PRÓLOGO
Después de encargarse de un hombre que provocó un incendio en uno de los almacenes de su jefe. Jungkook llevó a Namjoon de regreso a su mansión. El hombre había decidido no volver a ver a Jin, la persona que quería ese día, ya que quería que el chico se preparara.
Nada más llegar, la ama de llaves de la casa y a quien todos llamaban cariñosamente como Nana, los recibió a ambos. Namjoon se dejó caer en el sofá mientras le pedía un trago.
—Últimamente hemos trabajado demasiado, ya es necesario descansar —dijo el moreno dirigiéndose al ama de llaves pues ya era tarde para que siguiera despierta.
—Te estaba esperando hijo, necesito hablar contigo.
Namjoon la miró extrañado pues la actitud de la mujer era sospechosa.
—¿Qué sucede? —preguntó sorprendido al ver el rostro preocupado de su nana.
Él quería a esa mujer como si fuera su verdadera madre, sabía que se preocupaba por él y por Jungkook al igual que por sus demás empleados, así que estaba más que dispuesto a ayudarla en lo que necesitará.
—Bueno, me gustaría pedirte permiso para traer a mi nieto aquí, la inconsciente de mi hija lo abandonó, el niño no sabía a dónde ir y al final llegó llorando hasta la entrada de la casa. Lo dejé en mi casita sin tu permiso, se que hice mal, de verdad, lo siento —concluyó la anciana con voz baja y agachando la cabeza.
—¿A dónde fue? ¿Cómo pudo dejar al niño solo y a su suerte? —preguntó el moreno en tono estresado.
Conocía a la familia de su ama de llaves desde hace muchos años, su hija al principio ayudaba en la casa, pero cuando quedó embarazada de un antiguo guardaespaldas ambos se fueron y alquilaron una casa cerca de ahí, hasta que su marido murió en un accidente el año pasado.
Al principio Namjoon y su madre le habían pedido que regresará a trabajar ahí, pero ella se negó y decidió criar a su hijo sola, jamás se imaginó que fuera capaz de abandonar a su propio hijo.
—No lo sé, pero puedes preguntarle a Jimin. Solo se que tenía un novio que era extranjero según él, dijo que ella le dijo que iría a verlo, eso fue hace unos días y no ha vuelto. Jimin me dijo que el casero fue a exigir la renta o lo echaría a la calle, él no tenía el dinero, así que solo pensó en venir aquí —contestó la anciana con la voz quebrada y llena de vergüenza por lo que le había hecho su hija a su nieto.
—¿Dónde está tu nieto?
—Le dije que me esperara en mi cuarto, no se atrevió a salir temiendo que no estuvieras de acuerdo con su presencia en la casa.
—Llámalo, déjame hablar con él —dijo y la mujer salió de inmediato para buscarlo.
—¿Vas a aceptar que ese niño se quede aquí? —le preguntó Jungkook, por la amistad y confianza que ambos se tenían al haber crecido juntos.
—Sí, lo haré. Si he aceptado a otra gente que no lo haga por un niño, sería inhumano de mi parte.
Después de un tiempo, la anciana entró con un joven con el rostro brillante, pero con lágrimas en sus ojos y mejillas.
—Saluda apropiadamente Jimin — le dijo la mujer a su nieto.
—Buenas noches señores —saludó el joven a Namjoon y Jungkook.
El jovencito hizo una reverencia, estaba un poco asustado por la fuerte mirada de los dos hombres sobre él.
—¿Cuál es tu nombre? —le preguntó Namjoon.
—Jim… Jimin señor, Park Jimin —respondió nervioso.
—¿Cuántos años tienes?
—Quince señor —respondió en voz baja.
—¿Estudias?
—Sí, estoy estudiando la secundaria, pero no he ido a la escuela en dos semanas —respondió el joven con los ojos brillantes por las lágrimas retenidas.
—¿Por qué?
—Mi mamá no tiene dinero para pagar la escuela —replicó de nuevo el joven causando que tanto Namjoon como Jungkook fruncieran el ceño.
—No entiendo qué pasa con mi hija señor, yo le pasaba un dinero cada mes para ayudarla, apenas la semana pasada le di una cantidad.
El pelinegro suspiró frustrado, tratando de controlar su molestia.
—¿Qué hay de las pertenencias de tu nieto? —se dirigió a su nana, con la voz dura. No le gusto nada la situación del joven, lo hacía pensar en su propia infancia.
Namjoon fue un huérfano que había sido abandonado por su madre en un orfanato. Había crecido ahí, junto a Jungkook y cuando ambos salieron, estuvieron luchando para ganarse la vida por sí mismos. El caminó por el sendero oscuro hasta que llegó al punto de mezclarse con la mafia, y después buscó a su amigo para que lo ayudara, luchó por llegar hasta donde estaba, y cuando tuvo la oportunidad ayudó al orfanato donde crecieron.
—No tome nada, tuve miedo de que el dueño del cuarto se diera cuenta de que escapé por no tener dinero para pagar el alquiler —contestó Jimin mientras veía a su abuela.
Namjoon guardó silencio un momento, meditando las cosas antes de dirigirse a su hombre.
—Jungkook, quiero que mañana vayas con Jimin hasta el cuarto donde vivía, liquidez lo que se deba y que recoja sus cosas, luego vas a su escuela y ve que se necesita para transferirlo a un mejor colegio —ordenó en tono serio.
—No es necesario que te tomes tantas molestias hijo, con que permitas que viva aquí es suficiente —habló la anciana.
—No es ninguna molestia nana, yo voy a encargarme de todo lo que Jimin necesite de ahora en adelante, no te preocupes —contestó el pelinegro causando que las lágrimas brotarán de los ojos de la mujer.
—Muchas gracias hijo, te lo agradezco tanto —agradeció la mujer mientras hacía una reverencia —Mimi agradecerle a Namjoon —se dirigió a su nieto.
—Gracias señor —dijo el joven, también llorando.
—Tranquilo, no llores, todo está bien. Solo pórtate bien, estudia mucho y ayuda a tu abuela en lo que puedas. A partir del día de hoy estarás bajo el cuidado de Jungkook —dijo señalando a su mano derecha —así que deberás de obedecerlo, ¿Entendido?
El niño asintió mientras veía sorprendido al hombre de mirada feroz que estaba parado detrás del moreno y se escondió detrás de su abuela con algo de temor.
—Yo… yo prometo no dar problemas —contestó con voz temblorosa.
Namjoon sonrió levemente, se dió cuenta de que ese niño era un buen chico.
—Gracias hijo, me llevaré a Jimin a descansar, y mañana temprano lo mandaré con Jungkook para que lo lleve a dónde vivía.
El mafioso asintió y dejó que la anciana y el pequeño se marcharán.
—Jungkook, quiero que dejes todo listo con Jimin antes de irnos, y como dije de ahora en adelante estarás a cargo de su cuidado.
El hombre hizo una mueca, pues no estaba acostumbrado a tratar con niños, pero aún así asintió antes de darse la vuelta y salir al jardín para ir a su casa en la parte trasera de la mansión.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro