La noche había pasado entre tragos, besos por parte de las parejas y un enojado Yoongi observando como Taemin y Jimin reían abrazándose cariñosamente, habían terminado de ver la película y todos decidieron ir a sus casas, ya que se estaba haciendo muy tarde.
                   
– ¡Adiós, Descansen! – habló Jin saliendo junto con Namjoon.
                   
– Sí, descansen, nos vemos. – habló Jungkook sosteniendo a su Omega en brazos el cual había caído dormido poco antes de que terminara la película.
                   
– Adiós Jiminnie, adiós Yoongi, descansen. ㅡhabló Taemin tomando su chaqueta para poco después salir de la casa.
                   
Jimin fue hasta la cocina y sirvió un vaso de agua, poco después Yoongi entró y lo observó con sus brazos cruzados desde una esquina, con una cara seria y aparentemente enojada.
                   
– ¿Qué? – habló Jimin dejando el vaso sobre el mesón.
                   
– ¿Me podrías decir que mierda te traes con el tal Taemin? – habló Yoongi con un tono de voz serio y brusco.

– ¿Vuelves con el tema? Ya te lo dije, no te lo diré, no te incumbe. – habló Jimin pasando a un lado del Alfa.
                   
Yoongi tomó a Jimin del brazo y apegó su espalda contra la pared, Jimin intentó soltarse, pero Yoongi tomó sus manos y las puso a amabas arriba de su cabeza.
                   
– Sí, me interesa ¿Sabes por qué? – Jimin lo observaba fijamente sin ningún tipo de emoción en su rostro.

»– Porque tú, mi lindo Omega, mi lindo esposo, me importas, porque me gustas, no sabes cuánto me gustas, me encantas Jimin y ese chico en verdad me tiene con los nervios de punta, ver como te toca, te besa la frente, como te abraza, mi Alfa está desesperado y en parte yo también. Pero si estás con él en algún tipo de relación... – sus palabras quedaron en el aire en el momento en el que Jimin tomó sus labios.

Yoongi soltó sus manos y Jimin enredo sus brazos alrededor del cuello de Yoongi, el último mencionado tomo su cintura mientras profundizaba el beso y pedía permiso para irrumpir en la boca del contrario con su lengua, Jimin le dio paso sin rechistar, sus lenguas estaban en una batalla, sus salivas se mezclaban y escurrían por la comisura de sus labios, Yoongi mordió el labio de Jimin, este gruñó y se separó del beso.
                   
Con la respiración agitada Jimin habló–. ¿Tienes miedo Alfa? – sonrió acariciando la nuca de Yoongi – ¿Por qué no me demuestras que tú eres mejor que cualquier otro?
                   
Eso bastó para que Yoongi tomara nuevamente sus labios con los propios, tomó los muslos de Jimin y este inmediatamente acomodó sus piernas alrededor de la cintura del Alfa.
                   
Jimin pudo sentir la erección de Yoongi por sobre la ropa, lo tomó aún más fuerte de la cuello e intensificó el beso, sus besos estaban llenos de deseo y pasión, ambos se deseaban, ya no podían soportarlo más.
                   
– Ah~ Yoongi, hazme tuyo Alfa. – habló Jimin moviendo un poco sus caderas, creando una deliciosa fricción entre sus miembros, ambos completamente duros.
                   
Yoongi bajó a Jimin y lo tomó de la mano, subieron corriendo hasta la habitación principal donde dormía Jimin.
                   
Yoongi empujó a Jimin a la cama sin una pizca de delicadeza, tomó su camiseta y se la quitó dejando ver su bien marcado abdomen y su firme pecho, Jimin se deleitaba con la vista desde la cama.
                   
– ¿Quieres que te haga mío? – habló Yoongi subiéndose a la cama metiéndose entre las piernas del Omega.
                   
– Oh Yoongi ¿En serio preguntas? – habló Jimin intentando poner su mano sobre el abdomen del Alfa.
                   
Yoongi le dio un manotazo inmediatamente.

– No me tocarás, no aún, este será tu castigo por ponerme celoso. – habló firme Yoongi viendo como el pantalón de Jimin se mojaba poco a poco.
        
Jimin mordió su labio inferior, le encantaba que Yoongi fuera tan dominante y sexy.

– ¿Puedo sacarme la ropa Alfa? – habló con un puchero en sus labios el Omega.

Yoongi quitó la camiseta y el pantalón, dejandolo solamente en boxers–. Oh, mierda Jimin, estás lubricando tanto, mi lindo Omega. –Yoongi llevó sus labios hasta el cuello de Jimin, dejando varias marcas, así todos sabrían que ese lindo Omega ya tenía dueño.

– Mgh~ – Jimin abría cada vez más sus piernas sintiendo el duro miembro de Yoongi rozando contra su trasero, su lubricante salía a chorros, necesitaba a Yoongi, se sentía tan caliente, tan excitado tan... Necesitado.

– ¡Yoongi, ah~! – el Omega fue interrumpido por el Alfa, el cual estaba totalmente concentrado lamiendo y chupando su pezón derecho, mientras con su mano retorcía y jugaba con el otro.

Jimin apretaba la almohada bajo su cabeza, sacaba pequeños gemidos cosa que a Yoongi no le gustaba, él quería oír a Jimin, quería que se quedara sin voz por gritar su nombre toda la noche.

– Gime para mí Omega~ – habló Yoongi al oído de Jimin bajando el boxer del último mencionado.

Esa fue la gota que derramó el vaso, Jimin dejó salir un gemido alto, estaba tan excitado y Yoongi solo rozaba su cuerpo cada vez que se movía para cambiar de un lugar a otro.

Yoongi mordía con un poco de fuerza el pezón izquierdo de Jimin, el cual no paraba de gemir y arquear su espalda.

– ¡Y-Yoongi, Ah! Mierda, quiero tocarte, quiero besarte, quiero lamer cada parte de ti Alfa, por favor, te necesito. – habló Jimin con sus ojos brillosos y llenos de deseo.

Yoongi lo pensó un poco, se alejó de los pequeños botones rosados del Omega y habló. – Te dejaré tocarme, pero primero jugaremos un poco.

[...]

Yoongi terminó de sacar el boxer del Omega, empezó a hacer un camino de besos desde sus pezones hasta llegar a su cintura, acarició con las yemas de sus dedos la linda cintura de Jimin, levantó su mirada encontrándose con la del Omega, el cual se encontraba mordiendo su labio inferior observando cada movimiento del Alfa.

Yoongi se levantó un poco dedicándole una mirada a las hermosas piernas gruesas de Jimin, pasó sus dedos delicadamente por las la piel del Omega ignorando su erección goteante y el como lubricaba a chorros mojando sus piernas y parte de las sabanas.

Yoongi trazó nuevamente un camino de besos, solo que esta vez, desde las lindas piernas de su Omega, fue subiendo hasta llegar a la ingle derecha y dejar marcas allí, marcas que solo él podría ver.

– ¡Mhmg~ Yoongi Oh~! Sí~ Mierda, Yoongi. – Jimin tomó la cabeza de Yoongi con fuerza empujándolo hacia su goteante erección.

Yoongi se dedicaba a dar pequeñas lamidas a la punta rojiza del miembro del Omega, bajó un poco hasta llegar a sus testículos, comenzó succionando uno deleitándose con los altos gemidos de Jimin pidiendo por más, pasado un rato empezó a succionar el otro, mientras masajeaba y apretaba con su mano el anteriormente estimulado.

– ¡Santa mierda! Yoongi. – Jimin cubrió su boca, estaba siendo muy escandaloso.

Yoongi decidió dejar el miembro goteante de su Omega de lado, y centrarse en su pequeña y rosada entrada, dirigió su cabeza hasta la entrada del Omega, su lubricante salía a chorros y desprendía su delicioso aroma, menta fresca con canela, pudo recordar el día en el que lo conoció y por primera vez se embriagaba con un olor tan delicioso.

Sin más, dirigió su lengua hasta al pequeña entrada, comenzando a succionar para tomar del delicioso sabor del lubricante natural de Jimin.

– ¡Yoongi, Ah~! Sí, Alfa, más, mhgm~ más! – habló (gritó) Jimin tomando de la cabeza a Yoongi y empujándolo para que su lengua entrara mucho más profundo, sentía como la lengua de Yoongi tocaba sus paredes anales y si es que es posible lubricaba aún más.

Yoongi disfrutaba de la deliciosa escencia que Jimin desprendía, además de sus altos gemidos, su Omega estaba disfrutando y eso le encantaba.

La habitación estaba inundada con sus aromas mezclados y ambos cuerpos en la cama sudados y jadeantes.

Yoongi decidió salir de entre las piernas del Omega, le sorprendía que aún no se había corrido, decidió quitar sus únicas prendas para así quedar completamente desnudo y a disposición de su Omega.

Jimin observó nuevamente el gran miembro de Yoongi, pudo sentir como se le hacía agua la boca, quería volver a tener ese gran pedazo de carne en su boca, levantó la mirada encontrándose con la hambrienta del Alfa.

– ¿Qué es lo que quieres bebé? – habló Yoongi con un tono seductor en su voz, tocando la parte de atrás del cabello de su Omega el cual estaba totalmente mojado por el sudor.

– Quiero que metas tu pene en mi entrada, ya no lo soporto más. – habló Jimin directo, su voz agitada y su pecho subiendo y bajando rápidamente.