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Jimin siguió el beso, tomando su espalda y cerrando sus ojos.

Taehyung giró el rostro a otro lado, no quería ver, aún no estaba listo para tanto.

Jungkook apretó la mandíbula.

Mientras el demás equipo estaba en shock, al igual que toda persona en la universidad que estuviera observando ese momento.

Yoongi los separó.

Jimin se quedó sorprendido y ruborizado.

—Vámonos.— Yoongi le sonrió, tomó su mano y se lo llevó de ahí.

Se sentaron juntos en el jardín de la universidad.

—Pensé que seríamos discretos.— Jimin dijo comiendo de la barra integral.

—No quiero que esto lo sea más, me gustas y yo a ti, no quiero ocultarlo.— Yoongi dijo muy normal.

Jimin se puso rojo.

Aunque el día estuviese nublado Jimin lo sentía perfecto.

—Bien, mañana saldré con mi primo y su novio a un parque de diversiones ¿irías conmigo?— nervioso.

—Park Jimin, ¿me estás invitando a una cita?— Yoongi algo burlón.

—Algo así.—

—Entonces sí, claro que iré contigo.—

—Cool.— dijo acercándose a Yoongi, quien le tomó la mano levemente y entrelazó sus dedos.

Estuvieron todo el receso juntos.

A la salida empezó a llover y Yoongi lo llevó a su casa.

Durante el camino Min tomaba la mano de Jimin y le daba besitos en ella.

Al llegar se estacionó dentro de su cochera, que era abierta.

—Sigue lloviendo muy fuerte, espera a que baje para meterte a tu casa, tendrás un resfriado.— Yoongi.

—¿Acaso te preocupa?— Jimin sintiendo ternura.

—No, sólo que no quiero que con tus besos me enfermes.—

—Bueno cuidame.—

Yoongi asintió, en ningún momento soltó la mano de Jimin.

—Igual no quiero bajar, como mis tíos siguen aquí mis padres los llevaron a pasear, no han vuelto.—

—Puedo quedarme contigo hasta que vuelvan.— Min dijo.

—Mi primo y su novio sí están, y no bajaré, quiero estar sólo contigo, hace frío.—

Yoongi atrajo hacia él a Jimin, para abrazarlo.
Jimin se giró hacia él y lo empezó a besar.

La posición no era muy cómoda, para estar besándose.

Jimin se levantó un poco y empezó a besarlo con más emoción.

Mordiéndolo muy muy leve y usando su lengua.

Yoongi estaba prendiéndose, eran sólo unos besos, pero Min moría de ganas por comerse a Jimin, cualquier cosa que él hiciera lo prendía.

Jimin lo besaba mientras se puso de rodillas en el asiento girándose hacia Min.

Yoongi tomó una de sus piernas y la pasó al otro extremo suyo.

Colocando a Jimin sobre él.

Una posición no tan cómoda pero más tolerable.

En ningún momento se dejaron de besar.

Jimin se quiso recargar en Min pero con su trasero tocó el claxon.

Causando risa en ambos porque se asustaron.

—Lo siento, no soy nada sexy.— Jimin dijo riendo.

Yoongi rió, después se puso algo serio. —No opino lo mismo.—

Yoongi recorrió el asiento hacia atrás y lo reclinó.

Jimin por fin se acomodó sobre su entrepierna.

—Oh.— Yoongi rompió el beso para suspirar, colocó sus manos en el trasero de Jimin descaradamente y regresó a besarlo.

Jimin puso sus manos sobre el pecho de Min, en la bonita camisa negra de botones que hoy se había puesto.

Yoongi empezó a besar su cuello, mientras movía a Jimin sobre su entrepierna para causar placer en ambos.

Jimin respiraba con dificultad.

—Me encantas.— Yoongi dijo metiendo sus manos bajo la camisa de Jimin, quitándola sin pena alguna.

Jimin se ruborizó.

Yoongi empezó a besar cada pequeño y lindo lunar sobre la piel de Jimin.

Lo mordía suave o le dejaba pequeños chupetones en las clavículas.

—Tu cuerpo me enloquece.— Yoongi casi gruñó eso.

Luchaba contra sí mismo para no empezar a jalonear a Jimin y obligarlo a comérsela toda.

Jimin pasaba sus manos por el cabello de Min, despeinándolo.

Jimin bajó sus manos y desabrochó su camisa, sin detener el movimiento de caderas sobre Yoongi quien ya estaba durísimo.

Hacía frío, pero ahora hacia tanto calor que los vidrios se empañaban.

Jimin vio la blanca piel de Yoongi, esa piel que había visto muchas veces descubierta, pero nunca estuvo a su merced como ahora, podía besarlo, morderlo, lamerlo, lo que él deseara ahora mismo.

Y lo hizo, pasaba sus manos y labios por encima de él.

Aunque Jimin era limpio, no dejó ninguna marca en él, le quitó la camisa.

Yoongi por mientras puso su mano en la erección de Jimin, mientras la otra le apretaba el culo.

Metió la mano dentro de su pantalón, tocándole el bóxer, empapado de pre-semen.

Jimin estaba a punto de correrse por Yoongi y él ni siquiera estaba dentro de él aún.

Jimin jadeaba con desesperación, uno que otro gemido se le escapaba cuando Yoongi movía su mano en su entrepierna.

Min bajó el cierre, bajo un poco los boxers y sacó el pene de Jimin de sus pantalones.

Se lo masturbaba.

—Ah, Yoongi, muevelo más.— Jimin pidió en un tono tan erótico y excitante sobre el oído de Min.

Estaba al borde del orgasmo.

Yoongi besó el hombro de Jimin e hizo caso a su petición.

Movió más su mano, haciéndolo correrse sobre su abdomen.

Jimin sintió toda una honda de electricidad en su cuerpo, dejó caer su cabeza sobre el hombro de Min, cansado y respirando rápido.

Min seguía moviendo su mano sobre el pene de Jimin, causando que al estar tan sensible se retorciera un poquito.

Estaba avergonzado de haber dejado su semen sobre el abdomen de Yoongi.

Jimin se movió un poco, y puso su mano en la entrepierna de Min cuando recuperó el aliento.

—Todavía no acabamos.— Dijo pícaramente.

Tocando con su mano el pene aún erecto de Yoongi, quien le sonrió.

Cuando de pronto tocan la ventana del auto.