon Jungkook, veintiséis años —murmuró y bajo la mirada a sus zapatos.

—Tenga, aquí debe dejar todas sus pertencias. Estas se le regresaran cuando terminé su condena —le entregó una canasta de color blanco. En esta había sido anotado su nombre y edad junto a un número.

Sin decir nada comenzó a quitarse su reloj, los aretes que llevaba, un collar que le regalo Jimin y por último su celular. Trago grueso y observó al hombre calvo.

—Eso es todo —murmure y llevé mis manos hasta los bolsillos de mi pantalón.

—Sigame —el oficial comenzó a caminar por un largo y angosto pasillo. Al final de este había una puerta de color gris oscuro, dentro del salón se encontraba otro oficial y un par de reclusos más—. Quítese la ropa y póngase contra la pared

En ese momento el temor regresó inmediatamente a mi sistema. Esta sería mi realidad de ahora en adelante, tal vez las cosas nunca regresen a la normalidad. Así salga todo habrá cambiado para mi.

¿Por qué tengo que sufrir todo esto solo por amar a Jimin?

¿Por qué no podemos ser felices?

Llene mis pulmones de aire y obedecí, quite prenda por prenda hasta quedar completamente desnudo. Apoye mis manos contra la fría pared y cerré los ojos con fuerza al sentir los dedos del oficial sobre mis partes íntimas, seguido de un horrible dolor.

Desearía que todo esto acabé, desearía estar al lado de Jimin. Quiero besarlo, abrazarlo y decirle una y otra vez cuanto lo amo.

Al terminar el registro nos entregaron nuestros respectivos uniformes y cada uno fue guiado a su celda.

Al entrar a la mía observé con disimulo al hombre tatuado que se encontraba en la litera de arriba. Algo dentro de mi sabía a la perfección que algo malo sucedería, por mi aspecto estaba claro que sería un blanco fácil...

Tragué aquel molesto nudo en mi garganta y camine despacio hasta mi cama.

—Alto ahí, ¿Crees que vas a dormir en una cama mariquita? —aquel hombre tatuado soltó una carcajada y de un salto bajo de la litera.

—Amm, yo puedo dormir en cual-

—¿Te dije que podías hablar? La vas a pasar muy mal aquí... —sonrió con cinismo.

Jungkook no tuvo que ser un genio para saber que le iba a suceder.

Al recibir el primer golpe intento defenderse, le regresaba los puños como podía. Pero en un punto su cuerpo dejó de responder y cayó al suelo.

El hombre no se cansaba y pateaba su estómago y rostro sin pudor.

Kook no supo cuando tiempo paso, hasta que su vista se tornó negra y perdió el conocimiento.

El último pensamiento que tuvo fue de Jimin, recuerdos suyos. De su bella sonrisa, sus lindos ojos y su cabello rubio...

《Una semana y media después》

Yoongi mordía sus uñas y caminaba de un lado a otro por el pasillo. Estaba afuera del cuarto de Jimin sin saber que hacer, hace días el rubio no salia y no comía.

Por las noches lo escuchaba llorando y quejándose de dolor.

Se sentía realmente mal, culpable e idiota. Había actuado por impulso y ahora su hermano iba a enfermar y su amigo tal vez no...

Negó con la cabeza y armandose de valor golpeó tres veces la puerta.

—Jimin... —trago grueso— mamá te preparó carne frita y papas a la francesa ¿Te lo traigo?

Espero unos minutos sin obtener respuesta alguna.

—Jimin por favor

—Lárgate de aquí, no te quiero escuchar más. Me tienes harto —soltó con rabia— ¡Déjame en p-az! —su voz se quebró a lo último.

—Herma-

—¡Nada de hermano! —Jimin guardo la comida bajo la cama  y se acercó a la puerta. Él no había dejado de comer, No dañaría a su bebé. Iba a cumplir su palabra de cuidarlo, así que por más que no quisiera lo hacía. Salia todas las noches en silencio y llevaba a su cuarto todo lo que se le antojaba—. Vete de aquí ahora

—No me voy a ir, no haz estado comiendo —se pego más a la puerta— Sabes que me preo-

Jimin abrió la puerta de golpe haciéndo que Yoongi casi se cayera.

—¿Te preocupas por mi? —frunció el ceño— Si te preocuparas por mi no habrías hecho toda esta mierda, solo piensas en ti y no en lo que haz ocasionado en mi ni mucho menos en Jungkook —sus ojos se llenaron de lágrimas–. ¿Acaso no haz pensado en todo lo que le estará pasando allá? —un par de lágrimas se escaparon de sus ojos y rodaron por sus mejillas— a un chico que jamás había est-ado en l-ugares as‐í —negó con la cabeza un sollozo escapo de sus gruesos labios. No quería ni imaginar que cosas la podrían haber hecho ya a su novio. Tenía miedo, todas las noches le rogaba a dios para que cuidara a Jungkook. No sabía que haría con su vida si lo perdiera—. Te odio, no te quiero ver nunca más y en cuanto pueda me iré de esta casa

Yoongi se mantenía en silencio escuchando todo lo que decía su hermanito menor.

Él tenía razón, había sido egoísta. Actúo sin pensar en todo lo que ocasionaría esto a Jimin o a Jungkook. Se lleno de irá y lo único que quiso fue que Jeon recibiera un castigo por haberlo traicionado de tal forma.

Se enojo tanto e hizo hasta lo imposible para separarlo de su hermano. Había llegado muy lejos y lo sabía.

Cada noche que pasaba se preguntaba una y otra vez si había hecho lo correcto y la respuesta siempre era negativa. La habia cagado en grande y ahora no tenía ni la menor idea de que hacer para solucionar su gran error.

—Jimin yo...

—No digas nada —negó con la cabeza triste— sabes... —guardo Silencio pensando en si debía decirlo o no. Tal vez no sería buena idea pero con el tiempo lo notarian, prácticamente sería imposible ocultarlo— Estoy embarazado

Min abrió la boca en una perfecta "O" y bajo la mirada a la pancita de Jimin.

—Jungkook...—sonrió con tristeza— estaba tan feliz por tener un bebito, pero luego llegaste tu y arruinaste todo —miró a su hermano con odio—. Nunca pensé que tu o mis padres nos harían esto, ustedes fueron mi peor enemigo

—M-mochi yo

—¡Cállate! —limpió sus lágrimas con brusquedad—. No me vuelvas a hablar nunca Yoongi, no te quiero ver a ti ni a mis padres

—No digas eso, tienes que calmarte o te puede hacer daño

—¿y te importa? ¿Después de acusar a Jungkook de abusador ahora te preocupas por mi hijo? —apretó los puños con rabia–. Déjame en paz, no te quiero ver nunca más —espetó conteniendo su irá y sin decir nada más cerró la puerta con fuerza. Corrió hasta su cama y se acostó cubriéndose completamente con las cobijas—. E-estaremos bien bebé, V-oy a hacer hasta lo imposible para sacar a papi d-de allí —murmuró con la voz rota.

Y allí se quedó, acostado mientras lloraba y hablaba con su bebito. Después de todo era lo único que le quedaba...

Por otro lado Yoongi se encontraba en shock. No sabía como asimilar la nueva información que había recibido de su hermano.

¿Estaba embarazado?. Aún no se lo podía creer, estaba feliz pero ahora la culpa se había duplicado. Arruino la vida de su mejor amigo, de su hermano y también la del bebé.

¿Que mierda le paso?

Yoongi no era así, él habría aceptado su relación. De hecho sabía que algún día pasaría y lo había aceptado; pero el sentimiento de traición y decepción se habían apoderado de él y lo habían hecho actuar de forma irracional.

Fue un completo idiota, ahora debía pensar en como solucionar el problema. El primer paso sería hablar tanto con sus padres como con los de Jungkook y aclararles un poco las cosas, pero para ello debía charlar con Jimin y que le contará toda su versión...

¿Cómo podría conseguir eso si él no lo quería ver ni en pintura? tal vez debería pensar en otra opción. O simplemente hablar sin saber completamente la historia de kook y mimi.

Soltando un fuerte suspiro se acercó a la puerta y dejo caer su frente sobre la fría superficie de madera.

—Lo siento, fui un idiota por no haberme detenido a pensar bien las cosas —suspiró—. Te pido perdón hermano por todo el daño que te he ocasionado, cuando los vi y-yo me sentí tan traicionado por Jungkook y por ti que solo me cerré, me llene de odio y quise alejarlo de forma definitiva. Se que una disculpa no va a solucionar nada, te prometo que arreglaré mis errores —cerró los ojos. Tenía ganas de llorar, había metido la pata. ¿Jungkook algún día se lo perdonaría?, ¿Cómo estará?, ¿le habrán hecho daño?—. Te amo hermanito, en serio lo lamento tanto, voy a solucionar esto

Sin decir nada más dio la vuelta y comenzó a caminar a su habitación. Debía ir a hablar con sus padres al trabajo y luego con los Jeon, tal vez se ganará más de un insulto pero debía hacerlo. Solucionaría las cosas y esperaba que no fuera muy tarde para Jungkook...

Tomó las llaves de su auto y bajo corriendo. La desesperación se estaba apoderando de su cuerpo, por alguna extraña razón sentía que debía hacer las cosas rápido; eso le asustaba.

—Todo va a estar bien —se dijo a si mismo y encendió el auto.

No sabía que de que forma iba a convencer a sus progenitores de retirar los cargos que le  habían impuesto a kook. Y tampoco tenía ni la menor idea de como mierda iba a arreglar toda la basura que hablo de su amigo, debía aclararle las cosas a los Jeon ya que sabía que estos estaban furiosos por todo lo que él invento.

Mierda y más mierda. Realmente esta vez la había cagado muy feo

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Atte:roxyuwu






















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