
ᑕᗩᑭí丅ᑌᒪᗝ #43
Todos salieron de la habitación. Jimin se queda cerca de Jungkook, lo toma de la mano para mantenerlo tranquilo y frente a ellos... Chin-Hwa, con una cara triste; exactamente así se le veía.
—Quiero hablar sobre la torre —fue el primero en hablar—, no sé cuándo volveré, no hasta que el doctor decida, y quiero que estés a cargo, al menos hasta mi regreso. De la mafia no te preocupes, Taemin está a cargo, Nam también ayudará, junto con mis Coperegime.
Chin-Hwa estaba listo para hablar; solo quería que estén las cosas mejor entre ellos, aunque sabía que no todo se arregla y sana de la noche a la mañana, pero esperaba que la madre luna lo ayude en esta ocasión.
—Cachorro, sé que en estos 28 años que tienes de vida, nunca te he dicho cuánto te amo, cuánto significas en mi vida. Al verte a punto de morir, me hizo darme cuenta de muchas cosas. También ese hermoso omega que tienes a tu lado me hizo recapacitar de muchas cosas. Quiero que estemos unidos, que recuperemos el tiempo perdido, que sepas que es mejor tarde que nunca para compartir con mi hijo más tiempo. Quiero decirte que quiero comprar tu casa, quiero estar cerca de ti, trabajar contigo, ayudarte y, tan pronto me den un nieto, disfrutármelo completo. Te amo, Jungkook. ¡Perdóname, JK! —comienza a llorar abrazándolo.
Jungkook estaba completamente asombrado, no sabía qué decir, no podía negar que su corazón latía a mil por hora.
—¿Hablas en serio, papá? —sin dejar de mirarlo.
—Yo fui, soy y seré un hijo de puta, recto, estricto, lo que sea, pero no tengo por qué mentirte, cachorro, me llegas a dejar solo en este mundo y moría contigo. No me hagas esto más, ¡por favor! Jimin, cuídalo mucho y sabes que te acepto como mi otro hijo; eres el omega ideal para mi hijo, de los buenos quedan pocos —sonríe—. ¿Qué dices, me vendes la casa? ¿Me aceptas ayudarte con la minera? ¿Me amas aún? —mirando a su hijo.
—El JKBOSS estaba incrédulo, pero es normal, después de todo—. Bueno, creeré en todo cuando vea acciones, perdón por ser así... pero durante muchos años quise esto; ahora, a estas alturas de mi vida, ya es cosa de ver para realmente creer. Son mi familia, porque pese a todo, ¡los amo! Pero soy como me criaron —mirándolo—. Sí, claro, la casa la puedes coger, no te preocupes. Acepto tu ayuda, también.
—mirándolo—. Sé que es mi culpa, trátame como lo sientas, cachorro —resignado—. Entiendo que seas así y seas lo que se te dijo, ¡lo siento! Y bueno, la casa cuesta $10 millones según lo que tasa, ¿ese es su precio? —piensa—. Ya mañana ocupo tu lugar en la torre, no hay problema, dejé todo listo en mi empresa y ya busqué a quien me sustituya. Iré solo de vez en cuando a supervisar que todo esté bien. Jimin, mañana, ¿puedes acompañarme a la torre por unas horas?
—No te estoy vendiendo la casa, papá, tómala y listo —mirándolo con seriedad—. Y claro, ve a la torre y, si pasa algo, me avisas.
—Claro, señor Jeon —Jimin contesta.
—Mirándolo—. ¿Estás hablando en serio, JK?
Chin-Hwa estaba sorprendido; le daba gusto que a su hijo aún le quedara corazón. En parte, Jungkook quiere tenerlos cerca.
—Gracias, cachorro, gracias por regalarnos la casa —reparación de su alma—. Bueno, me iré ahora para New South Wales, buscaré ropa y veré cuándo podemos mudarnos —lo abraza—. Te amo, hijo, y espero que entre más cerca, más las cosas cambien —le da un beso en la frente—. ¡Gracias, Jimin!
—Por supuesto, no voy a vendértela, ya está limpia y disponible para ser habitada —todavía no puede hablar como si nada con su padre—. Yo también espero que las cosas cambien.
—¡De nada, señor Jeon! —se limita a decirle a su suegro.
—El día que me digas "te amo", porque me lo he merecido, ¡ese día muero en paz, hijo mío! —lo abraza—. ¡Gracias por la casa, la disfrutaremos cerca de ti! —le sonríe—. Nos vemos mañana, JK, espero que te encuentren bien y puedas irte a casa.
—Gracias por tus buenos deseos, y te agradezco el que quieras cambiar las cosas ahora, ¡nunca es tarde!
—Haré hasta lo imposible para recuperar el tiempo contigo, cachorro, nunca es tarde y yo te amo demasiado —le sonríe—. Le diré a tu mamá y a Pao para que se despidan, ¿sí? ¡Te veo mañana! Nos vemos, Jimin. —Sale.
Chin-Hwa salió y su omega y su hija entraron a la habitación.
—Mi bebé hermoso, nos vemos mañana, ¿sí? Y piensa mucho en todo lo que tu papá te ha dicho, es valioso, ¡eh! —le daba un beso dulce en la frente. JK amó los besos de sus padres en silencio.
—Hermano, nos vemos mañana; debes darme trabajito en la torre también —sonríe—. ¡Te amo, mi loco! —Lo abraza y le da besos en toda la cara—. ¿Cuñis, piensas que haya un puesto en la torre para mí?
—Lo pensaré, Pao, si mi alfa me deja. —Jimin se ríe.
—Lo pensaré, Pao, no te preocupes. Cuídense, señora de mi alma, las amo a las dos —le dice JK sinceramente.
—No vemos, mi amor. Nos vemos mañana, Minnie —se despide de los dos.
—Piénsenlo, ¡eh! No es que se quede en el pensamiento y ya —se ríe—. ¡Nos vemos, chicos! —también se despiden y salen.
Poco a poco los demás se fueron despidiéndose hasta el otro día.
Era miércoles, 12 de marzo de 2025.
Jimin había bañado a Jungkook, por si acaso lo daban de alta. Se disponen los dos a desayunar; como a eso de las 10:00 a. m. llegó el Dr. Ross.
—¡Buen día! ¿Cómo se portó el paciente ayer y cómo se levantó hoy? —sonríe—. ¡Hola, Jimin!
—Loco por irme a casa, pero me siento mejor... —JK contestó primero que todo.
—Me imagino que estás loco por ir a casa; puede ser que te vayas hoy —lo revisaba—. Sabes que eres un sobreviviente de la fiebre amarilla, por lo tanto, se adquiere una inmunidad que dura toda la vida, así que no te preocupes por tenerla de nuevo —sonríe—. Los análisis que te hice ayer presentan buenos cambios, veo que has mejorado mucho —hacía anotaciones—. Te enviaré a casa, pero, escucha bien, 2 meses en tu casa descansando, nada de trabajo y de perder noches; te veré 4 semanas corridas a ver cómo evolucionas, ¿ok? Lo único que te daré son 4 inyecciones más de vitamina C y K.
—Ok, dos meses sin trabajo, nada de desvelarme, 4 semanas corridas viéndome y 4 inyecciones de vitamina C y K. No hay problema —se repitió para que a él mismo no se le olvide.
—Muy bien que lo haya comprendido. Así que Jimin me ayudarás para que siga mis indicaciones al pie de la letra, ¿verdad? —sonríe—. Ahora daré la orden para que se puedan ir antes del mediodía, ¿ok? ¿Y bueno, alguna duda o pregunta?
—Claro que lo haré, doctor, no se preocupe. —Jimin estaba feliz de saber que su alfa estaba bien.
—Para nada, doctor, muchas gracias por todo lo que hizo por mí y traerme a la vida nuevamente. Se lo agradezco y más a la diosa luna por darle el conocimiento.
—No me den las gracias, aquí la diosa luna me alumbró el camino para saber lo que debíamos hacer. Íbamos a un mundo desconocido, pero lo logramos y te tenemos aquí. ¡Cuídate! Y nos vemos en una semana. Nos vemos, Jimin, Jungkook, tu omega sí que es un campeón —sonríe—. En unos minutos la enfermera vendrá a quitarte los sueros. ¿Tienen a alguien que te ponga las inyecciones en casa?
—Le agradezco, igual, doctor. Ok, aquí esperamos —piensa—. Bueno, tengo a mi omega; podrían explicarle a él y él me la puede poner.
—De nada, Jungkook, yo estoy muy feliz de que hayas mejorado de esta forma. Tú tuviste las 3 etapas y casi nadie sobrevive; fuiste un guerrero, sabíamos que tenías a alguien que ya depende de ti —sonríe—. Bueno, yo le diré a la enfermera que cuando venga le explique, ¿ok? ¡Nos vemos! —
—Claro que depende de mí, como yo de él —sonríe—, y eso fue mi mayor fuerza. Nos vemos y gracias de nuevo.
—No tengo duda de eso, hacen bonita pareja. Cuídense ambos —sonríe y sale.
—WoOhOo, voy a irme, por fin! —emocionado, celebraba—. Dame besos, ¿sí? Mmmm, aunque sé que no podré hacerte el amor, ¡jum! —cruzándose de brazos—. Baby, quiero pasear y almorzar antes de llegar a casa.
—Si quieres pasear y almorzar afuera, perfecto, baby —le daba muchos besos—, haremos todo lo que quieras, menos hacer el amor —Jimin se ríe—. Y en casita te hago la cena, ¿sí?
—Mmmm, qué ricos esos besos —los besos de Jimin le dan muchos años de vida—. ¿Tú me besabas cuando estaba en coma? ¿Me bañabas, me hablabas? —mirándolo.
Jimin buscaba la ropa para que Jungkook pudiera bañarse y salir lo más decente del hospital; aprovechaba también para acomodar todo, que los guardaespaldas se fueran llevando todo y que se iba a poner él también.
El omega estaba loco por salir corriendo de allí, ya que eso quería decir que no iba a perder el amor de su vida, por lo menos, no de la fiebre amarilla.
—El alfa estaba realmente feliz—. Y sí, quiero pasear y almorzar fuera, es que quiero ver el mundo, siento que volví a vivir y quiero estar seguro —piensa—. De cena quiero algo rico, como solo tú sabes hacer.
—Claro, mi amor, cuando estabas dormidito, te daba muchos besos, te bañaba, te acariciaba —sonríe—, te hablaba mucho también —seguía empacando—. Por supuesto, te haré algo rico como sé —besitos.
—Sonríe y lo miraba—. Mmmm, ¿por qué eres así conmigo, mi amor? Yo no creo ser tan buena persona para merecerlo —no dejaba de mirarlo—. Mimi, ¿puedo preguntar algo sobre nuestro bebé que no nació? —piensa—. Quiero estar en casa ya para que me consientan.
—Jungkook, yo no hago las cosas porque alguien es bueno o malo; las cosas se hacen por amor —mirándolo—. ¿Tú en mi posición qué hubieras hecho?
—Pues, hubiera hecho lo mismo, no me hubiera movido de tu lado, te estuviera acariciando, besando, hablando —se rasca la cabeza—. ¡Sé que es por amor, lo siento! —mirándolo—. Mmmm, y no me dijiste si puedo preguntarte algo de nuestro bebé. ¡Si no quieres hablar de eso, te entiendo! —resopla—. ¿Me ayudas a vestir?
—¿Ves? Aparte de que te amo, Koo-Koo, métete en la cabeza que siempre haré la diferencia a lo que pudieron haber hecho tus ex —sonríe y le pone la ropa en la cama—. Ah, sí, claro, puedes preguntar...
Jungkook estaba buscando las palabras correctas para hablar sobre su cachorro. No quería incomodar a Jimin, ni hacerlo llorar. Pero sentía la necesidad de saber cómo se siente su omega y protegerlo.
—Mi amor, yo te amo mucho más y quiero que los días que esté en casa te quedes conmigo y me cuides, ¿sí? —sonríe—. Me haces muy feliz, sé que eres el mejor omega del mundo, con el que quiero morir, pero de viejitos —le tiraba besos, romántico él—. Mmmm, cuando perdiste al cachorro, ¿qué pensaste? ¿Te dolió la pérdida, o cuáles fueron tus sentimientos? —Jimin comienza a ayudarlo a vestir.
—Koo-Koo, iremos a nuestra casa a pasarla muy bien, a cuidarte y mimarte —sonríe—. Yo también quiero vivir contigo siempre. —Le da un besito y sigue pensando en el cachorro—. Sí me dolió, no sabía de mi estado, tenía 5 semanas. Me preocupé mucho que pensaras que fue mi intención perderlo, ¿entiendes? —terminaba de vestirlo.
—Nunca me pasó por la mente que lo hayas perdido con intención, porque yo confío en tu amor, sé que existe —piensa—. 5 semanas ya era mucho tiempo; entonces, quedaste embarazado al principio de irnos de vacaciones, quizás en Suiza —mirándolo—. Creo que con esta pérdida he cambiado mucho mi manera de pensar, he reflexionado y sé que anhelabas este cachorro. Lo siento mucho, mi amor, espero que pronto podamos tener otro —sonríe—. Pero ¿estás bien? ¿Esto no tiene consecuencias?
—¡Por supuesto! —sonríe—. Pero me preocupaba que lo pensaras, por lo que hizo la loca —piensa—. No estaba tan grande, amor, solo era un mes y una semanita; aún parecía una bolita —le daba nostalgia—. No te preocupes, está todo bien, solo tengo que cuidarme mucho.
—Sonríe y lo abraza fuerte—. No, mi amor, tú jamás eres como la loca, yo sé que tú no te sacarías un cachorro nuestro, ¡eh! Así que no pienses así, ¿ok? Mmmm, parecía bolita, una bella bolita —le quería dar ánimos—. Sí, nos cuidaremos mucho, para después poder tener uno nuestro y que llegue a decirme papá. Te juro que en ese momento me mata y cambio por completo.
El alfa mafioso estaba en su momento de confesiones. Jimin sintió más ganas de llorar, pero de emoción, porque creía que nunca Jungkook iba a querer tener cachorros y ahora, quería uno que le dijera papá.
En ese emotivo momento, Jimin recibe una llamada: era Paolee.
—Mimi, Paolee llama, dile que ya me voy a la casa y qué hicieron, que, si se mudaron, ¿sí? Iré al baño, ¿será que me puedo parar solo y no me voy de lado? —se ríe.
—Lo sé, mi amor, y gracias por pensar así de mí —sonríe—. Claro que puedes, mi amor, inténtalo —le ayudó.
Jungkook, con un poco de ayuda, lo hizo, se levantó solo y fue al baño. Entonces, Jimin le contestó a Paolee la llamada.
—¡Hola!
—¡Hola, cuñis! ¿Cómo amaneció JK? ¿Qué le han dicho?
Jimin le contó que Jungkook ya podía irse a casa, todo lo que le dijo el doctor y que ya estaba caminando solo por la habitación.
Paolee le agradeció a Jimin todo lo que ha hecho por Jungkook, que también lo hace feliz. Pues sonríe, es feliz, disfruta la vida con su omega, que le cambió la vida. La familia del alfa estaba llena de felicidad por eso.
Además de eso, también hablaron de la mudanza; parece que ya está materializándose muy bien. Iba viento en popa.
—¿Estarán toda la tarde fuera de la casa? Minnie, ¿puedo preguntarte algo de Taemin aquí entre nos? —Paolee rompe el hielo sobre Taemin.
—No, solo almorzaremos y vamos a pasear, pero Koo-Koo debe descansar. —Le extrañó la pregunta—. ¿Qué pasó con Taemin?
—Resopla—. ¿Él es feliz con su Omega? ¿Él lo ama y ama a su hijo?
—Bueno, según él, dice que, si lo ama y es feliz, ama a su hijo, eso sin duda alguna... pero ¿por qué lo preguntas? Pao, eres joven, puedes buscarte algo mejor. Taemin y su omega tendrán una difícil separación.
—Mmmm, me imaginé que Taemin ama a su omega y a su hijo —resopla—. No, no, nada, no te preocupes. Solo pregunté por los días que me fue de mucho apoyo, pero eso ya no importa —piensa—. Pensaba en irme a estudiar a Estados Unidos; creo que necesito olvidarme de él y encontrar otro amor, ¿no crees?
—Pao, vivir sola en lugares que no conoces y que tú misma nunca has visto la vida, no es fácil. Quédate en un lugar donde puedas defenderte.
—Tienes razón, Jimin, creo que tendré que bregar con esto, como lo hice, así que ya sabré qué hacer. Te dejo y, gracias por tus consejos, nos vemos en la noche, ¿sí? Cuida a mi hermano. ¿Tú seguirás trabajando?
—Claro, Pao, para eso estamos. Nos vemos en la noche, ¿ok? Sí, yo seguiré trabajando lo más que pueda.
—Gracias, eres una persona muy linda. Sí, iremos en la noche, y haces chocolate caliente con quesito como lo sabes hacer. Oh, ok, pero estarás fuera del trabajo en lo que JK esté fuera, ¿o no? —piensa.
—¡Ya vine solito, mi amor! —JK sonríe y se sienta en la silla a esperar que vengan por él.
—Gracias por eso, y tú también eres excelente omega. Sí, sí estaré fuera cuidando a tu hermano, pero si tengo que ir, voy si es importante. Pero nada, te dejo, nos vemos en la noche.
—Gracias, y gracias a la diosa luna por darme un cuñis genial. ¡Chao, se cuidan! —cuelga.
—Mimi, recoge todo para irnos, ya quiero, fiummmm, irme —se ríe—. Amor, ¿qué has hecho con lo de la boda? ¿Aún no te has decidido?
—Claro, mi amor, recogeré todo. ¿Baby, cómo iba a pensar en boda con todo esto? —recogiéndolo todo.
—Bueno, sé que no era el momento para pensar, pero antes de yo enfermarme, ¿no pensaste o no lo consideraste? No sé si es pronto o puede ser este año. Dime al menos qué podría pasar, ¿no? ¡Es que eso me tiene preocupado! —resopla—. Si me das una esperanza, juro que no pregunto más y te dejo hacer lo que quieras cuando quieras, ¿sí? —se rascaba la cabeza.
Cuando estaban en esa conversación importante, entra la enfermera que llega a quitarle el suero a Jungkook para poder irse.
—Permiso, ¿a quién le enseñaré a aplicar una inyección intramuscular? —sonríe y Jungkook molestó porque él quería que Jimin le respondiera.
—Tranquilo Koo-Koo, claro que se hará la boda —sonríe, tranquilizándolo—. A mí me enseñará, por favor —mirando a la enfermera.
—¡Bueno, es fácil! Hay varios lugares donde se pueden aplicar estas inyecciones, muslos, glúteos, caderas y parte superior del brazo, pero como el paciente aquí presente tiene unas inyecciones bastantes dolorosas, te recomiendo que se los apliques en los glúteos, te haré una completa demostración, ¿ok?
Hizo que Jungkook se levantara de la silla y bajara un poco el pantalón mostrando su glúteo.
—Comenzamos: Lávese las manos con agua y jabón y séquelas bien; póngase guantes si es necesario. Paso #1: Abra la toallita con alcohol. Limpie el área en donde planea aplicar la inyección. Deje que se seque. No toque el área hasta que aplique la inyección. Paso #2: Prepara la aguja. Sostenga la jeringa con la mano que escribe y jale la cubierta con la otra mano. Coloque la jeringa entre el dedo pulgar y el índice. Deje el cilindro de la jeringa en el dedo medio.
La enfermera le hacía la presentación en vivo; Jungkook no sabía que en serio le iban a poner una inyección en su cola.
—Paso #3: Sostenga la piel alrededor de donde vaya a aplicar la inyección. Presione y jale cuidadosamente la piel con su mano libre para que el glúteo se tense un poco. Paso #4: Introduzca la aguja en el músculo. Sostenga el cilindro de la jeringa fuertemente y use la muñeca para inyectar la aguja en la piel y en el músculo en un ángulo de 90 grados.
Jungkook gritó, porque nunca se esperó el pinchazo en la cola; estaba más enojado que cuando la enfermera los interrumpió.
—Paso #5: Revise la aguja. Suelte la piel con la otra mano. Sostenga la jeringa para que apunte directamente. Jale el émbolo un poco para asegurarse de que no toque un vaso sanguíneo. Si sale sangre, retire la aguja inmediatamente. No inyecte el medicamento. Deseche la jeringa y el medicamento. Ponga medicamento nuevo en una jeringa nueva. Cuando usted vaya a aplicar la segunda inyección, hágalo en el otro lado. Paso #6: Inyecte el medicamento. Empuje el émbolo para inyectar el medicamento. No fuerce el medicamento empujando fuertemente. Algunos medicamentos provocan dolor. Usted puede inyectar el medicamento lentamente para reducir el dolor. Paso #7: Retire la aguja. Una vez que se inyecta el medicamento, retire la aguja en el mismo ángulo en que se introdujo. Coloque una gaza en el área en donde se aplicó la inyección. Listo, ¿alguna pregunta o duda? —se sonríe.
—La próxima vez, avise que va a poner la inyección, ¡carajo! ¡Y esta SÍ DUELE! —molesto.
—Mirándola—. Claro, vi todo muy bien, no se preocupe. Todo es aséptico y en el glúteo, que es mejor —Jimin, muy seguro.
—¡Exactamente, muy buen estudiante! Y es todo, señorito, no se queje, ¡eh! Ya se va —sonríe y Jungkook la miraba con ganas de matarla—. Aquí está el alta; ahora vendrán a buscarlo para bajarlo. Si tú quieres, ve haciendo los trámites de los papeles antes de que lo bajen y sales rápido de eso.
—Yo me voy contigo, ¡eh! —miraba a Jimin, ya estaba insoportable.
—Ok, yo haré eso ahora para irnos rápido, enfermera —mirando a su alfa—. Espérame aquí, baby, ¿sí?
—Yo espero que me vengan a buscar y bajo hasta allá; tú no subas, que después nos tardamos más. ¡Quiero irme, tengo hambre de comida de verdad! —molesto.
—Yo le informo a la enfermera que lo busque, que te lo baje allá, así que buscas tu carro y lo esperas a la salida para que se vayan más rápido; él está como desesperado —mirándolo.
—Ok, pues haga eso, será de mucha ayuda.
—Claro, vaya tranquilo —la enfermera le sonríe a Jimin.
—Que sea rápido todo, ya me quiero largar —odioso el JKBOSS.
Jimin fue a la recepción para dar la orden del alta de Jungkook.
Luego le avisó a Zorro que trajera el auto de su alfa y lo esperó a la salida.
Jungkook llegó con la enfermera y se fueron de inmediato.
Cuando iban de camino...
¡Hola Roommates!
Espero que todo esté bien y la estén pasando felices ʕ • ́؈ • ̀)
Aquí tenemos un nuevo capítulo, delen mucho amor, espero que lo disfruten y no se olviden regalarme ★'s y comentar que tal les pareció.
¡Hasta el próximo capítulo!
XOXO♥ ᒍOᗩᑎ
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro