Un auto que era testigo de aquel desenfreno de amor, en la cuál dos chicos sin ser nada mas que ex y conocidos del amor, daban riendas sueltas a aquella tentación que estaban teniendo. Aquel hecho no era para nada "silencioso" y tan solo estaban disfrutando del momento de tenerse cerca el uno del otro aunque no pensaran en nada mas que solo ellos dos.

Toqueteos indecentes entre ambos chicos, la cosa estaba mas que caliente y eso que todo era por encima de la ropa. Los pantalones del pelinegro estaban empapados así que no podía disimular que no le estaba gustando la situación. 

Los besos eran desenfrenados y muy apasionados, Jungkook no entendía que pasaba pero poco a poco todo llevó a que terminaran sin ropa, él pelinegro encima de Taehyung, acariciándose a mas no poder ¡Jungkook no sabía qué pensar! Pero lo que si estaba haciendo era dejarse llevar.

Aunque no pudieron estar horas juntos como hubiesen querido, si pudieron juntarse y tener sexo. Fue algo rápido, rico, adrenalínico y sobre todo loco. Y para cuando ambos llegaron al clímax fue cuando cayeron en cuenta de lo que había sucedido.

—Ah...—decía agitado mientras se reconfortaba en los asientos— Te amo Jungkook —soltó de repente tomando por sorpresa al pelinegro— Se que nunca lo hemos hecho en un auto y esto estaba fuera de mis planes pero créeme que me gusto tanto estar contigo —dijo pero creyó que ambos estarían felices pero en la cara del pelinegro se mostraba otra cosa.

—Que hemos hecho Taehyung —gritó de la nada— Lo acabamos de hacer no es para nada lindo Kim — le cuestionó—  Esto estuvo mal, enserio estuvo mal —dijo arrepentido.

—No estuvo mal —dijo atrayéndolo hacia él—  Nada de esto fue planeado pero quisimos hacerlo, tan solo fue nuestro amor Jungkook.

—Amor que acabo con nosotros años atrás —confesó— Y aventura que jamás debió pasar.

—¿Porqué? —le preguntó el castaño— No puedes arrepentirte de haber hecho el amor conmigo —reprochó— Esto fue lo que quisimos hacer desde que nos vimos Jeon, fue un acto de pasión pero mas de amor —lo abrazó— Nosotros jamás nos olvidamos y es algo que tu sientes ahí —señalo con una de sus manos libres su pecho, donde yacía su corazón— En el fondo de tu corazón.

—Tal vez sea así pero he engañado a Jimin —murmuró despacio— Hice algo que tanta repugnación me causaba, hice lo mismo que tú hiciste conmigo hace años.

Y era cierto, haber estado con hombres  en su vida era complicado, pero haber engañado a su novio era repugnante para alguien como Jungkook. ¿Cómo lo enfrentaría ahora? ¿Cómo llegaría a casa y estaría con Jimin? ¿Cómo lo miraría a los lejos y le diría que lo ama? Pues esas y muchas interrogantes mas pasaban en aquel momento por su mente.

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Por otro lado el doctor Park Jimin se encontraba atendiendo una de sus citas por la mañana, tenía muchas inseguridades pero debía confiar en pareja o el mismo terminaría arruinándolo o era eso lo que pensaba sin saber que el pelinegro ya lo había arruinado.

—Hey —apareció de la nada asustando al pelirubio en el momento— ¿Estas bien? —le preguntó al ver que su mente estaba en otro lado y no ahí con sus pacientes y trabajo.

—Perdón —se disculpó de inmediato— Estaba pensando pero creo que me perdí entre tantas cosas que llegaron a mi mente.

—Tonto —sonrío— Tal vez debas ir a descansar Jimin-ah —propuso su amigo.

—Dije que estoy bien Yoongi hyung —se quejó— Y a todo esto, tu no deberías estar en la academia de canto, enseñando a tus estudiantes —le reprochó.

—Ya sabes, me di el día libre por tanto trabajo —musitó divertido como si de un juego se tratará— Ya —hizo un leve puchero— No me mires con esa cara que vine a invitar a salir —sonrío divertido.

—Salir...¿A donde? —quiso saber.

—Quiero mostrarte algo de mis nuevas canciones —estiró la mano con la palma extendida esperando a que Jimin lo tomará y así fue, no dudo en aceptar aquella invitación— Tendremos un día divertido —dijo emocionado.

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Eran las 4 de la tarde cuando todos salían a almorzar de la gran empresa, Taehyung estaba trabajando en algunos papeles en su oficina totalmente en silencio y Jungkook por su parte estaba sentado en su escritorio sin decir nada. 

Luego de aquel hecho fortuito ninguno de los había dicho nada, ingresaron al establecimiento fingiendo que nada había pasado pero ambos en el interior sabían lo que había sucedido.

—Vayamos a almorzar —decía Wook ingresando en la oficina del castaño— Que te parece Kimchi con algo de Bibimbap —le preguntó sonriendo a mas no poder.

—Crees que puedas almorzar sin mí —trató de sonar normal— Aún tengo algunas cosas que hacer y no pienso salir sin haber terminado con este asunto.

—Por supuesto que no —soltó de inmediato— Tienes que comer si quieres solucionar ese asunto que tanto te aqueja —dijo sarcástico.

Algo le decía en el fondo al castaño que él intuía algo de lo que paso en la mañana con Jungkook, tal vez los vio o algo por el estilo.

—¿Tratas de decirme algo? —le preguntó serio.

—No...Tu quieres contarme algo —contratacó a su pregunta— Porque sí es así estoy mas que feliz por escucharte.

—¡No! —gruñó con voz clara ante el sarcasmo de su pareja— Comeré mas tarde —fue claro al responder— Adiós Wook-shi.

—Adiós "Cariño" —enfatizó la última palabra y se retiro de ahí sin decir nada mas.

Las cosas habían sido incomodas, algunas personas podrían decir que él castaño estaba siendo injusto con su esposo pero tampoco podía negar sus verdaderos sentimientos y eso era algo que estaría sobre todas las cosas. No importa lo que hiciera solo quería estar con Jungkook aunque eso implicara volver a lastimar a alguien que también quería.

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El descanso se prolongo mas de lo pensado, Taehyung se debatía en acercarse o dejar las cosas como estaban con el pelinegro, pero quería sentirlo cerca y así fue cuando decidió acercarse hasta él para invitarlo a comer.

—¿Gustas? —le ofreció una pequeña barra de granola, esperando que el pelinegro aceptara— Vamos Jeon que solo es comida, además vi que no has probado nada desde que llegamos —insistió aun mas para que el chico aceptara.

—Esta bien —tomo la granola y empezó a comerla sin perder de vista al castaño.

—¿Quieres decirme algo? —preguntó— No has quitado la vista de mi —río con un poco nervios.

—Esto es tan raro Kim —admitió— Que te preocupes por mí, que estemos conversando en este momento e incluso que estemos cerca...¡Es muy raro!

—No sé, quizás lo hacemos porque no podemos estar alejados mas tiempo —sonrío tomando la mano del pelinegro— Se que lo que paso antes es difícil para ti pero créeme que también lo es para mí —confesó con temor— Necesito que sepas algo Jungkook —le dijo.

—¡Ay no! —exclamó como si de un niño berrinchudo se tratase— Otro de tus secretos no por favor Kim —le pidió.

—La verdad no es un secreto, tan solo es mi historia —respondió mientras jalaba una silla para sentarse frente al pelinegro...

¡La historia que viví luego de separarnos!