ᴛᴀʀᴀ |𝟸𝟻|

ᴇʟ ᴅᴏʟᴏʀᴏsᴏ ᴀʏᴇʀ, ᴇʟ ᴄᴀsɪ ᴘᴇʀғᴇᴄᴛᴏ ʜᴏʏ ʏ ᴇʟ ɴᴏ ᴅᴇsᴄᴜʙɪᴇʀᴛᴏ ᴍᴀɴ̃ᴀɴᴀ.

Nunca pensé que podía vivir cosas en mi vida como las que me habían pasado en el ultimo año, incluso no estaba segura de si en realidad había vivido alguno de los acontecimientos recientes. Lo único que me recordaba que era una realidad todo lo que había pasado era el bebe que tenia en mis brazos, ese pequeño que me miraba con devoción cada que lo sostenía, como si me conocía desde siempre, aunque para él tal vez yo era su primer rostro, la primera sonrisa y la primera voz que escucho. Para mi esta pequeña carita que apenas y aprendía a sonreír era quien me daba vida constantemente. A mi y a su padre, por supuesto.

Era inevitable pensar en que todo talvez había sido una locura, como Jungkook y yo habíamos logrado conectar sin problema y que a pesar de todos los obstáculos y los bajos momentos de nuestra relación había sobrevivido a las más fuertes tempestades. Lo amaba, estaba total y completamente enamorada de él, no estaba segura de si podía amar a alguien mas que a él. ¿cómo hacerlo? No se podía olvidar al hombre que me había salvado incontables veces y de diferentes maneras, me mostró quien era en realidad y lo mejor de todo era que me amaba igual.

La tranquilidad que me daban sus brazos no iba a encontrarla en ningún otro lugar, ni siquiera en mi misma. Jamas podria darme yo misma lo que sus brazos me daban sin esfuerzo, la manera tan fácil en la que encontraba consuelo en cada una de sus palabras, sin siquiera intentarlo él lograba calmar las voces mas terrorificas y cada  vez que dormía en su pecho, cerca de su corazón, cada latido y pequeña respiración me recordaba que él era mi casa y que mi vida estaba donde él estuviera.

Yo estaba de pie en el lugar donde había empezado todo, aquel pequeño lago donde lo seduje, donde lo rete sin saber que eso era solo la vista previa de lo que sería nuestra relación. La primera vez que estuve aquí lo hice sola, con el corazón roto y creyendo que el no sentia lo mismo por mi, sin saber que en realidad el tambien se consumía por dentro. El amor también lo quemaba a el.

- Me parece que estas muy lejos de casa. - dijo esa voz que me hacía palpitar cada nervio de mi ser y que de a momentos me susurraba terriblemente al oído cuando éramos solamente el y yo - No fue aquí donde te deje cuando me fui de casa.

Sonreí, Jungkook sabia que siempre iba a hacer lo que yo quería, no lo que el me decía.

- Y a mi me parece que tratas de ignorar que siempre hare lo que se me antoja. Sabes que no puedes conmigo - empecé a caminar hacia el, quien estaba casi perdido entre las sombras del bosque - Hola mi amor - me puse de puntillas hasta que alcance su boca y pude posar mis labios en los suyos.

- Tara, ese beso no va a hacer que mi enojo desaparezca. ¿Qué haces aquí? siempre haces lo mismo, te largas de casa sin avisar y todos nos morimos de preocupación cuando no te encontramos. Estas demasiado lejos de casa.

Suspire fuertemente al mismo tiempo que torcía los ojos.

- Quería dar un paseo, no puedes culparme por eso. Me aburro en casa y queria venir aqui. Este lugar me trae buenos recuerdos.

- Ha anochecido, debiste volver hace horas. No me gusta que estés por aquí sola. Además mira al bebe, se ve incomodo - dijo apuntando al niño quien dormía acurrucado en mi pecho, envuelto en las sabanas de porteo que utilizaba - Vamos a casa, es tarde. Todavía no puedo creer que has venido caminando desde tan lejos.

- ¿Podemos quedarnos un rato más? Este lugar me trae buenos recuerdos y se que a ti también, estoy segura de que recuerdas esta fecha, puedo apostar que no has olvidado nada de lo que paso aqui.

Él sonrió, olvidando por fin sus casi absurdos argumentos por los cuales según él no debía estar aquí.

- ¿Entonces eso es? Quieres recordar viejos momentos. Creo que sabes que eso podemos hacerlo en casa...- me tomo de la cintura y me pego a el - ¿Quieres que lo hagamos aquí? - sonrió de lado mostrándome esa habilidad que tenía para hacerme derretir en sus brazos, recordando una vez más lo débil que era cuando estaba con el - Hasta donde recuerdo, no te he reclamado por completo desde que diste a luz.

- El bebé está aquí...

Desde que di a luz, los momentos que pasabamos juntos el y yo eran casi escasos, el bebe siempre lloraba o tenía hambre justo cuando Jungkook y yo estábamos cerca de alcanzarlo y a fuerzas teníamos que detenernos pero, a pesar de eso, no podíamos negar que estábamos enloquecidos por el niño.

- Entonces vamos a casa para que pueda seducirte y hacer contigo lo que quiera. También para castigarte por siempre venir a tu cuenta sin pensar las cosas.

- Olvida eso. Se que no te molesta que haga lo que yo quiera, estás molesto porque crees que me acercaré a la aldea, porque piensas que iré en busca de mi hermana - hizo una mueca que me confirmaba que yo tenía razón - No voy a hacer nada indebido, menos con el bebé en brazos. Olvida eso y concentrémonos en lo importante.

- ¿Qué es...?

Lo mire sonriendo, enloquecida por la mirada de tonto que ponía cada que pretendía no saber algo. Solo lo hacia para que yo dijera las cosas primero.

-Feliz aniversario, Jeon Jungkook - me volvi a poner en puntas y con mis manos apreté su cara para pegarla a la mía y colocar un beso profundo en sus labios - Vamos a casa- dije después de que solté sus labios. Tome su mano y empecé a arrastrarlo de regreso a casa.

En ese momento estaba dejando atrás al lugar que me había traído hacia él, aquel espacio en donde siempre pude encontrarlo cuando la vida y la maldad nos habían separado. Fue nuestro primer encuentro lo que bautizó ese lugar como sagrado, ese lago que brillaba bajo la luz de la luna y donde podria encontrarlo siempre a él, porque teníamos muchos recuerdos.

Había dejado atrás a ese lugar muchas veces, la primera fue después de que el me rechazo y la última se convertía en la única ocasión que debía importar de ahora en más. Una donde llevaba a su hijo en mis brazos, con una promesa en el corazón y al dueño de esa maravilla sosteniendo mi mano. ¿Qué más podía pedir? Sabía que su corazón y el mio caminarán juntos de ahora en mas, que mi vida y la suya nunca más tendrían que sufrir la ausencia de la otra y que el felices para siempre se iba a cumplir en nosotros.

FIN.

:)

GRACIAS POR ACOMPAÑARME HASTA AQUÍ, POR LEER CADA UNA DE MIS PALABRAS Y HACER DE MIS MOMENTOS EN WATTPAD LOS MÁS FELICES DE MI VACÍA VIDA. OJALA Y HAYAN DISFRUTADO ESTA HISTORIA Y CADA UNA DE LAS COSAS QUE PASARON, GRACIAS POR CADA UNO DE SUS COMENTARIOS, LOS AME.

NOS VEMOS EN LA PRÓXIMA HISTORIA.

PSD: ¿YA LEYERON LAS DOS PRIMERAS PARTE DE MI PRÓXIMA HISTORIA?

SI LA RESPUESTA ES NO, DEBERÍAN HACERLO, SE VIENE ALGO BUENOOOOOOO.