Jimin no sabia como reaccionar en ese momento teniendo a Jeon frente de el aguantando se las ganas de levantarse h abrazarlo y decirle lo mucho que lo había extrañado.

Pero no podía admitirlo frente a Jeon.

— ¿C-Cómo has estado? — Pregunto el pelinegro.

— ¿Luego de todo lo que me hiciste te dignas a preguntarme como he estado? — Pregunto Jimin molesto.

— Jimin deja que te explique como sucedieron las cosas por favor, solo te pido eso y estará en tu opinión si me crees o no, por favor — Dijo Jungkook mirándolo.

Jimin mordió su labio indeciso, ¿Debía escucharlo luego de todo lo que hizo?, ni el mismo lo sabía, solo sentía una pequeña corazonada que le pedía saber cómo fue que sucedieron las cosas.

Pero simplemente no podía, no aún...

— Lo siento Jungkook, pero... No puedo, lo siento — Dijo Jimin.

Y sin más Jimin se levantó de aquella mesa alejándose de Jeon, tal vez se estaba comportando algo infantil por no aceptar que Jungkook le diera una explicación pero no se sentía aún listo de saber la verdad, además que ahora no se trataba solo de el, si no que había una pequeña de entre medio de ambos.

Camino hasta uno de los baños dispuesto a lavar su rostro pero accidentalmente chocó con una chica haciendo que esta regala su bebida al suelo.

— Lo siento mucho no era mi intención — Dijo Jimin.

— No te preocu... ¿Jimin? — Escucho la voz de la chica.

Jimin miro a la chica delante de el llevándose una gran sorpresa al ver a Nayeon frente a el.

— Nayeon... — Pronunció Jimin.

— No sabes lo mucho que te busque unos días después que... Sucedió lo de Jungkook, yo...

— Lo siento pero no quiero saber nada de el, perdona tengo que irme — Dijo Jimin dispuesto a irse.

— Espera Jimin — Dijo Nayeon tomando el brazo del peli-rosa. — Enserio quiero hablar contigo, se que en ese tiempo actúe muy inmadura, pero realmente debes de saber cómo sucedieron las cosas, por favor hablemos...

Jimin mordió su labio indeciso, Nayeon había sido la causante de todo esto y el que Jimin supiera la apuesta en la que Jeon estaba metido, pero también quería saber la verdad y ver si podría solucionar algo con Jeon.

— Esta bien, pero no aquí, ¿te parece si es mañana? — Pregunto Jimin.

— Claro, no hay problema, conozco un lugar donde podremos ir te daré la dirección — Dijo Nayeon.

Nayeon tomó su bolso buscando un pedazo de papel junto a un lapicero anotando la dirección y entregárselo al peli-rosa.

— Es esta, enserio quiero arreglar las pases contigo y que... Tu y Jungkook solucionen aquello — Dijo Nayeon.

— No lo creo, pero veré si ahí algo que podamos solucionar — Dijo Jimin. — ¿Te parece si nos vemos a las diez de la mañana?

— Ooh, si claro, no tengo problema alguno — Dijo Nayeon.

Jimin asintió para luego despedirse de Nayeon y volver a la mesa donde estaba antes viendo que no se encontraba Jeon y ver a Taehyung sentado y sin pensarlo dos veces camino hasta el.

— ¿En donde diablos te metiste? — Pregunto Taehyung.

— Fui al baño — Dijo Jimin.

Taehyung asintió y le entregó un pequeño vaso de sujo y disfrutar el evento, aunque para Jimin no fue nada agradable ya que solo sentía las miradas que Jeon le daba, algo que lo ponía incómodo.

Unas horas después Taehyung y Jimin finalmente se encontraban en sus habitaciones del hotel.

Jimin secaba su cabello vistiendo algo cómodo para dormir, le dio una mirada al paisaje que le daba la ventana que tenía en su habitación pensando en lo que le diría Nayeon al día siguiente.

Se recostó en su cama mientras dejaba salí un suspiro estresado, sin duda ver nuevamente a Jungkook lo había hecho recordar varias cosas que pensó que habían quedado en el pasado.

Y que decir de Jeon quien se encontraba más apuesto desde que Jimin lo había dejado de ver, ya no era aquel chico serio y rudo si no alguien totalmente diferente pero que aún tenía aquel atractivo cuerpo.

Sacudió su cabeza dejando de pensar aquello y apagar las luces y caer en un profundo sueño.

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Al día siguiente Jimin se levantó temprano, salió de la ducha para colocarse algo no tan llamativo pero cómodo, tomó un pantalón de cuero negro junto a una camisa blanca y encima de esta una chaqueta de mezclilla.

Peino su cabello y maquillo su rostro para luego colocarse unos lentes mientras tomaba su llave y celular y luego salir del departamento.

Una vez salió del hotel tomó un taxi dando la dirección que Nayeon le había dado y unos minutos después estar finalmente en una agradable cafetería.

Pago el taxi y bajo de el y se adentro al lugar hasta ver a la castaña esperándolo.

Sin más camino hasta ella y tomar asiento delante de ella retirando los lentes que traía puestos.

— Hola — Dijo Nayeon.

— Hola — Respondió Jimin.

Una chica se acercó a ellos tomando sus órdenes y unos minutos después traerlas y retirarse dejando solos a ambos chicos.

— Bien, te escucho — Dijo Jimin tomando un sorbo de su café.

La castaña asintió soltando un suspiro y comenzar a hablar.

— Bien, primero que nada quiero que sepas que la intención de Jungkook no era nada mala, o bueno no después de conocerte, aquella vez que te dije sobre la salida que Jungkook había cancelado fue porque sus padres los obligaron ya que en ese tiempo estaba obsesionada con Jungkook, que cuando Jungkook me dijo que sentía algo por ti me moleste mucho, así que un día escuche a sus amigos hablar de una apuesta la cual pensé que sería la manera de separarte de el — Contó la castaña. — Pero cuando vi a Jungkook aquel día tratando de explicarte todo me di cuenta que eso ya no era un juego...

— Nayeon, no trates de hacer que vea a Jungkook como la víctima ya que claramente el no lo fue, lo que me hizo no merece mi perdón, jugó conmigo... — Dijo Jimin. — Ti misma me diste el video

— No Jimin si se que lo que hizo en un principio para acercarse a ti estuvo muy mal,  pero Jungkook realmente se enamoró de ti, aquel vídeo que viste donde Jeon niega sus sentimientos hacia ti esta incompleto... — Revelo Nayeon sacando su celular y mostrarle el video.

Jimin miro atento viendo que era el mismo vídeo pero lo que más le sorprendió fue que Jungkook confesara lo que sentía por el, algo que hizo que su corazón latiera más.

— Estaba molesta de que Jungkook te eligiera a ti antes de todo que recorte el video y así separarte de el, pero al día siguiente Jungkook fue a mi hogar diciéndome que por mi culpa el chico que tanto amaba se había ido — Dijo Nayeon. — No sabes lo que sufrió estos dos años sin ti Jimin, Jungkook jamás te ha dejado de amar incluso me siento demasiado culpable por lo que les hice...

— ¿Por qué estas haciendo esto Nayeon? — Pregunto Jimin mirándola. — Creí que estabas totalmente enamorada de Jungkook...

— Porque quiero que mi amigo este feliz, feliz con la persona que realmente ama y quiere — Dijo Nayeon.

Jimin bajo su vista, el también deseaba aquello, quería abrazarlo, besarlo, estar con Jungkook para siempre y ahora más que nunca al saber si lo que Nayeon le había dicho era verdad.

— Ten — Dijo Nayeon dejando un papel con una dirección. — Este es el lugar en donde está viviendo Jungkook ahora, si me crees y realmente quieres volver con el, ve... Y sobre la cuenta no te preocupes yo la pagaré, ahora ve con Jungkook de seguro esta en su departamento...

Jimin tomó la nota viendo la dirección y luego mirar a Nayeon.

— Gracias... — Dijo Jimin.

Y sin más el peli-rosa salió del lugar, tomó otro taxi y dar la dirección siendo llevado al lugar.

Su corazón latía al no más poder, sentía sus nervios salir a flote por la locura que iba hacer, pero quería saber todo desde la voz de Jeon.

Una vez el taxi se detuvo en un hotel pago y bajo de este mirando el edificio frente a el dejando salir un suspiro y sin mas entrar al lugar.

Camino hasta el ascensor indicando el cuarto piso y ver las puertas cerrarse, su pulso estaba demasiado acelerado que juraría que se desmayaría en cualquier momento.

Una vez las puertas se abrieron salió de este y caminar hasta la puerta con el número 1308, dio un largo respiro y seguido de este dar dos golpes leves a esta esperando a que Jeon abriera.

Entonces la puerta fue abierta dejando ver a Jeon quien miro sorprendido a Jimin.

— ¿Park?... — Dijo Jungkook sorprendido. — ¿Qué haces a..

Y sus palabras de cortaron al sentir los labios de Jimin sobre los de el abriendo sus ojos hasta más no poder.

Jeon sin más colocó sus manos sobre la delgada cintura del peli-rosa respondiendo a aquel besos mientras sentía los brazos de Jimin sobre su cuello sin intenciones de separarse de aquel beso.

Un beso que tanto habían anhelado después de dos años separados...

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No diré nada y simplemente me iré lentamente.