🚨Aclaración🚨

🚩🚩🚩 Está historia contiene comportamientos inadecuados, celos enfermizos, conductas tóxicas. No estoy romantizando nada de esto, es solo ficción. 🚩🚩🚩

🔞🔥

Las escenas de sexo son explícitas. Si no les gusta este tipo de lectura pueden saltar la historia.

🌈

En esta historia no hay inconvenientes de que personas homosexuales se unan al ejército. Ya sé que en la realidad fingen para no ser sancionados. Aquí en mi historia, eso no es relevante.

No siendo más, disfruten la lectura 😎

Cada vez que Taehyung se aleja de JungKook, el azabache siente que enloquece minuto a minuto.

La decisión de cumplir el servicio militar obligatorio en el ejército de Corea del Sur, los llevará a una gran prueba en su relación.

Taehyung trata de calmar a su angustiado novio, diciéndole que mantendrán contacto apenas tengan acceso al teléfono y que al cumplir los 100 días, saldrán de vacaciones y podrán verse nuevamente.

Todo se sale de control cuando JungKook escucha los rumores de que Taehyung es amado por todos, al grado de que algunos se volverían Gay solo por él.

La locura por poseer a su novio y castigarlo aumenta cada día, hasta el día 100.

Dónde la promesa de verse se cumple, luego de tanto tiempo.

Ser novios durante tantos años no era suficiente, los celos incrementaban con el paso del tiempo, eran irracionales, JungKook enloquecía cada vez que alguien admiraba la belleza de su hermoso y perfecto novio.

La dulce, tierna y sociable personalidad de Taehyung, lo hacía todo más difícil. Cada persona que conocía al castaño quedaba completamente hechizado por él.

Ya fuese por su belleza inigualable, su esbelta figura o su personalidad encantadora.

JungKook a veces sentía miedo de la forma en que su locura dominaba sus acciones, la necesidad de poseer a su novio en todo sentido lo llevaban a marcar territorio a dónde asistían.

Amigos cercanos, conocidos y compañeros de trabajo sabían de su relación, aún así, JungKook no lograba disimular su molestia cuando alguien era excesivamente cariñoso y amable con Taehyung.

Claro, a los ojos de Jeon, un simple gesto de amabilidad ya era excesivo para él.

-Me vuelves loco-

JungKook embistió con rudeza, jaló la cabellera del castaño, haciéndolo jadear por la intensidad de su encuentro.

-Ahg Baby... Me encanta tu locura-

Era retorcida la forma en que Taehyung disfrutaba de los castigos de su novio cuando se ponía celoso. El sexo era maravilloso, rudo y sin pudor alguno.

-Mírame- Demandó al dirigirse a él con voz gruesa. -Eres mío, Taehyung- Golpeó las nalgas con fuerza, dejando rojiza el área. -Me perteneces-

-Mgh- Taehyung gimió.

Su fetiche era ser azotado, jalado y usado. Su novio era experto en darle lo que quería.

-Dilo, quiero escucharte-

-Soy tuyo Baby, te pertenezco-

Los gemidos se incrementaron cuando JungKook afianzó el agarre y las estocadas se volvieron más fuertes. Lo penetraba con fuerza, admiraba con orgullo las marcas en la piel canela de su novio.

Taehyung le pertenecía a él, solo a él.

Nunca una ronda fue suficiente para ellos, terminaban exhaustos luego de varios encuentros. El cuerpo de Taehyung era adornado con hermosas marcas, cada una marcando la piel en señal de propiedad.

JungKook estaba totalmente loco, loco por Taehyung. Y el castaño amaba eso de el.

Algunos amigos le reclaman, diciendo que aquel comportamiento no era sano. A Taehyung poco le importaba.

-Su locura es hermosa para mi- Decía siempre.

Sonreía al recordar los reclamos infantiles de su pareja. Una mirada o un simple halago era suficiente para activar la posesividad de JungKook.

El azabache era impredecible la mayoría de veces, usualmente no mostraba celos al inicio, la acumulación de varios momentos lo transformaba en aquel loco obsesivo.

En público, intentaba controlarse. Sus característicos ojos filosos, mirada penetrante eran señal de su molestia y celos. La mandíbula tensa y la lengua empujando su mejilla indicaban el inicio de su frustración.

JungKook quería someter a su novio y que todos vieran a quien le pertenecía, al no poder hacerlo. Sus expresiones faciales lo hacían por él.

Todos ya conocían a Jeon y su cara de celos.

Cuando estaban en la privacidad de sus apartamentos, JungKook ya no mostraba señal de molestia, su rostro cambiaba a una peligrosa fiera queriendo devorar a su presa.

Su mirada sexy acompañada de gestos con sus labios y su lengua, hacian que Taehyung vibrara de anticipación por el placer que recibiría, con ansias queria ser devorado completamente.

Estando acostados en la cama de JungKook, Taehyung sonreía ante las suaves caricias en su cabellera. Luego de la intensidad de sus encuentros, su novio ahora tenía una faceta tierna, dónde consentía cada capricho que él le solicitara.

-No voy a poder estar tanto tiempo separado de ti-

-Lo sé, voy a extrañar dormir contigo, que me hagas mimos-

-Realmente estoy enojado y triste al no poder ir al mismo lugar, quería estar contigo al menos...-

Taehyung lo besó.

-Nos prometimos estar juntos, no logramos ir al mismo sitio, pero si en las mismas fechas- Taehyung suspiró. -Al menos saldremos al mismo tiempo-

-¿Que dijeron tus padres sobre la despedida?- JungKook jugaba con un mechón del cabello castaño de su pareja.

-Se decidieron por una cena familiar, ya le envié la invitación a tus padres-

-¿Y nuestra despedida?- JungKook habló con tristeza en su voz, hablar de eso era realmente doloroso para él.

-¿Que quieres hacer?-

-No importa realmente, si estoy contigo-

-Podemos invitar a cenar a nuestros amigos-

JungKook celaba a Taehyung de todos sus amigos, cada uno tenía algo que no era del agrado del azabache. Sin embargo, prefería estar cerca de Taehyung cuando salían, así podría vigilar y marcar su territorio.

Aunque con los amigos no hacía falta, todos sabían de su relación, JungKook le daba igual, era posesivo.

La Familia Jeon, se reunió con la familia Kim, compartieron un momento agradable, en honor a sus hijos, quienes pronto iniciarían su vida militar.

Días después, la pareja salió con amigos, cenaron en casa de Taehyung, bebieron vino, disfrutaron alegremente los últimos días de libertad antes de confinarse en el ejército.

Dos días antes de irse, JungKook había estado demasiado silencioso, Taehyung notó aquel cambio de actitud en su pareja. Seguía siendo empalagoso, amoroso, posesivo y celoso; pero había estado callado, algo muy extraño en él.

-¿Baby, pasa algo?-

Taehyung se encontraba abrazando la cintura de JungKook, ambos acostados en la cama, está vez en casa del castaño.

-¿Amor y si no soy capaz de estar sin ti?-

El temor de estar lejos de Taehyung era real, se habían acostumbrado el uno al otro que a veces parecían uno mismo.

-Lo harás, en pocas semanas podremos llamarnos y escribirnos. A los 100 días tendremos unas pequeñas vacaciones, podremos estar juntos otra vez, eso hará que la espera se sienta más corta-

-¿100 días?- JungKook abrazó con fuerza a Taehyung. -Es demasiado, no voy a poder-

A veces su actitud era tan infantil y mimada, quien se iba a imaginar que aquel lindo y tierno era el mismo que lo hacía suplicar de placer.

-Prometo que haré lo que quieras cuando nos veamos en los 100 dias-

-¿Lo que yo quiera?-

JungKook sonrió y aquella promesa hizo que su boca se aguara al imaginar a su novio siendo sometido por él.

-Si mi amor, lo que tú quieras-

Taehyung jamás sentía miedo, él gustoso haría todo lo que JungKook le propusiera. No era un secreto que amaba ser castigado por su pareja.

-Esta bien, tendré algunos días para pensar en algo interesante-

Por tradición, ambos cortaron su cabello, luciendo el corte característico del militar. Lo hicieron en compañía de sus familias y luego compartieron sus nuevos looks en una videollamada que luego se convirtió en una llamada caliente.

Tuvieron sexo telefónico, como acostumbraban cuando se separaban por situaciones de trabajo.

JungKook acompañó a Taehyung a su ceremonia de ingreso, la familia Kim también estuvo con ellos. En el vehículo, camino hacia el lugar, aprovecharon cada minuto.

Taehyung estaba en el regazo de JungKook con las piernas abiertas, abrazando la cintura. JungKook besaba a su novio con desesperación y locura. Jalando, mordiendo aquellos dulces labios.

Iban en un auto que alquilaron para asistir, teniendo algo de privacidad en el interior del vehículo.

-Esta noche me vas a hacer falta- JungKook dijo mientras besaba el cuello. -No voy a poder dormir-

-Baby, tienes que descansar. Mañana te toca a ti-

JungKook amasó el trasero de su novio, le encantaba como sus manos encajaban a la perfección. Quería hacerlo suyo, allí. No podía, quería someterlo. Recordarle hasta el último minuto a quien le pertenecía.

Taehyung lo conocía a la perfección, aquella necesidad y locura de JungKook por sentirse el dueño, la conocía en sus expresiones. Movió sus caderas provocando. Sintiendo la tensión en los muslos.

-Ahg Tae, debi hacerte mío una última vez antes de salir-

-Pero.. lo hicimos- Taehyung sonrió al sentir el bulto rozando sus nalgas.

-Una vez, solo una más-

-¿No te cansas?- Con sus manos jugó en el pecho del azabache. -Lo hicimos dos veces antes de salir de mi casa-

-No, nunca me cansaré de ti- Sostuvo las caderas e hizo presión hacia abajo, necesitaba aliviar el dolor en su entrepierna. -Ahg, necesito...-

-Baby- Le susurró en la oreja. -¿Necesitas que te alivie el dolor?- Mordió suavemente el lóbulo. -Puedo darle un besito de despedida-

JungKook gruñó por la propuesta, apretó sus manos, dejando marcas en las caderas, Taehyung gimió por la rudeza.

-Hazlo, quiero verte tragar todo-

Taehyung sonrió, besó fugazmente a su novio, se acomodó a un lado, observó con paciencia como JungKook desabrochaba el pantalón, liberando el miembro totalmente erecto.

JungKook lamió sus labios al imaginar, aquella boca en su extensión, moría por tener esa imagen frente a él. La mejor despedida de todas.

Taehyung envolvió con su mano la ereccion, lamió la punta con su mirada seductora puesta en su novio. Lentamente envolvió con sus labios gruesos, podia sentir las venas con su lengua.

JungKook tenía una gran tamaño, siempre le tocaba ayudarse con las manos para poder realizar aquella acción sin dejar de acariciar todo el miembro.

Bajo lento, provocando la locura en su novio, quien mordía sus labios con los dientes al sentirse desesperado por no poder moverse como quería. JungKook llevó sus manos al cuello de Taehyung y empujó su cadera hacia arriba.

-Hazlo rápido, me estás volviendo loco-

Taehyung respiró agitado por el repentino movimiento, jadeo y envolvió el miembro nuevamente con su boca, empezó a subir y bajar, su mano acompañaba los movimientos.

JungKook enfocó la vista en aquella imagen tan erótica, la recordaría cada día hasta que pudieran volverse a encontrar.

Las arcadas se hicieron presente, Jungkook no pudo evitar y empezó a mover sus caderas con desespero, follando aquella boca como le encantaba.

Gemía al sentir aquella húmeda cavidad recibirlo, Taehyung era experto en darle lo que quería, se dejaba usar a su antojo. En pocos minutos su orgasmo empezó a llegar a él.

-Te voy a llenar de mi, quiero que lo tragues todo- Dijo JungKook totalmente embriagado de placer.

Sostuvo a Taehyung por el cuello y embistió hasta que su líquido explotó en aquella boca, gritó a satisfacción por el orgasmo. Su lindo novio, tragó hasta la última gota.

Luego de aquel momento, JungKook acomodó su ropa, Taehyung se acomodó a su lado.

-Tienes los labios hinchados de tanto que los mordiste- Taehyung le dijo con diversión en su voz.

-Solo por ti, mi amor-

Se besaron con suavidad, hasta que el vehículo llegó a su destino.

Bajaron juntos, caminaron hasta el lugar, JungKook siempre al lado de Taehyung. La ceremonia duró poco, mucho menos de lo que JungKook quiso.

Se abrazaron antes de que Taehyung se encaminará a las filas para hacer su formación. JungKook lo miró a la distancia, sintiendo ese vacío en su interior. El castaño volteó a mirar hacia donde estaba su familia y su novio.

Una última mirada antes de partir.

Taehyung ingresó a las filas, las familias y acompañantes se retiraron del lugar. JungKook se fue esa noche a su apartamento, su familia lo acompañó.

Cómo era de esperarse, no durmió nada esa noche. Al siguiente día debía presentarse él para servir al país. Llegó al lugar, se despidió de su familia y amigos.

A partir de ese día, empezaría a contar los 100 días.

Los días pasaban, JungKook estaba distraído, pensativo y melancólico. Su rostro mostraba seriedad, extrañaba demasiado a Taehyung.

Los chismes iban de cuartel a cuartel, todos hablaban del soldado Kim.

Quien se destacaba en cada prueba, siendo el líder y ejemplo del escuadrón. JungKook también escuchó comentarios dónde decían lo dulce que era, lo fácil que se logró integrar.

La belleza de su novio era un chisme que corría por todo el lugar, todos sabían que era pareja de Jeon, sin embargo algunos bromeban, con la intención de molestar a JungKook.

Jeon evitaba a la mayoría y se concentró en sus actividades, no quería escuchar nada en relación a su pareja, estaba enloqueciendo.

-¿Escuchaste Jeon?- Alguien se acercó a él en la hora de la comida. -Dicen que hay hombres heteros que se volverían gay solo por Kim-

JungKook apretó sus manos, queriendo descargar su rabia en aquellas personas, golpeándolas hasta el cansancio.

-Era de esperarse- Dijo otro. -No hay duda que Kim es muy atractivo-

-Lo es- JungKook habló entre dientes. -Y es mío-

-Deja los celos, nadie te lo va a quitar- Bromeo el chico que estaba sentado a su lado.

Jeon se enfocó en el deporte y los ejercicios diarios para calmar su malestar. Le ayudó un poco, pero necesitaba saber de Taehyung para calmarse.

A las pocas semanas, tuvieron acceso a sus teléfonos y sin perder tiempo, se comunicaron.

-Hola baby, te extraño demasiado. ¿Dormiste la noche que me fui?- Taehyung habló entusiasmado cuando JungKook contestó el teléfono.

-Mi amor, me haces mucha falta. No pude dormir esa noche, ninguna desde que te fuiste- JungKook suspiró. -¿Estás bien?-

-Baby- Suspiró, quería abrazar a JungKook. -Tienes que dormir, te vas a enfermar. Estoy bien ¿Cómo te ha ido a ti? ¿Tienes amigos?-

-Estoy bien, sabes que no soy de hacer amistades tan fácil. Veo que ya tienes admiradores-

-¿Ya te llegaron rumores?-

-Sabes como es esto. ¿Les dijiste que tienes novio?-

-Todos saben que tengo novio, te olvidas de que somos modelos famosos-

-No está de más que les recuerdes cada que se acerquen a tratar de conquistarte-

-Baby, nadie me está conquistando. Incluso nadie me ha dicho nada de frente-

-Espero que no lo hagan, por qué soy capaz de ir y golpearlos-

-Mejor no hablemos de eso ¿Te parece?- JungKook indicó con su voz que estaba de acuerdo. -Ya vamos a poder llamarnos todos los días, eso me hace muy feliz-

-A mi también- Sonrió por primera vez en varios días. -Creo que hoy si podré dormir algo-

-Si pudiera, haríamos nuestras sesiones telefónicas- Taehyung hizo un puchero y JungKook sintió que su cuerpo se estremecía de solo pensarlo. -Vamos a tener que conformarnos solo con hablar-

-¿Te gusta provocarme?- JungKook le habló bajito, con voz gruesa y seductora. -Cuando nos veamos no vas a poder caminar de lo duro que te voy a dar-

-Ya quiero que nos veamos- Taehyung mordió sus labios. -¿Hablamos mañana? Por favor descansa. Te amo-

-Bueno mi amor, también te amo. Soñaré contigo-

-Espero me cuentes el sueño cuándo hablemos otra vez-

-Te lo haré cuando nos veamos- Sonrió. -Antes de colgar, quiero escucharte decir que eres mío-

JungKook respiró cerca del teléfono, queriendo traspasar la linea si fuera posible.

-Soy tuyo baby, solo tuyo-

JungKook suspiró, lamió sus labios. -Te amo mucho mi amor-

Aquella noche JungKook pudo conciliar el sueño, los días poco a poco eran más suaves y livianos, escuchar la voz de Taehyung lo tranquilizaba.

A veces sentía que la locura por verlo así fuera un momento, lo sucumbía en un sin fin de emociones. Tuvo una recaída en uno de los ejercicios y se lastimo la rodilla. Taehyung se enteró, no dudo en visitarlo. Tenía algunas tardes libres donde podían salir y su prioridad fue JungKook.

Taehyung estaba lejos de dónde se encontraba JungKook, viajo varias horas solo para verlo.
La felicidad de Jeon al encontrarse con Taehyung después de tantos días fue inexplicable.

Se besaron y abrazaron como si no se hubiesen visto en años. Aquello le dio fuerzas y lo ayudo a esperar con paciencia aquellas vacaciones tan anheladas.

JungKook a veces discutía con Taehyung porque en aquellas tardes libres, su novio salía con sus compañeros y eso no le gustaba, lo enfurecía. No habían palabras que Taehyung pudiera decirle para calmarlo.

El día 100 llegó, Taehyung salió primero, fue a su casa, visitó amigos y familiares. Sabía que en el momento en que JungKook saliera, no iba a tener tiempo para nadie más.

El día anhelado llegó, JungKook alistó sus cosas, se apresuró a hacer sus actividades del día, cocinar había sido realmente relajante desde que decidió ser cocinero en el ejército, sin embargo moría por devorar a Taehyung, la ansiedad por salir lo estaba matando.

Muchos criticaban los celos, decían que era inseguridad e incluso una actitud de desconfianza hacia la pareja. JungKook no sabía cómo controlarse, el solo era así y si Taehyung lo aceptaba, le importaba poco lo que dijeran los demás.

Y realmente Taehyung lo aceptaba así. Celoso, posesivo, dominante y un poco loco. Disfrutaba ver a su novio enloquecer cada que alguien lo miraba o simplemente lo saludaba.

De alguna forma, Taehyung también estaba un poco loco. Provocaba a su novio en algunas ocasiones, solo para ser sometido. No lo culpen, él realmente disfrutaba de cada acción de JungKook provocada por los celos.

Su novio se encargaba de mimarlo, consentirlo, besarlo y amarlo con intensidad y eso a Taehyung le encantaba, tanto que era adicto, ver celoso a su novio, era su placer culposo.

¿Su locura? .... Disfrutar cada momento.

Taehyung llamó a JungKook para preguntar si lo recogía al salir, quien negó diciendo que sus padres irían por él. Que comerían algo y más tarde iría al apartamento.

Taehyung estaba ansioso por aquel reencuentro, dónde podía besar sin pudor a su pareja. JungKook llamó, diciendo que en pocos minutos llegaria.

La puerta sonó y Taehyung corrió a abrir. Jungkook se avalanzo a besarlo, lo alzó con sus fuertes brazos.

-Te extrañe- Le dijo. -Te amo, mucho mi amor-

-Baby, yo te extrañe mas-

JungKook sonrió y sin perder tiempo volvió a besar a su novio, caminaron por el pasillo, despojando sus prendas, quedando esparcidas por el suelo. Llegaron a la habitación desnudos y se acostaron en la cama.

Los besos de JungKook recorrían la piel canela, mordiendo y chupando, marcando lo que le pertenecía. Puso sus dedos en la boca de Taehyung, le indicó que chupara. Con los dedos húmedos empezó a preparar a su pareja.

-Estas estrecho- JungKook mordió el cuello. -Muero por enterrarme-

-Agh baby, hazme el amor-

JungKook seguía besando a su novio, mientras lo preparaba, sabía que habían sido demasiados días sin actividad y no quería lastimarlo. Era un loco celoso, pero cuidaba a su pareja.

JungKook sacó sus dedos al sentir que ya estaba listo para recibirlo, volteó el cuerpo de Taehyung, quedando la espalda junto a su pecho. Ingresó lentamente y apretó el cuerpo junto a él.

-No hay nada mejor que esto- JungKook se enterró con profundidad. -Se siente tan bien-

-Mhg baby, muévete-

-¿Ansioso?- JungKook embistió y Taehyung jadeo. -Te quiero ver suplicando para me detenga-

-Hazlo fuerte, te extrañe demasiado-

JungKook dio una estocada, mordió el hombro de Taehyung. -¿Me extrañaste?-

-Si, ahg mucho-

-Voy a dejar marcado todo tu cuerpo- Embistió con fuerza, sin piedad y sus cuerpos chocaron por la fuerza del empuje. -Para que tus compañeros sepan a quien le perteneces-

-Ahg Kookie... Baby.... No pares-

-Antes de irte me prometiste que harías lo que yo quisiera- JungKook siguió embistiendo y Taehyung estaba perdido en el placer, asintio mientras gemía y jadeaba. -Voy a disfrutar estás vacaciones- Sonrió.

Taehyung sintió su primer orgasmo invadir su cuerpo, JungKook movía sus caderas y sentía que se iba a romper por la fuerza que era usado. Sin poder controlar, manchó las sabanas con su esencia y se desplomó.

Sus piernas temblaban, su respiración era agitada y errática. JungKook se levantó, se acercó a su bolso, sacó unas tiras de tela suaves.

-¿No llegaste?- Taehyung se sorprendió porque JungKook no logro su orgasmo.

-Aún no mi amor, apenas empiezo-

JungKook se acercó y empezó a atarlo de manos y pies, Taehyung sintió una corriente en su cuerpo por la sensación de indefensión.

-¿Me vas a amarrar?-

-Si, no vas a salir de ese cuarto por lo menos en dos días- JungKook sonrió con malicia. -Serás mío, completamente mío-

Cuando JungKook termino con su labor de amarrar a Taehyung, se acercó lentamente a él.

-Tu piel me encanta- JungKook lamió el cuello, beso con suavidad, bajo lentamente hasta los pezones. -Eres hermoso- La lengua hacia círculos en el pezón, lo mordía suavemente.

Taehyung observaba a su novio besarlo con adoración, su miembro empezó a despertar nuevamente, gemía en cada beso y en cada caricia.

JungKook bajó hacia el abdomen, besó y chupo dejando claro quien era el dueño de ese cuerpo. Lamió la punta del miembro, saboreando el líquido que había quedado en la punta luego del primer orgasmo de Taehyung.

Un jadeo ahogado se escuchó cuando JungKook envolvió el miembro con su boca, Taehyung gimió al sentir su entrada ser penetrada con un objeto liso.

JungKook chupaba con habilidad el miembro, mientras con un dildo follaba a Taehyung.

Estaba sensible y con rapidez el segundo orgasmo lo invadió, se corrió en la garganta de JungKook, quien saboreo cada gota.

-Delicioso-

La lengua de JungKook se hizo paso hacia las nalgas de Taehyung y lamió, chupó aquella zona como si fuese su platillo favorito.

Taehyung no sentía sus piernas, estaba sensible y demasiado exhausto. Sin embargo, no objeto ni dijo nada, no quería que JungKook se detuviera.

El cuerpo de Taehyung fue alzado, las piernas se enredaron en los hombros y JungKook siguió en su tarea de comerse aquel agujero con gran avaricia.

Introducía su lengua, Taehyung gemía, absorto con todo lo que su cuerpo estaba experimentando.

JungKook se apartó, bajo el cuerpo, lo acomodó al borde de la cama. Taehyung tenía sus manos atadas y las posicionó hacia adelante. Su trasero quedó expuesto afuera del colchón.

Una nalgada se escuchó. -Lindo trasero- Otra nalgada. -¿De quién es este trasero?-

-Ahg, baby... Tu.. tuyo-

JungKook alineó su miembro y se enterró de golpe. Taehyung gritó. Las caderas del azabache empezaron a moverse con rapidez, está vez con movimientos desordenados y erráticos.

Sostuvo las caderas de Taehyung para dominar las embestidas y continuo, golpeando sin piedad.

-No puedo evitar ponerme celoso- Miró el trasero y cómo su polla era tragada por aquel agujero. -La imagen de tu cuerpo siendo sometido por mi y escucharte gemir son mi mayor obsesión-

-Mhg.. Ahhg... ya no puedo más- Taehyung sentía que se iba a desmayar. -No puedo venirme otra vez, me duele todo-

-Si puedes- Le ordenó. Llevó una mano al miembro. -Estas duro- Bombeó.

-Nooo.. Kookie.. Ahg, estoy sensible-

-¿Quieres que pare?- JungKook se movió lento.

La lentitud hizo que las sensaciones disminuyeran, JungKook quería que su novio súplicara por él.

-Maldicion, no te detengas- Taehyung suplicó al sentir su cuerpo estar a punto de lograr su tercer orgasmo. -Follame duro, duro-

-Como ordenes mi amor-

JungKook embistió, con fuerza, las nalgas chocaban con sus caderas. Su mano bombeaba el miembro, sintió la tensión en este y la cavidad apretar su polla. Taehyung se corrió en la mano, jadeando y totalmente exhausto. JungKook se corrió por primera vez y no dejo de moverse hasta dejar toda su semilla en el interior.

Taehyung se desmayo, JungKook lo limpio con suavidad, soltó los amarres, cambio las sábanas y se acostó a su lado.

Horas después, ambos despertaron.

-Hola- Le acarició una mejilla con suavidad. -Despertaste- Le dio un beso en la nariz.

-Estas loco, baby. Me desmaye-

-Si mi amor, estoy loco por ti-

Las vacaciones fueron aprovechadas al máximo, no salieron por dos días de aquella habitación. JungKook no lo dejó descansar hasta que sació sus deseos por poseer el cuerpo de su novio.

Luego, salieron a comer a un restaurante, caminaron por la playa.

Faltaban muchos días para volver a verse de nuevo, ambos aprovecharían al máximo cada encuentro.

JungKook marcando territorio, amando de todas las formas posibles a su lindo novio.

Taehyung mirando con ternura cada escena de celos de su pareja.

Al final, no sé sabe quién esta más loco. Si JungKook por ser posesivo y celoso o Taehyung por disfrutar de aquellos celos irracionales.

Hola mis Lorechizadas 🫣

¿Se sorprendieron?

Está idea venía rondando hace varios días desde que los chicos están en el SM.

Yo acá imaginándome como sería ese reencuentro a los 100 días y bueno, nació esta pequeña historia.

🙋 Aquí las que amamos al JungKook celoso, posesivo y loco por Taehyung. ➡️

Los quiero, Lore 💚💜🐰🐻