— ¿Estás ansioso?

— No te imaginas cuánto...por fin el enano volverá aqui, fui tan idiota cuando lo tenía en casa, no lo tomaba en cuenta y siempre fui despreocupado, pero ahora que solo nos veíamos por llamada me di cuenta de lo importante que es mi hermano para mí  y que lo amo.
Está vez será distinto.

— Es lindo escucharte decir eso, el osito se merece todo el amor del mundo.

—¿Y tú linda novia?— preguntaba la rubia mientras se acercaba— Yo también meresco todo el amor del mundo, todo tu amor.

— Si Eunji lo haces....ayudanos, ve por la el pastel a la cocina porfavor...Tae debe estar por llegar.

La chica le dió una sonrisa cálida a Jungkook la cual cambio por completo cuando ya no estaba a la vista del pelinegro.

Si quería que ese chico fuese de ella siempre y no correr el riesgo de perderlo, entonces le daría lo que quería.
Debía fingir, podría ser la mejor mujer del mundo si con eso Jungkook seguía estando a sus pies.

Tomó con delicadeza el pastel y volvió dónde estaban los dos amigos terminado de decorar, viéndose muy ansiosos y felices por lo que pasaría.

— ¿Falta mucho?

— Mamá dijo que estaban fuera....están aquí Yoongi, al fin— Jungkook se sentía emosionado y a cierta rubia esta actitud le estaba desagradando—

La puerta principal se abrió dejando ver a Mínho y Amira, quienes entraron sonrientes a saludar a los chicos.

Unos segundos después un hermoso castaño se hizo presente en el lugar.

Jungkook dejo de respirar por unos segundos.
Sabía que el menor era hermoso, pero viendolo frente a el la imagen era totalmente sublime, lo hacía pensar que era la persona más hermosa y perfecta que sus ojos podían apreciar.

La sensación en su cuerpo , el cosquilleo constante y el revoltijo  en su estómago sumado  a lo fuerte que Latia su corazón lo hicieron ponerse en alerta, no espero sentirse de esa forma al volver a ver al pequeño.
Jamás pensó tener este tumulto de sensaciones con solo la presencia del menor, al cual siempre vio como un hermano pequeño, al menos eso pensaba hasta hoy.

Sus manos temblaban por tomar las de Taehyung y decirle mirando a sus ojos todo lo que lo extraño y la gran falta que le hizo.

La intensidad de su mirada sobre el menor hizo que apareciera un sonrojo en las mejillas de este y que una pequeña risita tímida abandonará sus labios.

Sus pies se movieron  por si solos hacia el castaño quedando frente a el y observando unos segundos más hasta acortar la distancia y envolver sus brazos a su alrededor, dándole un cariñoso abrazo, el cual el castaño correspondio de inmediato.

Estaban ajenos a todo alrededor, como si solo ellos dos existieran en el mundo, ahí juntos nada más tenía importancia.

Hasta que esa molesta voz de la novia del mayor  los saco de su burbuja y los hizo despertar de tan mágico momento.

— Así es que este es Taehyung...tenía muchas ansias de conocerte oppa.
Mi novio Jungkookie me hablo mucho de ti, me llamo Eunji..espero que me veas como tú hermanita.

— Un gusto ommeonie— saludo recalcando la última palabra— cuide de mi.

Taehyung no había pasado por alto la forma burlesca en qué la chica le llamo oppa tratando de sonar tierna y solo escuchándose ridícula al llamarlo así siendo mayor que el.

Tenía claro que está chica traería problemas en algún momento, pero el ya no era un niño y no dejaría que sea cual sea la persona lo tratase mal de alguna u otra forma.

— Estás muy grande y hermoso osito— dijo Jungkook ignorando por completo a su novia— siento que fue una eternidad sin verte.

Cada palabra que salía de los labios de pelinegro se escuchaba llena de sentimiento y que sus ojos no abandonaran el rostro del contrario solo hacia ver cómo si estuviese completamente hipnotizado por el menor.

—Fueron varios años Kookie, creo que que ya dejé de ser el niño pequeño que todos aquí conocían, ni yo mismo tengo recuerdo de aquel.

Minho se sentía triste, sabía que el cambio de actitud se debía a todo el tiempo que estuvo con Nora y no dejaba de sentirse culpable al dejar que su hijo se fuese con ella tan lejos y haber quedado expuesto a vivir una vida en la que no tubo el cuidado que se merecía.

Taehyung notó la incomodidad de su padre, el jamás lo culparía de nada de lo que pasó y se sentía ansioso de encontrar la forma en que mínho lo entendiera.

Pero este no era el momento de solucionar este tema, venía recién llegando a su hogar y quería disfrutar el momento, estar junto a sus seres queridos en paz.

Más tarde tendria una conversación con su padre, le dejaría en claro que no había nada de lo que culparse y que solo dejarian en el pasado lo sucedido.

— ¿No me abrazas Yoongi?

— Yo no abrazo enano.

—Pero soy tu hermanito....tu me querías aqui— dijo de forma manipuladora—

Yoongi solto un bufido, sabía que su hermano tenía razón.
El lo quería ahí con el y además se había prometido a él mismo ser mejor con el menor, ser el hermano que se merecía y hacer que taehyung se sintiera feliz de tenerlo junto a el.

— Ven a qui mocoso— dijo extendiendo sus brazos— ven antes que me arrepienta.

El castaño no dudo un segundo en acercarse a Yoongi y envolverlo con sus brazos.

Se sentía seguro en casa y feliz de que cada uno de ellos estuviese contento con su llegada, a excepción de la rubia, que parecía que estaba pegada al brazo de Jungkook cómo haciendo una barrera para  que ellos dos no tuviesen ningún otro tipo de contacto.

Era un vano intento de alejarlos, ya que todos los presentes sabían que tarde o temprano estos dos estarían pegados como imanes, eso siempre sucedió en el pasado.
No era un secreto para nadie que Jungkook adoraba al hermano de su mejor amigo.

La tarde transcurrió normalmente, estuvieron platicando hasta que la noche llegó.

Taehyung les contó lo que hizo mientras estuvo fuera y todas las cosas nuevas que aprendio.

También les hablo de Minjae, su novio.

Esto último no fue algo grato de escuchar para cierto chico, que por alguna extraña razón se sentía ¿celoso? , Eso era algo  que ni siquiera el comprendía.

Sabía que eran celos, pero se debían a que el menor siempre fue como su hermano pequeño y escucharlo hablar de su novio solo le hacía sentir un poco de envidia por lo que vivió la pareja.

La relación que Taehyung relataba era perfecta, el chico era prácticamente un príncipe recién salido de algún tipo de cuento de hadas cliché, que solo  lo hacía sentir molesto cada vez que era  mensionado.
Se sentía estúpido de lo que sucedía con el.

— ¿El no vendrá?— pregunto Minho—

— Está haciendo todo lo posible papá, pero la verdad yo no quiero que cambie su vida por mi, no quiero que una decisión importante se base en una persona.
No es justo para el.

— Minjae es un chico inteligente, si tomo está decisión fue a conciencia, quiere estar aquí contigo hermano, pero si tú no quieres que venga también debes ser honesto.

— Quiero que venga Yoon, yo quiero mucho a Minjae, solo no quiero que se precipite.
Aún somos jóvenes, no tomas estás decisiones de buenas a primeras a esta edad.
No sabemos si seguiremos juntos y la verdad no quiero sentir que todo lo que el hace al venir aquí es mi responsabilidad.
No necesita seguirme dónde vaya...
Siento que soy un idiota al no ser claro.

— No lo eres osito, solo te preocupas por el bienestar de tu novio y eso es muy lindo, pero deberías hablar con el.
Dejar las cosas en claro y reemplantearte tu mismo la relación, si la proyectas a futuro o solamente fue una bonita historia.

Todos quedaron en silencio observando al pelinegro, sabían que el no era muy expresivo pero también sabían que Taehyung desde siempre sacaba lo mejor de el.

— Gracias Kookie, tienes razon— dijo bajando su cabeza—

— Mi amor, Jungkookie , mi novio hermoso, ya me quiero ir.
Estoy cansadita y mañana debo trabajar temprano— dijo Eunji tratando de verse tierna— Al igual que tú cielo, recuerde señor Jeon que debe trabajar, se lo digo como su secretaria.

Utilizó la voz más dulce que pudo sacar y un par de pestañeo que estaba segura nunca fallaban, bueno no hasta ahora.

Lo habría conseguido hace un tiempo atrás, pero curiosamente en este instante a Jungkook solo podía desagradable.
No lo encontraba dulce, ni tierno, ni nada que se le parezca.

De igual forma sabía que es su novia, no podía hacerle un desaire menos delante de más gente ya que de lo contrario tendría una pelea con ella, las cuales eran muy recurrentes desde hace un tiempo y tenía la impresión que con la llegada del menor lo serían aún más.

— Pediré un taxi para ti Eunji...yo esperaré a mamá, me iré con ella a casa, perdón por no poder llevarte yo mismo.

La rubia se mantuvo sonriente, como si nada de lo escuchado le estuviese haciendo crecer un enorme enojo en su interior.

— Está bien cielo, pero mañana vas por mi para ir a la oficina.
Que sea tu secretaria no quiere decir que no deba cumplir con mis obligaciones.
Si te portas bien tal vez te visite en tu oficina.

El último comentario solo género caras de desagrado, estaba de más y no era el lugar para hacerlo.

— Ey rubia, guardate los detalles para ti— dijo Yoongi—

— Porque eres tan grosero Yoon, deberíamos intentar llevarnos bien, pronto seré la esposa de tu amigo y estaré siempre en sus vidas.

—¿Esposa?....ey Jk, cuando fue eso, no recuerdo que te hayas propuesto.

— Es porque no lo hize — dijo bajito— Eunji, hablaremos de esto después.
Tu taxi está fuera, vamos te llevaré hasta el.

La chica se levantó sonriente, había logrado su cometido de incomodar a unos cuantos con su presencia.

Tenía la certeza que tarde o temprano lograría atrapar a Jeon y volverlo su esposo, aún le quedaban algunas jugadas y era mejor para los demás irse acostumbrado a lo que eventualmente pasaría.

— Tengan buena noche....un gusto Taehyung, espero nos veamos seguido, amo los niños!

— Pues deberías buscarte uno o trabajar en una guardería, tienes la edad suficiente para eso.

Todos quedaron sorprendídos por la respuesta del menor, no esperaban que le respondiese ni mucho menos la tranquilidad y confianza que irradiaba ahora mismo cuando dejo de ver a Eunji y le restó importancia a la conversación.

— Gracias por tus palabras pequeño.... Eres muy gracioso...bueno me voy, les dejo a mi hombre, cuidenlo se que me extrañará mucho.

Dicho esto la chica salió del lugar victoriosa según ella, sin saber que los que quedaron dentro de la casa estaban carcajeandose por su evidente estupidez en su intento por marcar territorio.
Uno que sabían que en muy poco tiempo perdería.

Algo les decía que el final de esa relación estaba cerca y la persona capaz de lograr ese milagro sería el mismo Taehyung.

Siento que he tardado una vida en actualizar, pero aquí les dejo dos capítulos y la promesa de hacerlo más seguido 😁

Cómo siempre muchas gracias a quienes me leen, espero que la historia les esté gustando y me dejen sus comentarios.
Trato de mejorar día a día.