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Ella se recostó en el asfalto, cerrando sus ojos, intentando pensar en alguna manera para que su madre no la obligara a ganar el festival deportivo de ese año.

— ¡Ahí está! — se escuchó la voz de Kendo mientras ellas mantenía sus ojos cerrados.

Con pereza, la azabache suspiró, sintiendo como alguien la tomaba en brazos:— Yo la llevaré a un lugar seguro, volveré cuando la rehén esté a salvo.— dijo Iida, corriendo velozmente, haciendo que ella se viera forzada a agarrar su cuello y enderezar su cabeza.

— ¡Espera! Debes ir más lento, se supone que fui herida por un villano, si corres igual de rápido y tienes una víctima herida y desmayada le arrancarás la cabeza en cualquier momento.— se quejó ella, haciendo que el chico se detuviese.— Debes ser cuidadoso, tu prioridad es la seguridad de los demás, atrapar al villano es importante, pero se supone que la prioridad de un héroe es la seguridad de los civiles.

— Entendido, muchas gracias por la observación, Majakutsu-san.— la mencionada asintió.— esta es la zona segura, así que te dejaré aquí y volveré con los demás a combatir al villano.

Ella asintió:— Eso, tranquilízame, dime que tienes todo bajo control y que atraparan a ese canalla.— dijo ella en forma de burla, cosa que para Shinso fue evidente, sobre todo por aquella ultima palabra, sin embargo, Iida se lo había tomado realmente enserio.

— atraparé a ese canalla, no se preocupe.— dijo él, corriendo de nuevo a la escena, donde luchó con ectoplasm junto al resto de su equipo.

Ella soltó una risa, recostándose en suelo nuevamente y esperando a que la campana que indicaba el final de la batalla sonara.

La menor observaba con aburrimiento como Nemuri se encontraba alerta ante la aparición de cualquier estudiante, siendo Shinso quien entró por la puerta principal, sorprendido al ver como Midnight se encontraba frente a él.

Lo habían usado de carnada y él no tenía ni la mínima idea de ello.

Dos golpes en la ventana detrás de la azabache hicieron que ella se girara, observando a un sonriente azabache, quien levantó su casco:— ¿Me permites rescatarte?— dijo Sero con una amplia sonrisa, extendiendo su mano hacia la azabache.

Ella sin dudarlo tomó la mano del estudiante a héroe, abrazando su cuello cuando este la tomó de la cintura, pegándola a su cuerpo, para así poder balancearse entre edificios con ayuda de sus cintas.

— ¡Yo la iba a rescatar!— se escuchó el grito de Hitoshi a la distancia, razón por la cual Sero soltó una risa.

Al llegar a la zona segura Sero la dejó delicadamente en el suelo, observándola mientras estaba colgado de cabeza:— Toda la sangre se te va a ir a la cabeza.— dijo la más baja con una sonrisa.— ¿que esperas? ¿Un beso?

Hanta levantó sus cejas repetidas veces, haciendo sonreír a la azabache, la cual golpeó su nariz con su dedo para luego alejarse:— Gracias por salvarme.— dijo ella antes de desaparecer de la vista del sonriente chico.

— Ayuda.— dijo ella, desanimada, ya estaba cansada de toda aquella tediosa situación.

— ¡Por aquí!— gritaron Kyoka y Shoji, acercándose al lugar en donde la menor se encontraba

Ella suspiró. Aquel solo era un entrenamiento de rescate por desastre natural, razón por la cual al ser encontraba y puesta en la zona segura daría paso al siguiente equipo, el pilar sobre ella fue destruido, haciendo que el polvo y las pequeñas rocas cayeran sobre ella.

— ¿Estas bien? ¿Estas herida? ¿Te llevó a la enfermería?— preguntó Izuku con evidente preocupación.— déjame revisarte, si es que me lo permites, no es que quiera tocarte, pero no es porque no quiera, o sea, solo quiero ver si estás bien, estoy seguro que...

— Izuku, al grano.— dijo la azabache con una sonrisa, haciendo que el peliverde asintiera.

Los balbuceos de Izuku eran lindos, hasta cierto punto, después de todo ella estaba lo suficientemente irritada como para patearle el trasero a Katsuki en batalla. Cosa que sería fácil para ella, después de todo, toda su vida había entrenado en combate.

— Midoriya.— dijo Hiryu, acercándose al mencionado y, por ende, a la supuesta víctima.— aseguramos el perímetro, no hay señales de villanos, podemos llevar a la chica a la zona segura.

— Claro.— dijo él con una sonrisa, sonrojándose al tenerla en sus brazos.— con permiso.

Su sonrojo era evidente, cosa que, en cierta manera, a Majakutsu le pareció tierno.

— Encontramos...— dijo Kyoka, llegando a la escena y observando con un sonrojo a la preciosa chica en brazos de Izuku.

Le faltaban un zapato, no tenía su corbata, su camisa estaba casi trasparente gracias sal agua que había caído en su camisa y su falda estaba ligeramente levantada gracias al agarre de Izuku:— Encontramos su zapato.— susurró la de cabellos cortos, sonrojada.

Ella con cuidado y timidez se acercó, colocando el zapato en el pie de la azabache, observando después sus hermosos ojos negros, perdiéndose en la galaxia que Kyoka había encontrado en ellos.

— Jirou-san, llevaremos a Majakutsu a la zona segura, necesitamos que Shoji y tu nos avisen de algún derrumbe.— interrumpió Midoriya aquel momento, alejándose, usando sus particularidad para saltar por los aires.

— Claro.— dijo ella, volviendo a la realidad.

Con fuerza, ________ se sostuvo de una gran viga, evitando caerse por completo de aquel derrumbe:— ¡Ya vamos! Espera por tu príncipe.— gritó Monoma a la distancia.

— ¡Yo soy su príncipe!— exclamó Denki.

Ella estaba irritada:— ¡Me quedaré con Bakugo si siguen así!— Gritó ella, sosteniéndose como podía.

— ¿En serio?— preguntó el rubio con la cejas levantadas.— ¡Nadie quiere estar contigo maldita fea!

En aquel momento hubo un silencio sepulcral, después de todo, era hoy más que obvio que ni siquiera el mismísimo Katsuki Bakugo podía resistirse a los encantadores rasgos de la de orbes ónix, haciendo que todos de inmediato lo miraran mal, haciéndolo dudar de sus propias palabras.

— Como sea, yo...— cuando Denki iba a dar un paso para ayudar a su novia a subir y apartarse de aquel peligrosos lugar, no hizo más que resbalarse y hacerla caer.— ¡_______!

Antes de que ella pudiera estar siquiera un centímetro lejos del derrumbe Katsuki ya la había atrapado, teniendo, sin intención, su rostro entre los pechos de esta, después de todo necesitaba sus manos b. U. Hoy para elevarse en el aire y ella había decy cidido agarrase de su cuello.

— Con que si te intereso...— en aquel momento, ante tales palabras dichas por Majakutsu, Katsuki Bakugo se sonrojó, dejando un punto rojo en la camisa de la femenina gracias al pequeño hilo se sangre qué bajó por su nariz.

— Cállate.— dijo él, sonrojado.

— Esto no me parece muy seguro, señorita Midnight.— dijo la azabache, agarrando el brazo de la mencionada con fuerza.

Ellas se encontraban en la punta de un edificio de once pisos, aquel ejercicio era algo realmente exasperante para ella, con precaución ella se asomó. Cuando la de ojos ónix observó la gran caída su corazón se aceleró y comenzó a sentir la falta de aire en sus pulmones.

Tenía vértigo.

— por favor, vámonos.— dijo ella.

Si bien, usualmente estaba en edificios de mucha más altura, e incluso había saltado de ellos, tenía una herramienta importante a su disposición, su particularidad, no la usaba, pero podía confiar plenamente en ella para salar su vida. Dada la situación actual ella no podía exponer su quirk al público, por lo menos no hasta el festival deportivo, sería algo extraño si ella supiera cómo salvarse de una caída de cuarenta y un meteos.

Aunque pronto tendría que demostrar sus habilidades, aún no era el momento.

Lo peor de la situación era que su vértigo era causado por su poca confianza en los héroes, ¿como podría confiar en una persona que corre por la vida con un traje ridículo?, claro, no todos poseían uno de esos, algunos se veían realmente bien, pero, de igual manera, en su opinión los héroes no eran omnipotentes, hay situaciones que se salían de su control, y, por ello, no todos ejercerían su profesión a la perfección, siendo así como, la gran mayoría de héroes, por lo menos tendrían a una persona que no pudieron salvar.

¿Por que tendría que ser ella una de esas per
Aunque realmente no entendía su poca eficiencia, después de todo ella solía realizar su trabajo de la manera más pulcra y perfecta posible, su frase favorita era: "si no vas a hacer algo bien, mejor no lo hagas." Misma frase que sacó en su madre.

Akira era realmente buena diciendo frases de madre.

— Este es el último entrenamiento, no te preocupes, no dejaré que te pase nada.— dijo la heroina con una sonrisa, cosa que evidentemente no disipó la preocupación de la menor.

Solo fue suficiente un pequeño temblor de simulación para ella comenzara a caer en picada desde el último piso del edificio. Él gritó estruendoso de Midnight, quien no tenía forma de salvarla, hizo que casi se le rompieran los tímpanos.

— Por lo menos ya no tendré que madrugar.— susurró para su misma, siento como una viento frío le hacía estremecer el cuerpo.

Con rapidez inhumana Shoto había creado un largo puente de hielo hacia la azabache, caminando en este y atrapándola, cargándola de forma nupcial. La respiración del azabache era jadeante, después de todo había tenido que reaccionar muy rápido para evitar que el cuerpo de la chica diera contra el asfalto.

Ella suspiró, aliviada, mientras el Todoroki sentía el corazón en la garganta:— Tenemos que dejar de encontrarnos así.— dijo ella, abrazando el cuello del mitad mitad.

— Yo caí de un árbol, tú de un edificio de once pisos.— dijo él, con el ceño fruncido, sintiendo como ella temblaba ante los disparos de miedo y adrenalina que recorrían su cuerpo.

— Detalles.— dijo ella, restándole importancia.— ¿cómo está nuestro gatito?

Shoto suspiró, con su usual semblante serio, la observó:— Mal, casi pierde a su madre.— aquel regaño a ella realmente le sobraba.

— ¿Ya le pusiste nombre?— el más alto asintió.

— Big bang Andromeda Supernova Sonic.— respondió él, seriamente.

Ella soltó una risa, algo temblorosa, cosa que él mitad pelirrojo notó:— entiendo los primeros tres, pero, ¿por qué Sonic?— preguntó ella, jugando un poco con los cabellos del más alto, provocando que sus mejillas se sonrojaran un poco.

— Mi hermano mayor lo estaba viendo en la televisión mientras comía soba.— respondió, desviando la mirada y llegando a la zona segura, donde los esperaban los maestros y estudiantes de ambas clases.

— !¿estás bien?!— preguntó Denki al unísono con Hitoshi mientras corrían hacia la azabache, quien aún seguía en brazos de Shoto.

— Estoy bien, pero, quiero ir a la enfermería.— dijo ella, observando a Shoto con una sonrisa, quien la dejó en el suelo, cosa que no duró mucho, ya que sus piernas temblaron y casi cae, de no ser porque el hijo de Endeavor fue más rápido.

Aquello había sido a propósito, después de todo, quería pasar más tiempo con alguno de los miembros de su "sagrada trinidad."

— Te llevaré a la enfermería.— dijo Shoto por lo bajo, tomando la mano de la más baja para darle algo en que apoyarse antes de cargarla en brazos.

Denki colocó su mano en el hombro de chico, quien lo observó, inexpresivo:— Gracias, Todoroki, yo la llevaré.— con recelo, él mencionado apartó la mano de Denki, tomando a la chica en brazos sin importar la opinión de su novio.

— No puedes ni con tu vida, tampoco vas a poder cargar a tu novia.— se burló Katsuki, acercándose a la escena junto a Kirishima e Izuku, quien se encontraba preocupado por la azabache, a la cual Hitoshi revisaba, en busca de alguna herida.

Ella puso los ojos en blanco:— Creo que lo mejor será llevarla a la enfermería lo más pronto posible, puedo hacerlo, claro, si a Kaminari no le importa.— dijo Izuku con nerviosismo.

— ¿Estás bien?— preguntó Ochako, acercándose junto a Kyoka y Momo, quienes demostraban poseer la misma preocupación.

— Si.— dijo ella con una ligera sonrisa, mientras que Aizawa, quien observaba desde un par de metros de distancia, notó cómo su mano temblaba, haciendo que creyera que esto había sido provocando por el miedo.

Aunque ella era quien provocaba esa acción.

— Solo esto algo nerviosa.— dijo ella, para luego ocultar su rostro en el cuello de Shoto, quien se sonrojó ante aquella acción, dejando la discusión de lado y limitándose a intentar escabullirse con la azabache en brazos.

— !¿A donde vas, bastardo mitad mitad?!— gritó Katsuki al descubrir infraganti al mencionado, intentando llevarse a la novia de Denki en brazos.

Ella suspiró, agotada:— ¡Hermana!— Los ángeles hicieron soñar las campanas del cielo cuando ella escuchó la voz de su hermano menor mientras este se acercaba con preocupación hacia ella.

La azabache suspiró mientras sonreía:— Kota.— dijo ella con una sonrisa, cosa que dejó bajo su embrujo a varias personas, entre ellas, su hermano.

— ¿qué pasó? Tenía una hora libre y fui a visitarte a tu salón, pero tus amigas me dijeron que estabas aquí.— dijo él, preocupado, acercándose a la azabache mientras Shoto la colocaba en el suelo de mala gana, pero, con suma delicadeza.

Cosa que Kotaro aprovechó para tomarla en brazos rápidamente.

— No es nada, Kotaro, por favor, llévame a la enfermería.— dijo ella, escondiendo su sonriente rostro en el cuello de su hermano, cosa que provocó que este se sonrojara y comenzara a caminar lejos, apretando el cuerpo de su hermana contra el suyo mientras esta abrazaba su cuello.

Hola ¿cómo están?

Espero que bien, yo, más o menos.

Algunos se habrán dado cuenta que actualizo un día si y otro no xd

Cosa que puede variar, realmente :3

Capítulo corto y normal, para poder desarrollar un poco las relaciones y agregar a dos hermosos azabaches al harem.

Espero les haya gustado mucho, no olviden dejarme su opinión.

Gracias por leer.🥀