Creo que nunca me había sentido tan humillada.

Son las cuatro de la mañana y estoy frente al edificio de Haerin de nuevo, siento como si un camión me hubiera atropellado y me hubiera quitado toda la dignidad de un golpe. Podría intentar ir al club de Jin excepto que ya lo hice y está cerrado por lo cual no tengo algún otro conocido que pueda ayudarme.

Si, se supone que en este momento debería estar en un hotel durmiendo o llorando por las terribles decisiones que tomo, pero resulta que por alguna razón extraña no me han dejado ingresar ni siquiera porque he dicho que tengo para pagar todo un mes de alojamiento, así que supongo que el perfil estereotipado de delincuente me ha jugado una mala pasada porque es justo lo que parezco ahora.

Estaba a punto de desistir, aún podía probar en algún otro lugar o intentar comprar algo de ropa -En un horario que no fuera plena madrugada- Cuando alguien se detuvo a mi lado.

- ¿Yunsoo? -Giro mi cabeza para ver al dueño de la voz hasta que me encuentro a Jimin- Oh si eres tú, espera ¿No me había dicho Jungkook que habías desaparecido?

-Supongo que lo hice -Digo mirando hacia mis pies-

-Bien pues ya te encontré, vamos seguro que verte lo va a tranquilizar -Hice una mueca insegura de lo que sentiría Jungkook cuando me viera-

No tuve tiempo de negarme, Jimin ya me jalaba consigo, aunque tal vez el termino jalar no es el adecuado ya que no me obligaba y de hecho su toque era muy suave, era como si me dijera que podía irme si así lo quería, pero no lo hice.

¿Cómo enfrentaría a Jungkook? ¿Qué le diría? ¿Y si me echaba? Bueno total más dignidad no podía perder, aunque dudaba que hiciera eso lo entendería totalmente si lo hiciera, me lo merecía.

Aunque tal vez debería irme, tal vez debería simplemente volver a mi pueblo natal e intentar arreglar las cosas con mi familia. Quedarse o irse resultaban un desastre por igual sin duda, aunque irme tal vez arreglaría las cosas, había tantos lugares a los que podía ir sin necesidad de abordar el barco de drama familiar, pero incluso si escogía esa opción era tarde porque ya estábamos frente a la puerta del departamento de Haerin y Jimin ya había tocado el timbre. Cuando abrieron la puerta me di cuenta de que no había querido irme, aunque había podido simplemente no había querido aceptarlo.

La cabeza de Jungkook está baja y por ello no nos ha visto, Jimin es el primero en hablar.

-Bueno ¿Quién es el mejor amigo que ha encontrado a la damisela perdida?

No sé si es la palabra "Damisela" o "Perdida" Las que hacen que Jungkook reaccione, pero levanta su cabeza y por fin me mira.

-Yunsoo -Soy consciente de como Jimin mira entre nosotros-

-Supongo que voy a entrar, los amigos no son importantes ahora -Y justo así hace, pasa por un lado de Jungkook hacia el interior del apartamento-

-Lo siento, sé que no debería estar aquí, pero... -Mis palabras se quedan en mi mente cuando el me rodea con sus brazos.

Me está abrazando ¿Cómo es posible que haya considerado irme lejos?

-Menos mal volviste -Susurra, su voz casi en mi oído-

Probablemente no iba a separase pronto -No es como que quisiera que lo hiciera- Pero alguien me arranca de sus brazos ocupando su lugar.

-Oh dios mío, sabía que no habría tenido que dejarte ir, lo supe en el momento en que me dijiste que no dijera nada ¿Estás bien? -Le sonreí a Haerin, era la primera vez en mucho tiempo que sentía la preocupación de alguien más hacia mí-

-Estoy bien, lamento haberte preocupado y volver así.

-Oh no te preocupes linda, tenerte aquí es de las mejores cosas que me han pasado este año, por mi podrías quedarte para siempre -Sonreí sintiéndome especial- Ahora mismo te haría desayuno o un té, pero voy de salida, Jimin me va a ayudar a trasladar los muebles al local, si quieres le dices a Jungkook que te lleve más tarde a conocerlo ¿Sí? -Asiento sabiendo que para ella es algo especial- ¡Jimin!

Este aparece casi de inmediato en la puerta y dándonos una mirada ambos desaparecen camino al ascensor.

-Ven, hace mucho frío -Jungkook toma mi mano y mi maleta y me lleva hasta adentro cerrando la puerta tras de nosotros-

Hace que me siente en el sofá y se lleva mi maleta hasta su cuarto.

- ¿Estás bien? -Dijo volviendo y sentándose junto a mi- ¿Que sucedió con tu... ¿Con Sunwoo?

-Solo hablamos, le dije que no quería que siguiéramos juntos porque de alguna manera él pensaba que iría con el justo después de entregar el dinero.

- ¿Y por qué no lo hiciste? -Preguntó y había algo en esa pregunta ¿Curiosidad? ¿Esperanza? Tal vez la falta de sueño me estaba haciendo delirar-

-Porque ya no era lo mismo, ya había decidido irme antes de que atacarán el apartamento solo que no tenía el valor, no quería dejarlo solo y no quería aceptar que ya no íbamos a estar juntos.

- ¿Entonces aún sientes algo por él?

No lo sé ¿Aún siento algo por él?

Realmente soy creyente de los sentimientos residuales, creo que, aunque pase el tiempo siempre sentirás algo, aunque sea el más mínimo sentimiento hacia una persona, ya sea odio, cariño, nostalgia... Estaba segura de que aún quería a Sunwoo, no podía dejar de hacerlo luego de nuestra historia, pero no lo quería de manera romántica, siempre iba a querer lo mejor para él, eso no puedo negarlo, pero ya no quería ser parte de su vida, quería verlo feliz desde la lejanía, pero no podía explicar ese sentimiento así que solo negué con la cabeza y Jungkook asintió lentamente.

-Lamento mucho haberte preocupado Jungkook es solo que, no lo sé siento que estás haciendo mucho por mí y que no me lo merezco.

-Está bien, hablaremos de eso más tarde ahora vamos, debes descansar -Me tendió la mano y la acepte para que me llevará hasta su cuarto-

Me dejó sentada en su cama y se dirigió a la ventana y la cerró.

- ¿Te puedo hacer una pregunta? -Dije cuando se quedó mirándome y asintió- ¿Por qué insistes tanto en ayudarme? Solo soy una persona cualquiera que conoces hace unas semanas y que no aporta nada interesante en tu vida, un problema en toda la regla de la palabra.

-Yunsoo ¿En verdad no lo sabes? -Lo miré y suspiré-

La verdad se me ocurrían muchas cosas, la mitad de ellas eran ridículas y la otra mitad eran imposibles por lo cual no quería decir ninguna de ellas en voz alta.

-No lo sé -Dije con voz insegura-

-Yunsoo yo... -El timbre sonó interrumpiendo lo que estaba a punto de decir, suspiró frustrado- Iré a abrir, espérame aquí ¿Sí? Seguro Haerin olvidó algo.

Asiento y el sale rápido de la habitación escucho como abre la puerta.

¿Qué estaba a punto de decirme? Tal vez que me quiere como una hermana o que es tan buena persona que no estaría tranquilo sabiendo que yo la estaba pasando mal, eso era creíble y justo una descripción muy acertada de lo que es Jeon Jungkook.

- ¿Por qué sigues evitándome? ¡No se supone que lo nuestro terminará así! -Grita una voz femenina y en seguida me doy cuenta que no es Haerin y que tal vez he escuchado la voz antes-

-Chae cálmate, son las cuatro de la mañana y Haerin tiene vecinos ¿Cómo demonios sabías que estaba aquí? -Dice Jungkook sin gritar, pero aun así lo oigo, tal vez sea porque me acerque a la puerta sin darme cuenta-

Oh, así que es esa chica.

- ¿Creías que no me iba a enterar? Llame a Haerin y aunque no me dijo que estabas aquí tampoco me dijo que no lo estabas ¿Dónde más ibas a estar si no era en tu apartamento o aquí?

- ¿Fuiste a mi apartamento de nuevo? -Preguntó sonando molesto-

-Por supuesto que fui, creí que me encontraría con esa tipa de nuevo, pero no había nadie, ella era solo una amiga ¿No? Porque si me mentiste Jeon Jungkook...

- ¿Qué vas a hacer? ¿Qué pasaría si te hubiera mentido? -Hay una tensión en los segundos de silencio que le siguen a sus preguntas- No trates de amenazarme Chae tal vez deberías recordarte a ti misma que tú y yo ya no somos nada.

- ¡Es que no lo entiendo! Claro, comprendo que te hayas desentendido de tus padres, pero ¿Por qué aquello te llevó a alejarte de mí? ¡No tiene sentido! -Gritó y lo hizo más fuerte que las veces anteriores-

-No tengo ganas de hablar de eso hoy y mucho menos a esta hora así que te voy a pedir el favor que te vayas Chae.

-Jungkook -Dijo con voz de súplica- Bien -Dijo al cabo de segundos- Me iré, pero solo si me dices que ella no significa nada.

- ¿Quien?

-La tonta muda que estaba en tu apartamento la otra noche

-No la llames tonta -Le reprochó-

-Lo que sea, solo dímelo y te dejare tranquilo, al menos por ahora.

El silencio reino por varios segundos que me pregunte si ahora estaban hablando en una voz tan baja que yo no podía escucharlos peor no oía ni un murmullo y me sorprendió lo ansiosa que estaba por saber la respuesta.

- ¿Y bien? -Dijo la chica sonando altanera y rompiendo el silencio-

-Ella no... no significa nada -Dijo por fin Jungkook-

Sentí algo extraño al escuchar sus palabras, tal vez fuera que no esperaba su respuesta o tal vez que quería una respuesta diferente, me retire de la puerta y me acerque a la cama, olvide la posición en la que había estado y simplemente me acosté en ella.

Muy poco después escuche el sonido de la puerta cerrarse y espere a que Jungkook volviera.

Esperé mucho, incluso pude ver el sol saliendo al amanecer y el aún no entraba a la habitación, me preguntaba si el encuentro con esta chica le había causado emociones que no sabía que tenía y tal vez decidió que pasar tiempo conmigo después de eso era incorrecto.

Justo cuando estaba resignada al tiempo que tendría que pasar aquí hasta que Haerin volviera la puerta se abrió, supuse que era el, no podía verlo ya que estaba con mi cuerpo de frente con la pared, pero sabía que era él.

Cerró la puerta con suavidad tal vez pensando que estaría dormida, a veces me sentía mal por no dormir, pero hoy no tenía mucha importancia, estaba tan agotada por todo el gasto energético y emocional que implicaron mis decisiones ayer que no tardaría mucho en caer dormida.

-Dices que me metes en problemas -Habló en un susurro- Pero, aunque quisiera no podría dejarte ir y a estas alturas no sé cuál de todas las cosas que he descubierto de ti hacen que me gustes más, lo siento Yunsoo.

Con un suspiro abandonó la habitación y tal vez si se hubiera quedado unos segundos más hubiera sido capaz de escuchar los fuertes latidos de mi corazón.

La última vez que el corazón me latió con tanta fuerza iba camino al hospital desangrándome y llorando, pero era lindo descubrir que con Jungkook no tenía que correr peligro para sentir que el corazón se me iba a salir del pecho, aunque podía estarme equivocando muy en el fondo sentía que esto no era un simple flechazo, era algo más y también temía estar enamorándome una vez más.

Me desperté un poco extrañada, no había sol alguno que traspasara las cortinas o me diera directo en la cara, solo la luz del día que a su vez era bastante oscuro.

Me tomó unos segundos escuchar el sonido de la lluvia, tararee con fascinación, hace tiempo no llovía y a decir verdad los días lluviosos eran mis favoritos ¿No eran los favoritos de todos los ermitaños?

De cualquier forma, puede que me haya quedado más tiempo del que creí admirando la lluvia caer por la ciudad cuando la puerta se abrió.

-Oh, ya estás despierta -Dice la voz alegre de Haerin- No sabía que podías dormir tanto.

- ¿Dormir? -Pregunte desconcertada- ¿Qué hora es?

-Mmm creo que están a punto de ser las dos, no planeaba despertarte pero Jungkook dice que debes comer y que si tienes sueño puedes dormir luego.

- ¿Dormí casi nueve horas? -Pregunte alarmada- ¿Dónde está Jungkook?

-Bueno yo diría que fueron unas ocho o tal vez siete y media y Jungkook está trabajando dijo algo de que tenía un turno muy largo o algo así ¿Quieres que te prepare algo en específico?

-No, cualquier cosa está bien -Dije muy poco emocionada, la verdad esperaba ver a Jungkook al despertar, aunque no sabía exactamente que iba a hacer al verlo-

-Te espero en el comedor -Dijo y asentí-

Me tome un minuto para respirar, pero luego todo pareció volver a tener control así que simplemente tome mi cepillo de dientes y fui al baño, incluso me peine pero aún no me sentía demasiado renovada así que simplemente arrastre los pies hasta el comedor, donde Haerin me esperaba con dos platos llenos de spaghetti y albóndigas.

- ¿Tampoco habías comido? -Dije sentándome junto a ella-

-Acabo de llegar -Dijo acercando uno de los platos hacia mí- Y no quería comer sola de todos modos -Dijo antes de llevarse el tenedor lleno de comida a la boca- Oh ¿Sabes que me dijo Jungkook? -Sonreí cuando habló con la boca llena, me hizo una seña para tragar lo que tenía en ella- Dijo algo de que querrías salir, tal vez al museo que hay cerca, aunque no soy muy fan podría acompañarte.

La mire preguntándome como decirle que no era con ella con quien quería ir exactamente.

-Entonces ¿Qué tal si hacemos algo que te guste primero?

- ¿Eh?

-Bueno la verdad no me sentiría bien si solo hiciéramos algo que a mí me interesara, pero si tienes algo en mente... -Me encogí de hombros-

-Oh Yunsoo, no sabes cuánto llevo deseando que me lo pidas, si, por supuesto que quiero ir de compras contigo.

Y así me metí en algo que no sabía que necesitaba pero que al final terminé adorando.

Al parecer Haerin era muy fan de ir a tiendas, en realidad antes de este día lo odiaba, no era exactamente el día de compras que mostraban en las películas lo que acababa pasando cuando iba con mi madre, más bien se convertía en un "Pruébate esto" "¿De verdad estás considerando esa falda?" "Oh ni siquiera lo pienses, el rojo es un color muy vulgar" Por lo cual lo único que conocía en estos casos era la impotencia y vergüenza, pero Haerin apoyo la mayoría de mis sugerencias haciendo que me las comprara, al final del día termine con cuatro vestidos nuevos, dos nuevos pantalones y camisas y tres nuevos pares de zapatos e incluso un pequeño regalo para Jungkook.

Lo único en lo que pudimos no haber coincidido fue en quien debería pagar por mi ropa, o al menos Haerin se molestó cuando llegaba a la caja y yo ya había pagado toda mi ropa, lo cierto es que había tomado algo de dinero antes de salir y me escabullía mientras ella se probaba sus prendas para pagar lo mío, de alguna manera sabía que querría pagar por mí pero ella ya me ayudaba lo suficiente y si yo podía pagarlo ¿Por qué no hacerlo?

Aún observaba su mirada de desazón mientras pasaba su tarjeta de crédito para pagar por sus cosas.

-Bien supongo que tienes razón -Dijo con un susurro- También soy orgullosa y no me gusta que me paguen mis cosas, entonces estaba pensando en que compraste muchas cosas y muy bonitas incluido ese precioso regalo para Jungkook que estoy segura que le encantara, pero es probable que no vaya al apartamento hoy así que me pregunte "¿Cuál sería la ocasión perfecta para estrenar tu ropa, verte hermosa y entregarle su regalo?" Y boom se me ocurrió que tal vez podríamos ir a el club a saludar.

- ¿Al club? -Dije insegura y Haerin asintió- ¿A saludar? -Ella volvió a asentir- Bueno...

La verdad no tenía muchos buenos recuerdos en ese lugar y a penas ayer había pasado una de las mayores vergüenzas de mi vida allí así que...

-Porfis prometo que luego haremos todo lo que tú quieras, te maquillare yo misma y te dejare pagar los tragos -Sonreí, su intento de convencerme era demasiado tierno-

Lo que Haerin no sabía es que no hacía falta intentar convencerme, si había pasado unas cuantas situaciones difíciles allí pero también habían tenido cosas buenas, como ver a Jungkook en mi primer día allí y tener un reencuentro sincero con Jin ayer, además quería ver a Jungkook porque sentía que debía verlo o algo así, bastaba con verlo de lejos o tal vez llamarlo y oír su voz pero lo que Haerin me estaba ofreciendo era demasiado tentador como para negarme.

-Bien -Le dije y ella empezó a saltar emocionada- Pero solo porque no quiero que vayas sola -Me dio una sonrisa cómplice y me jalo a la calle para conseguir un taxi-