Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Cuarenta y cinco.

Pero en fin, la noche pasó.

Sábado por la mañana, Jimin bajó y se hizo un café.

Estaba pensando en qué haría con Yoongi, seguramente estaba molesto, por verlo con Taehyung.

Entraba el arrepentimiento en Jimin, cómo le explicaría a Yoongi que perdió la virginidad con Tae, cuando se lo negó a él muchas veces.

Tocaron a su puerta.

Dio un trago a su café.

Se levantó y fue a abrir.

Abrió la puerta un poco, cuando la patearon, fuertemente.

Jimin se hizo hacia atrás, asustado.

Yoongi se metió a su casa y cerró la puerta.

Evidentemente venía furioso y eso que todavía no sabía que se acostó con Taehyung, pensó Jimin.

—Amm, hola.— Jimin sin entender.

Yoongi suspiró, lleno de frustración, pasó sus manos por su rostro. —Antes de perder el poco control que logré conseguir viniendo para acá, te dejaré darme la puta razón por la que besaste a Taehyung, empieza.—

Jimin se quedó atónito, cómo mierda supo. —Yo, ah, no tengo una razón, ese día yo .. Vamos yo.— Jimin balbuceó, claramente no sabía que decir. Así que se la iba a voltear.

—Pero que me dices tú, te fuiste a un prostíbulo, me prometiste no volver a hacerlo, por el meñique.— Jimin, dolido.

Sorpresivamente, Yoongi no estaba atacándolo, estaba furioso sí, pero se retenía todas las ganas que tenía de romperle la boca ahora mismo a Jimin.

—¡Tú rompiste el acuerdo primero, ¿qué querías que hiciera? ¿Sentarme a ver cómo me tomas por tu tarado?! Mientras yo estaba hablándole a mi madre de ti, tu te besabas con Taehyung.— enojado.

—Tú mismo dices que no somos nada, no deberías molestarte conmigo, estamos a mano ya.—

—¡No! Es que ese ya no era el trato, tú y yo quedamos en algo, ¡tú lo rompiste!— Yoongi se le quebró la voz un momento, pero siguió firme.

Jimin se sintió mal.

—Dime, ¿es cierto que te acostaste con Taehyung?— Yoongi lo miró a los ojos. —Porque quiero oírlo de ti.— cruzó los brazos.

Jimin sentía la mirada de tigre sobre él, no podía mentirle más a Yoongi, ya no podía. —Sí lo hice.—

Esperaba que Yoongi fuera a pegarle, pero no.

Yoongi tragó saliva, se cubrió el rostro con las manos y miró hacia arriba.

Jimin dio un paso hacia con Yoongi.

—No, quedate ahí.— Yoongi, sin mirarlo.

—Yoongi es que necesitas escucharme.—

—No, no lo necesito, es una verdadera mierda, sabes podría pegarte y desquitar mi enojo .. pero no estoy enojado, estoy dolido y decepcionado de ti, me da una rabia quererte, haber querido hacer las cosas bien y que ahora pase esto.— Yoongi quería llorar.

Jimin se sintió verdaderamente mal, jamás se imaginó que todo esto iba a terminar así de mal.

—Eres un idiota, cuando todo pudo haber ido bien .. —

—Pero es que tú también hiciste eso, también te acostaste con otra persona.—

—¡Ni siquiera pude hacerlo! No pude acostarme con ninguna prostituta, no podía sacarte de mi mente, pensé en lo mucho que te quería y me importabas pero tú no hiciste lo mismo.— Yoongi no resistió, empezó a llorar.

Era muy difícil conocer las vulnerabilidades de Min, hasta para Jimin era difícil conocerlas.

Pero ahora lo dejó más que claro, el talón de aquiles de Yoongi, es Jimin. Todo lo que pase con él le puede mucho.

Se rompió sin evitarlo.

Jimin no sabía como reaccionar, sabía que se había equivocado rotundamente, amaba a Yoongi, ¿qué mierda le pasaba? Él siempre supo que amaba a Yoongi, no entendía por qué llegó a cuestionarselo.

Pero se dio cuenta, tarde.

Jimin empezó a llorar, no podía ver a Yoongi llorar y estar como si nada.

—Yoongi, perdón.— chilloteo, trató de acercarse.

Yoongi se hizo más para atrás. —No te acerques.— sabía bien porque lo decía, no lo golpearía, pero le darían unas ganas inmensas de agarrarlo entre sus brazos y perdonarle todo lo que haya hecho por el simple hecho de ser Jimin, su chico adorado.

Por eso no quería que Jimin se acercara a él.

—Yoongi yo te amo.— Jimin, con sus ojitos llenos de lágrimas, sus regordetas mejillas rojas del esfuerzo por no derrumbarse en llanto, su cabello desacomodado porque recién se iba despertando, con sus manos estiradas hacia Yoongi, pidiendo que lo abrazara o lo dejara tocarlo.

Min lo miró de pies a cabeza, muriendo por sostenerlo entre sus brazos.

Pero no, no lo iba a hacer, ¿por qué? Por dignidad.

—Me amas tanto que te acostaste con Taehyung, me amas tanto que no quisiste hacerlo conmigo nunca,  entiendo que Taehyung sea mejor que yo y que esté más bueno que yo, pero fue un golpe bajo.— Yoongi, secó sus lágrimas se dio la vuelta y se disponía a irse.

Jimin fue hacia él, tomó su mano.
—Lo siento mucho, en serio, no me dejes.—

Yoongi le quitó su mano.

Se marchó.

Jimin lloró mucho.

Todo salía mal, no veía la salida.

Yoongi se subió a su auto, condujo a casa de Nam, por el camino había dejado de llorar.

Bajó y entró a casa de NamJoon.

—Bien ¿cómo te fue con estrellita?— Nam.

Yoongi se sentó en su sofá y lo miró con una cara de enfado.

—Uy ¿tan mal? Entonces si durmió con Taehyung.— Nam con risa.

—No me lo repitas.— Yoongi, mirando a otro punto de la habitación.

—Deberías hacerle lo mismo.— Nam sentándose con él.

—Yo no soy virgen, no es algo que lo va sorprender.—

—Eres virgen de hombres, no te haz cogido un chico, ¿cierto?—

—Es cierto.— Yoongi sin mirarlo.

—Vamos, hazle sentir lo mismo que te hizo sentir él y tengo al candidato perfecto.— Nam le dio su celular a Yoongi. Donde había una foto del capitán del equipo de Fútbol americano: Jeon Jungkook.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro