Caminaron tomados de la mano tranquilamente, cruzando por los bellos jardines que tenía el hotel, pasaron por unos pasillos llenos de bellas y exóticas flores buscando con ansias sombritas por todo el camino, el sol de a medio día puede hacerte sentir exhausto, mientras Sooyeon le contaba cómo sus compañeros de escuela le habían conseguido un castigo por untar el pizarrón con pastel de leche vencido cuando tenían una pijamada en el colegio, todo esto en medio de la noche, Jaeyun lo escuchaba atentamente riendo cuando Sooyung mencionaba que eran unos tontos pero los quería.

Entraron a la habitación y tomaron lo que buscaban, Jaeyun aprovechó para llevar unos bocadillos y toallas limpias para mantenerse secos a la hora de volver, así no pescarían ningún resfriado y descansarían un poco para continuar con la diversión más tarde.

Aunque estaba pensando seriamente en tirar el teléfono de Sunghoon al mar en cualquier momento. Tal vez no lo haría, solo porque prefiere evitarse la discusión que tendrían si actualmente pasará eso.

Sabía que ambos eran bastante tercos, pero por lo general Jaeyun era siempre el que doblaba su brazo a torcer por eso estaba acostumbrado a guardarse todo dentro y después explotar con la vida reclamándole porque era tan injusta con él, llorando en medio de la ducha con canciones tristes de fondo.

De regreso se encontraron al trabajador de recepción que los había atendido amablemente el día de su llegada. Conversó un poco con él agradeciéndole por su amabilidad y añadiendo que estaban teniendo un tiempo fabuloso en lo que cabe. "Al menos mis hijos se están divirtiendo" pensó.

Atravesando de nuevo el gran camino lleno de flores y palmeras que conectaba las habitaciones con la alberca se percatan qué había un gran grupo de personas en frente a la playa.

La alberca y el hotel estaban alejados de la playa, se había diseñado para que tomarás tu tiempo caminado hacia la playa disfrutando de la vista, así que se encontraban bastante lejos pero entrecerrando los ojos podían notar que las personas que estaban observando entretenidamente la playa corrían despavoridos hacia ellos además que el sonido tan característico de las olas que tanto le relajaba escuchar se había convertido en un rugir intenso causándole escalofríos.

"Que extraño, ¿será un tiburón?" Pensó. Pero rápidamente se contestó "Los tiburones no tiene piernas idiota."

"Será mejor llegar rápido con Sunghoon para averiguar que está pasando." Se dijo a sí mismo.

—Papá, ¿que es eso?

Sus pensamiento se vieron borrados por la voz temerosa de su hijo.

Volteó rápidamente hacia donde su pequeño apuntaba, no le gustó nada lo que veía.
Grandes olas acercándose peligrosamente hasta la orilla de la playa.

En su mente alarmas de todo tipo sonaron, era peligroso estar allí.

Tomo a su hijo de la mano para empezar a correr, quería llegar con desesperación con su esposo e hijo pero cuando lo vio imposible su mente solo pensó en esperar que se encontraran bien, se sintió la peor persona pero tenía que salvar al pequeño que se aferraba con todas sus fuerzas a su mano.

Puso toda su confianza en Sunghoon, tenía la esperanza que estarían bien al final del día, que su amado esposo no estaría enviando correos como maniaco y que pondría a su hijo a salvo a toda costa.

Busco unas escaleras para empezar a subir a un lugar más elevado pero desgraciadamente ya estaban muy alejados del Hotel.

La gran ola que asechaba contra sus vidas ya había llegado a sus pies dejándolos a su merced.

Lo último que pudo escuchar fue el sonido del mar para después ser arrastrado con fuerza por las olas.

Espero que les esté gustando cómo se va desarrollando, que tenga un lindo día 😊