❝𝐂𝐚𝐫𝐭𝐚𝐬 𝐚 𝐥𝐚 𝐧𝐨𝐯𝐢𝐚 𝐝𝐞 𝐦𝐢 𝐞𝐱❞
Kang Seulgi, mejor a amiga de Jisoo y Lalisa cuando fueron a primaria, la mayor de todas desde esas edades siempre fue muy olvidadiza y la amistad inició el día del cumpleaños número diez de Jisoo, donde invitó a todos sus compañeros de escuela, menos a Kang, había olvidado su nombre y no pudo dar su carta de invitación por pena de poner otro nombre que no era.
Seulgi fué molestada en la escuela por ser la única no invitada a la fiesta de la niña más popular de allí. Pero muy enojada Jisoo al darse cuenta del acoso la defendió junto a Lalisa.
Hicieron una pequeña fiesta con la niña.
Aunque Jisoo fuera tan pequeña siempre fué muy justa, entonces al pasar aquello hizo una pequeña fiesta con su mejor amiga y con la chica de cabellos castaños. Era una muy simple pero desde esa pequeña fiesta que no traía un regalo muy grande se hizo un gran lazo.
Kang le dio a Jisoo de presente una pulsera con un símbolo de una pieza. Igual a la que llevaba la misma Seulgi en su muñeca.
Seulgi de pequeña esperó el cumpleaños de la tailandesa y le dio otra. Las tres tenían esas pulseras y al salir de la escuela juraron no separarse. Cosa que no se pudo, Lalisa y Jisoo fueron al mismo colegio, pero la de flequillo se retraso un año y en ese tiempo Kim se empezó a apartar por otras amistades del mismo nivel. La menor de las tres, Seulgi, vivía en la residencia de su madre pero tras la muerte de ésta a causa de una enfermedad, fué llevaba de inmediato a la casa de su padre.
Entró en una gran depresión cuando su mamá murió, pero no podía llorar, su padre era un alcohólico y aunque jamás la llegó a tocar, se molestaba mucho cuando la chica lloraba por su madre. Lo único que hacía él con Seulgi es que la mandaba y traía de la escuela mientras en la sala lloraba con una cerveza en la mano. Un mal pasado talvez.
Nunca le prestó atención a la pequeña. Talvez era porque el hombre era una persona muy triste, y se aferraba al alcohol para jamás desahogarse con su niña.
La amaba pero le era imposible acercarse.
Y eso a la pequeña Seulgi le afectó, le faltaba mucho cariño.
Una vez el hombre llegó a la casa con una sonrisa de oreja a oreja, había conseguido un trabajo más estable y en lo primero que pensó fué en llevar a Seulgi al cine. Las cosas mejoraron, el trabajo del hombre era en una fábrica de chocolates. La misma donde trabajaba el papá de Jennie.
Cuando salía del colegio, siempre se iba a la fábrica para hacerle compañía a su padre, y siempre que iba, había una joven algo menor que ella que también visitaba la fábrica. Un día se acercó a la chica y se hicieron amigas.
Kang se enamoró más de ella cada vez que la veía.
Pero Seulgi conoció a Roseanne en sus tiempos de adolescencia y ella fué la primera persona en darse cuenta de la relación de Jennie y la más alta. Las recibió con mucho amor y apoyo pero por dentro se sintió destrozada.
Se alejó tan rápido como pudo de la vida de Jennie.
Tiempo después, la curiosidad la consumía, quería volver a encontrarse con Jisoo y Lalisa. Ahorró mucho tiempo pequeñas monedas, ya que su padre no tenía auto y eran pocos los centavos que le daba ya que todo era para los gastos de la casa. Para variar quedaba muy lejos a la institución de las chicas.
Una vez lo logró.
Le robó a una anciana su billetera.
Pero tal cosa en parte llegó a ser su mayor pesar, la señora tuvo un ataque cardíaco cuando le apuntó con una botella por la espalda haciéndola pensar que era un arma. Murió por su culpa pero no hizo más que escapar tan rápido como pudo y tomar el tren.
Temblaba sentada en un asiento del tren y quizó que todo fuera un sueño, pero a las horas cuando el tren se detuvo frente a esa institución se dio cuenta de lo que hizo y se quedó estática por unos segundos.
Pero, dio un paso adelante y se quedó afuera de la institución buscando con la mirada a alguna de sus amigas.
A la salida, se encontró con Lalisa, quien la abrazó muy fuertemente, pero cuando preguntó por Jisoo, está le respondió que no habían vuelto a hablar y que siquiera se dignaba a mirarla. Le dio un vuelco en el corazón cuando al lado de Manoban pasó Kim mirándola con desprecio. Sabía que era a Lalisa quien miraba así, pero le dolió mucho que la mayor siquiera la había reconocido, y si lo hizo, no se acercó sólo para mantenerse en alto y no dar mala impresión acercándose a la de flequillo.
Entonces pensó, en simplemente hacer lo mismo que hizo con Jennie, apartarse y no volver. Intentar salirse de sus vidas rápidamente sin dejar rastro alguno.
Gracias por leer 💕
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro