Yoongi no haría eso

La tarde corrió con rapidez, como su estuviera emocionada porque la noche finalmente llegara. Taehyung dijo que cocinaría, ya que era su casa quería hacerlo él mismo. Cuando habló, el novio de su amigo mayor se ofreció inmediatamente a ayudarlo y junto a él, su propia amiga. Por más que quiso negarse, ninguno le hizo caso y tercamente lo siguieron hacia la cocina.

Los restantes en la sala dirigieron rápidamente su mirada hacia el mayor de los varones, quién alzó una ceja ante la repentina atención que recibió.

— Entonces, ¿desde hace cuanto tienes novio, Yoongicito? — Comenzó Hoseok, acomodando sus cabellos luego de haber estado acostado sobre la alfombra. Yoongi odiaba aquél apodo, pero estaba acostumbrado a él.

— Dentro de poco cumpliremos 10 meses — Respondió como si fuera nada.

— ¿Y lo dices así? — Pronunció Soojin ofendida ante la indiferencia de su amigo — Son 10 meses, Yoongi. Y nunca nos mencionaste nada sobre él, ¿Cómo es eso posible? — Reclamó.

En el grupo de amigos, Soojin era quién más comprendía y desentendía a Yoongi. Podía tener en cuenta qué era lo que su amigo sería capaz de hacer y lo que no, sabía perfectamente cómo reaccionaría a ciertas situaciones y a veces lograba mantenerlo lejos de incomodidades. Pero aún así, ella cuestionaba cada una de sus actitudes que mostraban insensibilidad, diciendo que debería comenzar a ser un poco más sensible, solo un poco para no dañar a nadie. Entendía la personalidad del mayor, pero no justificaba sus actitudes con aquello.

— Es mi vida privada, ¿Cuando alguna vez hablé sobre si alguien me gustaba? — Emitió, con esa impasibilidad que Soojin no toleraba — No mencioné nada porque no era necesario, incluso no creo necesario haberlo traído hasta aquí, pero él realmente quería conocerlos. Solo lo traje para hacerlo feliz — La rubia iba a quejarse, pero tuvo en cuenta sus últimas palabras.

Pronunció "para hacerlo feliz", y no "para que dejara de molestar", como seguramente diría ante cualquier situación. Su amigo realmente tenía pocos pelos en la lengua, diría la realidad sin problema alguno y no le molestaría admitir que realizó algo solo para que dejaran de estorbarle. Y escuchar de Yoongi que buscaba la felicidad de alguien más, sí era impresionante, Yoongi no lo admitiría, ni siquiera por ellos.

—¿Realmente nunca ibas a hablarnos de él o presentárnoslo? — Cuestionó luego, a lo que Yoongi negó. La rubia estaba perdiendo la paciencia.

— Ya te dije, no lo considero necesario. Es mi novio, mío, no de ustedes. No encontré necesidad de comentarlo. ¿Puedes comprender eso? Pareces ser la única que lo cuestiona — Soltó ya con cierta molestia, no le gustaba sentirse reprochado por algo que se le hacía totalmente absurdo — ¿Acaso nada te satisface? Traje a mi novio, te mostré una parte de lo que cuido, mantente feliz con eso y no hagas arrepentirme de haberlo traído.

Soojin cerró su boca, sintiéndose apenada. Su amigo había tomado la importante decisión de llevarlo y a pesar de no ser porque ellos habían deseado, lo hizo. Se los presentó y ella sólo se quejó de haberlo hecho tarde. Se sintió fatal.

— Bien, tienes razón. Lo siento, Yoongi — Se disculpó luego, dejando un ambiente tenso en la sala. Nadie se animó a hablar luego de aquello, no tenían palabras para emitir.

La incomodidad que no era conocida por ellos reinó en la sala hasta que una cabellera rosada se asomó por el umbral de la cocina. Los miró con sus labios levemente abultados, haciéndolo lucir como un patito, en su rostro se notaba la pequeña confusión. Un sonrojo casi llegó a sus mejillas al notar la mirada del grupo en él.

— Taehyung cree que es mucho silencio... — Emitió, parando su mirada sobre su novio, sus ojos eran un lugar seguro para él — ¿Está todo bien?.

— Claro que lo está — Dijo Hoseok, levantándose para dirigirse hacía él, bajo la atenta mirada de Yoongi — Es más, quedamos en silencio debido a que hablábamos de ti — Comentó, haciendo que Jimin se sorprendiera.

—¿De mí...? — Se apuntó a sí mismo.

— Lo que oyes, cielo — pronunció con su bonita sonrisa. Jung era un tipo cariñoso, adoraba llamar a todos de manera tierna, y Jimin no sería ninguna excepción. Yoongi tuvo un tic en su ojo izquierdo, puesto a que su novio en confianza sería igual que el menor.

— oh ¿y eso por qué? — preguntó con pánico.

— Porque eres maravilloso — halagó, haciendo que Jimin riera encantado — Tanto que nos dejaste sin palabras, eres tan genial — El mayor de todos dio vueltas a sus ojos, maldito genio de las palabras.

— Claro que no lo soy — dijo, riendo por lo bajo mientras negaba con su cabeza, sacudiendo su esponjoso cabello de algodón de azúcar.

— A decir verdad, no podemos estar seguros de eso, chiquito — Soltó aquel apodo, siendo que el lindo chico era un poco más bajo que él — ¿Qué te parece si te quedas con nosotros para que podamos confirmarlo? — propuso con una sonrisa amigable, recibiendo la afirmación de los restantes en la sala, curiosos por conocer al novio de su amigo.

— Oh, ¿Y Taehyung?

— Deja a Taehyung, que se las arregle solo — Habló Jungkook ahora, haciendo un gesto con sus manos para restarle importancia a lo que estuviera haciendo su mayor — Ven, ven, hablemos.

Luego de ser endulzado por un par de palabras más y de explicarle a Taehyung que se retiraría a la sala, Jimin se sentó nuevamente junto a su novio. Tomó su mano instantáneamente, siendo correspondido solo unos segundos más tarde. Los presentes en la sala sonrieron enternecidos, ocultando sus sonrisas cuando el mayor les dedicó esa típica mirada fría, que sólo él sabía usar para hacer temblar a sus amigos.

— Entonces, Jimin, ¿Qué edad tienes? — preguntó Soojin, acomodándose sobre el sillón para mirar al nombrado, mostrando verdadero interés en conocerlo.

— Tengo 24 años — Respondió y la sala quedó en silencio. El pobre chico volvió a mirar a su novio, justo como la primera vez que habló en el día. Por alguna razón, cada vez que emitía alguna información, todos parecían sorprenderse.

— ¡¿Cómo diablos... — El primero en hablar fue Jungkook — luce menos que yo?! — Cuestionó con sorpresa, sintiéndose un pedazo de mierda vieja al lado de aquél hyung.

— Oh por dios, y lo he tratado con tanta confianza — Le siguió Hoseok, llevando sus manos a sus labios con la misma sorpresa.

— ¡Luces realmente joven! ¡Creía incluso que tenía la misma edad de Hoseok! — Soltó Jisoo, y las exclamaciones de sorpresa por su edad y apariencia llenaron la sala.

Nadie podía tomarlo en serio, ¿qué comía aquel hombre para verse casi como un adolescente? Su piel estaba extremadamente bien cuidada y su cuerpo no lo hacía lucir como alguien de su edad. Casi de manera inmediata le pidieron la receta, que si bien no era de comida, necesitaban saber qué hacía para lucir de tal manera. Una charla llena de información que Yoongi ya conocía comenzó. Mientras su novio estaba concentrado hablando con sus amigos, él no hacía más que observarlo en un tranquilo silencio.

Al observarlo, tan bonito mientras hablaba, abultando sus labios y frunciendo levemente el ceño cuando tenía que dar una explicación detallada, utilizando su mano libre y la que tomaba la de su novio para acompañar sus palabras; no pudo evitar suspirar bobamente, como un tonto enamorado lo haría. Todos en la sala guardaron silencio, y Yoongi creyó que quizás había dicho en voz alta lo que cruzaba por su cabeza acerca de su lindo novio, porque lo miraron con tal sorpresa que se sintió desnudo.

— ¿A qué se debió ese suspiro? — preguntó primero Namjoon. Oh, el suspiro, pensó Yoongi sonrojándose levemente

¡Esperen! Yoongi, el mismísimo Yoongi Hyung, el que siempre tiene cara de 'voy a matarlos a todos', apodado en secreto como hielito, ¡¿Se había sonrojado?! ¡Yoongi y sonrojo nunca estuvieron en una misma oración! El suave pero notable sonrojo del mayor hizo que todos chillaran con ternura, burlándose como niños de él.

— A Yoongi le gusta Jimin~, a Yoongi le gusta Jimin~ ¡Y mucho! — exclamaban de manera infantil, haciendo que el primer nombrado se avergonzara aún más, y qué el último sonriera con adoración.

— ¿Así que le gusto mucho a mi Yoonie?~ — cuestionó tontamente, dirigiendo su mano derecha al rostro de su menor para hacer que lo mirara — A mí también me gusta mucho mi Yoonie — Dijo antes de besar tiernamente sus labios, el resto de la sala festejó.

Yoongi quería que la tierra se tragara a sus amigos, de ese modo podría recibir los besos de su lindo mayor sin que aquella banda monos los molestaran.

—Yoonie~ — Canturreó Jungkook de manera burlona, riendo a carcajadas cuando su amigo intentó matarlo con la mirada. Sería blanco de las bromas por lo que restaba del año, pero por ser gracias a Jimin, no le molestaría serlo.  

- Peach