Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Pausa II parte 1

—Bien, definitivamente el café y yo no nos llevamos bien —bostezaba, se había tomado un café hace poco porque extrañaba a su hermano, pero más que darle energía le dio sueño, ¿Cómo le hace su hermano para beberse más de 6 tazas al día?

Tenia sueño, eso no lo va a negar, pero, ¿Podría dormir?, alguien tiene que encargarse de los invitados y de poner lo que reaccionaran, y su hermano no estaba, por lo qué no pude o no debería darse el lujo de dormir.

Aunque... ¿Desde cuando él es responsable?

Él nunca ha sido responsable, siempre ha preferido procrastinar o hacer cualquier cosa ajena a sus responsabilidades, el responsable siempre había sido su hermano, no él.

—Piensa Elián, piensa... —forzaba a su mente a encontrar un hueco legal.

Por ahora se limitara a atender a los invitados, después de todo, ya acabaron con esta tanda de reacciones.

De hecho, tiene tanto sueño que no tuvo energía para desaparecer y aparecer en la sala de reacción, para él el café más que un energizante es como un somnífero.

—Tocara caminar, pues... —suspiraba del cansancio

Se tardo más de 5 minutos en ir a la sala de reacciones, a pesar de estar técnicamente cerca y que mayormente los divide una escalera.

—Hola —abría la puerta de la sala

Todos lo miraron extrañados, esperaban que se apareciera de repente, no que entrara por esa puerta que ni sabían que existía. 

—¿Qué pasa? —preguntaba sin entender porque lo miraban así —¿Tengo algo en la cara?

Un silencio se produjo, la verdad es que a los invitados les extrañaba la personalidad apagada de ese anfitrión, se esperaba que el que estuviera así fuera el otro, no este que parecía un pequeño sol.

—Bien, solo vine para decirles que acabamos por ahora, por lo que pueden hacer lo que quieran por un tiempo —notificaba —, eso significa qué —el anfitrión iba a silbar para poner en "pausa" a todos los invitados, técnicamente puede hacerlo, y podrá irse a dormir hasta que llegue su hermano.

—Oye —Gyūtarō interrumpía al anfitrión

—¿Qué pasa?, se rápido, tengo algo de vital importancia que debo hacer —evito decir que se va a dormir 

—Mi hermana tiene hambre, aliméntala —exigía 

—Mi hermano también tiene hambre, solo que no quiere admitirlo —Ume admite

—Antojaste con la última cosa que vimos —Kaigaku concordaba

Ah, ahora resulta que es culpa nuestra —pensaba el anfitrión ante lo dicho por Kaigaku —Tsk, veré que puedo hacer —se quejaba para irse un momento de la habitación

Del estrés golpeo la pared, definitivamente esto es un problema.

De repente se imagino a su hermano reprochándole con el ceño fruncido mientras dice "Entonces aprovecha el problema y vuélvelo una oportunidad"

—Incluso cuando estás ausente me vienes a corregir —suspiraba

¿Les puede dar comida?, sí, sí puede, solo que hay un pequeño detalle que es pequeñito, pequeñito, pero que es muy, muy importantito... ¡Ellos vienen de épocas diferentes! ¡¿Qué les puede dar?!

—¡Eso es! —saco su teléfono y abrió una aplicación llamada "servicios a domicilio", supuestamente era una aplicación que usaban los vigilantes para pedir cosas sin salir de casa, pero puede que le sirva de mucho aquí —¡Aquí está! —encontró la sección de llamada y comenzó a llamar a un número

El pitido comenzó a sonar, otra vez sonó, y otras vez...

—Servicio de asistencia, ¿Puedo ayudarle?

—Necesito comida de diferentes épocas antiguas de Japón, si puede ser después de la era Sengoku mucho mejor

—Requiero de sus datos para ayudarle

—Tal vez le suene raro, pero su nombre no lo sé —no sabe si confiar en este servició, nunca nadie le había pedido sus datos

—Me refiero a... ¿De qué Japón de todo el multiverso quiere la comida?

Elián se quedo en blanco, sus neuronas hicieron un corto circuito, ¿Y él como sabe ese dato?

—Un universo donde hubo dos guerras mundiales, una pandemia en el año 2019, 2020 y un poco del 2021, un conflicto entre Rusia y Ucrania se desarrollo en el 2022 

—Hay universos muy similares a los descritos, ¿Algo más?

—El autor de Hunter x Hunter regreso 

—Por los vigilantes, que suerte tienen algunos, universo localizado, un día iré de visita...

—Muchas gracias, ¿Sabes mi dirección?

—La llamada tiene registro, uno de nuestros repartidores ira al lugar de donde llamaste —explicaba

—Esperar- —de repente la llamada colgaba y alguien toco la puerta principal —¡¿Tan rápido?! —iba rápidamente a abrir 

—Servicio a domicilio, si nos demoramos más de 10 segundos es gratis —un repartidor traía varias cajas 

Espera... ¿Había que pagar? —pensaba horrorizado 

—Dejare estas cajas en el comedor —notificaba haciendo levitar a todas las cajas —Oye... ¿No eres muy joven para ser un vigilante?

—Sí, sí lo soy —respondía —¿Cómo es el método de pago?

—¿Eres nuevo?

—Eh... Algo así

—Solo debes darme el código que te dan después de que te gradúes de la academia de vigilantes

—Ah... —abría la boca sin saber que decir, ¿Y eso de donde se saca? —¿Sabes como puedo averiguar el código?

—¿En serio?

—Sí...

—¿Soy yo o la educación de los vigilantes cada vez está peor? —refunfuñaba molesto, ya solo faltaba que la próxima generación de vigilantes ni sepan conectar el computador a la pantalla

—Sí... La educación es la culpable —mentía, no sabía de que hablaba 

—¿Tienes la tarjeta de vigilante? —preguntaba

—¿Esta? —con el pensamiento hacia aparecer en su mano una de las dos tarjetas que estaban en la sala de reproducción

—Sí, esa —tomaba la tarjeta para luego ver la foto —Oye, este no eres tú...

—Sí, sobre eso... ¿Podemos hacer un pequeño arreglito?

—Cobrare el doble —respondía, si va a ayudar a un posible criminal o fugitivo debe hacerlo por buenas razones  

—Ujum —asentía rápidamente 

—Listo —escaneando el código cobraba la comida y su silencio —, ya las cajas están en el comedor, una vez las abras se recomienda comer rápidamente, luego de cinco horas desaparecen para eliminar las sobras, sin importar si comiste o no

—Ok...

—Suerte con lo que sea que hagas

—A usted por su colaboración —admitía avergonzado 

—No te avergüences o te tomarán de Uke de Yaoi

—No creo que haya gente tan loca...

—Todo es posible en el multiverso, amigo mío —desaparecía 

—Bien, a darles de comer a estos —cerraba la puerta 

Ni siquiera vio que comida le dieron, solo abrió las cajas rápidamente y la comida se trasporto directamente a la mesa grande.

Luego con un chasquido de sus dedos trasporto a todos los que estaban en la sala de reacciones al comedor 

Trasportar a otros requiere menos energía que trasportarte a ti, que sistema más raro —admite en su mente  

—¡Comida! —Ume dice encantada 

Nunca había visto tanta comida en mi vida —Gyūtarō admite 

—No hay pizza —Kaigaku buscaba 

Claro que no hay pizza, pedí comida de Japón, no de Italia. Si hubiera pedido de europea o de Norteamérica tal vez, creo que para tu época ya existía... —el anfitrión tiene un tic en el ojo

—¿De verdad se puede comer todo esto? —preguntaba Jigoro 

—Sí, los dejo a cargo a ustedes tres —señalaba a los gemelos Tsugikuni y a Jigoro.

—¿A cargo? —preguntaba Michikatsu —¿Qué se puede y que no se puede hacer?

—Solo no dejen que hagan alboroto, que todos coman, y sobretodo, que hagan silencio, buena noche —se iba del lugar 

—¿Buena noche? —preguntaba Jigoro, ¿Ya anocheció?, pero si era de día cuando lo trajeron 

—Estamos en mi elemento entonces —Michikatsu sonreía, le gustaba la noche, la primera vez que logro hacer su respiración lunar fue en plena luna llena.

—Me pregunto si habrá demonios afuera...

Al llegar a una habitación de invitados cerro la puerta y analizo la habitación, era cómoda, él era bastante exigente a la hora de dormir, necesita una buena cama, un buen ambiente, una buena almohada y sobretodo, buenas vibras, él no es como su hermano que puede dormir hasta en una fiesta con la música al máximo.

—Espero que cuando despiertes estés aquí, maldito hijo de... —paraba de maldecir porque tenían la misma madre —Hijo de nuestra hermosa madre querida.

Badir se encontraba en las puertas de su casa, estaba sudando, le había costado mucho llegar, cuando salió de la burbuja de multiversos de Kimetsu no Yaiba no supo cual era su universo, tuvo que investigar en su celular, luego de encontrarlo, fue a ese universo, pero hubo un problema, estaba en una época diferente a la suya, se tardo mucho en encontrar la época a la que pertenecía.

La verdad está un poco asustado, confiaba en que la señorita vigilante mantuviera la casa como la dejaron, pero el otro... Le recuerda un poco a su hermano, y uno nunca confía en los hermanos menores para dejar todo en orden, a menos que tengan un historial que demuestre lo contrario, claro está.

—Ya regrese —entraba a su casa —No veo nada raro... —pensaba aliviado 

—Oh, hermana, ya volviste —Badir abrió los ojos al verlo, ese era su hermano, no, era el vigilante que estaba usando la apariencia de su hermano

—Sí, veo que tú también te divertiste —observaba como jugaba con las consolas de su hermano como si fueran de él

—Sí —asentía 

Parece ser que su hermana está usando mi apariencia... —pensaba —Bueno, ambos somos los mayores, tal vez sea por eso

—¿Cómo te la pasaste con las vecinas? —preguntaba interesado 

Badir al escuchar eso abrió los ojos horrorizado, comenzó a sudar y trago en seco

¿Vecinas? ¿Se refiere a esas vecinas?

—¿Viste que no son tan malas?  —el menor de los vigilantes sonreía —Qué sean fujoshis no las hace malas perso- —iba a decir, pero Badir se fue rápidamente —Parece que se le olvido algo, bueno, no importa —se encogía de hombros —A seguir jugando —reía 

Badir corría a toda velocidad, podía usar súper velocidad, sí, pero en este momento no estaba pensando, era instinto, uso sus nuevas habilidades para saltar alto y llegar a la ventana que conectaba con la habitación de esas locas.

—Pero qu- —sus vecinas lo vieron entrar, pero las puso en "pausa" con solo tocarlas

—No les pido que me perdonen, pero les pido que me entiendan —jadeaba del cansancio, definitivamente odiaba hacer ejercicio —Quiero un café... —jadeaba, eso lo haría recuperar energía

Luego de recomponerse, busco a la vigilante, y la encontró, estaba acostada o bueno acostado, porque tenia su apariencia, en la cama con la mirada perdida y vacía 

—Señorita, señorita, ¿Estás bien? —preguntaba, aunque era obvio que no lo estaba 

—Decir bien o mal serían meras simplificaciones del abanico de inquietudes que me afligen es esos instantes 

Esto es inefable, está tan rota que habla de forma intelectual sin motivo alguno —decía asustado 

—Sin embargo, como debo dar ejemplo, pues comprendo la índole conciliadora de tu pregunta, así que no tengo más remedio que responder negativamente 

—Así que estás mal, eh... Era de esperarse... ¿Qué te mostraron? —preguntaba interesado, a él no le gustaba el Yaoi, mucho menos si viene de esas locas, pero no negara que el arte que hacen es precioso, sonara masoquista, pero le gustaba que lo perturben a veces con ese tipo de artes Yaoi.

La vigilante, que en ese momento estaba con la misma apariencia de Badir hacia una mueca horrorizada

No me veas así, es como si una versión alterna mía se asqueara de mi... 

—¿Pa-para que quieres saber? —preguntaba aun aturdida por la pregunta

—Para saber que tan grave fue lo que te mostraron —se excusaba 

Suspiraba —Ven, pero no me hago responsable de lo que veas —se sentaba en la silla y abría una carpeta llamada "Borrador" en el portátil

—He visto al ratón de Disney y al pato Donald en una situación poco sana y para nada hecho para menores de edad, he visto a Tom y Jerry como humanos haciendo besuqueándose, soy consiente de lo que me puedo encontrar  —¿Qué es eso? —miraba a dos hombres en una situación no apta para menores.

—No los reconoces 

—No, pero conociéndolas son las versiones humanas de algun personaje de caricatura antigua... —analizaba, uno estaba vestido de militar, ¿De qué santa caricatura sacaron a ese hombre?

—Acertaste, son Piolín y Silvestre —su voz sonaba frágil, como si hubiera tocado un punto sensible 

Badir hacía una mueca, ya entendía porque el traje de militar

—Has mejorado tus dibujos, amiga mía —le decía a una chica congelada —Y tu mejoraste la originalidad —le dijo a la otra —9 de 10, le resto un punto porque no sabía quienes eran

—¿Acabas de calificar esta atrocidad? —preguntaba anonadada

—Más o menos sí

—Iugh —hacia una mueca

—Bueno, debes admitir que su talento para dibujar digitalmente es hermoso, y más con ese detalle del traje militar...

—Admito que el dibujo está muy bien hecho, pero... ¿Por qué el traje?

—¿Sabías que Piolín y la abuela estaban en la segunda guerra mundial? 

—¿Qué? —no entendía 

—Sí, cuando Alemania aun tenia control sobre Paris, la abuela era espía y Piolín era una paloma mensajera 

—¿Y eso de donde lo sacaste?

—De una serie...

—... —parpadeaba, eso no lo sabía —¿Y Silvestre?

—Oh, él todavía no estaba vivo en ese entonces, se podría decir que Piolín es bastante mayor que Silvestre

—Genial, además de Yaoi es pedofilia —bufaba 

—No es tan grave como otras cosas que me han mostrado —admite 

—Hmp ¿Y ese? —cambiaba la imagen a una de tres hombres, los dos que estaban en los extremos estaban besando al del medio

—Tom, el gato negro y Jerry —reconocía —Típico de ellas, aunque nunca había visto un trio, 8.5 de 10 —calificaba 

—Estas igual de enfermo que ellas...

—No, solo estoy acostumbrado —su mirada se ensombrecía

—Este es el peor —cambiaba la imagen a un boceto donde un demonio estaba besando a un tren con cara

Badir abría los ojos horrorizados —Sabía que estas locas algún día pasarían la línea entre lo turbio y entre lo súper turbio 

—Veo que ahora no eres tan "Me las sé todas" —se burlaba 

Badir se sintió retado y forzó una sonrisa —Enmu y Tomas el tren, raro, muy raro, es solo un boceto por ahora, un 6 de 10 —calificaba 

—Ahhhh —no soportaba más y se fue del lugar 

—Duerman —obligo a sus vecinas a dormir —deje mis calificaciones aquí junto a unas recomendaciones para mejorar. Adiós —se fue rápidamente para alcanzar a la vigilante  

—¿Te peleaste con tu hermano? —preguntaba mientras bebía una taza de té negro recién hecha, había dejado de usar su apariencia.

—Yo no llamaría pelear a eso, creo que es solo un berrinche de su parte —opinaba mientras bebía una taza de café recién hecho 

—Sí, mi hermano cuando era más pequeño también hacia eso —asentía —¿Y cuál fue el detonante del berrinche?

—Digamos que le dije mi shipp favorito, y como yo siempre le molesto a él por sus shipps, pues... Digamos que reclamo igualdad —explicaba 

—Un hermano menor reclamando igualdad —soltaba una carcajada —, me recuerda a mi hermanito, la verdad...

—¿Qué crees que debería hacer?

—En primera, los hermanos mayores tenemos autoridad para con los menores, eso es innegable —opinaba —, con el tiempo se dará cuenta de que reclamar esa igualdad es una perdida de tiempo —explicaba —Aunque... Eso podría demorar más tiempo de lo que una vida humana de tu universo es capaz de vivir...

—¿Alguna forma de acelerar el proceso?

—Hmmm —intentaba encontrar una solución que funcionara en humanos de el universo del que venía su reemplazo temporal —¿Qué tal si pides disculpas, le regalas algo y le das un día de igualdad?

—¿Un día de igualdad? ¿Enloqueciste?, se supone que yo debo de dirigir las cosas, si fuera él... No sé que pasaría, pero bueno no sería

—Los hermanos menores tienen que darse cuenta que sin los mayores no podrán hacer casi nada, dale su día de igualdad y veraz como al día siguiente rogara por volver como antes

—¿Y si le gusta y quiere quedarse con su igualdad? 

—Te recomendaría un hechizo de sumisión, pero no creo que quieras hacerle eso a tu hermanito...

—Sí, que tenga autoridad sobre él no quiere decir que quiero arrebatarle su libertad y libre albedrio...

—Si pide de regreso la igualdad o quiere continuar con ese nuevo sistema, sencillo, muéstrale un universo donde esa decisión ocasiono una tragedia, eso lo asustara y dejara de molestar 

—Buena idea, como se esperaba de usted, señorita —halagaba —¿Cómo te fue en el examen?

—Oh, aun no lo he realizado, será dentro de dos días, por ahora vi los temas y son fáciles —admite —Menos matemáticas, no entendí nada, perdón por fallarte en esa área... 

—Oh, buena suerte entonces, requiero de una buena nota sobretodo en matemáticas

—Haré lo que pueda —forzaba una sonrisa —Mierda...

—Por cierto, ¿Qué ha hecho tu hermano? —preguntaba —Está usando la apariencia de mi hermano... No ha hecho nada raro, ¿Verdad?

—Lo único raro que hizo fue a ir a una cita a ciegas, por una recomendación mía, pero por alguna razón regreso corriendo —se encoge de hombros  

—¿Cómo haces para que se comporte tan bien? —preguntaba, ojala su hermanito fuera tan obediente.

—Porque un hermano menor jamás querrá decepcionar al mayor —explicaba con una sonrisa —, menos si se trata de una raza tan longeva como lo somos los vigilantes.

—¿Solo por eso?

—Bueno, también está el hecho de que lo mime mucho cuando era pequeño, por lo qué cree que tiene una especie de deuda conmigo, es muy pegachento y celoso por eso también

—Sí, me pasa lo mismo con el mío, él quiere que consiga pareja, pero cuando me ve cerca de una mujer, comienza a insultarla para que ni se me acerque, a sabiendas de que yo no quiero pareja por ahora —soltaba una carcajada mientras recordaba como su hermano le dijo "Aléjate de mi hermano, maldita ramera, vete con tu especie, perra"

—A veces es demasiado celoso, insulto a un posible patrocinador —suspiraba decepcionada

—En mi caso era una tutora privada contratada por mis padres para ayudarme a estudiar comercio —admite nostálgico —Bien, debo irme, creo que ya debió de haber acabado el video ese 

—Sí, yo también debo volver con mi hermano para luego borrarme la memoria para eliminar ciertos recuerdos homosexuales de mi sistema  

—Al menos deja el recuerdo de Piolin y silvestre, estuvo bueno 

—No gracias, no me gusta el Yaoi...

—A mi tampoco, pero siempre puedo apreciar el arte

—Eso no es arte...

—Para mi sí —se encoge de hombros —Bueno, adiós —desaparecía 

—Se fue sin pagar, que descortés —sonreía falsamente —La cuenta por favor —pedía la cuenta

—¿No había venido usted con un hombre, señorita?—preguntaba la encargada

—¿Yo?, para nada, yo vine sola —respondía 

—¿De acuerdo?

Acababa de llegar al camino de donde se dividían los universos de Kimetsu no Yaiba, es sorprendente, pero es más demorado salir que entrar, le parece curioso.

Luego de eso sencillamente busco el lugar fuera de los universos donde estaba el lugar donde se estaban quedando él, su hermano, y los invitados.

Antes de entrar un olor llegó a su nariz —¿Eso es comida? —preguntaba en su mente

Antes de siquiera pensarlo entro rápidamente y se dirigió al lugar de origen del olor

—¡¿Quién está aquí?! ¡Alza las manos si quieres vivir! —abría la puerta mientras invocaba un arma de fuego, no sabe como usarla, pero solo debe apretar un gatillo, muy difícil no debe ser, ¿Verdad?

Al abrir la puerta se encontró el comedor donde los invitados estaban comiendo.

—Sigan con lo suyo —el arma desaparecía y procedía a cerrar la puerta —¿De donde salió la comida?

Ahora que estaba tranquilo se propuso a buscar a su hermano, busco en la sala de reproducción, en la sala de reacción y...

—¿En serio? —miraba a su hermano durmiendo abrazado de un peluche de Zenitsu chiquito —Tantas cosas que puedes crear y usaste esa habilidad para un puto peluche...

Negaba rápidamente para luego sonreír, su hermano merecía descansar, él todavía podía trabajar, él estaba acostumbrado a no dormir mucho, el café lo ayudo a eso, y acababa de tomar técnicamente.

—Descansa, yo me encargare del resto —cerraba la habitación con cuidado para no despertar 

— ¿Qué habrá sido eso? —preguntaba Jigoro, el anfitrión que se había ido hace un tiempo regreso y les apunto con algo raro solo para irse de nuevo

—Ni idea, pero fue raro... —el menor de los Tsugikuni admite 

—Aunque también parecía que tenia miedo —el mayor de los Tsugikuni admite 

—Al menos cumplimos con no hacer alboroto y comportarnos —el menor de los Tsugikuni opinaba 

—No había razones para formar escandalo —Jigoro admite —Aunque si me sorprende de algunos —observaba a Kaigaku y a Zenitsu, le había prometido una ración extra a Kaigaku y se la dio, y castigo a Zenitsu con darle una menos, pero lo sorprendente es que Kaigaku se la regalo, le regalo su ración extra,  al parecer es una recompensa por hacer lo correcto y por casi dar una patada... —Debí castigarlos a ambos —bufaba 

—Me alegra que haya platos hechos de pescado, él que hizo esto sabe de calidad alimenticia —Managi admite 

—La verdad, yo no suelo comer pescado, ¿Y si me atoro con una espina? —preguntaba con miedo el chico inestable —Entonces nos morimos los cinco —la voz irritada concluye —Debemos aprovechar que hay mucha comida y comer —la voz alegre dice de forma divertida —¿Y si comemos un postre o un dulce? —preguntaba la voz relajada —¿Sakuramochi tal vez? —proponía —Creo que mientras comamos estamos bien —la voz triste admite, es deprimente que este tipo de servicios de comida no duren para siempre.

Nakime estaba comiendo algunos panecillos —A diferencia del arroz aguado que tengo que comer normalmente, esta comida de verdad te sacia... —sorbía un poco del té que había conseguido —Té bueno, casi hasta me olvido que soy pobre...

—¡Estuvo delicioso, hermanito! —Ume decía satisfecha por la comida 

Gyūtarō sonreía al ver a su hermana tan feliz, aunque él también lo hacía, hacía mucho que no podía comer junto a ella una comida de una calidad tan alta.

—Hacía mucho que no comemos los tres juntos, ¿No lo creen? —preguntaba la madre de Dōma

—Hace meses, sí —su esposo concuerda —, aunque también es debido a que Dōma estaba ocupado atendiendo a los creyentes 

Dōma solo ignoraba a sus padres, no le interesaba de que hablaban, y tampoco le importaba si comen con él o no, casi nunca lo hacen de todas formas, por ahora solo se limitara a cumplir la necesidad básica que tiene como humano y saciar su necesidad de hambre.

—Parece que le gusto mucho el tempura —la madre del niño sonreía al ver como su hijo comía con tanta tranquilidad, parece estar tomándose su tiempo para saborear.

—Come con tanta calma —suspiraba encantado el padre, a veces parecía que su hijo tenia modales desde que nació a la hora de comer

Dōma solo comía de forma calmada debido a que ahora no tenia la presión de que debía atender a más adoradores, ya que no tenia que apresurarse, pues podrá comer a una velocidad que él elija como la adecuada.

—¡Umai! ¡Umai! ¡Umai! —Hakuji comía rápidamente, la comida era deliciosa 

—Está delicioso, riquísimo, sabroso —Keizo comía a igual velocidad que su alumno, la comida era deliciosa

Koyuki comía tranquila y lentamente, la comida estaba caliente por lo que debía tener cuidado de quemarse. 

Recuento de palabras: 3. 958

Publicado: 05/Junio/2022

Editado: ???

Hey, hey, hey, al vigésimo tercer capitulo de este Watching ha llegado y con él mis agradecimientos por tomarse la molestia de leerlo.

Este capitulo se resume en relleno, pero al menos me sirve para dividir la otra tanda de reacciones XD.

Próximamente pondré la votación, aunque me gustaría que ustedes también participaran en la creación de las opciones.

Díganme, ¿Ustedes quisieran que reaccionaran a algo en particular?

Si la respuesta es sí, ¿A qué?

Sus respuestas las tomare en cuenta y además las pondré de opción en la votación que pondré próximamente.

Pd: Si quieren que reaccionen a algo que no sea de Kimetsu no Yaiba o a las lunas superiores pueden hacerlo, por ejemplo, ya una persona propuso que reaccionaran a un Rap de un personaje de DC comics.

Espero sus respuestas.

Dejo algunas imágenes de despedida.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro