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Una abejita seguro me quiere picar, me iré de aquí cantando y bailando. tarararará. jKskdkdf

leve smut (chaelisa/rosé:top, lisa: bottom), 2 g!p

si no les gusta ese tipo de contenido, puedes leer la otra mitad del capítulo que es más soft.

Jennie abrió los ojos, despertando por el ruido de gruñidos y agitadas respiraciones que sacudieron a su omega, estirándose como una gatita antes de ver lo que sucedía.

Roseanne y Lalisa peleaban, ambas forcejeando entre ellas para girar a la otra y tomar un momentáneo control, para después volver a girar sobre el colchón en busca de dominar. Jennie se quedó levemente sorprendida, porque ambas cachorras estaban desnudas, sus pupilas dilatas de excitación y sus aromas fuertes soltando feromonas que podrían embriagarlo en cualquier momento.

Se quedó ahí, a un lado de ellas casi pegada a la pared observando la manera en que poco a poco la pelea parecía apaciguarse; al menos esa vez, Roseanne logró colocarse encima, entre las piernas de Lalisa, sosteniéndole con firmeza con sus manos encima de la cabeza de la de flequillo, su boca atacando el cuello para inmovilizarla, donde mordió con levedad en una advertencia de permanecer quieta. Lalisa no luchó más, con el pecho subiendo y bajando con rapidez, puños apretados y ojos cerrados, dejando que la alfa mayor dominara esa vez. La rubia balanceó sus caderas, haciendo que sus erecciones sensibles se acariciaran entre sí, arrancando gruñidos de ambas.

Por supuesto, ninguna se había corrido mientras ayudaban a la omega, por lo que Jennie dedujo que buscaban liberarse entre ellas sin molestarla a ella mientras dormía. Sonrió con labios cerrados, sintiéndose extrañamente caliente ante la escena frente a sus ojos; Manobal gemía en suspiros y jadeos, mientras Park solo gruñía y siseaba, moviendo sus cadera para intensificar el contacto entre la húmeda piel de sus miembros. Incluso liberó las muñecas de la menor, solo para rodear su cuello con una mano sin hacer real presión, la alfa menor aferrándose a los hombros ajenos. Las manos de la rubia se deslizaban después en caricias por las firmes piernas de la menor, apretándolas entre sus dedos hasta dejar suaves rojeces.

Entonces, mientras Park comenzaba a repartir besos por el cuello de la alfa bajo ella y sostenía ambas piernas para mantenerlas levemente alzadas, sus embestidas tomando velocidad, Manonal arqueó la espalda y apretó los dientes ante el orgasmo que le recorrió el vientre. El nudo se infló, tiras blancas de semen manchándole el abdomen. Park le siguió poco después, ambos nudos moliéndose juntos un momento antes de quedarse quietas, dejando que sus liberaciones terminaran. Roseanne se refugió en su cuello, su cuerpo dejándose descansar sobre la alfa menor, quien no se quejó por ello, en realidad gimió bajito porque todavía seguía sensible y el fuerte aroma de la cafeína tostada estaba haciendo estragos en su loba.

— Eso fue... interesante... —Jennie habló, sorprendiéndolas. Roseanne se alzó sosteniéndose con sus manos a los costados de la cabeza de Lalisa, aunque no se quitó, ambas mirándole con expresiones agitadas y aliviadas— ¿pueden hacerlo de nuevo?

Lalisa se rió, negando divertida, una sonrisa floja. — ¿Es un nuevo fetiche?

— Uhm... disfruté verlas, así que... probablemente lo sea —la omega gateó un poco hasta colocarse al lado de Manobal, besándole la mejilla con cariño—. ¿Estás bien, bebé?

Y Lalisa asintió, sabiendo a qué se refería. Había perdido esa pelea, que aunque no hubo penetración, su alfa se vio sometido ante la loba de Roseanne. Pudo haber sido doloroso, en otras circunstancias, pero ambas lo querían y de alguna manera el ardor que le recorrió no se sintió mal. Fue como fuego, una llamarada que quemó por dentro hasta apaciguarse y dejar interesantes cosquilleos deliciosos. Su alfa aceptó la derrota permitiendo que otra alfa le dominara, disfrutándolo completamente.

Una sensación interesante que definitivamente querría volver a tener.

— Lo siento —de todas maneras, Roseanne se disculpó y acarició su cuello, donde había raspado con sus incisivos durante la advertencia
—. No fue profundo, se irá rápido y no te dejará secuelas.

La alfa menor asintió, despreocupada.

— Estoy cansada...

— Iré por agua y paños para limpiarnos —la rubia saltó de la cama, corriendo desnuda hasta llegar al baño, dejándolas solas.

Jennie rió enternecida por la preocupación, maravillada por la dualidad que desempeñó. Hace unos momentos, esa alfa que corría apresurada en busca de mimar y atender, con una mueca nerviosa y ojos grandes brillando preocupados, también había sido esa alfa que gruñía amenazante, mirando con ojos profundos y manos fuertes que encarcelaban a la alfa menor, siendo una completa dominante que incluso ella misma había sentido un cosquilleo en su vientre bajo.

Divertida, hace un momento parecía ser una poderosa alfa que te hacía temblar las rodillas, y en esos instantes volvía a ser una cachorrita que te provocaba sonrisas cargadas de ternura.

— Gracias otra vez, por estar aquí —Jennie habló después de pasar la comida por su garganta, mirando a las cachorritas frente a ella que comían también.

Las tres ya vestidas y aseadas, en el comedor de la casa Kim ya pasada la tarde, llegando la noche. Después de un agitado día y con la omega ya más tranquila y cuerda al su celo bajar, se dispusieron a salir de la habitación para tomar un aire menos inundado de feromonas excitadas. Ninguna había querido cocinar, por lo que ordenaron pollo frito a domicilio que no tardó demasiado en llegar.

— Estaremos para ti unnie —Lalisa apenas pronunció bien al su boca estar un poco llena.

Jennie les sonrió, dejando la pieza de carne en el plato para tomarse el refresco del vaso, pensando bien lo siguiente que diría. Había estado pensando sobre ello después de que su mente se tranquilizara de todas las hormonas del celo, por lo que decidió que ese era el momento en que hablarían seriamente sobre lo que tenían. No más atrasos, no más huidas, tendría que afrontarlo ahí mismo.

— Ustedes... ¿de verdad me quieren?

Ambas cachorras asintieron sin pensárselo ni un segundo, fue una respuesta inmediata, con sus mejillas llenas como una ardilla, viéndose adorables.

— No... como omega.

Ladeando la cabeza curiosas, compartieron una rápida mirada, antes de que la mayor de ambas alfas contestara: — Te queremos como omega, unnie.

— Nos gustas.

Jennie movió los labios en una mueca, su corazón latiendo fuerte.

— Ustedes... ¿me harán elegir? ¿Tengo que hacerlo? —ante la negativa de ambas, se sintió un poco menos tensa, pero todavía estaba nerviosa.

— unnie, nosotras ya lo hablamos —Roseanne sostuvo la mano de Lalisa sobre la mesa, llamando la atención de Jennie—. Te queremos como nuestra omega y queremos que nos dejes ser tus alfas.

De acuerdo, eso no se lo había esperado. Quizás lo pensó como una posibilidad, pero escucharlo directamente de ellas era hasta sorpresivo. Y por ello sonrió, sintiéndose feliz, su omega relajada. Pudo haber sido mucho más complicado, ellas pudieron haberle hecho elegir en otra situación, pero en vez de ello le ofrecían ambos ser sus alfas. Dos alfas.

— Puede que sea difícil, pero creo que no perdemos nada si lo intentamos. Yo te quiero unnie, y quiero a Rosé también, ¿por qué no?

— Sé que no nos quieres hacer daño, sé que te preocupaba tener que poner a una sobre otra, pero no es necesario si las tres estamos de acuerdo.

— En tu celo no buscaste a solo una, nos buscaste a las dos, llamabas a ambas y exigías atención de ambas. Tu omega lo quiere, pero falta que tú lo quieras también.

— ¿Quieres ser nuestra omega? Seremos tus alfas, si tú aceptas ser nuestra omega.

Jennie parpadeó varias veces, sus ojos intercalando entre ambas, su corazón latiendo menos nervioso y su omega feliz. Una sensación de orgullo se instaló, porque aunque ante sus ojos seguían siendo un par de cachorritas, lo cierto es que:

— ¿Cuándo crecieron tanto y comenzaron a comportarse como alfas maduras? —una risa risueña que se escuchó bonita para ambas, sonriéndoles de esa forma encantadora que dejaba alterado sus corazones— Quiero ser su omega... y quiero que ambas sean mis alfas.

Si las tres lobas estaban de acuerdo, ¿por qué complicarse más?

gracias por leer (*´˘'*)♡