Para ser un jueves dentro de la escuela, el día estaba yendo un tanto rápido. Cosa que agradecía eternamente, ya que después del día anterior necesitaba solo llegar a una cama cómoda y dejar de existir. Aunque para eso faltaban un par de horas más.

Me quejé por lo bajo, recargando mi cabeza en el hombro de Sadie. Nos encontrábamos en unas gradas lejos del comedor y el demás alumnado.

-¿Estás bien?- Preguntó la pecosa mirándome con una sonrisa. Asentí con el mismo gesto y retiré mi cabeza de su hombro un momento.

-Necesito un descanso.- Murmuré mirándola de reojo.

-Falta poco para que las clases terminen.- Animó con tranquilidad tomando mi mano. Sonreí con amplitud y giré mi rostro para mirarla. -En cuanto acaben nos iremos por tus cosas, después vamos a la casa del árbol y descansamos todo el tiempo del mundo.- Asentí bajando la mirada a nuestras manos, que ahora yacían entrelazadas. Mi sonrisa se amplió más.

-Olvidaste cubrir tu tatuaje.- Escuché su ligera risa.

-No tuve tiempo esta mañana, ya sabes, dormí en casa de Sophia y tuve que apurarme.- Asentí detallando el tatuaje con la yema de mi pulgar. Recordé por un momento que ella tenía más, un par más, que nunca había visto.

-¿Y los demás?- Pregunté aún sin mirarla.

-Oh... ¿Quisieras verlos?- Levanté la vista y asentí mirando sus ojos. -En casa te los muestro, no quiero que me descubran.- Reí ligeramente y seguí mirando sus manos.

-Espero poder descansar hoy.

-Espero lo mismo, Jammie.

[...]

El resto de clases pasaron rápidamente, cosa que seguía agradeciendo, pero también estaba extrañandome esa rapidez. Estaba siendo un día muy tranquilo, casi demasiado para mi gusto.

Generalmente eso significaba que algo grande estaba por venir. O al menos eso parece ser en nuestra vida, siempre estamos en constante movimiento por todo lo que nos pasa.

Y aunque tanta tranquilidad estaba abrumandome, decidí dejar de sobrepensarlo y concentrarme en la chica pelirroja que sostenía mi mano mientras caminabamos a mi casa.

-¿Tus padres están a estas horas?- La miré con una ligera sonrisa. Ella iba un paso adelante abriéndome camino entre la gente.

-Sé supone que no, pero después de que desaparecí anoche, probablemente esté alguno de ellos.- Me aferré a su agarre hasta que salimos de la gran multitud en la banqueta.

-Entonces tendremos que escalar por tu ventana.- Dijo en un tono dudoso. -Para evitarnos problemas directos.

-Sí, lo mejor será escalar, por si acaso..- Afirmé bajando un poco el paso hasta detenerme. Sadie miró al frente y después a mí, comprendiendo porque me detuve. -Vamos a la parte trasera.- Retomé el paso mirando la casa inmensa que nos esperaba.

Guíe a la pelirroja a nuestro destino, donde pudimos observar la delgada escalera con enredaderas que daba directo a mi habitación. Aunque no era una escalera como tal, ya que estaba echa para colocar plantas y nada más. Pero facilitaba la escalada.

-Iré primero.- Susurré soltando finalmente su mano.

-Ten cuidado...- Reí en voz baja comenzando a escalar. -Hey, es en serio.. ten cuidado.

-Lo tendré, Dodger.

Seguí subiendo con un poco de dificultad. Las plantas hacían todo más complicado. En un par de ocasiones estuve por resbalarme, aunque no iba tan alto pero si caía seguramente me lastimaba algo.

Una vez arriba pude observar a Sadie, quién ya empezaba a subir. Sonreí girándome y observando mi habitación por completo.

Me apresuré a la puerta para colocar el pestillo y así evitarnos cualquier sorpresa que no queríamos. Luego de eso, fui directamente a mi clóset, donde saqué dos bolsos deportivos que yacían ahí. No tenía maletas, así que debía improvisar.

Coloqué los bolsos sobre mi cama y observé a Sadie, quién me veía con una ligera sonrisa.

-Hagamos esto- llamé su atención. -yo elijo la ropa y tú me ayudas a acomodarla aquí.

-Claro, no hay problema.

Sin decir nada más nos dedicamos a lo dicho. O bueno, al menos yo me dediqué a lo mío, porque Sadie de dió la tarea de pasear por mí habitación en lo que yo colocaba lo necesario sobre la cama. Debía ayudarme a guardar las cosas, pero estaba más distraída inspeccionando el lugar.

Entonces hubo un momento en el que dejé de oír sus pasos por la habitación. Yo estaba frente a mi cama doblando las prendas. Fruncí el ceño por el silencio y levanté la vista.

Apenas mi rostro se levantó un poco cuando inmediatamente nuestros ojos conectaron. El hermoso color azul de sus ojos resaltó de inmediato; a pesar de no haber encendido las luces y tener muy poca iluminación en este momento, podía notar con claridad el brillo que tanto me maravillaba.

Me miraba expectante, lo cual me hizo bajar un poco la mirada gracias a su persistencia. Observé sus manos y no pude evitar sonreír.

-¿Dónde lo encontraste?- Cuestioné dejando de lado las prendas y yendo directamente a ella.

-Eataba escondido detrás de otra fotografía.- Respondió detonando cierta emoción. En sus manos sostenía una foto enmarcada de cuando éramos niñas. Según recuerdo, estábamos de viaje con su familia (yo fui invitada por ellos) y estuvimos todo un verano juntas.

Había sido maravilloso, ya que ambas nos hicimos conscientes de lo que sentíamos la una por la otra. Aunque aún éramos muy jóvenes, sabíamos que una amistad no era suficiente. Y cada quién descubrimos una cosa nueva de nuestra persona. Fue un viaje de autodescubrimiento increíble.

-Fue la primera y única vez que pasamos un verano juntas sin que tus padres se entrometieran.- Comentó mirando el cuadro con nostalgia.

-Quizás el próximo verano podemos hacer algo similar... Y no lo sé, tal vez sin nuestros padres- murmuré mirándola fijamente. -solo nosotras.

-¿Solo nosotras?- Susurró con una mirada ligeramente nerviosa. Sonreí al momento que apartó la mirada y su rostro se convirtió en un tierno tomatito. -S-Suena a un buen plan..- Aclaró un poco su garganta. No pude evitar reír y sentir unas ganas inmensas de abrazarla.

-¿Te pone nerviosa estar a solas conmigo?- Levanté una ceja tomando el marco de sus manos y colocándolo sobre la cama.

-Un poco- volvió su vista a mí. -mucho, bastante, demasiado..- nuevamente sus ojos se apartaron de mí.

Di un paso adelante, con intenciones de ponerla aún más nerviosa. Inmediatamente sonreí al escuchar un ligero suspiro salir de sus labios. No pude aguantarme más y solté una pequeña risa, intentando no sonar demasiado fuerte, por si acaso alguien estaba en casa.

-¿De qué te ríes?- Preguntó con una ligera confusión. Tomé sus mejillas entre mis manos sin dejar de reír, para posteriormente pellizcarlas.

-No puedo creer que te pongas nerviosa conmigo si llevamos muchísimos años juntas.- Se quejó por los pellizcos, a lo que yo la solté sin dejar de sonreír. -Eres muy tierna.

Guardó silencio un momento, hasta que un peculiar brillo apareció en sus ojos. Alcé una ceja pensando en lo que tramaba.

-¿Qué me ves?- Cuestioné.

Ella estaba ahí, quieta y con la mirada fija en mi rostro. Una sonrisa quería escapar de sus labios, y ahora era yo quien se sentía confundida por su comportamiento.

-¿Sadie?- Susurré aún con la ceja alzada.

De pronto sus ojos comenzaron a bajar, hasta que me analizó de pies a cabeza. Fue mi turno de sonrojarme al verla pasar su lengua sobre sus labios.

-¿Qué planeas ahora?- Su silencio estaba abrumandome y poniéndome nerviosa. Cosa que no quería, porque el plan tenía que ser al revés.

Sin decir nada, soltó un pequeño "grito de guerra", rodeandome por la cintura con sus brazos y lanzandonos a la cama a ambas. Arrugué mi nariz con ternura cuando ella esparcía pequeños besos por mi rostro. Me hizo cosquillas una vez que respiraba cerca de mi cuello, sin dejar de dar muchos besitos.

-¡Sadie!- Logré decir entre risas. Intenté quitarmela de encima entre palmadas y empujones, pero simplemente fue imposible. No sé cómo, pero era más fuerte y pesada que yo a pesar de ser más bajita.

Entre pequeñas carcajadas seguí suplicando que me soltara. Hasta que decidió que era suficiente y me liberó. Se mantuvo con sus manos a los lados de mi cabeza, con una sonrisa amplía y reluciente.

-Si hay alguien en casa, seguramente nos van a descubrir..- Susurró con la voz un poco agitada. Me sonrojé un poco al sentir su respiración tan cerca de mi rostro. Y a pesar de intentar que no lo notara mucho, la cercanía era suficiente para hacerlo evidente. -Hey, ¿no se supone que yo era la nerviosa?- Nuevamente susurró acercando un poco su rostro.

No sé cómo hace eso. No sé de dónde sacó ese poder de voltear mis planes en menos de un segundo. Me saca tanto de mis casillas verla sonreír tan victoriosa cuando sabe que me tiene comiendo de la palma de su mano.

Aunque generalmente era yo quien tomaba la iniciativa y ella era la nerviosa y tímida que simplemente se deja llevar.

Pero había momentos, momentos como este, en donde por unos minutos su personalidad cambiaba. Y se convertía en una persona muy segura, muy atrevida y sobre todo, tomaba el control de las cosas. El control de mí.

Eso siempre me volvió loca, o al menos hasta donde llega mi memoria. Sus acciones solo me hacían sentir que las ganas de besarla aumentaran más y más. Y últimamente tenía otros deseos, deseos que iban mucho más allá de besarla y abrazarla. Era algo que no entendía del todo bien aún; pero la quería completamente. Quería más de ella, y sé que ella quiere más de mí.

Volví a la realidad cuando sentí sus labios rozando los míos. Su respiración era pesada y chocaba contra mi rostro. De pronto mi boca se sintió seca. Necesitaba besarla, todo mi ser gritaba sobre esa necesidad.

Cerré los ojos atrayendola a mí lentamente, sintiéndome como en las nubes al mínimo tacto en nuestros labios.

Deseaba esto con toda mi alma, tener a Sadie en mi vida era toda la felicidad que necesitaba. Y besarla era mi parte favorita ante todas las cosas.

Pero aunque suplicaba que esta sensación fuese eterna y yo pudiera besarla infinitamente, todo tiene un fin, y siempre llega ese momento de separarnos. Ese punto cuando sus labios abandonan los míos, que aunque mis pulmones se sientan aliviados de tener aire nuevamente, mi corazón y mente maldicen tanto el tener que alejarnos.

-Te amo..- La escucho susurrar cerca de mi oído. Mi única respuesta es suspirar.

No estoy lista para decirlo, y ella lo sabe perfectamente, así que sé que no llevo prisa.

-Me gustas mucho, Sadie.- Nuevamente un suspiro escapa de mí. Puedo sentir su respiración cerca de mi cuello, y sé cuáles son sus intenciones. De solo pensarlo mis manos, que yacen sobre su cabello, tiemblan un poco.

Es inevitable sentir el calor subir por mis mejillas al hecho de que su respiración se volvió pesada y recorría mi cuello lentamente. No dejaba besos aún, no, solo respiraba cerca, logrando tensarme en múltiples ocasiones.

Mis ojos volvieron a cerrarse cuando sus labios finalmente tocaron mi piel. Casi por instinto me aferré un poco a su cabello. Y esta vez, de mis labios salió un jadeo.

Maldije a mis adentros una vez que me di cuenta de lo atrapada que me tenía. Y estaba completamente segura de que era consciente de eso. Era consciente de su poder y sus acciones. Sabía perfectamente como tenerme a sus pies.

Era un hecho que Sadie causaba muchas cosas en mí, cosas que soy capaz de jurar que nunca sentiré con nadie más.

Y aquí estaba nuevamente, entregándome a los besos de Sink, mi futura novia si es que todo sigue tan bien como va.

Esto era lo que merecía, lo que necesitaba, y por supuesto, lo que más deseaba tener. Un día tranquilo en los brazos de la pecosa siendo completamente cursi con ella.

-Eres todo lo que necesito..- Fue lo último que pude decir, antes de volver a besarla.

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Hey!

¿Qué les parece?:)

Hace mucho que no nos leíamos por acá...

Lamento mucho mi ausencia por estos lares, pero es que el tiempo no me daba lo suficiente. El fin de todo es que ya estoy de vuelta y muy contento de volver con estas dos chicas enamoradas.

Doy inicio a un maratón de compensación! Será un capítulo por día nwn

He de decir que estoy muy emocionado por los capítulos que vienen. Y debo avisar que probablemente uno de ellos tenga algo más.. hot (? No explícito porque no es mi fuerte, pero si algo un poco más calentón jiji

¿Cuándo será el día que estas dos confirmen su relación? Próximamente, eso es seguro..

En fin, espero que sigan aquí, votando y comentando. Prometo no irme así de nuevo. De hecho, planeo volver a las actualizaciones de los martes, si es que no muero en el intento nwn

¡Gracias por esperar!
¡Prometo no decepcionarlos!

Nos leemos mañana, a estas mismas horas, con un capítulo más..

1/?

Sillie es real!
Y!

Sin más que decir: CHAO BYE!!

By:Muffinisaurus_Rex8