Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

✷•𝓽𝓻𝓮𝓲𝓷𝓽𝓪 𝔂 𝓼𝓮𝓲𝓼•✷

*╔═══❖•ೋ° °ೋ•❖═══╗*

—Le pediré matrimonio a Jimin —confesé observando a Yoongi.

Han pasado siete meses desde el nacimiento de aiko y seis de la última discusión que tuve con Jimin. Desde entonces las cosas han mejorado notoriamente, tomamos la decisión de contratar una niñera de tiempo completo; por ende la carga de estrés que tenía mi precioso pollito disminuyó.

También retomó sus estudios presenciales, y esta siendo el más destacado en su clase de baile. Decir que estoy orgulloso de Jimin seria poco, cada día que pasa siento que me enamoro más y más de él.

Mi dulce mochi definitivamente me ha vuelto loco y eso me encanta.

En cuanto a mi relación con mi familia todo esta bien, se que probablemente nunca vuelva a tener la confianza que teníamos en el pasado; sin embargó intento llevar las cosas lo mejor posible. Nunca he sido un hombre rencoroso, a pesar de todo lo que pase por ellos aún siento apreció y los llevo en mi corazón de una buena forma, después de todo son mis padres y el señor y la señora Park siempre estuvieron presentes para mi.

Pero como mencioné anteriormente, quizás la confianza que sentía antes no regrese o puede que al pasar los años esté sentimiento de incertidumbre y miedo se desvanezca completamente.

Muchas cosas pueden suceder, lo que menos quiero ahora es pensar en ello y quemar mi cerebro con las miles de posibilidades del futuro. Por el momento estamos bien, llevamos una relación saludable y me siento cómodo con ello.

Por otro lado esta Yoongi, aquel tarado de cabello gris al cual por más que intento odiar simplemente no lo consigo. Claro esta que no olvide todo lo que me hizo pasar en prisión, no podría hacerlo; aquello fue algo que dejó una marca permanente en mi, una que aún duele. Hemos charlado sobre ello en muchas ocasiones, sobra decir que me ha pedido disculpas más de un millón de veces y que a diario se esfuerza para remediar sus errores conmigo y con su hermano.

No puedo negar que me enoja recordarlo, hasta he llegado a insultarlo más de una vez. ya que  como dije, aún duele. Pero no pasa de allí, quiero sanar y vivir plenamente junto a las dos personitas que más amo en este mundo.

Decidí dejar de ver hacía atrás y simplemente enfocarme en el presente, y mi presente ahora es estar sentado sobre el césped de un gran parqué junto a fantasmin. Digo, junto a Yoongi.

Ambos observamos como Jimin juega con Aiko en una pequeña piscina de pelotas, llevamos pocos minutos aquí. Es domingo, un bello día soleado y perfecto para salir en familia.

Yoongi no estaba invitado, pero el muy rufián terminó por colarse al plan y no tuvimos más opción que dejarlo.

—¿Que?...—respondió el mayor de los Park con sorpresa. Sabía que llegaría ese momento, desde que Jimin tenia cinco años supo que sus sentimientos hacía Jeon eran reales. Sin embargo al comienzo quiso convencerse a sí mismo de que únicamente era una etapa. No quería aceptarlo pues la diferencia de edad le parecía un impedimento inmenso, sin embargo al pasar los años se sintió tan asustado al notar que su amor por kook no hacía más que crecer y crecer. Tenía miedo de que Jungkook lo lastimara, le aterraba perder a su mejor amigo y a su hermano. Simplemente no podía imaginar que haría si ellos lo dejarán de lado, y por ese absurdo miedo actuó de forma irracional e inmadura.

—Le voy a pedir matrimonio a Jimin, ¿que no escuchas idiota? —repetí dándole un empujón.

—Si, si escuche. pero...¿ahora? —preguntó observando a su hermano reir con Aiko.

—No, sería lo menos romántico del mundo —solté un suspiro y pase mis manos por mi rostro con notable frustración.

—¿Entonces cuando? —giró su rostro para observar a su estresado amigo— ¿Quieres que te ayude con algo?

—De hecho si, necesito que me ayudes a cuidar a mi hija —aclaré mi garganta y al ver su cara Reí. Aiko siempre que esta con Yoongi termina vomitandolo, literalmente se a vuelto una costumbre que el terminará lleno de leche y baba.

—¿Acaso quieres que me vuelva el hombre vomito o que? —se cruzó de brazos y regreso su vista a Jimin—. Si aceptó, ¿que se supone que harás?

Nuevamente volví a reir por sus ocurrencias y me deje caer al suelo.

—Lo voy a llevarlo de viaje, quiero que tengamos un poco de tiempo a solas...—una sonrisita se dibujó en mis labios.

—Me harás vomitar si sigues con tus horribles insinuaciones sexuales —soltó con desagrado. Imaginar a su hermano y mejor amigo en esas situaciones resultaba realmente desagradable para él.

—No estoy insinuando nada idiota —observé el cielo por un par de segundos antes de continuar—.Quiero pedirle matrimonio de una forma especial, me gustaría que lo recordará toda su vida si es posible —mi vista regreso a Jimin el cual también me observaba con una tímida sonrisa.

—Llévalo a Tokio...

—¿Eh?

—Si, a Jimin le encanta Japón y estoy seguro que conocer ese país y sumado que le propongas matrimonio allí  sería perfecto —sonrió dejando ver sus encías—. Yo cuidaré de Aiko el tiempo que necesites, así me vomite a diario

Al escucharlo una sonrisa de oreja a oreja se dibujó en mi rostro.

—Gracias yongs —murmure antes de darle un abrazo. A pesar de todos los problemas Yoongi siempre será como mi hermano.

—No es nada, sabes que te debo muchas cosas —hizo una mueca de tristeza. Realmente se sentía arrepentido de todo lo que los hizo pasar.

—Esta bien, eso ya quedo atrás amigo —le di un par de palmadas en la espalda y me aparte notando que Jimin no dejaba de verme. Se veía ligeramente celoso—. Comenzaré a organizar todo y en cuanto lo tenga te aviso —me levanté del suelo sacudiendo mi ropa.

—Claro, ahora ve con el enano. Se nota que esta jodidamente celoso de este bombón

Solté una carcajada negando con la cabeza.

—No creo que se sienta amenazado por un fantasmin —dije con burla y di media vuelta para correr hasta la piscina de pelotas— Hola...

—Hola...—las regordetas mejillas de Jimin se tornaron rosa— ¿De que hablaban? —preguntó curioso y al tener cerca al mayor dejo un suave besito sobre sus labios—. No me has dado besitos hoy, eres un hyung muy malo

—Lo siento bebé, creí que te habían cansado mis besitos —me acomodé más cerca suyo acariciando sus muslos.

—Jamás pasara eso tonto —arrugó su pequeña nariz de botón y acarició las manos de kook suavemente. Jimin se atrevería a decir que justo ahora su relación estaba en el mejor momento. no habían vuelto a discutir, Jungkook lo invitaba a lindas citas, y cada vez que estaban solos no podían separar sus labios o sus manos del cuerpo del otro—. Estas muy guapo hoy hyung —susurro tímido y recostó su cabeza sobre el fuerte pecho de kook.

—Tú también estás muy guapo cariño —lo tomé del mentón para plantas un suave beso sobre sus gruesos labios—. Te amo mi amor, no sabes cuanto —llevé una de mis manos hasta su mejilla dejando suaves caricias en la zona.

El menor soltó una risita y se hundió bajo el brazo de kook. Justo ahora ambos sentían una felicidad inexplicable, todos los problemas habían quedado en el pasado y ahora lo único que les esperaba era disfrutar plenamente del amor que sentían.

—Te amo mucho más hyung...—salió de su escondite y llevo sus manos hasta el mentón de kook acariciando la poca barba que tenia—. Me encanta cuando dejas tu barba —susurro apunto de besarlo pero fue interrumpido por unas pequeñas y gorditas manos.

—Parece que tu no eres el único celoso —dije divertido y cargué a Aiko.

—Yo no soy celoso —saco su lengua de forma infantil—. Solo quiero saber de que hablaban...se veían muy contentos

—¿Nos estabas espiando? —enarque una de mi cejas.

—¡No!...bueno quizás un poquito —dijo con vergüenza mientras peinaba para atrás su rubio cabello—. Dime kooki, se supone que nos contamos todo ¿verdad?

—Si amor, pero esto no te lo puedo decir —acomode mejor a Aiko sobre mi regazo y acerqué mi rostro al de Jimin—. Es una sorpresa, así que debes esperar. ¿Entendido?

—Si —hizo un tierno puchero— di no espero ¿me vas a castigar? —sus preciosos ojos brillaron con lujuria.

—Si lo haces tu castigo será no tocarnos

—¡No, no! —negó rápidamente y soltó una risita nerviosa—. Prometo esperar hyung

Kook sonrió dejando ver sus blancos dientes y sin decir nada más lo besó despacio.

"Es hora de poner manos a la obra" pensó. Durante ese día pasearon por la ciudad, fueron a cine y finalmente Yoongi los dejo en su departamento.

Jungkook tardó alrededor de dos semanas para tener todo preparado, se aseguró de que cada detalle fuera perfecto. Seria su primer viaje fuera del país y finalmente pediría que se uniera de por vida a él. Cabe mencionar que se sentía aterrado, quería que todo saliera al pie de la letra e imaginar que algo malo pasaría lo tenía estresado.

Dio vueltas sobre la cama observando el reloj. Eran las ocho en punto de la mañana, su vuelo a Japón saldría a las dos de la mañana. Yoongi vendría por Aiko a las diez, lo único que faltaba era enseñarle los boletos a Jimin

Respiro profundo y con una sonrisa se sentó por completo en la cama. Estiro su cuello de un lado a otro y se levantó sigilosamente, se adentro al baño y luego de asearse salió.

Se vistió con tan solo un short de Jean y una camisa blanca sin mangas. Sin hacer un solo ruido se dirigió a la cocina para prepararle algo rico para desayunar a su precioso pollito.

Media hora más tardé tenía listo un rico desayuno. Huevos revueltos con tocino, zumo de naranja y panqueques. No se consideraba un gran chef, sin embargo sus desayunos eran muy buenos.

Al entrar a la habitación dejo la bandeja sobre una mesita y observó por un par de segundos al precioso rubio, seguido se acercó a este comenzando a llenarlo de besos.

—Amor, despierta...

El menor soltó una queja dandose la vuelta, dejando en pompa su redondo trasero.

—Jiminie no juegues con mi cordura —murmure ronco, mis manos se deslizaron por su perfecto cuerpo hasta llegar a su pequeña y definida cintura— despierta, tengo que decirte algo

—Mmmgh, dime más tardé —bostezo— es domingo kooki —chilló removiendose.

—Ahg, no te muevas así amor —lo sostuve suavemente haciéndolo notar el pequeño problema que comenzaba a provocar en mi.

—Jungkooki —Jimin se giró quedando boca arriba— Mm, ¿tienes un problemita? —susurro ligeramente ronco por haber acabado de despertar.

—Si, cariño...—separé sus piernas— pero eso no importa, necesito decirte algo —bese su naricita.

—¿Que es? —sus manitos acariciaron el cabello negro de su amado hyung.

—Te lo diré mientras desayunamos —me aleje de su cuerpo y acomodé la bandeja sobre la colcha—. Espero que te guste, les puse Nutella

Jimin se sentó bostezando y rasco uno de sus ojos intentando quitar el cansancio.

—Se ve delicioso, muchas gracias hyung —beso su mejilla rápidamente y antes de comer se escabullo al baño, minutos más tardé regresó un poco más presentable y tomó asiento junto al mayor— ¿Que es lo que tienes que decirme?

Aclaré mi garganta y estire mi mano para acariciar su mejilla.

—Te tengo una sorpresa...—susurre y saque de uno de mis bolsillos dos boletos de avión.

Jimin abrió sus ojitos como platos y rápidamente recibió ambos boletos, leyó todo en segundos y seguido chilló con emoción. Uno de sus más grandes sueños era conocer Tokio, amaba esa ciudad hace tiempo y deseaba visitarla. Sin embargo no había tenido la oportunidad ya que aún no generaba ingresos propios.

—¡Oh por dios!, ¡gracias, gracias! —grito y se lanzó sobre el mayor llenándolo de besos como solía hacer cuando niño— conocer Japón siempre fue uno de mis sueños hyung —contó con emoción. 

—Con gustó amor, hacerte feliz es mi cosa favorita. Y lo sé —sonreí— lo mencionaste un par de veces y Yoongi me lo recordó

—¿Si? — se recostó sobre el pecho de kook acariciando de paso su marcado abdomen. ¿Cómo no estar enamorado de él?, simplemente era algo imposible. Jungkook desde el primer día que llegó a su vida lo hacía feliz, se sentía tan agradecido con el universo por haberlo puesto en su camino y más por haberle dado la oportunidad de ser su pareja— ¿De eso hablaban el otro día?

—Si, esa era la sorpresa —susurre ligeramente nervioso, aún faltaban muchas cosas más y claro que no se lo diría—. El vuelo es a las dos de la mañana, lo elegí a esa hora para que tengas tiempo de organizar tus maletas —acerqué nuevamente la bandeja con el desayuno y llevé un pedazo de durazno a los gruesos labios de Jimin—. Pasaremos dos semanas allí bebé

—¿Y Aiko? —preguntó y recibió gustoso la fruta— ¿vendrá con nosotros?

—No bebé, Yoongi cuidará de ella estos días

—Oh...—soltó una risita divertido— creo que le va a provocar un dolor de cabeza

Solté una suave carcajada asintiendo. Definitivamente seria todo un reto para Yoongi cuidar de nuestra bebita.

Entre charlas sobre el viaje y cosas triviales terminamos de desayunar, Jimin se ducho y seguido comenzamos a preparar nuestras maletas.

《HORAS MÁS TARDÉ》

Ambos se encontraban completamente exhaustos, pensaron dormir un par de horas en el avión. No obstante, les fue imposible. Estaban demasiado emocionados para pegar un ojo así que pasaron alrededor de dos horas y media viendo el cielo y charlando.

Al llegar a Tokio se dirigieron directamente al hotel, Jimin entro primero soltando un chillido de emoción y observando todo con detenimiento. Hasta que sus bellos ojos se detuvieron justo en el baño, o para ser exactos en la división de este.

—Ouh...—sus rechonchas mejillas se tornaron rojizas— ¿Me vas a ver mientras me doy una ducha? —preguntó completamente avergonzado. Sin importar cuantas veces Jungkook lo viera desnudo aún se sentía demasiado tímido y nervioso.

—Mm, creí que nos duchariamos juntos —deje las maletas junto a la puerta y cerré esta con el pie— pero quizás terminemos haciendo más que ducharnos —bese su mejilla rápidamente—. Así que prometo no mirar mientras te duchas cariño —le regale una sonrisa de lado y camine hasta la cama— aquí te espero chiquito

—Esta bien, no tardó. Creo que ambos estamos apunto de morir de sueño —soltó una tierna risita y comenzó a buscar ropa en su mochila.

—En eso tienes razón...—murmure. Cuando entro al baño espere por varios minutos intentando no mirar hasta que el vidrio se empaño lo suficientemente permitiéndome ver tan solo su preciosa silueta. Tragué grueso y luego de sacudir un par de veces mi cabeza hice una pequeña llamada a la recepción, ordene dos postres con helado y fresas con chocolate. Las favoritas de mi Jiminie.

Cuando la orden llegó acomodé todo junto a un pequeño ramo de rosas y espere paciente a que saliera.

Cuando finalmente lo hizo lo observé por un par de segundos haciéndolo sonrojar.

—No me veas así kooki —termino de ponerse una camisa varias tallas más grande que él y se sentó junto a su hyung viendo otra sopresita— hyung...—sus bellos ojitos azules brillaron conmovido. Jungkook estaba siendo realmente especial y él no le había regalado absolutamente nada, eso lo hacía sentir fatal—. Lo siento kooki hyung, y-yo no tengo nada para ti... —hizo una puchero triste.

—Para mí es suficiente tenerte a mi lado, te amo Jimin —acaricie su mejilla— no te pongas triste, quiero que disfrutes de este viaje..¿Si?

—S-si, gracias kooki —se acurrucó contra el mayor y tomó su postre y el bello ramo de flores—. Gracias por hacer cada uno de mis sueños realidad —susurre enamorado.

—Creo que también debo darte las gracias por eso...—nuestras miradas se conectaron y tontas sonrisas se pintaron en nuestros rostros.

A los ojos de los demás nuestra relación era algo imposible, muchos pensaron que el amor que sentíamos no sería lo suficientemente fuerte para poder superar los obstáculos. Y joder, ¡que equivocados estaban!.

Mañana será el día, finalmente pediré su mano y me encargaré de hacerlo eternamente feliz. Hasta el último de mis días provocare una preciosa sonrisa en él...

《Al día siguiente》

Nervioso, jodidamente nervioso. Así estoy, durante todo el día no he podido dejar de temblar como un completo imbécil, desde que despertamos me encargue de pedir un delicioso desayuno el cual casi termina en el suelo por culpa de mis ya mencionados temblores.

Luego de haber desayunado ambos nos dimos una ducha y nos alistamos para comenzar nuestra pequeña aventura en Tokio.

Nuestra primera parada fue disneyland. Al ingresar nos subimos a todas y cada una de las atracciones, pasamos el día entre risas y tiernos besos llenos de sentimientos.

Cenamos en un bello restaurante temático y al finalizar ambos comenzamos a caminar en dirección al castillo principal de Disney, al llegar a este nos sentamos y observamos el cielo disfrutando del majestuoso espectáculo de fuegos artificiales.

Al fondo se podía escuchar la característica música del comienzo de todas las películas, los colores iluminaban el cielo creando un ambiente completamente único.

Llene mis pulmones de aire fresco y lo solté lentamente sin llamar la atención de Jimin, me sentía más nervioso que antes; Claro si es que eso es posible. Ha llegado el momento, le pediré a mi precioso pollito que sea mi esposo, ¡MALDICIÓN LLEGO EL MOMENTO!.

Tragué grueso y giré mi rostro para observarlo, él se encontraba absorto en el espectáculo. Sus bellos ojos brillaban y sus labios estaban ligeramente separados en señal de asombró.

"Es ahora o nunca" pensé.

—Amor...—acaricie sus pequeñas manos con suavidad provocando que volteara a verme.— Gracias

—¿Por qué kooki? —preguntó con una sonrisita. Ese día estaba siendo maravilloso. Si su yo del presente le dijera al pequeño Jimin del pasado que estaría con Jungkook en Disney, rodeado de princesas y mágicas historias no lo habría creído. Pero ahora todo era real, su más grande deseó se había cumplido y él no tenía palabras para describir la felicidad que sentía.

—Por amarme desde que eras chiquito, por tenerme paciencia; por apoyarme, por enseñarme que es el amor verdadero...—mis ojos se cristalizaron—. Por no alejarte de mi sin importa cuan difícil sea la situación, por hacerme reír —un par de lágrimas traicioneras escaparon de mis ojos y rodaron por mis mejillas hasta caer al suelo— Por haberme esperado tanto tiempo cariño —mis grandes manos se dirigieron a sus húmedas mejillas. Mi lindo pollito había comenzado a llorar— Por aguantar mi humor de mierda cuando era adolescente, por hacerme tan feliz...—pegué mi frente a la suya—. Por todo mi amor. gracias, gracias mi vida

—K-kookie, gracias a ti —sorbio por su pequeña naricita—. Gracias por amarme, gracias por ser el mejor hyung del mundo; g-gracias por todos los regalitos que me has dado desde que soy un bebé, gracias por cuidarme y aceptarme tal y como soy. Te amo, te amo tanto hyung —abrazo con fuerza a Jungkook siendo correspondido del mismo modo.

—Te amo más, mucho más mi príncipe —lo aleje suavemente de mi cuerpo. Mordí mi labio inferior nervioso y armandome por milésima vez de valor me arrodille ante él—. Jiminie, Y-yo me siento demasiado nervioso justo ahora como para pensar en algo...—rasque mi nuca— pero quiero que sepas que lo único que deseó es pasar toda mi vida a tu lado, quiero envejecer junto a ti. Quiero que hagamos locuras, viajemos y vivamos plenamente muchos años —sonreí—. Espero que nuestra familia crezca aún más...—tome aire— déjame amarte hasta la eternidad. —mis manos temblaron al sacar una pequeña cajita de terciopelo color vino—. Park jimin...¿T-e quieres casar conmigo?

Jimin ahogó un grito cubriendo su pequeña boca. Sus preciosos ojos estaban completamente abiertos y juraría que podía escuchar su corazón latir desenfrenado.

Lo siguiente que sentí fueron sus labios impactar contra los míos, separándose escasos segundos para pronunciar.

"Si, aceptó hyung"

Ambos sonreímos y de forma nerviosa deslice el anillo sobre su pequeño y regordete dedo.

—D-dios —gruesas lágrimas rodaron por sus cachetes. ¿Acaso ese día podía ser más perfecto?, cuando pequeño le pregunto a su hyung si se iba a casar con él. Cuando este lo negó Jimin se sintió demasiado triste, aún así muy en el fondo tenía la esperanza de que en el futuro las cosas cambiarán, y hoy había llegado el final de la espera..¡SE CASARÁ CON JUNGKOOK!— ¡Te amo, te amo! —gritó.

Cuando kook se levantó del suelo el rubio salto sobre él llenándolo de besitos y palabras de amor. Ambos estaban que explotaban de la felicidad, miles de emociones invadían sus cuerpos haciéndolos sentir completos y cálidos.

El camino no fue nada fácil para ninguno de los dos, su relación había sido un gran reto desde el día uno. Sin embargo ambos pudieron superar todos los obstáculos, cada uno de estos fortaleció su amor y los hizo entender que estaban destinados a estar juntos. Y que nada ni nadie los podría separar, sin importar cuantas veces lo intentase.

—¿Siempre vas a estar conmigo kooki? —susurro sobre los finos labios del mayor.

—Si mi vida, hasta que la muerte nos separé... —al decir esto lo bese, sellando nuestro pacto para toda la eternidad.

Gracias pollito por haberme enseñado que el amor verdadero si existe.

*╚═══❖•ೋ° °ೋ•❖═══╝*


:""3 y hasta aquí llegamos dulces chiquis, falta el epílogo y esta obra finalmente terminará.

Quiero agradecerles por todo el apoyó que ha recibido este fic, nunca pensé que les gustará tanto y realmente me hace muy feliz leer cada uno de sus comentarios e interactuar con todos.

Mil gracias, espero que permanezcan mucho tiempo en mi vida y sigamos avanzando en este pequeño pasatiempo que tanto amo.

Atte:roxyuwu

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro