|𝙲𝚊𝚙 3 𝙴𝚕 𝚗𝚞𝚎𝚟𝚘 𝚎𝚖𝚙l𝚎𝚊𝚍𝚘/

El robot estuvo un buen rato apoyado sobre las compuertas de seguridad y observaba fijamente a la oficial Sarvente, quién aún no se ha enterado de la presencia del robot. Luego de unos minutos, la guardia dejó de ver las cámaras y miró a las compuertas, al ver al robot allí observándola fijamente, hizo que pegara un brinco por el gran susto, no se imaginó que Ruv estaría observándola.

Ruv: — Oficial Sarvente, ¿Se encuentra bien? — Preguntó Ruv confundido, pues no sabía mucho de las cosas humanas

Sarv: — Estoy bien, Ruv. Solo no me vuelvas asustar así de la nada — Dijo Sarvente mientras se tocaba el pecho mientras recuperaba algo de aire, en verdad se asustó

Ruv: — ¿Asustarla? — Preguntó un poco confundido Ruv, para después tocar lo que eran sus mejillas

Solo Ruv sabía que podía asustarla completamente si mostraba "una sonrisa", ya ha asustado a trabajadores antes.

Sarv: — Eh, Ruv — Lo llamó Sarvente

Ruv: — ¿Si, oficial Sarvente? — Preguntó mientras la miraba

Sarv: — Eh, quiero saber si ya los trabajadores lograron- — Fue interrumpida, por el contrario

Ruv: — No, no pienso ir — Lo dijo Mirando a otro lado, eso fue algo humano de parte de Ruv

Sarv: — Mmm... ¿Quieres que te acompañe hasta allá? — Preguntó Sarvente, no era la primera vez que hacía eso, hubieron veces que ayudó a otros robots a ir allá

Ruv: — No quiero molestarla, Oficial Sarvente — Le respondió sutilmente

Sarv: — No me molesta, vamos a ir, ¿Okey? — Preguntó mientras se levantaba de su asiento

El robot tardó en responder.

Ruv: — Ok...

Mientras Sarvente se estiraba un poco pues el asiento era algo incomodo, Ruv estaba procesando lo que estaba haciendo, ni sus sistemas le decían nada fuera de lugar.

Sarv: — Bueno, vamos — Dijo Sarvente saliendo de la sala de seguridad

Ambos fueron dirigiéndose hacia de partes y servicios, en todo el camino casi no se hablaron, se dirigieron palabras, pero Ruv quería romper un poco más el hielo, ni él sabía por qué quería hablar con ella, era raro para el "querer" algo, eso era algo humano, que no podía evitar.

Ruv: — Entonces... — Dijo Ruv, se mantuvo callado unos segundos — ¿Que has hecho hoy? — Preguntó

Sarv: — La verdad no mucho, lo mismo de siempre. Ah, y también visité la guardería y le conté a Damien que va a tener un nuevo compañero de trabajo — Le respondió con una sonrisa

Ruv: — ¿Esa Cassandra de la que tanto hablan, lo tomó bien? — Preguntó Ruv

Sarv: — Oh, claro que sí — Le respondió con una sonrisa y mucha tranquilidad

Ruv a veces se preguntaba cómo le hacía la guardia de seguridad para estar todo el tiempo positivo, a pesar del "pequeño" problema, la esterilidad.

Sarv: — ¿Y tú has estado haciendo lo de siempre, no es así? — Le preguntó con una sonrisa Sarvente

Ruv: — Si — Respondió Ruv — Haciendo show para los niños y dando todos los autógrafos posibles — Agregó

Sarv: — Vaya, debe ser algo estresante tener una multitud de niños y adolescentes encima — Comentó Sarvente mientras sacaba unas risas

El robot la miró con algo de confusión y curiosidad.

Ruv: — ¿Estresante? — Preguntó

Sarv: — Sí, estresante hacer lo mismo casi todo el tiempo, que los niños te griten para que tú les des sus autógrafos — Respondió Sarvente explicándole

El robot no dijo nada hasta llegar a la zona de partes y servicios.

Sarv: — Bien, vamos Ruv — Lo animó Sarvente

Ambos entraron, le hicieron con cuidado las actualizaciones y analizamientos de los problemas que traía, pero no sé encontraba nada que causaba las fallas, eso era raro, así que, para la próxima vez, lo van a checar con más profundidad, obviamente con mucho cuidado para evitar los accidentes, además de que era muy tarde para saber la fuente del problema.

Dejaron ir al robot y la guardia, Sarv llevó a Ruv a su habitación y estuvieron hablando de cómo se sentía las nuevas actualizaciones.

Sarv: — ¿Seguro de que te sientes bien, Ruv? — Preguntó Sarvente mirando al robot mientras caminaban

Ruv: — Si — Respondió directamente Ruv, caminaba mientras analizaba todo para ver las actualizaciones

Sarvente camino un poquito más con él y vio una máquina expendedora, tomó una lata y antes de seguir con Ruv escuchó una conversación de unos trabajadores sobre un problema que aún no se reparaba en Ruv, "el problema del reflejó" sucedía si no se seguía exactamente las instrucciones, era terminar completamente herido o morir.

Quizás Sarvente deba preguntar sobre ese problema con Ruv, cuando se dio cuenta de que dejó a Ruv solo, miró su dirección y se dio cuenta de que se había adelantado un poco, así que Rápidamente lo siguió.

La guardia tuvo que apresurar su paso para alcanzarlo, después de un rato llegaron al cuarto del robot, entraron y comenzaron a hablar o más Ruv, ya que tenía mucha curiosidad sobre lo que hacían los "humanos" en sentido robótico.

Ruv: — ¿Cómo es haya fuera? — Preguntó Ruv mirándola y parado frente al escritorio

Sarv: — Es muy bonito para ser sincera, ¿Por qué lo preguntas? — Respondió Sarvente sentada en la silla del escritorio del animatrónico, cruzada de piernas y brazos haciendo seña de prestar atención y tener interés en el tema

Ruv: — Solo es curiosidad — Respondió Ruv Mirando a otro lado

Sarv: — Si quieres puedes sacar todas tus preguntas que hacemos... — Dijo Sarvente y se puso a pensar unos segundos — Las personas — Agregó con una sonrisa

El robot fue acomodándose mentalmente mientras activaba su sistema de preguntas.

Estuvieron conversando, Sarvente respondiendo todas y cada una de las preguntas de Ruv, hasta que llegó las 6 de la mañana, y cuando Sarvente vio que ya era hora de irse, ya que había terminado su turno.

Sarv: — Ya tenido que irme, Ruv. Me gustó mucho haber hablado contigo — Le dijo Sarvente con una dulce sonrisa mientras se iba a la puerta

Ruv: — Eso es bueno saberlo, nos vemos en la siguiente noche, oficial Sarvente — Le dijo Ruv mirándola

 "Ya te dije que me llames Sarv". Pensó Sarvente antes de irse.

Fue a la sala de seguridad, tomó sus cosas y se fue, pero en eso vio a su jefe acercarse a ella

Una vez el jefe llegó con ella, empezó a hablar.

— Oye, te necesito, no ahorita, pero en unas 3 horas. Necesito qué le des un recorrido al nuevo empleado de la guardería — Dijo el jefe mirando el teléfono y con unas carpetas a mano

Eso la saco un poco de lugar a Sarvente.

Sarv: — Eh, pero yo- — Fue interrumpida, por el contrario

— Genial, ah y antes que se me olvide. El nuevo se llama Otis, y dile sobre Cassandra que tenga cuidado con ella — Le dijo sin mirarla ni un momento

Sarvente se quedó callada unos segundos.

Sarv: — Esta bi- — Nuevamente fue interrumpida

— Estupendo, nos vemos, Sarv — Dijo el jefe para irse como si nada

Sarvente miró a su jefe, hizo pasar que le tiró algo y Suspiro. Le tenía paciencia a veces gracias a la paga que era buena, y así salió del sitio. Se dirigió a casa, tan rápido que pudo para solo poder dormir una hora y volver al PizzaMax más tarde.

Después de hacer lo que tenía que hacer en casa, se dormito un poco, arregló como pudo, aún que le costará mucho ya que necesitaba dormir para tener más energía, pero bueno, nada que un café no arregle.

Luego se fue de casa, llegó al PizzaMax de allí entró como si nada, pero había un montón de gente desde las 9:34. Las 9:34, ella jamás había visto como es el PizzaMax en el día, eso debe ser mucha presión ahora que lo piensa, además fue buena idea trabajar en el turno nocturno.

Entro para irse a los vestidores de mujeres, se puso su ropa de trabajo y se fue a buscar al nuevo empleado. Al final lo logró encontrar, estaba en la entrada principal, allí parado como si esperara una novia

Sarv: — Tu eres Otis, si me equivoco — Dijo Sarvente mirándolo de pies a cabeza

Otis: — Oh, por supuesto. ¿Y usted es? — Preguntó el chico anteriormente llamado Otis

Sarv: — Sarvente, me llamó Sarvente, puedes decirme Sarv — Respondió Sarvente

Otis: — Un gusto conocerla — Le dijo Otis

Sarv: — Bueno, empecemos con el tour. No te vayas a perder con tanta gente, ¿De acuerdo? — Dijo para así empezar a caminar

Otis: — Espérenme — Dijo Otis mientras la seguía