—¡Hey, Minnie, llegaste! —Jin, emocionado, lo abraza al ver a su piojo favorito. — He estado todo el día con diarrea, tu jefe me puso enfermo en la entrevista — se ríe, burlándose de él mismo —. No sé si me aceptó o no, ¿tú qué sabes, lo hice bien? —mirándolo con cara de traumado.

—Jungkook, ¿no te dijo? —se ríe —. Y sí, si te aceptó. Te dijo cómo se trabaja, ¿verdad?

—No, Minnie, no me dijo nada, solo me dijo que me fuera, o sea así, que me fuera, que él me dejaba saber, no me dijo si me aceptó, cuándo comienzo, cómo se trabaja y cómo iré vestido, ¿puedes explicarme? —Traumado — ¿Te lo dijo a ti? —Se reía, pero de los nervios.

—Sí, Kook me dijo a mí todo, pero hazte el que no sabes nada, Jin —se ríe —. Tú vas como sea... solo que evita los pantalones ajustados, que los alfas ahí se babean —pone los ojos en blanco — y luego tienes líos...

—A ver, futuro Jeon Jimin, ven acá, ¿allí trabajan omegas monjes? —con la ceja levantada —. Y cómo trabaja el Sr. Jeon, ¿es exigente, o es buen jefe? ¡YAY! Quiero saber cuándo comienzo —emocionado—. Wow, eso de ser el abogado de la minera es demasiado genial —Jin no se lo creía —. Y tú, ese milagro que estás aquí, ¿Jungkook te dio permiso? —se ríe.

—Jin no es por eso, pero por la luna, tampoco vas a provocar a los alfas y betas allí, ¡caray! —piensa — Sobre Kook como jefe, no te voy a mentir, es demasiado exigente y jode con J mayúscula. —Resopla y se ríe después por su drama, aunque es cierto — Y sí, me dieron permiso, OBVIO, supongo que iba a hacer algo, de seguro.

—LO SÉ, nene, no te alteres, ya se te está pegando lo del Sr. Jeon, ¡eh! —Ríe — Iré como Omega recatado —Le hacía ruido el que su nuevo jefe era un negrero. — por la luna, creo que necesitaré una serenita diaria con mi nuevo jefe —ríe más. — Mmmm él y sus cosas que hacer, yo tú no me despego de su lado —piensa. — Y, ¿se está portando bien? ¿Qué tal su herida?

—Más vale que vayas recatado —mirándolo—, una serenita (es una pastilla para calmar los nervios), ah, y una grabadora para obtener todo lo que te pide —riéndose—. Bueno, como no me deja ir a ciertos lugares, ni modo. Pero se está portando bien, espero —resopla—. Vamos al café. Mi cuerpo requiere un poco de cafeína.

—Jin se ríe— Voy a anotar, #1 recatado, #2 tomarme una serenita, #3 una grabadora —Más risas—, mmmm, eso de que se porta bien, quizás es cuando duerme, nada más —piensa—. ¿Nos vamos así? ¿Quieres ir a "Crema espresso"? —mirándolo—. Vámonos en ropa deportiva para hacer algo de aerobismo —se ríe.

—Bueno, si no quiero ir a Crema Espresso, ¿a cuál más Seok Jin? Si es al único que voy —resopla—. POR LA LUNA, después me dices que me parezco a los demás —pone los ojos en blanco—. OK, vamos en ropa deportiva.

—Ay, se supone que vengas contento de estar con tu alfa rebelde, ¡caray! Voy a cambiarme, por la luna —se va a la habitación.

Jimin y Seok Jin van a cambiarse y poco tiempo después se fueron a trotar un rato.

Después de 45 minutos, a la vuelta pararon en "Crema Espresso" para un café y algo de comer. Los omegas escogieron las mesas de afuera para tomar fresco y recuperarse de su esfuerzo físico.

De momento, alguien le ponía la mano en el hombro a Jimin y Jin estaba blanco como el papel.

Jimin pensó lo peor... y no se equivocó. Cuando giró su cara, supo de quién se trataba; le quitó la mano de su hombro de inmediato.

—¿Qué haces aquí? —alterado.

—Sabía que estaba cerca de ti —Chanyeol le sonríe a Jimin, como si fuera un encuentro grato—. Tanto tiempo, ¡qué bueno encontrarte! —El alfa, estaba pasivo, todavía—. ¿Me invitas a un café? ¡Estás hermoso! —mirándolo de arriba a abajo.

—¡Estás loco! NO, no te invito nada. Hazme el favor y aléjate de mí.

—¡Yo no estoy loco! —mirándolo y saca la silla, sentándose con los omegas—. Gracias por la invitación. ¿Qué pidieron? ¿Qué me recomiendan? —sonríe— y que, mi amor, ¿cómo te va en Australia? —le toma las manos.

—Jimin suelta sus manos de entre las del alfa— ¡VAMOS, JIN! —se levantaba—. Eres bruto, te dije que NO hay invitación.

Seok Jin se levantó y Chanyeol, de inmediato, agarró a Jimin de la mano.

—¡POR LA LUNA! —Jin, se asustó.

—NO te vas a ir de aquí, te vas a volver a sentar, VAS a tomar y comer lo que acaban de llevar a la mesa, ¿me escuchaste? —Lo lleva a la mesa, casi arrastrándolo y lo sienta.

—¡Cuidado, chico, le vas a romper el brazo! —Jin, asustado—. Minnie, haz lo que te dice, ¿sí?

—Mira, Jin, no seas pendejo, yo no le haré caso a él. Así que muévete —se levantó otra vez y dejaba la propina—, comete lo que hay en la mesa, en confianza.

Seokjin vuelve a levantarse y comienza a caminar con Jimin lo más rápido que pueden, pero Chanyeol los vuelve a interceptar de frente.

Miraba a Jimin muy molesto.

Ya el guardaespaldas que Jungkook había asignado para cuidar de Jimin estaba alerta para llegar a donde él. Solo esperaba que el tipo hiciera algo.

—¡Muévete, tipo anormal!

Seok Jin sacaba a Chanyeol del camino y Jimin salió corriendo, pero el alfa logró agarrarlo por los cabellos, haciéndolo caer al pavimento.

—Ahhh —Jin, va corriendo hacia donde ellos— ¡Suéltalo, animal! —golpeándolo en la espalda.

Al guardaespaldas le tocó intervenir, antes de que se pusieran peores las cosas, y Jungkook lo mate él por no proteger a Jimin.

—¿Pasa algo, señor? —Zorro dice con seriedad—. Hágame el favor de soltar al Omega —el guardaespaldas realmente era de alto como una torre—. ¿Estás bien, Jimin?

Zorro ayudó a Jimin a ponerse de pie y Chanyeol se le enfrentó.

—¿Qué le pasa, comió valentía usted hoy? —Serio.

—Y tú, ¿quién eres? Deja de meterte dónde nadie te ha llamado, él es mi omega, así que muévete.

—Yo soy el guardaespaldas del Omega, así que DÉJELO en paz, si no quieres que esto pase a mayores, señor —mirándolo—. Él no es su omega; él ERA su omega. No sé para qué ha venido a molestarlo, ¿usted no sabe que tiene un alfa, que puede acabar con usted? ¡LÁRGUESE AHORA! ¿Estás bien, Jimin? —mirándolo.

—¿Cómo que tiene alfa, ha? Él es mío y de nadie más, así que el que diga eso, se debe enfrentar a mí.

—Sí, estoy bien, gracias, Zorro...

—Yo lo que le digo es que se está metiendo con él menos que debe meterse, así que tranquilo. ¡Já! Con mucho gusto, tipo —mirándolo—, pronto nos vemos. Tú quieres problemas, no hay problema —seguía al pendiente de Jimin—. Vamos, Jimin, entra en la camioneta con tu amigo; los llevaré.

—JÁ, quiero ver quién es ese imbécil que dice que es alfa de mi omega.

Jimin entraba en la camioneta con Jin.

—De tu EX omega hace más de 2 años, ¡métetelo en la cabeza! —le golpeaba con el dedo en la cien de Chanyeol— No te preocupes, que cuando menos te lo esperes, verás al alfa de tu ex —mirándolo serio y le hace señas a otro guardaespaldas para que lo siguiera— ¡Vamos! —entra en la camioneta— ¿Jimin, seguro que estás bien? ¿A dónde van? —puso la camioneta en marcha.

—¡Vamos a la casa! Se supone que Kook me buscaría más tarde.

—Sí, así es, él lo buscará más tarde. Ya sabe de lo que ocurrió, así que las cosas seguramente cambiarán —mirándolo por el retrovisor—. De seguro se reúne con el tipo más tarde —serio, mirando adelante.

—Jimin miraba a Jin—. Y... bueno... no puedo cambiar las cosas... y ¿dónde está él?

—Mirando a los omegas por el retrovisor—. Jimin, las cosas cambian; si el jefe así lo quiere, no se le olvide. Él está ahora mismo resolviendo sobre un dinero no recibido y otro incompleto, con esperanzas de no tener que viajar a Mónaco y Nepal.

—Mirándolo—. OK, entiendo. Entonces, llévame a mi casa.

—Claro, allá lo llevaré —seguía manejando.

—Jin se acerca al oído de Jimin—. ¿Cómo es eso que cambian si él quiere, que no se te olvide, qué mierda? —Sorprendido.

—Mirándolo y se le acerca—. Esa es su manera. Jin, no sabes nada...

—O sea, ¿qué tú haces lo que él dice? —mirando a Jimin—. Pero y, ¿si te lleva a la casa de la isla? ¡Ay, estás loco en seguir sus reglas!

—Mmmm, no me llevará lejos. No sé qué cosas pasarán, Jin...

—¿Quieres decir que si te dejarías llevar a donde a él le dé la gana? Por la luna, ¿qué te hizo? Tú no te dejabas dominar de nadie loco —mirándolo—. Eso de que no sabes qué pasará me da estrés; me asusta el misterio, ¡caray!

—No, Jin, tampoco así, pero sé que, si no lo hago, tú corres peligro, ¿entiendes?

—¿Yo corro peligro? Pero a ver, ¿tú estás corriendo peligro ahora, Minnie? Pero, ¿por qué? ¿Tú estás metido en las cosas del Sr. Jeon, o es que simplemente quieres estar cerca de él? —Mirando a Jimin, asustado.

—Jin, tú no sabes de lo que es capaz Chanyeol ¿o te haces el loco? —mirándolo—. Tu nivel de inmadurez a veces me supera... esté con Jeon dentro o fuera, Jin, se corre riesgo; no seas anormal.

—¿Es necesario que me tengas que decir loco, inmaduro o anormal? —mirándolo—, tengo que preguntar de cosas que no entiendo, ¡eh! Pero no pregunto nada entonces. Yo sé de lo que es capaz Chanyeol, pero con Jungkook asegura que, si va a verlo, no exista más —mirando hacia afuera de la ventana con los brazos cruzados.

—Pues que tú quieres, ¿qué le diga que no lo haga? No me haces caso, Jin, te crees que hablo mierda.

—Sé que es capaz de todo. Y mira cómo te tiene vigilado, no sé de dónde carajo salió el tal Zorro, por la luna —piensa—. ¿Tú crees que Jungkook vaya a donde está Chanyeol?

En eso se escuchaba a Zorro hablando por su celular, al parecer con Jungkook.

—Ni yo tampoco sé de dónde salió Zorro. Y ya, como que llamó el nene, de seguro te dejo y me manda a buscar...

—De seguro te tiene cuidado, Minnie —mirándolo—. Jungkook, al parecer, te cuida sin que te des cuenta. Mmmm, ¿tú crees que Zorro está hablando con Jungkook? ¿Ay, y si mató a Chanyeol? —piensa—. Y si te dice que te vayas a vivir con él, ¿qué vas a hacer?

—Ay, Jin, por la luna, estás loco, no digas eso. No pienses en algo negativo.

—Lo siento, pero de Jeon ya me espero todo —resopla.

Llegan a la casa de Jimin.

—Jimin, el Sr. Jeon lo vendrá a buscar en unas horas, está resolviendo otro asunto, prepara unas cosas como si fuera a ir de viajes, ¡por favor! —mirándolo, él seguía instrucciones.

—Ok, Zorro, gracias —se baja con Jin—. Estoy jodido, eso será una pelea.

—Mirándolo—. Una pelea entre quién, Jungkook y tú, ¿o Jungkook y Chanyeol? ¡Ay, ya ni entiendo nada! —piensa y entran a la casa—. Pero a ver, ¿por qué tienes que hacer una maleta?

—Sí, una pelea entre los dos —mirándolo—, ni idea por qué la maleta Jin —resoplando.

SeokJin mira por la ventana, asustado.

—Por lo menos, esos guardaespaldas no se han ido de aquí al frente; creo que la cosa se pone fea, Minnie —mirándolo—, ya que no nos pudimos tomar el café, ¿quieres que haga un poco de cappuccino en lo que te preparas?

—Sí, Jin, por favor, haz un poco.

—Ve tranquilo, prepara todo, date un baño tibio y te lo llevo ya mismo —le sonríe y le da un abrazo dirigiéndose a la cocina.

Jimin fue a su habitación; rondaba muchas cosas en su cabeza.

Por su parte, Jin estaba preparando café y unos muffins.

En otra parte, JKBOSS estaba en busca de Chanyeol, a quien encontraron entrando al hotel en donde se estaba hospedando.

Los guardaespaldas del mafioso lo llevaron a la habitación y el Boss, después, entró.

—¿Quién carajo eres? ¡Suéltame! —Enojado.

—El alfa de Jimin, ¿acaso creíste que no nos veríamos de verdad?

—¡HA! ¡HA! ¡HA! ¡HA! ¿TÚ? ¿Tú eres el alfa de Jimin? ¡Ay, por favor, no me hagas reír! A Jimin NO le gustan los tipos como TÚ —serio—. A él le gustan los tipos como YO, así que se vean hombres, no metrosexuales como TÚ. Déjalo en paz, que él es MÍO y me lo pienso llevar a Estados Unidos, ¡eh!

—No, espera un momento, tú no sabes con quién te estás metiendo. Si quiero ahora mismo, te mato, imbécil —mirándolo superserio —. Para tu información, le gustan los tipos que lo complazcan en la cama y le den para 5 folladas corridas. Por tanto, me lo dejas en paz. Tú decides, te matamos ahora o dime dónde vives para enviarte directito a mmmm, ¿dónde vives? Ah, sí, vives en Maine, Estados Unidos.

—Ay, por favor, tienes cara de pendejo, me vas a matar tú a mí, no me hagas reír. Y yo me voy cuando me dé la gana, así que LARGATE de mi habitación, ¡necesito descansar! Y NO lo pienso dejar en paz; él fue y será MI omega, grábatelo, ¡eh! Yo lo complazco y le duro lo que él quiera; no sé qué pendejadas hablas, mejor CÁLLATE y vete, modelito europeo.

Chanyeol se dio media vuelta y se acostaba en la cama, llevando sus manos detrás de la cabeza, bien plácido.

—¿Qué hacemos, jefe? —Esperando órdenes del guardaespaldas.

—¡Dámela! —Le extendió la mano al guardaespaldas para que le diera el arma. — Si le durabas, claro, porque tanto estabas sin tener tu orgasmo para llegar a la par de él... Pero, en fin, no hablaré de eso aquí —El guardaespaldas le dio el arma y Jungkook le apuntaba directo en la frente. — ¿Quieres volver a Maine o Corea? —mirándolo — deja de hablar de Jimin, de seguirlo, de acosarlo...

—Hey tipo, ¿qué pasa? ¡Tranquilo! ¿Por un Omega te meterás a la cárcel? , ¡Ridículo! Baja eso, me pones nervioso, no me gustan las bromas así, ¡eh! —Chanyeol mirándolo algo asustado, pero, aun así, lo jodía —. No volveré a ningún lado, aquí me quedo y me lo llevo conmigo. ¿Tú y quién más me lo van a impedir, ah? —Se levanta y le baja el arma. Es valiente el tal Chanyeol — ¡Ya! Es mejor que te vayas y te resignes a que él va a estar mejor conmigo que con un delincuente como tú. —Ahora sí, enojó a Jungkook.

—Jungkook, le volvió a apuntar la pistola en la cabeza—. Camina, que yo mismo procuraré llevarte al aeropuerto con pasaje y te lo advierto, no se te ocurra pisar Australia otra vez, porque no vives para contarlo, Chanyeol. Así que muévete, recoge todas tus mierdas, ¡AHORA!

—Tranquilo, tipo, no me vayas a matar, mierda —Guardaba sus cosas, molesto.

A punta de pistola, Chanyeol se resignó a recoger sus cosas.

Jungkook y sus guardaespaldas fueron directo al aeropuerto, compraron un pasaje y el JKBOSS personalmente lo llevó hasta el asiento del avión de vuelta a Maine.

Esperó que el avión despegara y así estaba más seguro de que no se bajaría del avión.

Después de allí, el mafioso llamó a sus contactos y consiguieron una casa para Jimin en Surfer Paradise, más o menos a 25 minutos de su casa.

Antes de ir por Jimin, debía hacer una parada importante.

JKBOSS llegó a un gran edificio camuflajeado como un centro de donación sanguínea; siempre iban personas a solicitar pintas de sangre con una específica letra o simplemente ayudaban a donar.

Detrás de un negocio de la mafia también existe caridad. JK dona la sangre que no necesita a hospitales e identidades sin fines de lucro.

Todas las A ±, B ±, O+, AB+ las donaba.

Pero las O- y AB- eran su líquido vital dorado, esas que podían traficar alrededor del mundo, esos tipos raros que solicitaban en muchos casos y eran escasos.

Él tenía a sus Regime e independientes donando sangre como vacas con leche de oro; el líquido vital estaba teniendo demanda en el mercado negro, así que hasta aprendió a canjear sangre que no necesitaba por esa que le dejaba dinero.

Era un negocio redondo y JKBOSS el único mafioso que se ocupaba de eso, no tenía ninguna competencia, pero sí muchos compradores.

Se acerca a Taehyung, a quien llamaban V en la mafia. Era uno de sus tres caporegime, en esos que más confiaba y que sabía cómo manejar bien su negocio de aguas rojas brillantes.

—Buenas, jefe, qué bueno verlo —le da un buen apretón de mano.

—¿Cómo está todo por aquí, V? —Mirando la cantidad de gente que estaba donando sangre— hoy es de esos días buenos, por lo que veo —Mirando los números desde una iPad— aquí dice que tenemos 50 mil bolsas del donador mundial, O- —Piensa— debemos esta noche empacar y llevar al puerto para la exportación; no podemos tener tantas acumuladas. ¿Cuántas hay de AB±?

—Tenemos unas 15 mil bolsas, ha sido difícil encontrar donantes en estos últimos 6 meses; creo que debes considerar hacer un banco de sangre en Corea, ese tipo de sangre es común allí —V se da cuenta de que su jefe no está muy convencido, pero lo está pensando— ¿Está todo listo para mandar esa sangre a Estados Unidos? ¿Te pudiste comunicar con La cinco familias? —La cinco familias se llama la mafia estadounidense.

—V, mejor cierra la boca, yo sé que es mejor o peor, así que yo sé lo que tengo que hacer —Serio— empaquen la sangre AB± para Estados Unidos; necesito que eso lo hagan antes de 3 días, que NO se eche a perder, porque te corto las pelotas Taehyung —Cuando menciona su nombre de pila, es que lo decía muy en serio— la última vez tuvimos problemas por tu incompetencia.

—Jefe, la otra vez no fue culpa nuestra, fueron los "policías", por el gobernador estar cerrando las calles hacia el muelle; el calor estaba derritiendo mis bloques de hielo en las neveras, por el tráfico.

—No me interesa, Taehyung, haz que eso llegue bien al muelle y a su destino, congela tus pelotas y mándalas en las neveras si es necesario.

—Jungkook, pero... —El nombrado de una sacó su pistola y se la puso en la frente a V.

—Soy JKBOSS, calla mi nombre, calla si no quieres que me olvide que eres mi amigo y te corte la lengua.

V subió las manos en rendición y no se fue en contra de lo que JKBOSS ordenaba.

Eran amigos, pero en la mafia eran simplemente caporegime y jefe.

A eso de las 7:00 pm, Jungkook llama a Jimin a su celular.

—Hey, al fin apareces, ¿dónde estabas, qué hacías? —Jimin, tenía muchas preguntas...

—¡Hola, bebé! ¿Cómo estás? ¿No te duele nada? Yo estaba arreglando unos asuntos. Ya envié al tipo de vuelta a Maine y mira qué cortés soy, que hasta al asiento lo llevé —sarcástico—. Necesito que estés listo para irte a buscar. Voy de camino, ¿cenaste?

—Estoy bien y preocupado por ti. No me duele nada. Ay, Kook, entonces ¿me tenías guardaespaldas, ah? ¿No pensabas decírmelo? —Resopla—. Ya estoy listo y no he cenado todavía.

—¿Por qué estás preocupado por mi bebé? Yo me cuido muy bien. Ya mañana me sacan los puntos de la herida, ¡espero! ¿Seguro que no te duele nada? Ajá, te tenía guardaespaldas, ¿lo dudarías? Y mira, qué bueno soy, ahí te puse a tu amigo Zorro para que no tengas problemas, bueno, te lo iba a decir luego, pero no me digas que te enojarás por eso, ¿o sí? Bueno, pues ya estoy llegando para ir a cenar y te llevaré a un lugar.

—Porque dijiste que me venías a buscar rápido y los rápidos pasaron, ¿no me iba a preocupar? No, no me duele nada —pone los ojos en blanco—. Al menos hubieras tomado la cortesía y la molestia de decirme que los tendría, Jungkook. Además, ¿para qué me pediste que hiciera una maleta?

—Mi amor, perdóname, pero estaba en unos asuntos y no quería que estuvieras conmigo cuando estaba en ellos, pero ya voy por ti. Mi amor, no importa que no te haya dicho, al menos reaccionaron bien cuando te hacían daño, ¿o no? Bueno, usted sabrá qué va a hacer con la maleta, no se preocupe. Iremos a Surfer Paradise. ¿Cómo estás vestido?

—Ajá, y ¿qué eran o de qué trataban los asuntos? —Jimin, preguntaba más que un fiscal, como que es abogado—. Además, dijiste que siempre me dirías, por lo tanto. Tengo un jean color marrón ajustado, una camisa blanca con un abrigo encima de color marrón y unos botines, ¿por qué? ¿También quieres saber el color de mis ojos hoy? —Se ríe.

—A propósito, ¿ese era tu alfa? ¿Un bajito y todo tatuado, jodido y con cara de gracioso? ¿Dónde estaban tus gustos omega? —Se empieza a reír de Jimin— Bueno, uno de los asuntos era con el amor de tu vida, el segundo era otro asunto que te enteras más tarde, bebé; el tercero debía ver las donaciones de sangre ya, eso no importa tanto como para que te molestes por los guardaespaldas, ¡caray! Sí, dije que siempre te diría, pues, ya lo sabes, mi amor. Está bien como estás, mi amor, es para ir a cenar a la playa.

—Sí, era mi alfa, ¿cómo que dónde estaban mis gustos, Kook? Ajam, veré si me contentas, no estoy nada de contento, ¡he dicho!

—Entonces, ¿yo no soy tu gusto? Él me dijo que tus gustos no son metrosexuales como yo, según él. Ya veo que con él sí tenías gusto, ¿no? ¿Qué no te tengo contento? Pero ¿qué yo he hecho? ¡Ay, no es justo! —Resopla.

—Ay por la luna, si me gustara él, hubiera continuado con él pese a las cosas. AY, ¿tienes celos, Sr. Jeon? ¡Ay, si es justo!

—¿Tengo celos, y qué? A lo mejor, tu EX es tu prototipo de verdad, así todo tatuado y como los míos son una porquería, ¿no? Y no te enojes conmigo, ¡eh! Así que conténtate antes de que te dé una nalgada.

—Empieza a reír—. ¿Es en serio Jeon Jungkook? Ajá, fíjate, ni que yo siguiera tus órdenes, no me mandas. ¡JUM!

—¿Cuál es la risita? A ver, ¿yo soy metrosexual como él me dijo? Yo te gusto más que tu EX, ¿qué tiene tu EX que NO tenga YO? No te mando yo, pero te lo esmando yo y muy bien, ¿no te gusta, bebé? —Le estaba insinuando que lo follaba muy bien.

—Más risas—. ¿Acaso te daño la mente, Sr. Jeon? ¿Ya vienes o no? Estoy quitándome los botines.

—Ignórame, ya me enojé. Me creó complejo; más bien, al cabrón ese, lo debí de mandar a Groenlandia en vez de a Maine —piensa—. Ya estoy llegando, dile a Jin que cierre bien y no le abra a nadie, ¿ok? Y que comience a trabajar desde mañana. No se quite, nah, que estoy casi en la esquina.

—Bueno, ya voy por el jean —se ríe—. Ok, yo le digo a Jin que se prepare bien para mañana.

—Mmmm, ¿no tienes nada puesto todavía? Y ¿por qué me dijiste que tenías jean coño? ¡Me mientes! —se ríe—. Sí, dile que vaya preparado para trabajar y a ti te pondré la oficina dentro de la mía.

—Te dije que tenía puesto hace rato, ¡eh! No me digas que, dentro de la tuya, ¿aja con cuáles intenciones, Sr. Jeon? —Riéndose.

—Se ríe pícaro—. Ahhh, ¿usted no fue el de la idea de que ibas a ser mi abogado, de mí, de mi propiedad? Pues, tengo todas las intenciones para con usted. Que ni mi secretaria tiene el privilegio de verme de frente, así que ahí te pondré el escritorio, dentro de mi oficina, ya lo verás. Mmmm, es de muy buena conveniencia y la vestimenta permitida es shorts SOLAMENTE.

—Se empieza a reír Jimin, con las locuras de su alfa mafioso—. Oh, ¿sí? Para conmigo con todas las intenciones —se ríe—. Vamos a ver cómo es la cosa; eso de la vestimenta es para mí, ¿o para Jin? —Más risas—. OK, ya voy por el calzón...

—Uf, ya tengo la mente enferma contigo, con todas las intenciones perversas, mi amor —se ríe—. Ya verás. Y no, eso es regla para usted, no para Jin. Él que vaya recatado, usted va como a mí me provoque. Mmmm, como que va por el calzón, ¿qué haces? Ya estoy aquí al frente, qué haces, quitándote todo de nuevo, ¿o qué? —Alterado.

—Más risas—. Ahhh, perdón, ¿entonces permitidos los shorts? ¿Ya estás ahí? Entonces dame 5 minutos —se ríe y colgaba—. Jin, me voy, cierra bien, ¿ok? Por favor.

—Hey, ¿cómo que te vas? ¿Ya Jungkook está ahí? —mirándolo—. Entonces, ¿cuándo nos vemos? Cuídate, ¿sí?

—¡Sí, ya llegó! Pues, espero verte mañana y Kook dijo que empiezas mañana, así que prepárate, ya sabes cómo te dije —sonríe, tomando sus cosas.

—¿En seriooo? AHHHHHHH, qué fucking emoción, comienzo mañana, ¡WoOhOo! —Emocionado— Sí, ya sé cómo ir vestido. Te veo mañana. ¿Te llevas la ropa? Bueno, que la pases bien con Kook —sonríe y lo abraza—. Cena, ¡eh!

—Se ríe— Sí, así que a dormir temprano, ¡eh! Me llevarán a comer ahora, cualquier cosa me escribes, ¿ok? ¡Chao!

Jimin salía de la casa con su cartera y mochila. Luego se sube a la camioneta y se encarama del cuello al alfa, dándole un beso con todo y mordida de labio. Estaba loco por ver a Jungkook, aunque el Omega no lo diría en voz alta, ¿o sí?

—Mmmm, ya hacía falta... —Jimin se muerde el labio coqueto.

¡Hola Roommates!

Espero que todo esté bien y la estén pasando felices ʕ • ́؈ • ̀)

Aquí tenemos un nuevo capítulo, delen mucho amor, espero que lo disfruten y no se olviden regalarme ★'s y comentar que tal les pareció.

¡Hasta el próximo capítulo!ＸＯＸＯ♥ ᒍOᗩᑎ