POV Jennie:

Hoy había sido un día de locos, primero, Nayeon llega de la nada y me besa y después mi profesora Lalisa estuvo a punto de tener sexo conmigo pero me lastimó.

Todo era muy confuso.

En el almuerzo, le dije todo a Rosé, desde cuándo Nayeon me besó y como tuve relaciones con nuestra profesora de inglés.
Obviamente, como toda buena amiga, me regañó en un principio.

Me dijo que ambas estábamos haciendo algo ilegal y si algo salía mal o si alguien nos descubría, todo se iría a la mierda y nuestro jueguito se convertiría en prisión.

Lamentablemente, yo le dije que estaba feliz con lo que hacíamos, así que ella decidió apoyarme, tengo suerte de tenerla como amiga.

Las clases pasaron lento, más lento de lo que me hubiera gustado.

Cuando fue hora de al fin salir, la escuela ya estaba vacía, pues me quedé en el gimnasio ayudando a mi profesor con algunas labores.

Había demorado media hora, pero no me molestaba, ya que esa clase me gustaba mucho y el profesor no era tan malo conmigo.

Salí por el estacionamiento, pues la entrada y salida principales las estaban limpiando y no quería ensuciar.

Caminaba por los pasillos llenos de autos, iba a colocarme mis audífonos, cuando de pronto escuché unos sonidos extraños, parecían quejidos o gemidos tal vez.

Inmediatamente mi mente pervertida, pensó que tal vez alguien estaba teniendo un gran momento con su pareja, pero mi otro lado dijo que tal vez podían estarle haciendo daño a alguien.

- No todo en el mundo es sexo Jennie- Pensé.

Decidí seguir los ruidos, llegué a un lugar un poco alejado donde solo había dos coches estacionados, uno azul que no reconocí y el de mi profesora. Lalisa.

Me acerqué y vi algo que me disgustó por completo, la profesora que me había quitado la virginidad, la profesora que me ató a su cama, la que se portó posesiva hace un rato conmigo, la misma que había deseado tanto tiempo estaba fajando con mi maldita profesora de artes. Kim Jisoo.

Sabía que era esa maldita, porqué Rosé estaba perdidamente enamorada de ella, siempre hablaba de ella y decía que otra vida, probablemente ya estarían casadas y con hijos.

Por alguna razón la furia me invadió, lo que vi me hizo hervir la sangre.
Lalisa estrujaba su trasero con esas grandes manos que me encantaba tener en mi cuerpo, la besaba con pasión, incluso pude ver cómo metía la lengua en la boca de esa perra.

Pude ver qué Lalisa notó mi presencia y sonrió de lado, besando con más fuerza a esa zorra.
Ahora lo entiendo todo, ella solo estaba jugando conmigo, podré ser menor pero no soy estúpida y sé que hace esto por algo.

Tosí para llamar la atención de ambas idiotas, se separaron sin inmutarse porque una alumna las vio, ¿Qué carajo les pasa?.

- Jennie, llegas justo a tiempo- Lisa limpió un hilo de saliva que salía de su boca por el beso intenso de hace unos segundos, eso me dio mucha rabia.

- ¿Para qué profesora?, Usted puede seguir haciendo lo que quiera, no le diré a nadie- Fingí una sonrisa.

- No haz entendido... Sube al auto- Entonces, ella sacó las llaves del coche, quitó el seguro y me abrió la puerta.

La profesora Kim Jisoo, subió al asiento del copiloto y solo se quedó ahí, yo miré dudosa a Lalisa, quién solo me miraba extraño y señalando que subiera al auto.

Después de unas cuantas miradas, subí dudosa.

No sabía que era todo esto o qué carajo iba a pasar, solo esperaba que fuera algo bueno.

A medida que pasaba el tiempo, me di cuenta de que el camino que tomó Lalisa, fue el camino para su casa, supuse que iríamos ahí a hablar sobre lo que vi, ¿No?.

                        ❛❛三人性愛❛❛

En el momento menos esperado, ya estaba en la habitación de Lisa, donde tenía todos sus juguetes, donde tuvimos sexo y me ató.

Ella se besaba con esa mujer, quién ya estaba desnuda, Lisa no tenía su sujetador pero si tenía su pantalón.

Para cualquier otra persona, esto sería excitante, pero no para mí, ¿Porqué?, Ni yo lo sé.

Yo solo estaba parada en una esquina, esperando a que esas dos pudieran acabar, quería irme de ahí pero Lisa cerró la puerta con llave y no pude salir, fue entonces cuando entendí que ella me estaba castigando por ese beso.

- Ven aquí- Lisa se separó de Jisoo y me ordenó ir a la cama.

Yo no sabía que hacer, ¡¿Ella quería que tuviéramos un trio?!, Eso sería muy incomodo para mí.

Por alguna razón, en mi mente pervertida, esto sería mi más grande sueños, dos mujeres hermosas junto a mi, desnudas y yo siendo la pasiva... Era como soñar en grande.
Pero yo no quería que nadie me tocara, nadie que fuera Lalisa podía tenerme y disfrutar de mi, me había planteado esa idea yo misma, ni siquiera sé porqué.

Solo obedecí, no quería que ese castigo se hiciera más grande si no obedecía, ya era suficiente con ver a mi profesora besar y tocar a mi otra profesora.

Me paré al pie de la cama, dispuesta a sentarme ahí, pero Lisa me detuvo con su voz.

- Desnúdate- Eso, más que una petición, fue una órden.

Yo lo hice dudando, pues me sentía apenada, Jisoo solo me veía y observaba mi cuerpo, cosa que me hizo sentir más vergüenza.

- Jugaremos un pequeño juego...- Se acercó a mí- Si adivinas quien te está tocando, podrás hacer todo lo que tú quieres conmigo- Acarició mi cabello, hablando muy cerca de mi cuello, cosa que me prendió- Pero, si no lo haces, yo haré todo lo que quiera contigo, ¿Te parece?- Me miró a los ojos, esa mirada penetrante me encantaba.

Yo solo asentí nerviosa.

Imaginar que ganaba y sometía a mi profesora a mis ideas más locas y perversas me hacía mojarme.

Que comienze el juego.