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“I know you haven’t made your mind up yet but I will never do you wrong.”

Ya había pasado un mes desde que Seokjin y Namjoon se conocieron, y desde ese día no volvieron a tener contacto alguno.

Faltaba un día para la boda. La boda que Namjoon y Seokjin no deseaban que sucediera pero que toda su familia esperaba con ansias.

Hace unas semanas, los padres de Seokjin y Namjoon se reunieron para ir a elegir la casa de la pareja. Los futuros esposos no estuvieron invitados por que según sus padres era “una sorpresa para los recién casados”.

La última semana tanto Seokjin como Namjoon fueron con sus madres a mirar los últimos detalles de sus trajes. Había sido una tarea muy agotadora para Seokjin, ya que su madre era muy complicada con todo el aspecto de la ropa y esas cosas, y para el final del día el omega estaba supremamente estresado y ya no aguantaba estar ni un segundo más con su madre.

Ahora se encontraba en su habitación, luego de haber tomado un relajante baño. Todo el día estuvo con los nervios de punta y con muchas ganas de llorar, estuvo tratando de inventar algún plan de escape pero finalmente se resignó y decidió relajarse para su gran boda.

Estaba tumbado en su cama hablando con Hoseok por mensaje, cuando le llegó un mensaje. Un mensaje de Namjoon.

Namjoon🐨. 
Hola, Seokjin. 

Seokjin🐹.
Hola ☺

Namjoon🐨. 
¿Cómo estás?

Seokjin🐹. 
Voy a decir que bien, para no preocuparte ;) ¿tu?

Namjoon🐨. 
Jaja. Yo estoy bien. ¿Preparado para nuestra GRAN boda mañana?

—Por supuesto que ibas a preguntar eso —susurró Seokjin poniendo los ojos en blanco

Seokjin🐹. 
Digamos que si. No lo sé, ¿tu? 

Namjoon🐨. 
Si. Debo confesar que he estado un poco ¿nervioso?, no sé. 

Seokjin🐹. 
Entiendo.

Namjoon🐨. 
Bien. Sólo quería saber como estabas, ahora iré a dormir. Espero que descanses, te veo mañana. Xx.

—Después de todo no eres tan tonto. —dijo sonriendo un poco.

Seokjin🐹. 
Tu igual. Adiós.

Luego de enviarle ese mensaje al alfa, se fue a dormir y no es que el mensaje lo hubiera alegrado o algo, pero esa noche durmió con una sonrisa en su rostro.

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Tanto la familia Kang como la Kim ya se encontraba en la capilla donde se llevaría a cabo la ceremonia.

No tenían invitados, ya que Namjoon y Seokjin desde el principio dejaron claro que no querían nada muy extravagante que solo con las dos familias estaría bien. La única persona que vino de otro lugar para la celebración fue la hermana de Namjoon, Hyejin. Era una beta muy linda, tenía el cabello pintado de Electricmango, el color de sus ojos era muy hermoso y su sonrisa era una combinación de la sonrisa de su madre y Namjoon, al igual que la forma de sus ojos. Cuando Seokjin la conoció ese día, le agradó al instante y ni hablar de Taehyung, inmediatamente se hicieron amigas y todo el día habían estado juntas esperando la boda de sus hermanos.

Seokjin y Namjoon no se habían visto aún porque debían seguir la tradición de “los novios no se pueden ver antes de la boda porque es de mala suerte”, Seokjin se rio ante ese comentario, ya que ellos ni novios habían sido.

Ahora, Seokjin se encontraba en una habitación con su madre y Namjoon probablemente estaba en la habitación del lado. Seokjin necesitaba hablar con Namjoon, pero al parecer no había ni las más remota posibilidad de que se vieran, así que decidió enviarle un mensaje de texto.

Seokjin🐹. 
Hola, Namjoon. Necesito que hablemos, por favor.

Namjoon🐨. 
Uh, ¿pasó algo?

Seokjin🐹. 
No, no. Sólo quiero decirte algunas cosas ya que ahora seremos “esposos”, ya sabes.

Namjoon🐨. 
Oh, si claro. Pero, ¿qué te parece si después de la cena y esas cosas lo hablamos? No creo que quieras decirlo por mensajes. 

Seokjin🐹. 
Está bien.

Namjoon🐨. 
Te veo en un rato. Xx.

—Siempre manda esas estúpidas equis. —dijo antes de guardar su teléfono.

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Después de veinte minutos, ahora Seokjin se encontraba caminando hacia donde estaba Namjoon y todas las familias.

Al entrar se quedo impresionado con lo que estaba viendo. Si antes pensaba que Namjoon era guapo, ahora lo estaba confirmando al cien por ciento.

Namjoon estaba parado en el altar, iba con unos pantalones negros y una camisa negra abierta hasta la mitad, dejando ver algunos de sus tatuajes. Su cabello estaba un poco peinado y tenía los rizos más definidos que el día que se habían conocido. Era imposible de negar, Namjoon estaba muy apuesto y Seokjin por primera vez sintió un poco de atracción hacia Namjoon, pero eso era algo que nunca iba a decir en voz alta.

Por otro lado, Namjoon también quedo maravillado con lo que estaba viendo. Seokjin venía con unos pantalones negros anchos y un poco cortos al final, tenía una camisa blanca un poco abierta dejando ver sus clavículas las mangas de ésta estaban dobladas hasta la mitad de los brazos. Llevaba una coronita de flores blancas y el cabello un poco desordenado. “Está precioso” pensó Namjoon y tuvo que dejar de mirar a Seokjin porque seguro alguien en la sala podría oler como se sentía ahora y eso era lo último que quería.

La persona que los iba a casar empezó la ceremonia cuando Seokjin se ubicó al lado del alfa. Todo fue muy rápido ya que no tuvieron que decir votos ni nada; sólo tenían que decir “Sí, acepto”, intercambiar anillos y eso era todo.

La ceremonia terminó y se dirigieron al lugar donde sería la cena, en la cual sólo se dispusieron a escuchar anécdotas de los padres de cada uno. Seokjin de vez en cuando miraba a Namjoon y se sorprendía al ver que Namjoon también lo miraba, intercambiaban sonrisas tímidas y luego dirigían la mirada a otro lugar. Así pasaron las dos horas que estuvieron en ese lugar.

Finalmente todo terminó. Cada uno se despidió de sus familias y ahora se dirigían a su casa.

Seokjin pensó de todo, menos en que se iban a exceder tanto cuando compraron la casa. Namjoon estacionó el auto y ambos salieron. Sus expresiones de asombro eran difíciles de ocultar. Se encontraban afuera de una casa con una puerta gigantesca, la casa era de dos pisos y tenia unos ventanales gigantes.

—Wow. —dijo Namjoon. 

—Si, wow. Esto parece una casa de alguna celebridad. —se giró para ver a Namjoon.— ¿Estás seguro de que es aquí?

—Si, ésta es la dirección, si quieres te…

—¡Oh por Dios! Llegaron los esposos, ¡vengan! —fueron interrumpidos por una señora de uno 40 años de edad, era beta y tenía una hermosa sonrisa en su rostro cuando se les acercó—. Un gusto conocerlos al fin, señores. Yo soy Hana, soy la encargada de cocinarles, y ellos… —hizo un gesto para que las otras dos personas detrás de ella se acercaran—. Él es mi esposo, Dong, es su chofer para cuando necesiten cualquier cosa. Y ella es Jiyu, la encargada de la limpieza de la casa. Es un placer conocerlos al fin.

—Un gusto. Yo soy Namjoon. —dijo con una sonrisa extendiendo su mano para estrecharla con las tres personas. —Y él es…

—Yo soy Seokjin. —se apresuró a decir.— Un gusto conocerlos a todos ustedes. —sonrió y alzo su mano en forma de saludo.

—Bien, es un placer tenerlos aquí en su casa finalmente, Seokjin y Namjoon. —dijo Dong, el cuál era un alfa muy simpático. —Hace poco recogí sus maletas con ropa y esas cosas, todo se encuentra en su habitación.

Luego de eso entraron a la gran casa y quedaron más asombrados de lo que ya estaban. Se dirigieron a la habitación principal, donde estaban sus pertenencias. Allí había una gran cama, dónde probablemente cabrían más de 5 personas perfectamente. Todo estaba decorado muy lindo y moderno. Seokjin estaba fascinado con todo

—Eh… —Namjoon se aclaró la garganta para hablar.— ¿Recuerdas que me querías decir algo? ¿Aún quieres? —preguntó.

—Si. Por supuesto, ¿nos sentamos? —dijo Seokjin sentándose en la gran cama.— Bien, pues, ahora estamos casados. 

—Así es. —respondió Namjoon antes de sentarse al lado de Seokjin, pero dándole su espacio.

—Ok. Así que… hem, digamos que tengo algunas ¿reglas?, no sé bien que son pero quiero comentarlas contigo, para que no hayan malos entendidos.

—Por supuesto. Soy todo oídos.

—Está bien. —se aclaró la garganta un poco y miró a los ojos a Namjoon.— Lo primero es que, no me gusta que tomen decisiones por mi, así que espero que respetes eso. —Namjoon asintió para que Seokjin continuara.— Bien, segundo, no quiero que nos besemos. Sé que somos esposos pero no es algo que yo quiera hacer ahora, si no lo hicimos en la ceremonia no creo que tengamos necesidad de hacerlo ahora. Y, tercero no voy a dormir contigo en la misma habitación, o por lo menos no lo haré hasta que tengamos algo más de confianza o te conozca un poco más, así que dormiré en la habitación del lado que es igual a esta. —suspiró luego de decir todo y Namjoon se dedicaba a mirarlo asombrado.— ¿Tienes algún problema con eso?

—No, no. Para nada. Estoy de acuerdo contigo, no te voy a presionar a nada. Sé que todo esto es raro y nuevo para ambos, así que estoy de acuerdo contigo. —Seokjin asintió y le sonrió un poco—. Pero, no tienes que irte de la habitación, puedo hacerlo yo.

—No, Namjoon. Cambiar de habitación es lo menos importante, yo me iré a la del lado. —Namjoon asintió y Seokjin se paró de la cama para recoger sus cosas.

—Hem… yo, quiero decirte que te veías muy bien hoy, con tu traje y todo. —dijo Namjoon cuando Seokjin le daba la espalda.

—Oh, gracias. —respondió y se giró para mirarlo.— Tú, tú también te veías bien. Por lo menos no me obligaron a casarme con un alfa horrendo. 

Ambos rieron y Seokjin se dirigió hacia la puerta de la habitación.

—Seokjin. —llamó el alfa.

—¿Si?

—Yo sé que a ambos nos obligaron a casarnos pero quiero que sepas que, así todo esto sea muy superficial yo voy a ser un buen alfa. Seré un buen alfa para ti. —Seokjin asintió y le dedicó una sonrisa tímida.

—Gracias. Descansa, Namjoon.

Seokjin salió de la enorme habitación y Namjoon se tumbó en la cama lanzando un largo suspiro.

Esa noche a pesar de que durmieron separados, ambos pasaron la mejor noche del mundo. Hace mucho no dormían tan bien y ambos sabían la razón, solo que no querían aceptarla. No aún.

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