
ᑕᗩᑭí丅ᑌᒪᗝ #42
Cuando Jimin despertó por completo y estuvo bien en tiempo y espacio, miró a Jungkook.
—¡Mi amor! —se levantó rápido—. ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes?
Jungkook sonríe al verlo y rápidamente pone carácter; ni enfermo se le quita lo JKBOSS.
—¿Qué hacías dormido, ah? ¿No se supone que estás cuidándome? ¡¡Jum!! —mirándolo—. Bueno, siento que he dormido una vida entera, ¡me duelen los huesos! —resopla—. Mmmm, ¿qué me pasó? Pensaba que estaba en casa, pero ya veo que no. ¿Cuánto llevo ya aquí?
—Llegamos aquí hace como 7 u 8 días —sonríe, abrazándolo—. Bueno, el que te cuide, no significa que no pueda dormir —pone los ojos en blanco—. Estuviste en coma, mi amor, y ya has despertado. Han hecho mucho para que estuvieras bien.
—Se estira un poco—. ¿7 u 8 días? Rayos, ¿tanto tiempo? —asombrado—. ¿Y no me dieron comida? Porque tengo mucha hambre, me comería un steak de esos que tú haces, con una papita asada, unas zanahorias hervidas con salsa ranch, mmmm —se lo saboreaba todo—. Eso de estar en coma es crítico, ¡no vuelvo! —se ríe—. Ya estoy bien y me puedo ir a casa, ¿o aún tengo la cosa, esa amarilla que no me acuerdo? —piensa—. ¿Y has estado solito todos estos días aquí, mi amor?
Es normal que Jungkook haga preguntas; no sabe lo que ha pasado, su condición de salud ha superado una muerte segura.
—Mmmm, no tanto tiempo, mi amor —sonríe—. Pero te prometo que cuando salgas te consiento, ¿sí? Iré a avisar que despertaste, ¿ok? —le daba besos—. Te amo y gracias por volver.
Jungkook agarró a Jimin de su camisa para que no se fuera y lo acercó a darle besos.
—No quiero que te vayas, mi amor —sonríe—. Quiero irme, dile al doctor que me mande a casa, ¿sí? Necesito que me consientan y estar en una cama más cómoda; esta es una mierda —molesto —. Yo te amo más y gracias por cuidarme —besitos—, ¿será que ya no me muero? —se ríe con picardía.
—Mi amor, necesito avisar para que te revisen, no me hagas berrinches ahora, te prometo quedarme cerca de ti, ¿ok? —Le da un beso en la frente—. Te amo y no te pasará nada, porque me enojo, ¡JUM! Ya vuelvo, espérame. —Sale.
Jimin salió de la habitación para avisar que Jungkook, al fin, se había despertado. Rápidamente, vino el personal de salud. Quienes cuidaron al alfa en todo momento le hicieron análisis para ver su mejora.
Más tarde le dieron la primera comida líquida por boca y Jimin lo bañó. A eso de las 3:00 p.m. sacaron a Jungkook de cuidados intensivos y lo pusieron en una habitación regular. Ya todos pudieron verlo al mismo tiempo y estaban muy felices de que estuviera fuera de peligro.
A las 5:00 p.m. Jimin fue a comprar algo de comer para él y subir con Jungkook, que no dejaba que se moviera ni un solo minuto de su lado, cuando se encuentra con Chin-Hwa.
—Jimin, ¿podemos hablar un momento antes de que vuelvas con JK? —mirándolo.
—Ajá, dígame, señor —con seriedad.
—No me trates de señor, Jimin, tú sabes bien quién soy, soy el papá del alfa que amas y que me gustaría que me llamaras suegro. —Mirándolo, Jimin no se le rió en la cara de puro milagro—. Desde que JK se fue en coma y tú perdiste a mi nieto, me puse a pensar en muchas cosas. Me sirvió de mucho que me dijeras todo lo que me dijiste cuando llegué al hospital y siento mucha culpa que ya no vayas a tener a mi nieto, pero no sé si es demasiado tarde para decirle un te amo a mi hijo, no sé si sea tarde para decirle que es lo más importante para mí —seguía mirándolo a los ojos—. Gracias por cuidarlo desde ese primer momento, Jimin, gracias por amarlo —superdolido y sincero el señor, como nunca el omega lo había escuchado.
—Eso, usted se dará cuenta, como su hijo lo trate. No sienta cambios cuando nunca lo vio de usted. Y, por favor, le pediría que nunca mencione lo del bebé —firme.
—Serio—. Me duele escuchar eso de ti. No quiero saber lo peor; que me sentiré escucharlo o sentirlo de mi hijo. Sé que no lo traté de la mejor forma en toda la vida, pero yo lo amo y es lo más importante. No pido que sea un cambio de hoy para mañana, pero te hago saber lo que siento por él para que le digas y lo ayudes a ver las cosas de otra forma. Es un favor que te pido —seguía insistiendo—. Y, ¿por qué no le vas a mencionar lo del bebé? Es una pregunta nada más; si no quieres, no lo mencionaré.
—Debió pensarlo cuando tuvo a su hijo en brazos. Yo trataré de hacerlo, pero no obligaré a Jungkook a hacer algo que no quiere. El cambio es de usted, hágalo notar —mirándolo—. No es que no quiera decirle, es mi alfa y lo merece, pero no quiero darle otro dolor, otra pérdida de un bebé —se le hizo un nudo en la garganta.
—Asombrado—. ¿Otra pérdida de un bebé? —no entendía—. ¿Habías tenido otro aborto? — mirándolo—. Sí, sé que debí pensarlo y darme cuenta de cuando lo tuve en brazos, de cuando lo llevé al kinder, de cuando lo vi en su primera graduación, cuando lo vi cumplir 15 años, cuando lo vi graduarse de la preparatoria, cuando heredó todo lo de mi padre y de mi abuelo, todo lo mío, pero sé que nunca es tarde. Y no quiero que para nada lo obligues, solo quiero la ayuda que me puedas brindar. ¡Y desde hace días trabajo en mi cambio, Jimin, te lo juro! —se escucha muy sincero.
—No, yo no, fue Cecilia la que se sacó un bebé de Jungkook de 4 meses de gestación —mirándolo—. Está bien que jure, señor, pero que no sea en vano; demuéstreselo a su hijo.
—Sorprendido—. ¿Cecilia, la chica de Victoria, la ex de JK? Madre Luna, un bebé de 4 meses de gestación, ¿en qué carajo estaba pensando? —Saber eso lo desconcertó—. Wow, es que no lo puedo creer —piensa—. Jimin, no juraré en vano, quiero tener una mejor relación con mi hijo, ayudarlo en la torre; yo sé que Taemin lo ayuda en lo otro, se enferma mucho y necesita descansar. Y se lo demostraré, solo que necesito un poco de ayuda —le faltaba arrodillarse—. Por cierto, ¿aún tiene la casa de la King Charles Drive, la que vivían ustedes antes? Ya supe que le vendieron la otra a Namjoon.
—Sí, esa y otras son las razones por las cuales Jungkook no quiere saber de ella —piensa—. Esa casa de que usted habla todavía mi alfa la tiene. Quiero que lo escuche y me entienda. Señor, cuando intenté ayudarlo con todo este problema del amor de su familia, me dijeron un par de cosas hasta llegar a donde llegué. Ya no haré nada más. Eso debe hacerlo usted y que él se dé cuenta.
—No lo sabía, nunca me había enterado de que ella estuviera embarazada —sorprendido—. Y tú, ¿cómo te sientes de tu pérdida? —le pregunta con mucha empatía—. Quiero comprarla, quiero estar cerca de él y ayudarlo en la torre, así que cuando se ponga mejor me reuniré con él y hablaremos sobre eso. Ahora quisiera la llave de la casa, ¿me ayudarías con eso? —mirándolo—. No te preocupes, trataré de hacerlo y que él se dé cuenta. Gracias por tu esfuerzo, Jimin, eres el mejor omega que ha tenido JK a pesar de la diferencia de edad —resopla.
—Algunas lágrimas escaparon de sus pequeños ojos—. Me siento muy triste, solo quisiera que me devolvieran a mi bebé. Cuánto quisiera que Koo-Koo lo supiera y me dijera que todo va a estar bien —puchero y sorbía por la nariz—. Mire, señor, qué va a saber sobre la vida de Jungkook si usted ni se había indignado a saber más allá de su hijo —mirándolo serio—. La llave está en la casa y la tiene Rosalía. Yo le diré dónde la tiene, pero lo haré con el permiso de mi alfa. Nuestra diferencia de edad solo son números, no por madurez...
—Tienes toda la razón, no he sido el mejor padre del mundo; solo le di a mi hijo la mejor educación, el mejor cariño, el mejor abrigo, el mejor abrazo; nunca se lo logré dar. Ya mi hijo tiene 28 años y no sé ni tan siquiera cuál es su helado favorito —resopla—. Ok, habla con JK y luego me haces saber, te lo agradeceré un montón —mirándolo—. Tienes razón, es una diferencia solo en números, pero hacen la mejor pareja del mundo; ojalá que puedan darme un nieto pronto —sonríe—. Espero que estés bien del aborto y no haya consecuencias.
—Ok, yo le dejaré saber —mirándolo—. Yo también espero que no pase nada y pueda darle un bebé a mi alfa —se limitó a decir.
—Gracias por tu ayuda, Jimin. ¡Me iré primero! —siguió caminando.
Jimin fue por su cena. Cuando regresa, que iba a tomar el ascensor, alguien más entra con él; cuando se da cuenta...
Se encuentra con nada más y nada menos que con Cecilia. Jimin la ignora, porque no está de humor, de ganas, de nada. Ya había pasado por mucho y ella tenía ganas de joder y así fue.
Cecilia sabía que Jimin había tenido un aborto espontáneo y lo primero que hizo fue amenazarlo con decirle a Jungkook, pero no como realmente pasaron las cosas, sino que se iba a inventar que Jimin se lo sacó, para que el alfa mafioso lo rechazara y ella quedara como la buena.
Venía la ex-omega de JK dispuesta a quedarse con él; tenía mucha seguridad, pero el omega de Jeon era dominante, seguro de sí mismo y no se iba a dejar joder. Iba a demostrarle que en la guerra y en el amor todo se vale, pero que él iba a ganar y con mucha seguridad lo sabía.
Lo peor de todo es que se metió como Juan por su casa a la habitación del alfa, perturbando su tranquilidad, pero así enfermo la corrió en menos de nada de la habitación y Jimin se sintió triunfante.
—Resopla mientras cierra y abre los ojos—. Ven, baby, ¿sí? —Le extiende la mano—. ¿Estás bien? ¿Te hizo algo?
—Sí, estoy bien, no te preocupes —se sienta al lado de su alfa y su conciencia le estaba jugando una mala pasada, lo tenía inquieto—. Jungkook... si te digo algo, ¿no te molestarás conmigo?
—¿Qué pasó, mi amor, por qué me voy a molestar contigo? —Lo agarra de la mano—. Nunca haces nada para hacerme mal —mirándolo—. Mmmm, ¿sabes qué? La perfección no existe, pero te veo y como que comienzo a dudarlo, ¡eh! —le sonríe—. ¡Te amo, mi amor!
—Mirándolo—. Ammm, hace 6 días... luego de que te fuiste a la diálisis... pues, yo... —Resoplaba y no sabía ni cómo decirle, los nervios a flor de piel.
—¿Qué pasó, Jimin? Ya me estás poniendo nervioso —mirándolo—. Hace 6 días, antes de ir yo a la diálisis, tú... ¿Qué pasó, mi amor? Juro que no me voy a enojar.
Chin-Hwa miraba a Jimin y lo animaba con la mirada a que continuara.
—Respiraba hondo—. Te juro que yo no sabía... que estaba embarazado, Jungkook —rompe en llanto—, y tuve un aborto —más lloraba y se tapaba la cara, muy angustiado.
De momento estaba anonadado, trataba de asimilar lo que Jimin le estaba diciendo, pero lo escucha llorar con sufrimiento y debía reaccionar rápido; un resoplo lo ayudó a reaccionar.
—Mi amor, ven, ven a dónde mí, ¿sí? Explícame, ¿cómo estás? ¿Qué fue lo que pasó? No llores así, que me dan ganas de llorar. Ven, mi amor bello —le extendía la mano para que fuera a donde él y consolarlo.
Jimin, que se había alejado un poco, va rápido a donde su alfa y se aferra entre sus brazos.
—Bueno, estoy bien, solo me pusieron una pinta de sangre porque tuve una hemorragia fuerte... es que me alteré... en eso, pues me dio un dolor fuerte y me desmayé; lo que pasó luego me lo dijo mi papá... Yo desperté ya cuando estaba en la habitación —puchero.
—Lo abrazaba fuerte—. Mi amor, siento mucho lo que pasó con nuestro bebé. Por algo pasan las cosas y yo sé que nunca me ocultarías un embarazo; fue un accidente. No lo provocaste tú, yo lo entiendo, mi amor, esas cosas pasan —le levantaba la cabeza y le daba besos—. Yo sé que no fue fácil lo que estabas pasando conmigo; yo quiero que me perdones a mí, porque yo tuve la culpa de que estuvieras alterado y nervioso. Te prometo que luego tendremos un bebé, ¿sí? Y a mí ahora mismo solo me importa que tú estés bien, ¿me juras que estás bien?
Estaban allí los familiares de ambos y presenciaron todo esto. Nadie podía creer la comprensión y cómo Jungkook asimiló todo, más Chin-Hwa, que no podía creer que Jimin no lo delatara, que había sido por su culpa.
—Gracias por entender, alfa... pensé que no pasaría esto, que ibas a reaccionar mal... y me preocupo de que Cecilia te lo dijera, porque no sé cómo se enteró, dijo que en este hospital era fácil obtener información... y por eso te preguntó por qué estabas con alguien que no era honesto... pero no me atrevía a decirlo...
—¿Cecilia lo sabe? —mirándolo—. Ya que ella está colmándome la paciencia, más vale que se aleje, porque no voy a responder de mí, ¡más nunca! —piensa—. ¡Ay, mi amor, cómo no lo voy a entender! Si yo te amo, yo no quiero que te alejes nunca de mí, aunque yo sea ya un viejo todo defectuoso. ¿Me juras que no te vas? —besos—. Con tu palabra no me iba a importar la de Cecilia; asegurado, mi amor, te amo demasiado. Y bueno, ¿cuándo me voy a casa? Quiero dormir con mi omega y que me consienta. ¡Nos vamos a casar, que todo el mundo aquí lo sepa! —le sonríe a Jimin y le da besos para animarlo.
—Yo también te amo —sonríe mirándolo—. Hay que esperar al doctor a ver qué nos dice y cuándo te vas. Pero sabes que no tocas la torre ni nada. —Levanta la ceja.
—Mmmm —piensa—, ya hoy vino a verme, eso quiere decir que hoy no me iré, ¡por la luna! Con las ganas que tengo de estar en casa, ¿alguien entiende eso? —resopla—. Jefe, ¿y cuándo será el día en que vuelva a tocar a la torre? —bromea con su omega dominante y se ríe—. ¿Y para hacer aquello? —se refiere a hacer el amor.
—Cuando el doctor diga que puedes volver, porque ya te encuentras mejor y recuperado totalmente —se le acerca al oído—, de eso debe ser máximo unos 34 días —le dice sobre hacer el amor.
—¿34 días? ¿Me estás diciendo que hasta el 15 de abril no puedo? —alterado y Jimin lo mira muy feo—. Ops, lo siento, pero es que me dio dolor en el corazón eso —se rasca la cabeza y se ríe—. Bueno, quizás unos meses fuera de la torre, a quien pondré a trabajar por mí —piensa.
Jimin piensa que es buena idea comenzar a que Jungkook y su papá tengan una buena relación.
—Se ríe—. Lo siento, no fue mi intención alterarte, pero así son las cosas ahora, lo que yo diga —se le acerca al oído—. Habla con tu papá... —Luego lo miraba.
—Se ríe—. ¿En serio hay que esperar todo eso, y cómo la hija de puta aquella no esperó todo eso? —piensa y resopla—. ¿Me pueden dejar solo con mi papá? Mimi, quédate tú —lo agarra de la mano.
Todos los que estaban en la habitación salieron y Chin-Hwa se quedó sentado en donde estaba. No tenía esa arrogancia de siempre, solo se acomodó y miraba a su hijo con una mirada que Jimin no sabía descifrar, pero era suave, como de padre, y eso lo relajó, porque no quería que Jungkook se alterara.
—Dime, hijo —mirándolo—, quiero aprovechar también el que vamos a hablar. Dime, ¿quién habla primero, tú o yo?
¡Hola Roommates!
Espero que todo esté bien y la estén pasando felices ʕ • ́؈ • ̀)
Aquí tenemos un nuevo capítulo, delen mucho amor, espero que lo disfruten y no se olviden regalarme ★'s y comentar que tal les pareció.
¡Hasta el próximo capítulo!
XOXO♥ ᒍOᗩᑎ
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