|25| Fin del Camino
|Outfit Multimedia|
"La he perdido... perdi a Evie"
Abri pesadamente mis ojos encontrandome sentada en el sillon de la residencia familiar, veo mi vestimenta y tengo un vestido blanco, el mismo que use en la coronacion.
Se escuchaba musica clasica y voces a lo lejos de mi.
¿Que hacia aca?
Por los ventanales entraba una gran luz blanca que era posible ver hacia afuera.
-¿Mama...? -pregunto con un hilo de voz cuando la veo caminar por el hall con su bello vestido color rosa viejo hasta sus rodillas que le quedaba perfecto pero ella no me escucha. Me levanto del sillon caminando fuera de la sala directo al hall- ¿Papa...? -pregunto al escuchar su risa acompañada de la de mi mama. Mis ojos se mojan mientras camino al comedor de nuestro hogar, escuchando mas risas.
-¡Hermanita! -escucho cuando entro en el comedor, viendo a mi hermano Caspian, mi abuelo Antonio, a mis padres y a Luna. Mi padre y abuelo vestian con su apuesto traje negro con la camisa blanca y mi hermano lucia una camisa blanca con un pantalon negro. Luna finalmente vestia con su largo vestido hasta sus pies color blanco con piedras blancas y su cabello platinado con una corona de flores blancas.
-¡Ven, caperucita! -dice mi abuelo que estaba frente a la chimenea tomando de su copa de vino.
-Mi bella naranjita... -llama Luna con una calida sonrisa, asi me llamaba.
-¿S-son real? -pregunto tartamudeando sin poder creerlo. Luna se acerca a mi lentamente y no dudo en abrazarla, ahora las dos estabamos a la misma altura, sentia su hermoso perfume de frutos rojos, tocaba su liso cabellos platinados y nos separamos, viendo que aun corservaba su belleza Seelie con sus bellas orejas puntiagudas.
-Eres toda una mujer, Naranjita -dice mi protectora acariciando mi mejilla y cierro mis ojos ante su dulce tacto.
-Mi bella caperucita -llama mi papa y me separo de Luna para ir a mi papa y a mi mama, mis lagrimas salian una tras otra, sintiendo como mi corazon se achicava ante sus manos y me volvia inmune- Eres una bella señorita -mi padre me ve cara a cara y limpia mis lagrimas.
-Como en tu dedo, Leonor -exclama mi mama riendo mientras tomaba mi mano izquierda, mi papa rie.
-Eres igual que yo, pero con la belleza de tu mama -alaga mi papa y vuelvo a abrazarlo, lo extrañaba tanto, amaba verlo.
-¿No me vas a abrazar? -giro a ver a mi abuelo quien tenia sus brazos abiertos, como una niña de cinco años con lagrimas corro a abrazar a mi abuelo fuerte y este me alza en brazos como si fuera una niña de vuelta- Mi Caperucita roja... -ambos nos abrazamos fuerte mientras lloraba en su hombro- Estoy orgulloso de ti y en la perfecta Shadowhunter que eres.. -giro a ver a mi familia quienes me sonreian.
-Llegue tarde, lo siento... -digo luego de procesar todo mientras limpiaba mis lagrimas- Mate a Valentine, hice justicia por ustedes...
-No... -me dice mi abuelo acariciando mi espalda- No te preocupes, Caperucita.
-¿Es el cielo? -pregunto extrañada al verlos a los cinco.
-Ahora lo es -asegura mi mama caminando a mi para abrazarme de vuelta y nos miramos para que ella acaricie mi mejilla.
-Lo siento... -digo con mis lagrimas de vuelta- No pude defenderlos la noche de la coronacion, me culpe por años y... trate de quitarme la vida... -mi mama solo me ve sin expresion y me abraza.
-Tranquila, bebe -me dice sobando mi espalda.
Me sentia en casa, finalmente.
La residencia Bloodmane volvio a ser mi hogar, con mi familia.
[...]
Narrador Omniciente
Evie dejo de respirar, sus lagrimas dejaron de salir. Alec solto un sollozo fuerte mientras estrechaba a Evie en sus brazos llorando. Jace abrazo a Isabelle quien estaba devastada, escondiendo su cara en el pecho del rubio para no ver mas.
-¡Magnus, haz algo! -ruega Alec llorando Pero Magnus pone una mano en el hombro de Alec y niega lentamente- Evs no me dejes... -decia llorando mientras acariciaba el pelo de su difunta novia.
-Por mas que quiera hacerlo... no puedo -responde con dolor el brujo viendo el cuerpo de su amiga en brazos de Alexander mientras que una lagrima salio de su ojo- Mi magia tiene limites... lo siento mucho, Alexander.
-Chicos, lo siento... -dice Clary apenada- Es mi culpa, mis condolencias... -intenta acercarse a ellos tres pero la mano de Alec la detiene.
-No... -la corta el morocho sin parar de llorar- Mantente alejada de nosotros, por favor... -ruega mientras miraba a Clary, la misma se detuvo en seco, sintiendose culpable de todo eso.
-Alec, yo... -intenta hablar pero los Lightwood la interrumpen de vuelta.
-Alejate... -ruegan los dos sin dejar de llorar, Jace cierra los ojos mientras negaba varias veces, no sabia que hacer- Desde que llegaste, ella se expuso a mas riesgos que cualquiera de nosotros cuatro por salvarte resultando herida... -continua Alec solo mirando a su chica- ...Mantente alejada... -pide con un hilo de voz.
-Evs... Parabatai... -susurro Iz llorando y Alec pasa un brazo por la espalda de su hermana para abrazarla, Jace abraza a Iz y a Alec, dejando en medio a la difunta Evie, formando un circulo entre ella.
-Adonde tu vas... Nosotros iremos... -dice Isabelle con Lagrimas mojando la cara de su parabatai.
-Tu pueblo.... es nuestro pueblo... -continua Jace cerrando sus ojos con fuerza mientras mas lagrimas salian.
-Tu dios... es nuestro dios... -dice Alec para luego quebrar en llanto, mientras miraba a su novia, uniendo su cara con la de ella.
Los tres hermanos se abrazan mas fuerte formando un abrazo familiar mientras lloraban cerrando sus ojos, sintiendo como una parte de ellos se moria, en especial Isabelle que era su Parabatai.
Magnus y Clary quienes estaban de pie llorando en Silencio, se sorprendieron al ver que todas las runas que Evie tenia en sus brazos y abdomen, comenzaron a teñirse de un color dorado.
-Chicos... -llama Clary viendo el cuerpo de Evie. Jace, Izzy y Alec abren sus ojos y se sorprenden al ver las runas de la chica Bloodmane de color dorado.
-¿Magnus que estas haciendo? -pregunta Alec pero el brujo levanta sus manos en señal que no estaba haciendo nada y todos vuelven a fijar su vista en Evie.
Alec, Jace e Izzy se sorprenden al ver que un circulo de color dorado los rodea a ellos cuatro y empieza a brillar mas, como las runas del cuerpo de Evie mientras que un polvo color dorado tambien los rodeaba como si Magnus estuviese haciendo un hechizo.
-Adonde tu vas... nosotros iremos... -repite Isabelle mirando a su Parabatai.
-Tu pueblo... es nuestro pueblo... -repite Jace abrazando mas a los Lightwood.
-Tu dios... es nuestro dios... -dice Alec que les estaba pasando a ellos cuatro.
-No nos pidas que te dejemos... o regresaremos cuando aun te estemos siguiendo.. -dicen los tres chicos mirandose y luego a la chica- Porque adonde tu vayas, nosotros iremos... Donde tu vivas, nosotros viviremos.... Entran cuatro...
Fin del narrador Omnsiente
[...]
Evie Bloodmane
Todo parecia una celebracion de bienvenida, como si toda mi familia Bloodmane hubiese esperado mi llegada con ansias desde hace mucho tiempo, realmente no se como sentirme.
Estoy feliz... mas de lo que pude llegar a serlo desde que mi familia fue masacrada.
Sentia que el alma me habia vuelto al cuerpo, ellos estaban aca. Y yo estaba con ellos.
Los trescientos miembros Bloodmane nos encontrabamos en uno de los Grandes Salones de Baile que habia en nuestra Residencia, en especial, este Salon iba a ser el que se utilizaria para celebrar mi Coronacion y la de mi hermano Caspian.
Paso entre los hermanos de mi padre que me saludan con una sonrisa y una reverencia con la cabeza, citandome las palabras "Es un honor volver a verte, sobrina", a lo que yo les agradezco antes de seguir caminando.
Mi madrina, la tia Astrid fue la que me abrazo con fuerza y estando aliviada de que nos hayamos encontrado de vuelta, ya que ella era mi tia favorita y la que me cumplia los caprichos de ir a entrenar cuando me lo prohibian o hacer misiones privadas.
Seraphina, la hermana menor de mi padre, ella me sonrio cortésmente como siempre, con su cabello naranja reluciente y sus ojos azules, con una copa de champagne, ella nunca fue muy afectuosa conmigo ni con mi hermano, teniendo la razon de que somos parte "impuros" debido a mi madre.
Pero mis tios Lorcan y Alaistar me siguen querido mucho al igual que Astrid, a ellos no les importa la sangre que corre por mis venas, solamente les importa que seamos de la misma sangre Bloodmane.
Seraphina al igual que mi abuelo Antonio, ellos nunca fueron coordiales con mi madre debido a lo que hizo los Herondale; Abandonar al Consejo y el Aureum para pertenecer a la Clave e Idris, siendo una de las familias mas importante en Idris.
Y ahora puedo verlo perfectamente, siendo una mujer adulta debido a que de niña no lo entendia muy bien. Observo como la tia Seraphina se marcho con mi abuelo para hablar ellos dos mientras veian a mi madre.
Mi madre presiente las miradas de ellos dos y se siente incomoda, estando junto a su marido y escuchando la conversacion que el establecia con Alaistar y Lorcan, en completo silencio e incomoda.
Caspian se fue junto a nuestros primos, quienes se molestaban entre ellos o veia a los mas pequeños correr por todo el gran salon, pasando incluso junto a mi lado.
Por primera vez, pude conocer a mi abuela paterna; La unica y la infame Annelisse DarkBlood, la Dama de Rojo.
La primera mujer que le robo el corazon a mi abuelo.
Rubia de ojos celestes, de gran ego y de una belleza que no se ve en cualquier lado, traia un impecable vestido color rojo con piedras bordo y bordado que mostraban su silueta y zapatos de tacon alto.
La Dama de Rojo traia una copa de alcohol en sus manos mientras hablaba con mi madre, ya que ella me habia contado que Annelisse la habia aceptado en el primer momento que mi padre la presento.
Pero las dos al verme, mama me hizo señas para que me acerque y asi lo hice:
-Evie Aislinn Ilaria Bloodmane, eres toda una mujer -alago Annelisse, con una sonrisa sin mostrar sus dientes.
Le sonrio de la misma forma.
-Es un gusto por fin conocerla, Annelisse -le digo y ambas estrechamos manos- Mi abuelo me conto grandes cosas sobre usted.
-Tu abuelo es un gran hombre -afirmo viendo al mismo hablar con Seraphina y Leonor- A pesar de lo que nos distancio, el logro todo lo que queria para sus hijos.
A decir verdad, jamas supe de que murio Annelisse DarkBlood, ni mi abuelo ni mi padre me habian dicho, pero solamente se que realmente eso los afecto a ellos dos bastante, al igual que a Lorcan y a Alaistar.
Los diarios de ellos siempre evitaron esa parte, pero siempre la recuerdan como una gran mujer luchadora, hermosa y lider.
-Parece que tenemos tiempo para conocernos -comento con ambas manos detras de mi espalda, a lo que ella asiente con su cabeza- Me gustaria saber las grandes historias de La Dama de Rojo...
Annelisse sonrio orgullosa.
-Solamente si puedo escuchar las historias de Capucha Roja -afirmo, llamandome por el apodo que me dio mi abuelo.
Cada Bloodmane tiene un apodo que lo representa en los libros junto a una pintura o fotografia del mismo, dando a leerse su vida y su descripcion.
En mi caso, soy Capucha Roja (aunque de niña siempre me dijeron Caperucita Roja por ser una niña) Mi hermano Caspian es el Baron Rojo debido a su letales ataques y lo profesional que es. Mi abuelo es el Leon Dorado y mi padre El Caballero Dorado, terminando con mi madre que es la Pequeña Rosa.
Y asi, cada miembro Bloodmane como mis tios (Lorcan: El Leon Solitario ; Alaistar: El Pequeño Diablillo ; Astrid: El Demonio disfrazado de Angel y Seraphina como la Mano Derecha del Leon Dorado) y todos los miembros Bloodmane somos apodados con un apodo desde el nacimiento para que seamos recordados por ellos en los Diarios y las hazañas.
-Si me disculpa, Annelisse... -digo- Me gustaria ir a hablar con alguien mas...
Antes de que me vaya, Annelisse me toma del brazo para detenerme y hacer que la vea directamente a sus ojos azules, causandome sorpresa.
-Por favor... llamame Abuela... -dijo con una sonrisa y un tono escalofiante.
Esa palabra me hizo dar un escalofrio por todo mi cuerpo, solamente me dedico a asentir varias veces para que no piense otra cosa.
Annelisse sonrie mas en grande y me suelta con lentitud, dejandome seguir con mi camino.
Eso fue realmente extraño.
Camino hacia mi protectora Luna, quien cargaba un hermoso bebe mitad brujo mitad seelie, envuelto en una manta color azul bebe, ella sera una gran madre.
El fruto de Luna y Magnus, quienes le apodaron "Nale", un bebe de ojos celestes y una marca de brujo igual a su padre Magnus: Ojos de Gato.
Al llegar, Luna me sonrie y me muestra mejor su hijo, quien tenia los ojos celestes mas claro que habia visto, como los de Luna, jugando con un colgante mientras usaba su propia magia.
Para ser un recien nacido ya controla muy bien su magia.
-Los extrañe... -digo mientras Luna me veia con detalles, a lo que yo veo como Nale juega con un dije que tengo en el cuello, haciendolo flotar.- A todos ustedes -agrego mirando a uno por uno.
-¿Como esta Magnus, Naranjita? -pregunta Luna.
-Te extraña, y no es el unico -digo con una sonrisa y ambas reimos- De verdad se enamoro de ti.
-Y yo de el -confiesa con los ojos lleno de lagrimas, veo como ella se aleja de mi y se saca un collar de piedra Cuarzo y me lo entrega guardandolo dentro de mi chaqueta.
Frunzo el ceño al no saber que significa
-Lo amo mucho, Naranjita. Cuidalo por mi, por favor y dile que lo amo. -¿como iba a hacerlo si estaba muerta ya?, no entiendo nada.
Giro a ver a mis papas y me acerco a ellos que hablaban con Caspian.
-Los extrañe... -digo con una pequeña sonrisa abrazando a mis papas y a Caspian mientras que el ultimo sobaba mi pelo.
Todos todavia tenian su belleza, la edad no los cambio por nada.
Ahora si... estoy en casa...
⚜
✨Annelisse DarkBlood protagonizada por Michael Pfeiffer✨
✨Primera esposa de Antonio Bloodmane✨
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