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Ya habían pasado tres semanas, convivían felices y tranquilos, claro con algunas complicaciones entre TaeHyung y JungKook, pero todo era armonioso.

SeokJin intentaba hablar y decirle a los chicos el por que de la ausencia de el décimo chico, mas no encontraba el momento indicado para tal noticia.

—¡¡Oppa!!, ¡¡Oppa, NamJoon!!.

—¿Qué ocurre Hye-Jin?

—Ya es de madrugada y JungKook aun no llega.

TaeHyung volteó a ver hacia aquellos chicos y frunció el ceño. ¿Qué acaso JungKook no se había ido a dormir hace dos horas?.

Dejo su libro a un lado y camino hacia las escaleras, al ya estar en la puerta de la habitación de JungKook, tocó varias veces sin obtener respuesta alguna, abrió la puerta y prendió las luces, JungKook no estaba, ni en la cama o en el baño. ¿A dónde había ido?.

Camino a su habitación y tomó saco un abrigo que puso en su cama para atender la llamada entrante en su celular.

JungKook
—¿Estas dormido?... que pendejo claramente no... me contestaste.

—¿Estas borracho Jeon?

—¿Borracho?, Jajaja por supuesto que no .

—¿En donde estas?, ¿Ya vienes?... me tienes preocupado.

—En la calle... creo que ya estoy cerca de la casa. Espera... ¿preocupado?........

La llamada se corto y TaeHyung miro preocupado por la ventana y vio la llovizna que estaba afuera y en esos momentos no estaba en condiciones para usar sus poderes puesto que últimamente cuando intentaba utilizar uno de los dos más habituales hacia todo lo contrario, detestaba el no poder ser normal.

—¡Ya nos iremos a dormir Tae!—Gritaron desde afuera y después abrieron su puerta—¿Esperas tu a JungKook?

TaeHyung asintió y tomó su abrigo para después bajar a la sala. Y apagar la mayoría de las luces exceptuando la de la entrada. 

Cerró sus ojos y de la nada su característica aura Lila apareció y sus ojos se iluminaron en rojo y el otro Lila para después la lluvia pararse y convertirse en una lluvia de estrellas que daban a entender su estado en ese momento se sentía confundido y con una lluvia de estrellas en su estómago cada que escuchaba o hablaba con JungKook.

JungKook desde ese farol a unos siete metros de la casa observó como la lluvia paraba abruptamente y de la nada una preciosa lluvia de estrellas llenaba el cielo.  Sonrío sabiendo que eso era producto de su Peligris/castaño.

Llego a la puerta y toco siendo recibido por un TaeHyung en Shorts negros y una camiseta blanca grande que dejaba al descubierto uno de sus hombros.

Lo analizó algunos minutos hasta que sintió como el de ojos heterocromicos se lanzaba a él y lo abrazaba.

Sorpresa.

Eso es lo que el pelinegro sintió.

—No vuelvas a salir tan noche, no sabes que te puede pasar.

—Se defenderme Tae—Se separó un poco y acarició su mejilla y lentamente se acercó a él sorprendiéndose una vez al notar que TaeHyung no oponía resistencia.

—Se que sabes defenderte... pero que si te lo encontrabas a él... no sabemos las cons..

Y lo besó, aún había alcohol corriendo por su cuerpo pero estaba consciente de que hacía y de lo perfecto que se sentía besar a ese chico, que tantos secretos tenía.

—TaeHyung...

—JungKook...

—Déjame amarte

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Al despertar noto como un brazo rodeaba su cintura, y que se encontraba en el sofá de la sala, volteó a ver a JungKook quien con su boquita abierta y soltaba leves ronquidos.

Recordó la noche anterior y lo dicho por el pelinegro. Ese que no lo dejó responder y solo lo beso hasta el sueño los atacó y se quedaron dormidos juntos en aquel sofá.

Bien se había dicho hace tres semanas. El que no arriesga no gana. Y él se quería arriesgar.

—Kook... Kook. Despierta.

—Mgh.. ¿Quién es y qué quiere?

—Soy TaeHyung y quiero que te levantes.

Y sin más el pelinegro se sentó en aquel sofá. Sin rechistar ni más ni menos, TaeHyung sonrío ante ello y acarició su mejilla.

—JungKook, respondiendo a lo que me dijiste anoche yo...

—¡Buenos días chicos!

Él castaño se alejó de JungKook con las mejillas sonrojada y saludó en un susurro, mientras JungKook seguia pensando en "¿Por qué justo cuando TaeHyung me va a decir algo HoSeok Hyung viene y lo interrumpe?"

—¿Hablamos más tarde?.

—Si—Respondió aún murmurando.

—¿Qué quieren de comer?—Preguntó HoSeok con una sonrisa resplandeciente a lo que los chicos respondieron al unísono.

—¡HotCakes!

—¡Muy bien!... haganlos ustedes jeje yo no se cocinar—Se rascó la nuca y camino hacia el sillón sentándose a un lado de TaeHyung y abrazándolo por encima de sus hombros con un brazo. Causando un adorable (Para TaeHyung) pero terrorífico gruñido por parte de JungKook—Tranqui.

TaeHyung solo rio y su rostro se coloró aún  más cuando se le ocurrió acariciar la mejilla del pelinegro quien ignoró completamente al de mechas rojas y prestando única atención al de ojos grises con café.

—¿Cocinamos juntos?.

Y como si tuviese un animal en su interior que movía la cola emocionado asintió. ¿Acaso su castaño ya estaba comenzando a tenerle confianza? O ¿Acaso a través de esos preciosos ojos grises se escondía un sentimiento naciente hacia su persona?.

—Cocinemos juntos—Afirmó.

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—Entonces crees que...

—Si, tan solo míralos, TaeHyung ya se está abriendo nuevamente—Con una gran sonrisa comentó JiMin a Hye-Jin.

—¿Tanto lo hizo sufrir él otro?

—Uy, mi querida Hwasa... no tienes idea, ese hijo de su mamá... le hizo el corazón polvo a Tae.

—Y JungKook esta recolectando las cenizas para guardarlas delicadamente en un garrón—Continuó ella.

—Y amoldarla con un poco de amor y volver a formar su corazón.

—¿JungKook es el indicado JiMin?.

—Solo Tae sabrá... pero si me preguntas a mi como su amigo. Se que abran problemas. Pero son el uno para el otro, no tengo pruebas pero tampoco dudas.

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Este capítulo estuvo más corto, lo siento la inspiración me abandonó.

Espero les guste.

Los dueños de este mes 🛐✨💜