Ya varios meses habian transcurrido y parecia que desde la llegada del menor de ojos de zorro todo habia cambiado para mejor.
Habian logrado dar con muchos datos que ni las tres cabezas superiores allí habian visto. Jeongin era observador, eso fue su punto a favor para entrar en el caso de lo que conocian como "Robbers".

Todos se encontraban en una sala, con un gran escritorio con miles de papeles con datos, fotos, numeros, vehiculos, entre otras cosas. Y frente a ellos una pizarra que marcaba el mapa de la ciudad. Habian apuntado a ciertos lugares donde Jeongin habia notado que frecuentaban, lo unico que faltaba para completar su plan era saber en que horarios de trasladaban y como era su recorrido de principio a fin.

Teniendo ello listo todos se ejecutaria de la siguiente manera:

Seo se encargaria de organizar y hacer posible un buen plan estructurado y fiable, Felix se encargaria de, (como siempre), ser la distraccion y el que les confirmaria que estaba hablando con los mismos tipos que querian atrapar,  Lee Know movilizaria a todas sus fuerzas estando ya en el campo, entre ellos su arma mas letal, Jeongin seria el que les cubriria la espalda.

Aunque no habian logrado entender como funcionaba la personalidad de su menor. De un momento estaba siendo la cosita mas adorable y tierna del planeta y al otro solo con la mirada te hacia querer estar tres metros bajo tierra. "Vaya bipolaridad" solía decir Felix. Creian que podria haber pasado por algo en su niñez para que ciertas acciones o palabras detonaran una personalidad totalmente contraria y sin sentimientos. Como una clase de mecanismo de defenza. Pero como Seo habia visto en el historial del chico, estaba limpio y no mostraba contacto con familiares o hermanos.
Estando seguro, cuando se cierre el caso se tomaria el tiempo de investigar a mas profundidad.

Por su parte, Jeongin frecuentaba mucho comprar en aquella panaderia. A veces nisiquiera compraba algo, solo sentía que tenia un amigo y podia hablar con Hyunjin antes de ir a trabajar. Según lo que le habia mencionado este tambien tenia otro trabajo por la tarde asi que solo podia tomarse el turno de la mañana en aquella linda panaderia de aspecto muy hogareño.

Tal vez se empezaba a llevar muy bien con su mayor, entre las muchas virtudes podria describirlo como alguien amante de hacer drama, solia expresarse muy exageradamente y con sus grandes extremidades si que lo hacia resaltar mas. Tambien menciono que pinto muchos de los cuadros que resposaban sobre las paredes, eso en definitiva fue lo que mas llamó su atencion, Jeongin también amaba el arte. Amaba su cabello crecido y ese pequeño lunar que resaltaba bajo su ojo. Muchas veces se habia tomado el tiempo de analisar sus facciones.

Era alguien muy bonito en todo sentido

-Cuidado afuera- le dijo su mayor, Chris lo solian llamar, su cuerpo era bastante robusto y usualmente solia llevar una marcarilla que tapaba la mitad inferior de su rostro, haciendo resaltar mas que todo su mirada con veta celestina, penetrante en su oponente.

-Tu confia en mi- respondio divertido quitando tension al ambiente -Tu sigue con esos golpes o lo que sea- hablo simulando dar golpes al aire tal como lo hacia el mayor. Este rio levemente y asintió

-Llama si ves algo nuevo- finalizo acomodando las vendas en sus manos para seguir aventando golpes al saco de boxeo colgado en medio de la habitacion, era bastante fuerte a decir verdad.

J.One o Hanji (como lo llamaba únicamente Sam) asimilaba ser alguien ordinario con una carrera universitaria promedio, usaba lentes redondos, hoodies grandes, pantalones de mezclilla y unos zapatos con tacon de 3cm (Su altura era bastante baja de por si, a veces ayudaba) Comenzo en el negocio por su habilidad de hackeo y de averiguar en un abrir y cerrar de ojos los mas oscuros secretos de las personas, Hwang sabia eso, y no hizo mal al ponerlo en el aquipo.

Hanji comprendia que mucho del trabajo era gracias a él, ya que no era afán de ser alguien agresivo y de disparar o golpear a las personas, por ello solo se encargaba de hacer maravillas en su computadora. Era un nerd en una pandilla de mafiosos, pero no le era mayor problema.

Ese dia habia decidido salir por un rato a un tienda que estaba cerca donde con suerte se daria el lujo de un pequeño bocadillo. "Tomaria prestado" un articulo y se hiria sin inconvenientes. Siempre habia sido sigiloso.
Con sus auriculares colgando de su cuello y una mochila de la banda japonesa llamada "One OK Rock" se adentro al lugar, una chica de cabello rubio y nariz respingada se encontraba en recepcion, lo saludo amablemente y siguio en sus actividades con su telefono celular. "Pan comido" fue lo que pensó. Coloco su cubrebocas y busco entre los productos del lugar su alimento famorito en todo el mundo, aunque digan que es lo mas simple y conseguible que hay. Tomo un Kimbap de la estanteria guardandolo rapido en su bolsillo sin ser visto.

Despidio a la joven, cuyo nombre era Bahiyyih como lo mostraba una pequeña etiqueta en su camisa. Creyo que su trabajo allí habia terminado con un total exito. Era de los pocos momentos que podia sentirse que estaba haciendo algo ilegal en persona y no tras una computadora, aunque claramente no se comparaba en nada a sus compañeros, no podia intimidar con solo su presencia como Sam o aplastarte todos los huesos del cuerpo como Chris, pero podia robar Kimbap y se sentia poderoso con solo hacer eso.

El sonido de la alarma de seguridad detuvo su caminar, él la habia activado al pasar por la puerta la cual se cerro casi en su cara haciendolo caer y dejando a la vista el alimento en su bolsillo.

-Sabia que algun dia esa tonta alarma serviria de algo- hablo emocionada la rubia acercandose -Son 6.000 won, niño- le extendio la mano en señal de espera del pago. Hanji se sentia inutil,  despues de todo su trabajo se daba mejor en un ámbito cibernetico, era pequeño y debil, un fugaz recuerdo paso por su cabeza.

Chris siempre le decia que portara un arma consigo.

Claro que hubiese sido mas sencillo pagarle el dinero y salir de allí como solo un cliente problematico, mucho mas secillo. El menor queria algo de accion en su vida, asi que se encontraba apuntando su arma directamente a la cabeza de la chica aun sabiendo que ella solo complia con su trabajo y no tenia la culpa de nada. La campana de la puerta del frente sono dejando a la vista a un chico que se veia mayor que él, con ojos gatunos y vestimenta de civil. Mierda policias.

-Hey tú, baja el arma, soy policia es una orden- hablo en tono firme sacando su propia arma apuntando en la direccion de Hanji. Sentia sudar frio su mano comenzaba a temblar y por alguna razon sentia miedo de que en un descuido disparar a la rubia.

Se habia perdido en sus pensamientos ya que lo ultimo que llego a escuchar fue un golpe seco en su cuello, logrando que cayera inconciente.

-¿Que dices que hizo?- Carcajeo Felix golpeando la mesa -Vaya loco, pensando matar a una pobre jovencita por un puto Kimbap- Negó tratando de calmarse.

-¿La gente es asi de loca?- Dijo Jeongin cubriendo su boca inocentemente.

-Jeonginnie lindo, la gente a veces hace este tipo de cosas por llamar la atencion o por que tiene posiblemente una vida mediocre. Meh, son una piedra en el zapato para nosotros en este momento que estamos cerca de dar con los "tipos malos"- hizo comillas con sus manos mientras hablaba y el menor solo asintió.

Salio de la habitacion dando con un chico que parecia casi de su edad o la de Felix, tenia ojos y mejillas redondas, "parece una ardilla, pero una de mal humor" pensó para si mismo mirandolo desde la distancia ya que se encontraba sentado en una banca con sus manos esposadas.

-¿Que me ves mocoso?- soltó de la nada pero eso no lo intimido, algo en la forma de sus ojos se le hacia conocido pero no sabia aun de donde era -¿Estas sordo? Enfocate en tus asuntos idiota- Esa cara retadora se torno una de confusion al ver como la expresion de Jeongin se oscurecia, sus ojos se volvian negros y sus facciones de hacian duras. Le sonrio de lado de una manera escalofriante y fue directamente a la oficina de Seo

-Seo-

-Yang, ¿que ocu- se freno al ver esos ojos otra vez, lograban intimidarlo un poco

-Me mostraste fotos de los posibles sospechosos ayer, ¿correcto?- El mayor asintió -Dejame verlos de nuevo- Le tendio una carpeta con fotos de muchas personas que podrian haber sido sospechosos tachados de la lista y otros que aun quedaban por revisar -Bingo!-