❁્᭄͜͡Ficha de Información.
ೃ࿔Pareja/s: Todoroki Shoto x lectora
ೃ࿔Personaje Principal: Momo Yaoyorozu
ೃ࿔Advertencias: -
ೃ࿔Anime/Manga/etc: Boku no hero Academy

Narrador Omnisciente.        

Nuevamente ella lo observaba, lágrimas caían por sus suaves mejillas, veía como este se estiraba los bicolores cabellos en una señal de frustración, odiaba ver a Shoto triste, odiaba verlo sufrir todas las noches, Yaoyorozu odiaba no poder hacer algo para arreglar aquella soledad en la que el mago vivía, ella odiaba que él no la amara como ella lo hacía.

—Shoto... —Lo llamó acercándose a él, era hermosa, cabellos largos negros, su piel era tan blanca, emanaba toda la pureza que poseía, sus pequeños labios; carmines y una tentación al pecado para cualquier ser, finalmente unos hermosos ojos negros. Los cuales te hacían perder en la oscuridad de la noche, todo en ella era puro y hermoso.
¿Por qué no? Si la noche era hermosa y ella era la causante de traerla. Muchos seres habían muerto por haber quedado perdidamente enamorados de la Luna, habían desaparecido por el hecho de que tan bello ser no los podía amar.

Las mejillas de Momo se pintaron de un suave color rosado, al notar como aquel hechicero no le quitaba la mirada, Todoroki desvió la mirada y soltó una pequeña disculpa.— ¿Hoy no llegará la Luna? —preguntó, la noche pronto llegaría y la azabache ahora estaba con él.

—Hoy no habrá Luna. —respondió ella, sentándose en el prado junto a él, cuidando de no pisar su vestido.— ¿Nuevamente deprimido?

—Me ahogo en la soledad, perdí a mi familia y ahora no tengo a nadie ni nada. —Nuevamente los ojos de Shoto se habían nublado de lágrimas, la noche volvía a todos vulnerables, y más aún tener a tu lado al ser que la traía.

—Eres el mejor hechicero del bosque, tienes muchos seres que te admiran, hasta te quieren, Shoto —dijo ella aún incomprendiendo los extraños sentimientos que alguien podía tener.

—Yaoyorozu, una cosa es tener poder y el cariño de admiración, otra es que te amen, que deseen pasar el resto de su vida junto a ti, no importa su alguien más se opone. —Soltó ilusionado, deseaba todas las noches poder encontrar a aquella mujer con la que deseara pasar el resto de su vida.— Yo deseo a alguien que me quiera realmente.

—Me tienes a mí —soltó la de ojos negros en un acto de imprudencia, sonrojandose nuevamente.

El mitad pelirrojo la miro y mostró una pequeña sonrisa.— Tu eres mi amiga, la única que tengo.

La pelinegra sintió su corazón estrujarse, no se sentía bien, no quería ser solo su amiga.— Algún día encontrarás a tu otra mitad. —apoyó al chico.

Sus emociones estaban mezcladas, se sentía mal por ser solo su amiga, pero se sentía feliz de ser la única, hasta ahora ella era la única mujer que quedaba en la vida de Shoto y deseaba que así quedara.

"Debes recuperar el libro de Vida y Muerte, lo resguarda un hada en lo más profundo del bosque, es sorprendente que esta todavía no haya sido perturbada con la fuerza maligna que posee aquel libro. Por eso te pedimos que lo traigas, en el santuario sera bien cuidado y liberaremos del duro trabajo a aquella hada, ella se llama ____"

Recordó las palabras de aquel rubio, el sol.
Cuando finalmente la vio quedó embobado, el hada era realmente hermosa, largos cabellos negros, ojos celestes como el cielo, era preciosa.

—¿Eres Shoto Todoroki? —preguntó y al ver que no le respondió, con un chasquido de dedos a su lado apareció una foto del bicolor.— Eres tú, Mirio me informo que debía entregarte el libro.

Cuando Shoto logro reaccionar asintió y esperó a que el hada le entregara aquel libro blanco.— Debes apresurarte, muchos seres lo anhelan para realizar cosas malas.

Segundos después de que lo entregó ambos se quedaron mirando fijamente, había algo en ellos que no dejaba que se alejaran, sin darse cuanto estaban juntando sus manos, cuando estas hicieron contacto todo a su alrededor brilló, luces y chispas aparecieron a su alrededor causando que cerraran sus ojos un momento.
Cuando los abrieron y analizaron lo sucedido sonrieron, los ojos de la joven se habían cristalizado,  y antes de darse cuenta ambos se encontraban abrazados.

"Cuando un ser mágico haga contacto físico con su Alma gemela, el ser con el que pasara el resto de su vida, todo a su alrededor brillará."

"Todoroki Shoto se a enamorado de una bella hada, dicen que es su alma gemela"

No podía creer lo que estaba sucediendo, solo había pasado una semana de aquella misión.
Una semana y ya lo había perdido, corrió, corrió hasta sentir el aura del mitad albino y cuando lo encontró su corazón terminó de romperse, él se encontraba con aquella bella hada, la estaba besando.

Lagrimas amenazaban con salir y para evitar eso desapareció de aquel lugar.
Aquella noche, la luna no salió.

Toda la madrugada derramando lágrimas, gritando y sufriendo, toda una noche había bastado para terminar de destrozar su corazón.

—La odio —había soltado pensando en ____— La odio tanto.

Los nuevos sentimientos de odio y remordimiento en aquel ser tam puro, habían logrado despertar a aquel libro, el libro que deseaba seguir corrompiendo más seres limpios.

En la segunda noche dispuesta a comenzar su ritual de llanto y sufrimiento escuchó como susurraban su nombre.

"—Yaoyorozu"

Siguió tales susurros, estos la guiaron a la habitación en la que se resguardaba aquel libro al que le habían prohibido acercarse.
Cuando estuvo frente a este alguien apareció enfrente, era ella, aquella hada a la que tanto odiaba, el ser por la cual había caído en el pecado de odiar, la mujer que se lo había robado todo.

—No te espantes, solo tú odio me ha convertido en esto, veo que realmente odias a esa hada. —habló refiriéndose a que no se trataba del mismo ser.

—¿Quién te ha traído?

—Tu lo has hecho, el libro te eligió, y tú me has hecho despertar. —Le acercó el libro a la Luna, tentandola a que lo abriera.

—No lo haré, eso, eso estaría mal.

—Niña, tu ya estás manchada con el mal, has sentido odio, envidia y desagrado hacia un ser mágico, ¡¿Qué importa todo ahora?! Ella, no... Yo te robé a tu alma gemela, yo según todos soy más hermosa que tu.
Lo único que esa hada tonta no ha hecho fue abrir este libro. Demuestra que eres mejor. —habló cegando los ojos de la azabache, el mal había obtenido lo que quería.

Como si estuviera siendo controlada abrió el libro, rápidamente este mostró una página "Como matar a las hadas"

—Quita la pagina y él será todo tuyo. —Le susurró al oído.

Momo arrancó la página, dispuesta a recuperar a Shoto, de pronto cayó al suelo soltando gritos de agonía, le dolía la cabeza.

—Ups, creo que olvidé mencionar que cuando haces un trato con el libro este te quita algo, pero tranquila, no será importante. —comentó mientras volvía a su transformación normal, un hombre mayor, ojos rojos, bastante feliz, había logrado corromper al ser más puro de todo el bosque mágico.

—¡Me lo robaste! —gritó cuando encontró al hada sola.— Me quitaste a mi alma gemela.

—¿Disculpa? —preguntó sin entender, aquella mujer era extraña, bastante oscura a su parecer, un largo vestido negro, su largo cabello tenía un tono gris, y sus ojos, completamente rojos.

—El hablaba conmigo todas las mañanas, las noches que no había luna también hablaba conmigo, yo era la única mujer en su vida, hasta que llegaste tu... y me lo robaste. —Dijo dando a entender de quien se trataba.

—¿Luna? ¿Yaoyorozu, eres tú? —preguntó quedando totalmente sorprendida por la apariencia nueva de la joven.— No me digas que abriste ese libro maldito.

—El me ha ayudado, sin ti, Todoroki podrá ser mi alma gemela. —concluyó lanzando un pequeño hechizo a la pelinegra, pronto la bella hada cayó al suelo.

—El... el libro te... te engañó,  Sho-... no será tu...-

—Egoísta —Hablo interrumpiendola.

Finalmente ____ cerró los ojos.
Finalmente el hada cayó en aquel fatal sueño de no sentir.

Pronto la voz se corrió; "La hermosa hada guardiana, ha muerto"

El mago pasaba noches y noches en vela, ya sea llorando o buscando la forma de traer de vuelta a su hermosa hada.
Por más poderoso que fuera no lo conseguía, hasta que recordo aquel libro de la vida, sin pensarlo llamó a Momo.

—¿Shoto? —preguntó ella, totalmente emocionada quizá era momento.

—Quiero el libro de vida, quiero traer de vuelta a ____ —Nuevamente el corazón de la joven se rompió. Él seguía amando a esa estúpida hada.

—No te lo daré. No la puedes traer de vuelta. —Soltó con odio, ya no aguantaba.

—¿Por qué dices eso? Ese libro puede traerla de vuelta.

—¡No puedes! ¡No puedes hacer esto! ¡Hice todo para que me amarás! —No pudo retener su furia y empezó a gritar.— ¡El libro me dijo que si la mataba tu me amarías!

—Yo nunca amaría a un ser tan oscuro. —respondió el hechicero observándola, de un momento a otra la joven había cambiado su apariencia a una totalmente oscura.

Sin aguantar más, Yaoyorozu desapareció, huiría, había hecho algo malo por nada.
Y nuevamente esas voces le hablaban: "Mátalo, él te acusará y se volverá a enamorar.
Si no es tuyo que no sea de nadie."

—Si no es mío no será de nadie... —susurró siendo controlada totalmente por el odio, ella debía matar al mago.

Las noticias volvieron a correr; "La luna traicionó al bosque, terminó con la vida del mago y su compañera de vida."

—Te dejaste controlar por el odio, y desapareciste dos seres mágicos. ¿Cuál crees que será tu castigo? —cuestiono el Sol, mirándola con tristeza.

—¿La muerte?

—No, darte muerte seria dar demasiada misericordia, querida hermana... —soltó sorprendiendola, si no era muerte que sería.— Tu castigo será la inmortalidad, vivirás siempre, conocerás a tu alma gemela y la verás morir, aún así, serás expulsada del santuario. Lamento informarte que ya no serás la luna.

Y la vio, se vio a ella misma en frente, carcajeando por su condena, había sido traicionada por ese oscuro ser, ella misma.

—Shoto... Sho —sintió como lo llamaban, abrió los ojos y entonces la vio, su hermosa hada se encontraba enfrente.

—____... —La observó con una pequeña sonrisa.

—Es hora de irnos —habló sujetando su mano y empezando a alejarse.

Sin duda un hermoso regalo de los dioses, si no se amaron en su vida, lo harían en su muerte.