Narrador Omnisciente.

》—Corre... tu hermano te cuidará.

Escuchaba aquella voz nuevamente, ojos rojos y sangre, siempre la misma escena.

》—Tranquila, aquí estoy yo.

Y aunque sentía calidez al ver aquellos ojos negros...

》—Tu hermano está para cuidarte.

Ella no tenia un hermano, ella no tenia familia.

—¡Tetsuya! —gritó levantándose  velozmente.
Nuevamente pesadillas, ojos carmín y muerte.
Nuevamente un castaño de ojos negros, al cual no conocía, ¿quién era Tetsuya?

Limpio el sudor de su frente, y observo por su ventana.
Quizá las seis a.m., tenia tiempo. Preparo lo necesario, no noto cuando la hora pasó velozmente.

Salía de su hogar, llenando su mochila con lo necesario, cuando estuvo por cerrar la puerta con llave recordó.

》—Felicitaremos a Kakashi con un presente cada uno.

Volvió a abrir su hogar y corrió en busca de aquel regalo. Llegaría tarde si no se apuraba.

● ● ●

—Es qué por el camino tuve que enseñarle a una anciana que llevaba una cesta...

La castaña río ante tal escusa, se colocó de pie y caminó hacia aquel par.

—Ya déjalo Kakashi, un día recompensarán a BakaObito por sus buenas acciones. —hablo mientras ayudaba al azabache a colocarse de pie.

—No seas tan blanda, Haruka —gruño el albino, no le gustaba que ella siempre defendiera a Obito, no le gustaba que siempre prefiriera al Uchiha antes que nada—, los ninjas que no siguen las reglas son solo escoria.

—Seremos escoria juntos, ¿verdad Obito? —cuestionó esta, mirando feliz a su mejor amigo.

Kakashi solo suspiró, sería una misión larga, y lo único que lo animaba, eran aquellas sonrisas de la castaña, sonrisas que no eran para él.

—Hoy Kakashi se estrena como jounin...

Y ella dejó de escuchar aquella conversación, la suave brisa le susurraba al oído causando leves escalofríos en su cuerpo.
Tenia un mal presentimiento, pero quería ignorarlo.

Volvió en sí cuando escuchó a su amigo volver a discutir con el Hatake.

—¡No te he traído nada! ¡Absolutamente nada!

Sabia que debía interponerse para evitar más gritos, los gritos la molestaban, uhg.

—¡Kakashi! —gritó ella, colocándose frente al peliblanco—, este es mi regalo, aquel día descubrí que te gusta leer, así que compré algunos que pensé te gustarían —Haru le guiño el ojo.

Kakashi se sonrojó bajo la máscara, soltando un leve y avergonzado gracias, no sabía si aquel guiño era una indirecta romántica o le decía que había descubierto su secreto, prefería mil veces la primera opción.

—¡Yo Obito Uchiha, del clan Uchiha, te superaré cuando despierte el sharingan!

Río nuevamente y trato de calmar al azabache, bajo la atenta mirada de todo su equipo.

El albino frunció el ceño, no le gustaba eso, pasase lo que pasase, ella siempre estaba ahí para Obito, hiciera lo que hiciera, Obito siempre tendría su apoyo y siempre sería así, porque Haruka Byakko estaba enamorada de Obito Uchiha, y Kakashi Hatake lo sabía, lo sabia perfectamente.

● ● ●

—Voy a romper las reglas —musitó el azabache—, si abandonar a tus compañeros significa ser un verdadero ninja, entonces aborrezco esa idea de ninja. Salvaré a Rin.

Y sin más se fue, dejándolos solos a ellos, Kakashi frunció el entrecejo y miró a la castaña;— Nosotros debemos cumplir con la misión, luego los buscaremos, vámonos.

Más aún así, ella no se movió, el jounin volteó a verla, y aunque sabía lo que diría se negaba a escuchar.

—Obito tiene razón —Siempre la tenía, cuando se trataba de ella—, siempre estaré con Obito, Kakashi. —Y siempre fue así, siempre era él.

Haruka se fue, dejándolo solo y con el corazón destrozado, nuevamente estaba Obito antes que nada, antes que la misión, antes que su vida, antes que él.

● ● ●

—¡Kakashi! —gritó emocionada y sonriente al ver a su compañero aparecer frente a ellos.

—No puedo confiar esto y la seguridad de Haruka... la... la de Rin también, a un nin-ninja llorón como tú —habló, moviendo levemente su mascara.

—Pelo blanco, chakra blanco, no puede ser... tu eres; ¡¿el colmillo blanco de Konoha?! —preguntó aquel ninja.

—Esto es un recuerdo de mi padre...

Suspiro trayéndose tranquilidad, todo saldría bien si trabajan juntos desde ahora.

—¡Obito detrás tuyo!

Corrió hacia el cuerpo de Kakashi, limpiando la sangre que caía por su ojo.
Y por primera vez ante la vista del albino, ella le presto atención a él, no importaba si era por la misión o solo le ayudaba por su ojo, él quería creer que ella lo ayudaba por voluntad propia.

—¿Algo en tu ojo otra vez? —preguntó con burla el albino—, un ninja nunca debe llorar. Aún así no voy a morirme.

Las castaña golpeo levemente a Kakashi;— Sin un ojo y sigues siendo molesto, Bakakashi.

Su interior festejó, aunque aquella forma fuera algo parecido a un insulto ella solo llamaba Baka a todo aquel que le agradaba, y ahora Kakashi se sentía feliz.

—¡Muere!

Y ante aquel grito Obito había logrado evitar el ataque.

—Protegeré a mis amigos.

Haruka quiso salir corriendo de ahí, sin querer se alejó de Obito, como si le tuviera miedo.
Ahí estaban, aquellos ojos carmín, protagonistas de sus pesadillas.

—El Sharingan.

Estuvo perdida y pensativa los siguientes minutos, solo trataba de alejarse de Obito, le tenia miedo, y Kakashi lo notó.
Todo iba bien, ayudo a Rin a levantarse, aún estaba perdida, si aquellos ojos eran del Sharingan por qué ella soñaba con esos, por qué les tenia miedo.
El Hatake pensó que se había debilitado al utilizar su chakra en el, al curarlo y ayudarlo con su ojo, no dijo nada.
Obito pensó que estaba muy preocupada por Rin, así que no dijo nada.

Todo iría bien;— Cuando terminemos todo esto... cocinaré algo para todos. —Haru trato de animar a todos, o quizá animarse a ella misma.

—¡Elemento tierra! ¡derrumbamiento de cuevas!

Todos entraron en pánico y empezaron a correr, Kakashi cayó al suelo, estaba débil después de todo, quiso acercarse a ayudarlo, pero Obito había sido más rápido.

Y de pronto... silencio.

—¿Están bien?

Soltó un grito ahogado y corrió junto al azabache, empezó a llorar.

—Te quiero dar... mi Sharingan. —volvió en si cuando lo escuchó decir ese nombre—, Haru... por favor...

Ella se negó, aún lloraba;— O-obito... no... te... te sacaremos de aquí.

Entonces Obito se dio cuenta, ella no estaba dispuesta a hacer eso, se negaba a dejar ir a su amigo.

—Rin... por favor.

Y durante todo el proceso la de ojos avellana solo lloraba y pedía disculpas, había estado tan distraída que no pudo ser de ayuda.
Había sido su culpa.

—Kakashi... cuida de ambas —el Uchiha aún mantenía viva su sonrisa.

—Obito... no me dejes, no quiero estar sola —acariciaba con delicadeza la mejilla del azabache—, no te lo he dicho aún...

—Siempre lo supe... —el albino aún lloraba en silencio, manteniéndose ajeno a toda la charla.

—Me gustas, Obito. —El corazón del que ahora poseía un Sharingan dejó de latir.

—Fue desde la primera vez que te sonreí, ¿no?, sabía que caerías.

Y entonces se dio cuenta.

—Eres un tonto, BakaObito.

Siempre habría una cosa en la que Kakashi Hatake nunca podría vencer a Obito Uchiha, por más que lo intentará, por más que lo deseara, él no podría conquistar nunca a aquella castaña.
O eso creía.

—En otra vida prometo corresponder a tiempo.

N/A: capítulo uno antes de irme a dormir.
Abxkanx.
Actualizare una vez a la semana (?), o eso intentaré, igual ahora la historia está bien cringe, prometo que mejorará cuando todos mueran :D

Milezesteesturegalodecumpleañosadelantado.👊❤