—¡Hola, mamá!

—¡Hola, hijo! ¿Cómo estás? ¿Qué haces? Rato que no te veo, te he extrañado mucho.

—Estoy almorzando con Jimin, todo bien, gracias a la madre luna... ¿Y tú, cómo estás?

—¡Buen provecho, mi amor! ¿Y cómo van las cosas con Jimin? Qué bueno que estés bien. Yo estoy bien, triste. Que ya no vengas a la casa, ¡quiero verte!

—¡Gracias, mamá! Las cosas entre Jimin y yo se están dando poco a poco, pero estamos bien, gracias por preguntar. Y estoy muy ocupado, tengo viajes y cosas que hacer, no sé si pueda ir a verte...

—Hijo, quiero decirte que no pienses que no te amo, ¿sí? Eres mi bebé, con el cual aprendí a ser mamá. El que me dijo: "El te amo más bello de la vida por primera vez", ¿me entiendes? Yo te extraño demasiado, no me importa lo que piense o haga tu papá, pero lo que yo siento por ti y por Paolee es el amor más grande del mundo. Por favor, no dejes de amarme.

—Sí, mamá, pero esas palabras llegaron tarde para el corazón duro que tengo... y la verdad, me alegra el saber esas palabras, no te digo que no, pero es algo que realmente no sé cómo explicarlo...

—¿Ya no amas a tu mamá, Jungkook? Yo sé que ya tienes 28 años, eres todo un hombre, tienes tu vida hecha, no necesitas de mamá, pero que me digas eso... Me duele mucho. ¡Lo siento mucho, Kookie, lo siento!

—Los amo, no digo que no, porque miento. No tengo una vida hecha, mamá, estoy intentando tener una vida; es muy diferente. Estoy tratando de ser menos posesivo, calculador, frío, hijo de puta... eso es lo que trato de hacer, o sea, es increíble que a mis 28 años alguien trate de recuperar mi infancia... son cosas que no vienen al caso ahora mismo...

—¡Ay, Kookie! Soy la peor madre del mundo, lo siento, no debí permitir que, por ser el único varón, troncharan tu vida, tu infancia, pero yo no tuve toda la culpa, mi amor. Te juro que casi no podía hacer nada, cuando tu papá te llevaba con él. Era literal una obligación, no tengo la culpa de todo. Y no digas que estás queriendo recuperar tu infancia, por la luna, cachorro, no me hagas sentir peor. Y claro que son cosas que vienen al caso, no digas que no.

—No te echo la culpa, ni a ti, ni a nadie. No viene al caso: primero, no estoy en el lugar adecuado para hablar; segundo, no estamos de frente y, tercero, ya lo estoy dejando atrás. No es cosa de pedir perdones, mamá, son cosas de acción a cambios.

—Te prometo que las cosas cambiarán, mi cachorro —Eileen estaba llorando—. Lo siento, espero decirte todo de frente. Te amo con todo mi ser. Disfruta tu comida y compañía —cuelga.

—Por la luna —dice por lo bajo, resopla—. Bueno, Mimi, seguimos almorzando, ¿sí? —sonríe un poco.

—¿Cuándo lo hablarán? —mirándolo y come.

—Mi amor, no creo poder. No quiero quebrarme como pendejo enfrente de ellos —come, pero estaba pensativo—. No se merecen quizás mis lágrimas, mi dolor y mi frustración. Creo que el que debería olvidar soy yo, ¿no crees? Dejar todo como que nunca pasó y que las cosas sigan normales como siempre, total, ya estoy acostumbrado —mirándolo—. Ella dice que me ama, que me extraña, que quiere verme. Pero no dijo: "Cachorro, mañana voy a verte porque me extraña, ¡blah!". Siempre las palabras se las lleva el viento.

Se hizo un amargado e incómodo silencio, pero Jungkook retomó la conversación después de un suspiro.

—Tú me has hecho la vida diferente en menos de 30 días, como mi familia no ha hecho nada diferente en 28 años, es lo que no entiendo —agacha la cabeza, y luego lo mira—. ¿Tú crees que tengo sentimientos? Yo quisiera sacarme del sistema todo lo que me afecta, pero ¿para qué? Si, al final les diré a mis papás: ajá, me hicieron un daño, pero los amo tanto; es contradictoria mi vida —agacha la cabeza de nuevo.

—No piense así, Koo-Koo, de seguro todo cambiará, luego —levanta su mentón y hace que lo mire—. Deberías hablar con Nam, porque, pues... él sabe más que yo.

—Ya no hablemos de esto, mi amor, estamos juntos y contigo es feliz la vida, ¿sí? Ya después pasará algo y quizás cambien las cosas. Mientras, no permitas que yo deje de sonreír, ¿sí? —sonríe— Nam, ya me ayudará en esta loquera de mi vida, no te preocupes. —Besos.

—Lo sé, mi amor, pero debes hablarlo, por favor... —Mirándolo.

—Ya lo hablaré luego, bebé, ¿sí? Mejor almorcemos y pasemos el mejor año, los dos mejores días juntos, a beber y a bailar —sonríe y lo besa— mmmm, quiero que mañana te vistas hermoso; siempre lo haces, pero quiero que me dejes más enamorado.

—Está bien, baby —sonríe—. Lo haré, ya lo verás que me vestiré hermoso para ti.

—Muy bien, que sigas mis reglas —sonríe—. Hoy nos vamos más temprano de la Torre, ¿ok? Más o menos a las 3:00 pm para ir a comprarle algo a Min-Tae y llevárselo mañana —el más tío ahora.

—Jimin lo mira—. ¿Comprarle algo a Min-Tae? —anonadado.

Jimin no encuentra qué decir. Es su sobrino, hijo de Taemin, que es amigo del alfa, pero como es reacio con los cachorros, no lo puede creer, quizás escuchó mal.

—Mirándolo— Mmmm, ¿te parece raro que lo haga, o es que no lo debo hacer? —con cara de preocupado.

—Me sorprendes —sonríe.

—¿En serio te sorprende? Bueno, como soy tan animal y de poco corazón, no es para menos —piensa—, pero quiero llevarle algo y que le guste por la Navidad, ya que no le llevé nada el 25 de diciembre.

—Mi amor, es que no me lo esperaba —sonríe—, pero me encanta tu decisión, así que vamos por el regalo. —Emocionado, aplaude y todo.

—Medio sonrojado—. ¿En serio no te lo crees? ¿En serio soy un grinch? Por la luna, ya me hiciste tener vergüenza.

—Se ríe—. Tengo curiosidad de ver qué compras —emocionado— y no es eso, mi amor, pero como dijiste que no tenías vena paternal ni nada de eso, pues me emociono.

—Eres más malo, mira cómo te burlas de tu alfa, ¡caray! —se ríe—. Vamos a ir a comprar y tú me ayudarás, ¡eh! Mmmm, pues... —piensa—, no tengo vena paternal, pero ahí intento, ¿no? —mirándolo.

—Yo no, solo es que, pues —se sigue burlando de su tierno alfa mafioso—, te ayudaré a elegir el regalo —besándolo.

—Me gusta verte emocionado, así como un omega que se emociona cuando su cachorro hace algo por primera vez —se ríe—. Mi amor, ¿quieres algún postre, o nos vamos a la torre?

—Estoy muy feliz —sonríe—. No, mi amor, estoy bien así; en la noche me como el postre —pícaro.

—Jimin, ¡caray! —riéndose—. Bueno, bebé, entonces, pago la cuenta y nos vemos, ¿sí? —mirándolo y lo besa—. Voy al baño, ya vengo. —Se levanta y se va.

En eso que Jimin espera paciente por su alfa, Jin llama a su celular.

—¡Hola, Jin!

—Minnie, aquí hay una omega buscándote. Parece como una muñeca —hablando bajo.

—¿Una muñeca, cómo se llama?

—No lo sé, pero Rochelle la está atendiendo; al parecer la conoce, porque sonríe y todo. Tiene el cabello rojo, un cuerpo brutal, está vestida muy bien; debe tener dinero.

—Ah, ella debe ser Cecilia. Mira, la cabrona llegó hasta acá.

—Rochelle le acaba de decir que tú no llegarás hoy, porque estás con el jefe; ella hizo una cara rara. ¿Quién es Cecilia? ¿La conoces?

—Cecilia fue novia de Jungkook por 7 meses, pero no pasó a nada más que una corta relación. La conocí en Victoria. Obvio, si no estoy solo, ella se cree que le tengo miedo...

—Esa mujer que mide de estatura igual que Jungkook fue su novia por 7 meses, ¿por qué anda buscando a ti? ¿Cuál es la mierda que tienes contigo? Además, creo que tiene un compinche con Rochelle, así que debes de tener cuidado. ¡Bajaron en el ascensor juntas ahora mismo!

—Sí, esa misma, hace tiempo que se dejaron, Jin. Solo que sigue enamorada de él, y quería tirárselo en Victoria. Yo no les tengo miedo, Jin, de verdad voy a todo, como omega decente y fiera, no como loco y estúpido.

—¡WOW! Tiene un cuerpo brutal, seguro que Jungkook le pagó las tetas, ¿no? Porque no son de ella, lo demás, pues, ni modo. Pero no es fea tampoco. Lo más increíble es que Jungkook está enamorado de un omega completamente diferente a los que ahora me imagino que eran sus exes, ¿no crees? Mmmm, parece que lo que le daba Jeon aún lo necesita. Joder, ¿cómo que se lo quería tirar? ¡Explica eso! Ay, Minnie, igual debes tener cuidado; ellas son unos animales, te pueden hacer lo que sea para sacarte del medio.

—Se comenzó a reír—. No, creo que no. Pues, en Victoria lo besó sin yo estar presente y Koo-Koo me lo dijo rápido, ¡ya sabes! No me harán nada, Jin, de verdad, ni se atreverán a tocarme.

—¿Que no se las hizo? Ay, no, pues entonces le envidio el cuerpo a esa loca —se ríe—. Sí, eres diferente a los ex de Jungkook entonces, pero realmente ese alfa se ve enamorado de ti. Digo, no sé si me equivoque, pero yo siento que sí, si no me lo hubieras dicho. Jimin, ¿QUÉ? ¿Dejaste que te lo besara y estrujara? Yo la hubiera matado, loca psicópata, besándote a tu alfa. Agárralo bien, ¡eh! —sinceramente lo decía—. ¡Ay! Minnie, ojalá, porque yo la veo de esas que te raptan y te sacan las uñas a sangre fría —se refería a Cecilia.

—Jungkook, no me iba a dejar salir de la habitación para acabar con ella, asegúralo —se ríe—. Nah, bregaré a lo mafia, como mi alfa, y seré yo el que haré que se salga de ahí y no regrese.

—Me imagino que cuando te lo dijo Jungkook, estabas encabronado, con lo celoso que eres tú y con semejante hombre, que tienes que ponerle alarma, ¡eh! Pero alarma contra ZORRAS —ríe— JIMIN, ¿cómo que a lo mafia? Ay, me asustas, ¡caray! Ya te estás juntando mucho con el Sr. Jeon.

—Es que no sabes, cuando Koo-Koo me contó que lo besó la loca esa, tetas del Everest, me encabroné demasiado, solo quería coserle la boca —resopla, al recordarlo—. Y así es de ahora en adelante, somos de la mafia, así debemos bregar con las locas estas.

—¿Y qué hiciste cuando te lo dijo? No me gusta que hables así, se supone que tú metes presos a los delincuentes, no que eres parte de ellos —piensa—. Bueno, lo siento, sé que debes estar de parte de Jungkook, pero pues... con ellas puedes bregar de otra forma, tener confianza de tu alfa que no se irá con Rochelle o con la despampanante ex.

—Pues, él me dijo que no le importaba a ella, tampoco se iría con ella, de verdad que no, pero ellas son de armas tomar...

—Entonces, tiene que ser muy real, que no le importa y solo le importas tú. ¿Tú crees que obligue a Jungkook a acostarse con ella? Digo, no creo que sea fácil con tanta custodia que tiene tu alfa; debe ser algo voluntario.

—No creo que lo obligue, Jungkook no me intenta hacer caso a mí, le hará caso a ella.

—Espero que nada pase, Minnie, me preocupas mucho tú, aunque yo sé que Jungkook te cuidará mucho. —Miraba a todas partes— Jimin, seguí a las locas, la tipa se montó en una limosina y se fue.

—Sí, aunque igual le diré a Jungkook, porque si él sabe que YO sé esto, ya sabes la grande que se forma —habla de que Cecilia lo andaba buscando—. Y Rochelle, ¿se quedó?

—Le dirás a Jungkook, ¿seguro? No, Minnie, ella se fue con ella, o sea, está en horas de trabajo —anonadada.

—Ah, pues perfecto, con más razón se lo diré a Jungkook...

—Bueno, pues dile, pero con calma, no le vaya a dar un ataque —piensa—. ¿Ya vienes para acá? Hice los papeles de las explotaciones de la semana pasada, está todo clean...

—Sí, le diré con calma... y sí, de paso, ya nos íbamos. Ok, perfecto, se seguirá haciendo eso virtual.

—Bueno, cuidado, ¡eh! Y te veo acá; sigo con el trabajo virtual. Cualquier cosa me llamas, ¿ok? ¡Chao! —cuelga.

Jungkook llegó a donde Jimin; había tardado, pero no solo en el baño, también pagando la cuenta y peleando con sus "independientes" de su mafia.

—¿Nos vamos, bebé? Disculpa, estaba pagando la cuenta. ¿Hablas con alguien? —mirándolo y le extiende la mano para ayudarlo a levantarse.

—Extendiéndole la mano—. Sí, con Jin, baby... —Sonríe.

—Sonríe—. ¿Está todo bien en la torre? Vamos, bebé, para salir del trabajo temprano —caminaban al auto—. El viaje me tiene emputado, me molesta que cambien de planes sin decirme una mierda —resopla con un texto que le acaban de enviar.

—¿Qué pasó? —mirándolo.

—Voy a Londres a llevar un cargamento millonario de diamantes, más o menos de $60 millones. Les digo que lo llevaré por aire, que me esperen en el muelle y allí lo entregaré, pues no, ellos quieren que todo se haga en el aeropuerto, mierda, allí nos pueden atrapar, ¿serán imbéciles? Me jode que quieran hacer las cosas a la conveniencia de los demás.

—¡VAMOS a Londres! —mirándolo— espera, Jungkook, no puedes hacerlo en el aeropuerto y punto, le dices que la mercancía no se entrega y ya. —Ahora el omega es experto en tráfico también.

—¿VAMOS? ¿Ya te montaste, Park Jimin? Te dije que NO —mirándolo y entrando en el auto, poniéndolo en marcha rumbo a la torre—. Es que no lo haré en el aeropuerto Omega. Yo llego al aeropuerto, de allí me bajo en las camionetas negras que ya tendrán los diamantes, de ahí hago la entrega y recibo los millones; es todo, les guste o no.

—Sabes que me monté desde que me lo dijiste, así que no sé por qué te sorprende —pone los ojos en blanco—. Dando y dando, pájaro volando, así son los negocios. Mmmm, tengo que decirte algo que me acaba de decir Jin...

—Mirándolo con la ceja levantada—. No es lo que tú digas, Jimin, así que déjate de inventos. Claro, así es el negocio ahora, tú me das y yo doy —mirándolo—. ¿Qué pasó, qué te dijo Jin?

—Voy a ir, Jungkook, te lo juro por lo más que quieras —desafiante—. Bueno, es que mira, fue a la torre alguien a preguntar por mí y Rochelle indicó que yo no volvía, o no estaba, porque estaba almorzando con el jefe y entonces, Jin me describió a la omega...

—Sabes que si te pasa algo, me voy a enojar contigo, ¡eh! —mirándolo serio—. Ajá, a la torre fue alguien a preguntar por ti. Rochelle la atendió y dijo que no estabas, porque estabas contigo y entonces, ¿qué descripciones te dio Jin?

—¿Ya aceptaste que fuera? —Levantando la ceja— Pues, pechugona, buen cuerpo, parece doll... y su nombre, Cecilia...

—No he aceptado nada, Jimin, ¿yo dije que sí? —mirándolo, ya estaba a punto de decirle que sí, para que deje de presionarlo—. ¿Cecilia? ¿Qué carajo hace Cecilia en Queensland? —se le subió la comida—. ¡Qué clase de cojones, viene a joderme la vida, lo sé! —responde bien serio; él sabía a lo que venía.

—Pues, aceptes o no, ya sabes que IRÉ, así que me apuntas en tu viaje. ¿A qué viene Jeon? —mirándolo.

—JIMIN, si te pasa algo, me voy a encabronar, ¿ok? Fuiste por TU voluntad, ¡eh! —No le quedó de otra—. A joder viene Jimin, viene dispuesta a que me dejes, no hay más que decir, quiere acostarse conmigo y decir que soy el peor cabrón del mundo para que me dejes; la conozco muy bien y sus espectáculos... Y Rochelle, la mejor amiga —mirándolo—, NO quiero que te alejes de mí.

—¡NADA me va a pasar! —pone los ojos en blanco—. Ok, pero a ver una cosa, Jungkook, cuéntame cómo es ella, cómo fue su relación... Dime todo, así no sucede nada que nos aleje —mirándolo.

Al JKBOSS, realmente no le interesa contar su vida, ni sus relaciones, ni de esos que pasaron por su cama una noche, de su familia o de la mafia.

Pero se trata de Jimin, de la persona que le importa, que quiere, que le gustaría hacerlo su esposo en un futuro no muy lejano, por lo tanto, no debe haber secretos.

—Espero que no te pase NADA, Jimin —sigue con su cantaleta—. La relación fue normal, no nos podíamos ver mucho porque vivíamos lejos, pero nos veíamos siempre que podíamos y cuando yo no llegaba allá, ella aparecía acá. Ella es muy narcisista, ella se cree que porque está buena, es la sensación del bloque y todos tienen que arrodillarse cuando pase. Es una desbaratadora del dinero, es medio fría, es muy celosa, lo que se propone lo logra. Yo nunca llegué a sentir amor por ella, solo atracción física, ya viste cómo es, pero ahora mismo, a 5 meses de dejados, ella no me afecta en ningún sentido, para nada —mirándola—. Si sucediera algo, yo solo espero tu confianza, que confíes solo en mi palabra.

—Mirándolo—, no entiendo qué puede suceder entonces...

—Mmmm, Mimi, ella va a hacer lo que sea por tenerme. Obvio que yo no me dejaré, pero puede hacer lo que sea para joder. Yo solo te pido que confíes en mí, ¿ok? Y me da peor miedo que te haga algo a ti, aunque no la veo capaz, pero no lo puedo descartar. Mmmm, ¿me besas? —mirándolo, mordiéndose el labio.

—Besándolo y casi se le trepaba encima— Koo-Koo, pero ¿ella sabe dónde vivías antes? O sea, ahora vivimos juntos, ¿va a llegar ella a la casa?

—Mmmm, no me beses así, que te tengo que hacer el amor, ¡caray! —se mordió el labio y vuelve a besarlo —. Mi amor, yo sé que vivimos juntos, ella fue a la casa como dos veces, porque siempre la llevé a la isla o a casa de mis papás, pero no sé si llegue hasta allá, por lo que hay que tener cuidado, ¿sí? No quiero que te mande hacer daño.

—Mmmm, mejor, así te desvío de la torre y vuelves a ser mío toda la tarde —se ríe—. No creo que me hagan algo, baby, no te preocupes, pero solo quiero saber cuán loca es, para atenerme a las consecuencias —besos.

—No te preocupes, bebé, nos vamos a las 3:00 pm, vamos al centro comercial y soy tuyo igual toda la tarde —besos—. Tu seguridad me preocupa, ¡caray! Siempre estás con que no te pasará nada, no confíes —mirándolo serio—. Si pasa algo, besos, se desnuda o lo que sea, sabes que no soy yo, ¿ok?? —besos.

—WoOhOo —se ríe dándole besos—. Yo sé que no me pasará nada —besos—. ¿Cómo que se desnuda? Es loca, ¿lo hará frente a quien sea?

—Tú sabes que yo complazco a mi nene —besos—. Por la luna, tengo que cuidarte más; eres un atrevido. Yo creo que, además de Zorro y Mike, te pondré dos más, ¡eh! Mi amor, ella no es una prostituta o algo así, es una mujer de dinero de Australia, más bien sus padres, pero cuando quiere algo, es así de loca, es capaz de hacerlo frente a ti y más para joderte —mirándolo.

—¿QUÉ? ¿En serio? A mí por joderme, ¿por qué? —piensa—. Sí, tiene buen cuerpo, pero tú te fijaste en mí, aun siendo así, así que eso no tiene nah que ver —mirándolo.

—Sí, ríete mucho, tendrás 4 guardaespaldas, ¡eh! —se ríe y besos—. Sí, mi amor, por joderte a ti, ya que estás conmigo, pero más quiere joderme a mí, porque no quiero estar con ella y que me dejes. Eso la hará feliz, aunque no esté con ella. Sí, tiene un cuerpo brutal, no es fea, pero yo escogí al mejor omega de todos, a mi flaquito rico —besos— y no me arrepiento, y lo mejor, sentimientos incluidos.

—Ay, Koo-Koo, ¿para qué tantos? —se ríe—. Pues, no me importa, yo voy a estar con mi conejito bello —besos—, así que le guste a quien le guste.

En el camino a la torre, Jungkook le decía a Jimin que, como era un problemático y se cree que está en la mafia y puede pelear con el mundo, le iba a poner 23 guardaespaldas, la edad que tenía; después se burlaba de la cara que le puso.

Algo normal y casual para ellos como conejos calentones. Camino a la torre, hicieron un poco de cardio para bajar el almuerzo en pleno auto; fue cuestión de Jimin treparse ahorcajadas sobre su alfa, sacar el pene de su alfa, echar su calzoncillo a un lado y ser follado ricamente frente a todos en la ciudad. Ellos disfrutaron la adrenalina del momento.

Llegan a la torre, llegan a la entrada y el chico del valet los espera para estacionar el auto deportivo de último modelo. Y como estaban haciendo sus cosas deshonestas, no le quedó otro remedio al alfa mafioso que acomodarse el pantalón de una forma muy obvia, pero no le importó. Ambos entran al hall.

Extrañamente, uno de sus empleadores le dijo que en el salón de conferencias en el primer piso lo esperaban unos hombres, no vestidos de traje, sino como cualquier otra persona.

Le dijo a Jimin que lo esperara sentado en el hall, que no tardaría; se desvía a lo que parece una puerta secreta y entró.

Una discusión bastante fuerte se desarrolló allí; nadie escuchó, porque simplemente el cuarto estaba preparado para aislar el sonido.

Cierra la puerta y Jungkook se queda con ellos adentro, sin guardaespaldas.

—Los modales hacen al hombre —girándose a esos hombres—. ¿Saben qué significa? —mirándolos— Les voy a dar una lección.

Los miraba y ninguno dijo nada, por lo que se sentó en un sofá de cuero color marrón que tenía allí.

—Nos quedaremos aquí todo el día, ¿o vamos a pelear? —metiendo su mano en su saco.

Saca su pistola y mata a los cuatro hombres que habían venido a matarlo a él. Es astuto e inteligente, sabe leer el lenguaje corporal y captar indirectas. Vio sus armas y sus malas intenciones; venían a vengar una muerte, la muerte del boss de la mafia albanesa.

Sus asistentes ayudaron al JKBOSS a limpiar la sangre que le salpicó en su cara. Buscaron otra ropa y se cambió, se acomodó todo y salió a buscar a su omega, que ni se enteró de lo que pasó detrás de aquellas paredes.

Subieron al piso del CEO.

Allí cerca estaban Rochelle y Cecilia. Jimin se dio cuenta y fue cuando más se lució. El omega de Jeon se decía en sus pensamientos.

«Si estás intentando joderme, vas a salir jodida tú,mijita, y menos me quitarán a mi hombre». «¡HA! No sabes ni con quién te has metido».

¡Hola Roommates!

Espero que todo esté bien y la estén pasando felices ʕ • ́؈ • ̀)Aquí tenemos un nuevo capítulo, delen mucho amor, espero que lo disfruten y no se olviden regalarme ★'s y comentar que tal les pareció.

¡Hasta el próximo capítulo!ＸＯＸＯ♥ ᒍOᗩᑎ