ᑕᗩᑭí丅ᑌᒪᗝ #27
Jimin entró a la habitación del yate, se acostó al lado de Jungkook, imitándolo; también miraba al techo.
—Ammmm, ¿qué miras en el techo?
—Estoy pensando, bajándome la calentura. Y tú, ¿qué hacías? —No dejaba de mirar al techo—. Me imagino que creías que estaba hablando por celular, ¿no?
—¿Bajándote la calentura, de qué? ¿De enojo? Si te digo la verdad, SÍ, pensé que estabas hablando.
—No, la calentura de excitación, ¿qué te crees, que lo que te hacía no me gustaba? —sin mirarlo—. ¡Vaya, qué bien! Ahora yo solo me paso pegado al celular y no atiendo a mi omega. ¡Uff, bravo! —resopla—. ¿Quieres algo frío de comer?
—Ah, estás bajando la calentura de excitación, pero yo veo que no se te ha bajado —le miraba la entrepierna—. Algo frío de comer, ¿qué cosa?
—No, no se me ha bajado, porque se tarda en bajar así solo. Es normal, no te preocupes, ya bajará —mirándolo—, pues algo como un cheesecake con helado de chocolate y syrup de chocolate, te gustará, es homemade. ¿Me acompañas a comer?
—Mmmm, ok, vamos —mirándolo.
Jungkook se levantó de la cama llevándose a Jimin con él; ambos caminan a la cocina del yate.
—Bueno, haré el tuyo primero, ¿ok?
Jungkook se movía por la cocina del yate con solo un bañador y medias, con su fornido cuerpo a la vista del omega calentón.
Buscó un plato pequeño, puso un pedazo de cheesecake, le puso una bola grande de helado de chocolate y un topping de syrup de chocolate.
—¡Que lo disfrutes! —le sonríe—. Buen provecho —preparaba ahora el suyo—. Mmmm, ya estás bronceadito, te ves lindo con ese aceitito por encima de tú cuerpo, ¡eh! —con esa voz provocativa mientras lo miraba.
—Mmmm —se mordió el labio y comenzó a comer—. ¡Qué rico, gracias! —sonríe.
—Comiendo—. ¿Te gusta? A mí me encanta comerlo, es mi postre favorito. Amo el helado de chocolate —le sonríe—. Mmmm, una pregunta, ¿estaremos enojados todo el fin de semana? —mirándolo—. Estaba pensando a dónde podemos ir de vacaciones con Nam y Jin.
—Se sienta. —Sí, es riquísimo —siguió comiendo— mmmm, ¡me encanta! No, no tenemos que estar enojados —roba un pedazo del cheesecake de su alfa y feliz se lo comió.
—Hey, ¿por qué me robas? —mirándolo con seriedad y todo— Me alegra que te guste, mmmm, con cosas así y con buenos movimientos de caderas, este fin de semana engordas una libra, ¿qué crees? —se ríe—. Entonces, si no tenemos que estarlo, ¿cuándo ya no estaremos? —con la ceja levantada—. Mmmm, ¿a qué lugar de Europa quisieras ir?
—¿Era tuyo? No sabía, es que lo vi ahí con más chocolate, pues me lo quise comer —se ríe—. Mmmm, ¿qué lugar de Europa? Tailandia —mirándolo.
Jimin, como glotón que es, terminó de comer su cheesecake y tomó el envase de chocolate, se echó en el dedo y se lo chupaba.
—¿Por qué te chupas así? Hasta me entró la corriente —se ríe, pícaro—. Mi amor, Tailandia, le pertenece a Asia y queda al sur de Asia. Mimi —mirándolo—, ¿te gustaría ir a Tailandia?
—En Europa, pues Suiza o algo así —piensa—. En geografía no soy muy diestro, ¡eh! —se ríe—. Mmmm, me lo chupé, porque fíjate...
Sentó a Jungkook en la esquina de uno de los asientos que tenía en la cocina, y felizmente sacó el pene de su bañador, que todavía estaba algo despierto y accesible.
Jimin le echó syrup de chocolate y pasaba la lengua por donde iba bajando el espeso líquido azucarado.
—Mmmm, es que no se me dio saborear el chocolate así, ¿qué tú crees? —seguía en su diestro arte del chupar.
—¿Cómo no voy a querer? —se mordía el labio y lo miraba—. Sí era lo que me hacía falta hace rato, una buena mamada. ¡Qué rico! Sigue, sigue, aunque se me derrita el helado y el cheesecake —disfrutando de lo que su omega hacía—. En Suiza hace frío en estos meses, mi amor, ¿quieres ir a esquiar? ¿Te gustaría Grecia o Turquía? —recibiendo una mamada y el arte de hablar a la vez— mmmm, qué rica esa boca, ¡por la luna! —jadeante—. No pares, Mimi, por favor, te necesito...
—Seguía en lo suyo y luego lo miraba— Mmmm, bueno, esquiar sería rico y, aparte, con frío mejor, duermo más calentito aún —se ríe. A todo esto, seguía chupando como si nada—. Así que no te preocupes, me gustaría ir allá...
Volvió a divertirse con el pene, haciéndole de todo a Jungkook; chupó luego sus testículos, que no tardó en sacarle un gemido agudo y fuerte.
—Mmmm, rico, alfa, disfruta, vamos...
Siguió en lo de él, le sacó un orgasmo a Jungkook seco, sin parar; ahora le echa el helado que todavía tenía su alfa en su plato. El frío lo puso peor y el omega disfrutándoselo, hasta que terminó en su boca como loco. Aún estaba en el cielo con los ojos cerrados, mientras que el omega se levanta y se ríe, se comió lo que quedaba en el plato del alfa y luego lo besó.
—¿Estás más relajado, baby? —se ríe travieso.
—Resopla— relajado, es poco, ¡QUÉ RICO! —se ríe, mientras recuperaba la respiración—. JIMIN, te comiste mi cheesecake, ¡caray! —Le da una nalgada— Mmmm y tú, ¿no quieres una chupada con sabor a chocolate? —Se mordió el labio—. ¿Sabes qué, mi amor? Podemos hacer un tour por Suiza, Italia, Turquía y Grecia. Son par de días que estaríamos los 4 disfrutando —lo atrae, agarrándolo del cabello fuerte, besándolo con esa única pasión que ellos saben.
—Ay, lo siento, lo vi solitario y decía «cómeme» y lo hice —riéndose—. Yo quiero de todo un poco —besos—. ¿En serio lo harías sin preocuparte por tus cosas de mierda? —mirándolo—. Bésame de nuevo...
Jungkook vuelve a besarlo de igual forma; él ama besarlo agarrándole los cabellos y como un lobo salvaje.
—Sí, Mimi, hablo en serio, y si vamos a ir a esos lugares sin preocuparme por nada, serán más de 15 días, bebé —sonríe—. ¿Tú quieres de todo un poco? Ya me dañaste la mente. —Se muerde el labio.
—Oh, por la luna, si va a ser así, Koo-Koo, entonces el viaje juntos va a ser increíble —emocionado— y sí, quiero de todo un poco e incluso quiero probar el jacuzzi —besos.
—Carga a Jimin en brazos—. ¿Es increíble? Mmmm, o sea, ¿que después de Año Nuevo nos vamos? —besos—. Pues, vamos a probar el jacuzzi; debe estar rica el agua con esta brisa, ¿no crees, bebé? —subió a cubierta—. También debemos mudarnos —piensa.
—¡¡Síiii, por favor, nos vamos!! —emocionado— Claro, estará muy rico utilizar el jacuzzi... —sonríe—. ¿Si nos mudaremos en serio? ¿Sabes qué he pensado? En vez de un penthouse, busca una casa en un área menos millonaria, ¿entiendes?
Entre besos, Jimin y Jungkook llegaron al jacuzzi. El omega entró primero y el alfa después, quien se sienta y hace que Jimin se siente de espaldas a él, abrazándolo.
—Sí, mi amor, nos vamos a ir, así que se lo dices a Jin, que yo se lo digo a Nam, ¿sí? —besitos en el cuello—. ¿Mudarnos a un área menos millonaria? No entiendo, mi amor, dónde va a haber una casa grande en un área humilde, ¿ah? —piensa.
—Sí, yo le digo a Jin —sonríe—. Mmmm, pues mira, te digo de buscar una casa bonita, pero que no sea en un área famosa por ser de millonarios, ¿entiendes, mi amor?
—Quedamos en eso, mi amor, tendremos un genial viaje de parejas —estaba ya pensando cómo iba a hacer para no tener el celular cerca—. Es que, mi amor, aún no sé en dónde podemos buscar una casa bonita en un barrio pobre, es que creo que no existen —piensa—. ¿Tú sabes de eso?
—Mira, cuando yo compré mi casa... había visto una... a ver dónde era... —Pensando— creo que era en Scarborough, sé que era completamente abierta, tenía 4 pisos, pero al frente era una casa normal; sí, tenía bonita entrada y recuerdo que los autos quedaban debajo de la casa, tenía para el yate, pero tenía espacio para caminar en la playa y todo... Era exquisita, pero para mí era muy grande. Lo importante es que es muy bonita y en sus alrededores no hay casas muy lujosas, baby.
—Mmmm, pues, cuando regresemos a tierra vemos qué tal la casa, ¿ok? ¿Seguro que quieres vivir en el barrio humilde? —piensa—. ¿Y no robarán? Bueno, tendré los guardaespaldas de todas formas, pero que tampoco hayan muchos malandros —mirándolo—. Pero sabes que Scarborough está algo lejos de New South Wales y Main Beach, ¿no hay problema? De la Torre está como a una hora.
—Ok, mi amor, la vemos; sé que podría gustarte. Además, lo mejor de todo es que no despertaríamos sospechas de nada en cuestión de tus cosas, así que igual podemos tener los guardas. No creo que haya problema, pero sería interesante vivir lejos de los lugares concurridos.
—Bueno, ya cuando lleguemos el lunes, verificamos lo de la nueva casa y lo del viaje, ¿ok? Quiero ver que no sea peligroso para ti —le daba más besos—. Mmmm bebé, quiero algo que hace tiempo no me das, ¿puedo cogerlo? —le decía sensual al oído.
—Ok, mi alfa, lo haces cuando lleguemos, pero no es peligroso, la verdad, porque se ve una casa muy tranquila, mi amor e inclusive tiene ascensor —se ríe, mordiéndose el labio—. ¿Qué quieres? JEON, te he dado todo, no seas exagerado —pone los ojos en blanco.
—Se ríe, haciéndose el loco—. Suena interesante la casa; la consideraré más, porque sé que te gusta. Ya veremos cómo hacemos todo para mudarnos, mi amor. Ahora, solo quiero hacértelo rico —le mordía el lóbulo de la oreja—. Quiero tu rotito apretado; hace muchos días que no me lo das. —Sí que es descarado el alfa.
—JUNGKOOK, por la luna, ¿qué rayos te he dado desde que nos trepamos en este pinche yate? Mejor cállate. —Le dio en el pecho fuerte y se levantó.
—Riéndose, porque le gusta verlo enojado—. ¿Otra vez te vas a enojar? Ven acá, cascarrabias, JIMIN —no podía parar de reírse—, bebé, no me dejes solo, subeeee...
Jimin entró a la habitación con intenciones negras; en realidad no estaba enojado. Él amaba que Jungkook lo follara cuantas veces quisiera, pero vio este momento el ideal para hacerle una broma al alfa mafioso, a ese que le llaman JKBOSS.
Le iba a demostrar que, por más sicario, loco, traficante o como más le llamaran, él lo tenía comiendo de su mano.
Abrió su mochila y sacó algo de allí; esperó a que llegara su hombre sabroso.
Sabía que Jungkook iba a ir por él, así que tenía listo su ataque.
Y así como lo presentía, el alfa llegó a donde él en un santiamén.
—¿Qué haces? —le dice el alfa.
—Venga, acá, señor Jeon, como usted parece un conejo malo, tengo algo para usted y quiero que se lo ponga y NO acepto un NO por respuesta.
—Pues, sea lo que sea NO, y menos después de que me dices, conejo, ¿qué falta de respeto es esa? —La ceja levantada.
—Ponte esto... y es ahora... —Le daba el disfraz de conejo sexy y sensual.
—No, omega, no me pienso poner esa mierda, ¿te patina el coco? —Lo tiró en la cama—. ¿Qué estás pretendiendo?
—¿Estás enamorado de mí? ¿Yo te importo? ¿Harías cualquier cosa por mí? —mirando a su alfa desafiante—. Si todo eso es afirmativo, quiero verte con esto puesto —lo agarra de la cama—. Toma, vete al baño y te espero aquí —tratando de no reírse de la cara de encabronado que tenía Jungkook.
—¿Quieres humillar a tu alfa? ¿Esto es una broma? —Muy serio.
—No se contesta con otras preguntas, señor Jeon, toma —le pone el babydoll en las manos y lo dirige al baño.
Jimin se echó a reír por lo bajo, pero Jungkook entró al baño y no volvió a salir.
Tardó más de lo esperado y cuando creyó que no saldría, lo hizo: Jungkook salió del baño con ese traje de conejo.
—No te atrevas a reírte y menos a tocar el celular, Jimin —serio.
—Koo-Koo, modélame, por favor, solo una foto, déjame tener una foto —haciéndole ojitos.
—¡NO! Quédate ahí y no te me acerques, estoy muy molesto —se cruza de brazos.
—No estés enojadito —lo abraza por la espalda—, solo estamos jugando, es una broma, mi amor —hace su famoso puchero.
Pero Jimin no tenía intención de parar la broma todavía, por lo que se bajó su bañador un poco y sacó su pene, comenzando a restregarlo en las nalgas descubiertas de su alfa.
—Ahora me toca a mí follarte —le dice pegado a su alfa y muy sensual.
—¿QUÉ MIERDA ES ESTO, JIMIN? NO, ¿QUÉ TE PASA? —Lo agarró de los brazos y se le fue un poco la fuerza, lo tiró a la cama—. Que sea la última vez que hagas esto, esto no son juegos graciosos. —Jimin se reía y el alfa fue a quitarse la ropa, tirando la puerta tras de sí.
Salió poco después y no habló nada; fue por una copa de vino y subió a cubierta.
Jimin, después de cansarse de reír, sentía que había confianza suficiente; hay cosas que contar y así hacer que su alfa olvide la broma o, de paso, que se enoje, peor.
Sube a cubierta, ya con un hoodie gigante de Jungkook, que tenía puesta hasta la capucha. Se sienta al lado de su alfa.
—Alfa, te confieso algo, digo, si no es que lo sabes ya —piensa.
—Confiesa, mi amor, ¿qué pasó? —mirándolo. Jimin se relajó después de que escuchó el "mi amor".
—Mmmm, las fotos, ¿recuerdas? —mirándolo.
—¿Qué fotos, mi amor? ¿Las tuyas que tengo en casa de la revista? —Jimin asintió. Jungkook se pone serio otra vez— Sí, recuerdo la foto desnudo con las otras personas; la tengo en la casa también. ¿Qué pasó, mi amor, cuál es la confesión?
—Bueno, la confesión es que luego, después de eso, fue una orgía completa —mirándolo.
—Se quedó anonadado con esa respuesta de Jimin. —Esa información no me la dieron, ¿cómo que tuvieron una orgía? ¿Todos juntos? ¿Tú con ellos, ellos contigo? —mirándolo.
—Sí, entre todos, uno tocaba al otro, la otra tocaba a la otra y así. Todos nos tocamos mutuamente —mirándolo.
—¿Y hubo penetración? Pero Chanyeol no sale ahí, ¿por qué?
—Porque Chanyeol no sabe de eso —suspira—. Sí, hubo penetración, con protección, obviamente.
—O sea, ¿que lo hiciste sin que tu novio lo supiera? ¿Y qué te animó a hacerlo? ¿Te gustó? ¡Contesta sinceramente!
—¡Sí! —mirándolo— Lo hice cuando ya estaba teniendo problemas con Chanyeol, la verdad. Y bueno, tampoco es que estuviera en mis cinco sentidos. Mmmm, me gustó solo porque pude recibir placer. Estaba ebrio, en cierta manera, si lo hice para eso. Me enamoré de Chanyeol, sí, pero cuando él se puso psicópata e inclusive días antes intentó matarse y entonces, obvio, me sentía mal e hicimos eso y, bueno, me lo saqué del sistema. No lo volvería a hacer, porque eso trae consecuencias y muchas.
—Mirándolo—. ¿Consecuencias? ¿Cuáles, mi amor? —Insistió—. Ahora, ¿ya te lo sacaste por completo, ya no sientes nada por él? Mi amor, yo espero que conmigo no cometas más errores como esos. Yo jodo con cojones, pero tenme un poco de paciencia, ¿sí? Sabes que yo me entero de todo, ¡eh! —le advirtió.
—Pues mira, nos tocamos entre omegas, Jin también participó y se salió todo de control —piensa—. Y no, la verdad es que no siento nada por Chanyeol. Cuando lo vi, me asusté mucho, porque él se vuelve loco de momento. Si no fuera por Zorro, no sé dónde iba a estar ahora.
—Piensa— Bueno, dicen que es normal que omegas se toquen y les guste, ya que saben dónde es que les gusta. No te voy a pelear por eso, mi amor, y sobre Chanyeol, ya sé cómo es el tipo y no te preocupes que no volverá a pisar Australia, ¿ok? —Lo abraza— ¿Hacemos una siesta antes de hacer la cenita? —Más besos.
—Piensa— Espero que no pise Australia nunca más Chanyeol, ¡la verdad! Sí, hagamos la siesta... Koo-Koo, no te enojaste por lo que te dije, ¿verdad? —mirándolo.
—No, es que no pisará más Australia; lo amenacé de muerte, pero no creo que lo vaya a hacer, ¿ok? —besos—. Bueno, vamos a hacer la siesta —lo ayuda a levantarse—. Sinceramente, me enojé al principio, porque no entendía, pero ya no estoy enojado, no te preocupes. ¿Por qué me preguntas eso? Soy hijo de puta, pero no tanto —mirándolo y besitos.
—Mirándolo —¿en serio lo amenazaste de muerte? —se ríe—. Estás loco, Jungkook, ¡caray! Te pregunto porque no sé, pensé que te habías incomodado, por eso —piensa.
Jimin estaba realmente preocupado de lo que Jungkook pueda pensar de él, después de que soltó la lengua y dijo hasta su más oscuro secreto.
—Mirándolo y se ríe— En serio, hasta yo mismo lo llevé hasta la silla del avión para asegurarme de que no se me iba a escapar, ¡imagínate! —Besos y lo toma de la mano— Vamos, mi amor, al menos 30 minutos de sueño nos hará bien. —Caminan— Sinceramente me incomodó, mi amor, pero después ya se me pasó, no te preocupes, ¿ok? Después de que no lo vuelvas a hacer, conmigo todo bien, ¿sí?
—¿En serio? Me imagino la cara de alfa embarrado de mierda que tenía el muy imbécil —más risas—. Siiii, vamos a dormir esos minutitos ricos y yo hago la cenita —sonríe—. Ok, no lo vuelvo a hacer... si no es contigo —se mordió el labio, riéndose.
—¿No me crees capaz? —ríe—. ¿Harás una cena rica? ¡Estoy emocionado! —sonríe y besos—. Más vale que ahora todo sea conmigo, nada más; eres mío, solo de mí, de mi propiedad, ¿ok?
—Claro que eres capaz, amor, lo que pasa es que me sigo imaginando la cara de ese alfa de pacotilla —ríe—. Claro, haré una cena rica —sonríe—. Mmmm, igual que tú, eres mío, de mi propiedad —besos—. Mmmm, Koo-Koo, haremos otra vez lo de tener mucha gente mientras follamos, como en mi casa, que lo hicimos en mi cuarto y estaba Jin —se mordía el labio—. Mmmm, algo más que podamos hacer... ¿Que nos vean? ¿Sexo compartido? ¿O qué? —se ríe. A Jimin le gusta jugar con fuego.
—Claro, tengo el sello de tu propiedad, ¿no lo ves? —serio— Mmmm, me gustaría follarte en la oficina, con todo el mundo afuera, pensando que van a entrar. Sería tan rico, pero tan rico —piensa—. ¿Sexo compartido? Ya me pusiste celoso, ¿cómo es eso? —mirándolo con la ceja levantada—. ¿A ti te gustaría que nos vieran?
—Mmmm, eso es cierto, completamente rico, mmmm —se mordió el labio—. ¿A ti no te gustaría que nos vieran? —se ríe—. Ya sé que no dejarías que nadie me toque y YO MENOS lo haría.
—Entran a la habitación—. Mmmm, tú sabes que yo tengo tu sello, está justo en el pene, ¡uhhh! —se ríe—. En la semana que viene, un día será de follar en la oficina —se ríe pícaro—. Mmm, bueno, depende en qué sentido quieres que nos vean, porque nunca van a tocarte a ti, ¡eh! —enojado.
—La semana que viene será candente —risas—. No, solo te digo si lo quieres hacer.
—Espera la semana, que será inolvidable. Por lo pronto, lo hacemos en la oficina; no me interesa el exhibicionismo, vamos a la siesta.
—Claro que la esperaré, sin lugar a duda —bosteza—. Si, mi amor, vamos a la siesta —acostándose.
—Que descanses, mi amor, soñaré con la cena y cómo te haré el amor en la oficina. ¡Te quiero! —le da besos y lo pega a él—. ¡Te quiero y te quiero!
—Yo también, te quiero y te quiero —besitos.
Hicieron la siesta, unos 45 minutos. Eran las 11:00 p.m. menos cuarto.
Jungkook se quedó durmiendo; Jimin se despertó primero.
Se levantó el omega a ver qué podía hacer de cena y si tenía todo para los burritos. Comenzó a hacerlos con todo su arte y los puso en el horno para terminar de cocinarlos. Cuando los sacó, a Jungkook le dio el olor, llegando a la cocina en segundos... espera... ¿Dónde estaba su guacamole?
¡Hola Roommates!
Espero que todo esté bien y la estén pasando felices ʕ • ́؈ • ̀)
Aquí tenemos un nuevo capítulo, delen mucho amor, espero que lo disfruten y no se olviden regalarme ★'s y comentar que tal les pareció.
¡Hasta el próximo capítulo!XOXO♥ ᒍOᗩᑎ
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