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Cuando uno es niño disfruta de cada cosa, sin importar cuanto sencilla sea. Después de todo es verdad lo que dicen, las pequeñas cosas son las que más nos hacen felices. Solo que cuando crecemos olvidamos aquello.

Cada juego para mi era tan emocionante y divertido, conocer personas nuevas era mi actividad favorita. Oh, y ni hablar de salir al parqué, realmente amaba los columpios.

Mis padres siempre me describían como un niño muy inteligente, alegré, amable y muy extrovertido. Amaba cualquier tipo de actividad, siempre quería estar haciendo algo ya que me aburría con facilidad, y permanecer en casa solo me volvía loco.

Soy hijo único, siempre le pedí a mi madre que me diera de navidad un hermanito, pero ella me explicó que no podía tener más hijos. Debo admitir que al comienzo me enoje, pero tiempo después lo olvide.

Cuando tenía cinco años mi padre compró una casa mucho más grande y cerca de mi colegio y su trabajo. Era preciosa, pero me aburría ya que no conocia a nadie en el vecindario.

En el verano de ese mismo año no pudimos viajar ya que mis padres tenían demasiado trabajó. Por ende tuve que pasar gran parte del tiempo en casa solo, hasta que un día vi a un niño salir a jugar con unos carritos.

En aquel momento no dude ni un segundo en salir de casa e ir a hablar con él. Recuerdo ese día a la perfección.

《Flashback》

Cuando me acerqué a ese niño me miró mal y recogió todas sus cosas, seguido comenzó a caminar a su patio trasero pero yo decidí seguirlo.

-Hola -sonreí-, soy Jungkook

El niño solo volvió a mirarme mal y se sentó en el césped para continuar jugando mientras me ignoraba.

-¿Puedo jugar contigo? -me senté frente a él y comencé a tirar de un pasto con suavidad.

Al notar que él no me respondió arrugue mi pequeña nariz y me quedé en silencio pensando por unos segundos que era lo que le pasaba, hasta que llegó una idea a mi pequeña cabecita.

-¡Oh! ¡Eres sordomudo! -chille-. No se hablar en señas, Pero podría aprender -dije y comencé a mover mis manos de forma extraña.

-¡No soy sordomudo niño tonto! -soltó con enojó-. ¿Que haces aquí? eres raro

El niño comenzó a recoger nuevamente sus carros dirigiéndose a una casita de madera, La cual estaba junto a un gran pino. Jungkook también se levantó y nuevamente lo siguió.

-No soy raro, tu eres eres raro...además pareces un fantasma -dije entrando a la casita sin permiso alguno-. ¿Que vamos a jugar? ¡tengo muchas ideas!

-¿Cómo que un fantasma? -frunció el ceño y puso sus autos en orden sobre el suelo de madera-. Yo jugaré solo, tu te vas a ir ahora

Negué con la cabeza y me cruce de brazos. No me iría, no quería estar en casa solo.

-Pareces un fantasma porqué eres muy blanco -tome un carrito rojo-. No me voy a ir, estoy aburrido. ¿Cómo te llamas?

Él niño soltó un fuerte suspiró.

-Que desagradable eres -susurro-. Soy Park Yoongi

-Yo soy Jeon Jungkook -sonreí y estire mi manito en forma de saludo.

-Si, ya lo dijiste. Tu nombre es muy feo -Ignoró la mano extendida del niño y comenzó a jugar.

Hice mala cara al escucharlo. Mi nombre no era feo. Tome otro carrito de color verde y comencé jugar con este.

-Podemos hacer carreras, ¿Quieres? -susurre.

-¿no te iras verdad?

-No...

-ash, que molesto -rasco su nariz con suavidad y luego miró al niño raro-. Está bien juguemos...

Al escucharlo sonreí y me acerqué para abrazarlo pero él me empujó.

-¡No, odio lo abrazos! -chilló haciendo una mueca de asco-, ¡Me has contaminado!

-¡Pero a mi mamá le encantan! -hable sorprendido. Jamás había conocido a alguien que no no gustaran los abrazos-. ¿C-contaminado?, ¿que es eso?

-Pero a mi no, así que no lo hagas -Sacudió su ropa completamente asqueado y gruñendo volvió a tomar su carrito-. Significa que me llenaste de tus germenes, así que no me toques más y juguemos

Aún sin entender del todo asentí rápidamente y volví a tomar el auto comenzando a jugar carreras con él.

《Fin del flashback》

Desde aquel día comenzamos a salir juntos a jugar. Al principio Yoongi seguía siendo un poco callado pero poco a poco una gran amistad se formó.

Yo siempre estaba en su casa o él en la mía. Salíamos a todas partes juntos y obligue a mi padre a que me cambiara de colegio solo para estar con mi mejor amigo.

Al pasar el tiempo la señora Park nuevamente quedó embarazada, tendría un niño. Desde que nos enteramos estuvimos muy emocionados, ambos queríamos conocer al pequeño bebé que venía en camino.

Así no fuera mi hermano yo estaba demasiado feliz, tal vez más que Yoongi. Ya que siempre quise un hermanito y sabía que ahora que él nacería lo podría cuidar y enseñarle a jugar videojuegos o tal vez jugar fútbol.

Lo meses pasaron y un 13 de octubre nació Park Jimin, un tierno bebé con las mejillas regordetas y rosadas. Era la cosita más hermosa que había visto en mi vida. En ese entonces tenía tan solo ocho años y Yoongi diez.

La señora Park nos dejaba verlo, pero nunca cargarlo ya que se nos podía caer y era muy delicado.

Siempre que llegaba del colegio dejaba mis tareas de lado y me dirigía a la casa de los Park, pasaba horas con el bebé, era adorable. Su carita era tan redonda y tierna que me provocaba apretar sus mejillas, pero siempre me contenía para no hacerle daño.

Cuando caía la noche hacía mis tareas junto a mi mejor amigo y luego regresaba a mi casa.

Un año más tarde entre al equipo de fútbol de mi colegio así que me quedaba menos tiempo para ver a Jimin, aún así siempre encontraba la forma para poder ir a jugar con él.

El tiempo avanzó con rapidez cumpliéndose cuatro años desde que comencé aquella rutina. Iba a estudiar, luego entrenaba en mi equipo de fútbol, al llegar a mi casa hacía tareas y me duchaba para ir a jugar videojuegos con Yoongi o a los superhéroes con Jimin.

Él ya tiene cinco añitos y yo trece. Jimin Es un niño realmente inteligente y cariñoso. Bueno, especialmente conmigo.

Desde que cumplió cuatro años comenzó a estar pegado a mi en cada momento. Antes también lo hacía, pero no era tan exagerado como ahora. Cada vez que voy a su casa literalmente se prende a mi como si fuera una pequeña garrapata.

Eso me causa mucha ternura, una vez le pregunté porque lo hacía y su respuesta me asombro bastante.

《Flashback》

Un año atrás

Las luces de Navidad parpadeaban iluminando el lugar de bellos colores. La cena había acabado hace unas horas y nuestros padres se encontraban charlando entre ellos en el patio trasero. Ellos se hicieron buenos amigos desde hace unos tres años, eso es genial ya que siempre celebramos las fiestas juntos.

Yoongi estaba hipnotizado con su nuevo celular y yo solo me divertía al ver a Jimin jugando con sus nuevas figuras de los vengadores. Por cierto ese regalo se lo di yo, y no es por presumir pero fue el que más le gusto.

-¿Me dejas jugar pequeño? -pregunté y me senté junto a él en la alfombra.

-¡Si, si hyung! -grito con emoción y se tiro sobre kook llenándolo de besos.

-¿Porqué conmigo no eres así? -preguntó Yoongi mientras alejaba su vista del celular-. Eres demasiado cariñoso con kook

-Es verdad -reí y acomode en mi regazo a Jimin. Aún era muy pequeño, tenía tan solo cuatro años-. ¿Porqué me quieres más?

-No te quielo más -habló con ternura. Diciendo un par de palabras mal, aún no hablaba a la perfección-. ¡Pero hyung me hace sentir malipositas en mi barriguita! Así como papi hace sentir a mi mami!

Al escucharlo decir eso reí. Era obvio que él no entendía que significaba eso.

-¿Ah si? -peine para atrás su cabello negro y apreté sus regordetas mejillas-, tu no sabes que significa eso pequeño

Jimin frunció el ceño y nego repetidas veces. Él si entendía lo que sentía.

-Si lo sé -hizo puchero.

-según él está enamorado de ti y se van a casar -dijo Yoongi y soltó una fuerte carcajada.

Las mejillas de Jimin ardieron de vergüenza y se levantó del regazo de kook para golpear a su hermano con un cojín.

-¡Era un secleto! -grito molesto.

Al verlos así reí y me levanté para separarlos.

-Ya, ya no más peleas en navidad -me senté en él sofá y peine mi cabello negro para atrás. Saque mi celular para revisar mis redes sociales, pero este fue arrebatado de mis manos.

-¿no ibas a jugar conmigo? -susurro Jimin haciendo un adorable puchero.

Sonreí de lado y acaricie sus mejillas. Dios, realmente quiero con todo mi corazón a este bebé.

-Claro -nuevamente me levanté del sofá y me senté en la suave alfombra comenzando a jugar con los superhéroes.

Horas más tardé él comenzó a quedarse dormido así que lo llevé a su habitación, hice que cepillara sus dientes y luego lo arrope. Cuando estaba por irme sentí su pequeña mano agarrarme de la camisa.

-¿puedes quedalte? -sobo sus pequeños ojos adormilado.

-Esta bien -me senté en una silla junto a su cama-, ¿quieres que te lea un cuento?

-No, no...Solo quédate -se cubrió mejor con las cobijas.

Asentí y apague la luz dejando únicamente la lámpara encendida.

-¿Es verdad lo que dijo Yoongi? - pregunté mientras lo observaba. Sus bonitos ojos siempre brillaban.

Tardó un par de segundos en responder pero luego asintió con un leve sonrojo.

-Hyung me gusta -susurro con timidez.

Solté una suave risa y negué con la cabeza. Era adorable, Jimin es un niño muy inocente. Despeine su cabello y me acomode mejor en mi puesto.

-Es hora de dormir pequeño -murmure y acaricie su mejilla. Él cerró sus ojitos lentamente y segundos después se quedó dormido.

《Fin del flashback》

Yoongi abrió la puerta de su casa y ambos nos adentramos a esta. Comenzamos a subir las escaleras y entramos a su habitación.

-Joder estoy agotado, tráeme agua -dije y me tire a su cama.

-¡Quítate de ahí que asco! Estas todo sudado! -grito y tomó del brazo a Jeon y tiro con fuerza hasta hacerlo caer.

-¡Uhg! que mal amigo -me levanté del suelo y me senté en una silla.

-Hola hyung... -una pequeña cabecita se asomo por el marco de la puerta.

-Hola Jiminie -sonreí de lado y estire mis brazos al verlo correr hacia mi.

-¡No, no! -Yoongi atrapó a Jimin justo antes de que llegará con Jungkook-. Kook está sucio, tuvo un partido y está sudado y oloroso

-Cierra la boca -deje caer mi cabeza para atrás y cerré los ojos. Estaba muy cansado.

-¡No importa! -Jimin se removió entre los brazos de su hermano mayor intentando safarse.

-Sabes que no te puedes soltar, así que deja de intentarlo -soltó una carcajada-. Más bien ve a jugar con tus peluches

-¡No! ¡quiero un abrazo de hyung! -hizo puchero y sus ojitos se llenaron de lágrimas.

-Va a empezar a llorar, suéltalo... -dije mirándolos.

-No kook, solo si te vas a tu casa y te das una jodida ducha

-Ahg, esta bien. Ya vengo pequeño -al pasar a su lado despeine su cabello y salí.

Media hora más tardé regresé y sonreí de lado al sentir los bracitos de Jimin rodear mi cintura. Hace tres años que él me recibía de forma cariñosa. Realmente me gusta, siento que soy muy importante para él.

-¿Estabas llorando? -lo cargué y camine con él hasta la cocina. Luego lo senté en la barra y lo mire fijamente-. ¿Porqué?

-Yoongi me molestó -susurro y sorbio por su rojita nariz.

-¿Que te hizo? -limpié con suavidad sus mejillas.

-M-me d-dijo que tu nunca me vas a querer -un par de gruesas lágrimas escaparon de sus ojitos-, dice q-que s-soy un bebé t-tonto

-Oh vamos, sabes que eso no es verdad no lo escuches -volví a limpiar sus mejillas-. Eres un bebé, no uno tonto pero si un bebé

-N-no soy un bebé, y-ya tengo cinco añitos! -movió sus deditos contando.

-Si lo eres, no tiene nada de malo -sonreí-. no vuelvas a llorar sabes que si te quiero

-¡Pero no me quieres como papi a mami! -nuevamente gruesas lágrimas escaparon de sus ojos y rodaron por sus rosadas mejillas.

-Bebé, tu no entiendes eso aún -susurre y le di un poco de papel higiénico para que limpiara su naricita-. Ese tipo de amor es distinto, tu no lo puedes comprender aún

-¡Si lo hago! -chilló molestó- ¡y t-tu también eres un niño!

-No Jimin, soy un adolescente, tu si eres un niño no entiendes esas cosas -dije con seriedad.

Sus ojitos brillaron por las lágrimas y un sollozo escapo de sus labios. Hizo el ademán de saltar de la barra pero inmediatamente lo atrape y lo ayude a bajar.

-Jimin escucha -susurre.

Él me Ignoró por completo y salió corriendo a su habitación.

Solté un fuerte suspiro y pase mis manos por mi rostro. No quería hacerlo sentir mal, pero era la verdad. Él no sabe que es estar enamorado de alguien, es muy pequeño para esas cosas.

Espero que para mañana se le pase el enojo. No puedo soportar verlo así...

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