Jungkook se dirigía tranquilamente a la cocina por un vaso de agua, esa tranquilidad fue interrumpida cuando un olor un tanto conocido se fue haciendo presente, se dió la vuelta y efectivamente ahí estaba Taehyung.

Como las veces anteriores, intentó alejarse, pero la mano de Taehyung lo detuvo.

—No te alejes. — musitó. — Sé que no empezamos de la mejor manera, pero quiero ser tu amigo, lo digo de verdad.

Jungkook, no muy convencido y un tanto nervioso, asintió, ya que las palabras no podían salir de su boca.

Y Taehyung por otro lado, muy feliz de que Jungkook no huyera de él por primera vez.

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