Jimin sentía su cabeza pesada y le dolía, mientras seguía resonando la voz de sus pesadillas y al parecer de su pasado olvidado, abrió lentamente los ojos y se congeló al encontrarse con esos oscuros ojos de dragón viéndolo fijamente, su estómago dió un vuelco por la intensidad con que lo veía. No podía apartar la vista, se sentía como hipnotizado, se sentía como cuando Jungkook lo miraba, todo a su alrededor desaparecia.

Namjoon podía sentir el tibio aliento del chico golpeando su rostro, sabía que debía apartarse, pero simplemente no podía, esos preciosos ojos miel lo veía de una manera que no sabía identificar, sus ojos bajaron hasta esa pequeña boca de gruesos labios y volvió a preguntarse qué se sentiría besarlo.

Jimin parpadeó repetidas veces al tiempo que los ojos negros rompieron el contacto visual y se removió nervioso.

—Por fin reaccionaste, pero no te levantes —habló el moreno con la voz más ronca de lo normal y se levantó del sofá, tenía que poner distancia.

—¿Quien… quien eres? ¿Qué pasó?

—Soy Kim Namjoon, te desmayaste en el templo y te trajimos a la casa para que te revisara un doctor.

—No es necesario, ya estoy bien —dijo Jimin mientras volvía a intentar levantarse, pero nuevamente se mareo y se dió por vencido.

Taehyung regresó y vio a su amigo ya consciente, y se apresuró a su lado.

—Mimi, despertaste, me preocupé mucho, todo por no querer comer nada ni descansar.

—Lo siento —dijo mientras veía de reojo a Namjoon.

—Hobi ya está llamando al médico, deja que te revisen por favor.

Él asintió y se volvió a recostar, cerró los ojos que le dolían como parte del intenso dolor de cabeza, Hoseok regresó avisando que el doctor ya estaba en camino.

—Namjoon, Choi Mu Jin quiere verte antes de irse y el detective Min también, ¿Que les digo?

—Dile a Min que yo lo busco después y lleva a Choi a mi despacho, necesito terminar aquí —respondió, Hoseok asintió y volvió a salir.

—Taehyung déjame solo con él —le ordenó al novio de su empleado, necesitaba hablar con Park Jimin y no podía dejar pasar la oportunidad.

El castaño lo miró con interrogación, y después se volvió hacia su amigo, que seguía con los ojos cerrados. Entendía que Namjoon quisiera hablar con Jimin, pero no creía que fuera el momento.

—No creo que sea el momento, ¿no puedes esperar a que se encuentre mejor?

—Dejanos solos Tae, todo está bien y yo también quiero hablar con él —murmuró Jimin que seguía sin abrir los ojos.

—Muy bien —aceptó, se puso de pie y se acercó al moreno —se cuidadoso con él, ya ha sufrido demasiado, por favor.

Namjoon asintió y esperó a que se marchara el castaño para hablar.

—¿Qué recuerdas del accidente? —pregunto directo.

—Nada, no he podido recordar nada. ¿Eres realmente hermano de Jungkook? —respondió con calma, para después hacer sus propias preguntas.

—Lo soy, Jungkook era mi hermano pequeño. ¿Qué es lo último que recuerdas?

Jimin sonrió al pensar en su último recuerdo, que curiosamente era con su novio…

El cielo estaba repleto de estrellas, Jungkook y él estaban recostados sobre la arena, sus cuerpos estaban desnudos, la adrenalina de haber hecho el amor en la playa arriesgándose a ser visto, aún fluía por sus venas.

—Jimin, si te pidiera que nos fuéramos de aquí ¿Te irías conmigo?

—Yo iría contigo a la luna si me lo pidieras Kookie, sabes que te amo con todo mi corazón.

El agarre en su cintura se volvió más fuerte y sintió los labios de su novio en su cabeza. Él se levantó y giró su rostro buscando que ahora el beso fuera en sus labios, el fuego volvió a encenderse con cada caricias que recorría su piel, se subió por completo sobre el musculoso y fuerte cuerpo de su novio sin dejar de besarlo, sintió la dureza de su falo frotarse en su trasero, lo elevó solo un poco y volvió a bajar gimiendo al sentir la intromisión, no había dolor pues aún se encontraba dilatado por la acción previa.

Sus cuerpos estaban fundidos, convertidos en uno, entregados a la pasión e inmenso amor que sentían el uno por el otro, el clímax explotó lanzándolos a un exquisito éxtasis. Jimin amaba a Jungkook y sabía que era correspondido.

Namjoon vio como silenciosas lágrimas resbalaban por el delicado rostro de Jimin, no necesitaba que le dijera en voz alta que recordaba, sabía que era a Jungkook. Ese chico tal vez conocía más a su hermano de lo que él mismo lo hacía o el resto de su familia, el dolor que sentía era genuino, Min Yoongi se equivocaba al pensar que él tenía que ver con su muerte.

Jimin abrió los ojos y suspiró, se limpió las lágrimas y se levantó con cuidado.

—No puedo decirte los detalles pero lo último que recuerdo con claridad es haber estado con Jungkook en la playa en Busan. Después de esa noche volvimos a Seúl, me dejó en mi casa y él se marchó, mi padre me dijo que eso fue dos días antes de haber desaparecido, al parecer habíamos pasado el fin de semana allá.

—Ya veo, y ¿nunca has buscado ayuda para recordar?

Jimin se levantó haciendo un esfuerzo por evitar el mareo y caminó hasta pararse enfrente del hermano de Jungkook, le molestó tener que voltear hacia arriba para verlo, pero aún así no se intimidó.

—Mi novio, la única persona que he amado desapareció, y yo estuve en coma durante un año. ¿De verdad crees que no he intentado recordar? Cada maldito día desde que desperté y supe que él no estaba he querido recordar que pasó, todos los días me despierto llorando, gritando y agitado por qué sueño cosas que no se que significan, se que algo tiene que ver con lo que sucedió, pero solo son fragmentos de un rompecabezas del que no tengo la imagen completa como referencia.

La vehemencia de sus palabras le sorprendía y le gustaba, el carácter de ese chico le fascinaba tanto como su físico, y entendía perfectamente que era lo que había visto su hermano en él.

—En lugar de preguntarme si recuerdo o no, por qué mejor no te preguntas a ti mismo dónde estabas antes de que tú hermano desapareciera, ¿por qué en los cuatro años que lo conocí  jamás te menciono o a su familia? Ahora lloran y lamentan su muerte, pero ¿dónde estaban para evitar que pasará? Sin importar cuál sea la razón por la que sucedió.

Namjoon frunció el ceño, por las palabras del chico, ¿en realidad su hermano jamás le habló de ellos?

—Tienes razón en lo que dices, pero también te equivocas al juzgar las cosas sin saber, lamento decirte que en los cuatro años que conociste a mi hermano nunca lo conociste en realidad.

—¿De qué hablas?

—El Jeon Jungkook que tú conociste, no es el mismo Kim Jungkook que yo conocí, hay una historia detrás que tú desconoces y que mi hermano prefirió omitir, pero eso no es relevante ahora, necesito que me ayudes a descubrir qué sucedió, las respuestas detrás de su muerte y de tu accidente están escondidas en tu cabeza, ayúdame y ayudate a ti en el proceso.

—¿Y que te hace pensar que tú podrás lograr hacerme recordar? ¿Qué sabes tú qué no sepan los médicos y psicólogos que he visto? —refuto Jimin incrédulo y molesto por la soberbia de ese hombre, ¿cómo se atrevía a insinuar que no conocía a Jungkook?

—Tengo los recursos, acceso a los mejores médicos, hay tratamientos que podrían servir.

A pesar de su molestia, la semilla de la duda creció en Jimin, ¿Y si de verdad él no había conocido realmente a Jungkook? Él quería recordar,saber que había sucedido, darle por fin un cierre a todo eso, saber qué fue lo que los llevó hasta ese punto en el que Jungkook ya no estaba.

Iba a responder cuando Hoseok volvió a entrar acompañado de un hombre.

—El doctor está aquí —dijo notando la tensión que se respiraba en el salón.

—Ok, entonces los dejo solos para que revise al joven —dijo Namjoon mientras se dirigía al doctor y después volvió la vista hacia Jimin —espera aquí cuando acaben, aún tenemos cosas que hablar.

Jimin asintió más por ser educado, que por realmente querer continuar con la conversación, lo vio caminar fuera del salón y entrar a una puerta que suponía era el despacho donde antes le había dicho a Hoseok que llevará al hombre que quería hablar con él.

Namjoon cerró la puerta de su despacho, Choi Mu Jin ya lo esperaba y se puso de pie apenas lo vio entrar.

—¿Todo bien Kim? Vine que estabas con un muchacho cuando entre, ¿es el mismo que se desmayó en el templo?

—Sí, era el novio de mi hermano, todas las emociones vividas lo afectaron, pero ya lo está revisando un doctor.

—Que bien, dices que era novio de Jungkook, ¿piensas que él sabe que pasó?

El moreno iba a responder, pero había algo que no le dió confianza, si bien Mu Jin había sido socio de su padre durante mucho tiempo, él no lo conocía y no le gustaba la forma en que preguntaba sobre cosas que no debían de interesarle, así que prefirió evadir la respuesta.

—Señor Choi, dígame qué quería hablar conmigo, como comprenderá ahora no es un buen momento para la familia —dijo mientras se sentaba detrás de su escritorio e invitaba al hombre a hacer lo mismo.

—Tenemos negocios pendientes, cosas que quedaron inconclusas con la enfermedad y muerte de tu padre y que no había podido venir a resolver antes.

—Mi padre murió hace un año y yo me he hecho cargo del negocio desde hace dos, ¿Por qué vino hasta ahora?

—Había estado fuera del país, cuidando unos negocios que tenía pendientes, no había podido volver, pero ya que estoy aquí decidí terminar lo que inicié hace tres años —la voz serena y fría de ese tipo, junto a su sonrisa, despertaron las alarmas en Namjoon, en definitiva ese hombre no le gustaba en lo absoluto.

Asintió, pero no continuó con la charla.

—Muy bien, pero como le dije ahora no es un buen momento, ¿Por qué mejor no nos reunimos en mi oficina? ahí es el lugar adecuado para hablar de negocios, ¿le parece?

—Muy bien, tienes razón, entonces me pondré en contacto, y nos reunimos después —respondió el hombre con un deje de molestia en la voz que supo disimular mientras se ponía de pie — nos vemos luego Kim y nuevamente mi más sentido pésame por la muerte de tu hermano.

Namjoon hizo una reverencia breve y escoltó al hombre fuera de su despacho, al tiempo que ellos salían también lo hacía el doctor que era acompañado por Jimin y Hoseok. Vio como Mu Jin veía a Jimin, el asentimiento de cabeza en forma de saludo cuando se cruzaron y la forma en que su mirada lo siguió hasta la puerta, y no le gustó nada, tendría que investigar muy bien a ese hombre.

Jimin sintió un estremecimiento recorrer su cuerpo cuando se cruzó con ese tipo, algo en esa mirada le dió miedo y le provocó un destello de reconocimiento, ¿pero de dónde lo conocía? ¿Realmente lo conocía o solo era su imaginación? Se preguntó antes de escucharlo hablar.

—Nos vemos Kim, adiós jóven —dijo y Jimin casi se volvió a desmayar, esa era la voz de antes, la misma voz distorsionada de sus pesadillas.

Se detuvo en seco y palideció, cuando otro pedazo de sus sueños volvió.

Jungkook tapaba su cuerpo con el suyo, ambos estaban parados muy cerca del precipicio, la lluvia mojaba sus cuerpos, varios hombres se erguían frente a ellos, pero había uno que estaba más cerca, un impermeable negro cubría su cuerpo y la capucha le impedía ver bien su rostro, solo lograba ver una sonrisa torcida, levantó una de sus mano apuntandoles con la pistola que sostenía.

—Entrégame lo que quiero y nadie tiene porqué morir, o por lo menos no él, dame lo que busco y lo dejaré vivir.

—Yo no tengo nada, solo fue una treta para matarnos, un maldito engaño, creado por ti y por… —el sonido ensordecedor de un trueno no le dejó escuchar claramente —pero los dos me la van a pagar, no crean que esto se va a quedar así.

—Los muertos no hablan y mucho menos cobran venganza —fue lo último que ese hombre de negro dijo antes de disparar.

Jimin se tuvo que sostener de la pared por la intensidad del dolor en la cabeza, sintió que alguien lo tomaba del brazo como forma de ayudarlo a no caer, levantó la mirada y volvió a encontrarse con esos ojos de dragón.

—Ayúdame a recordar —le dijo de pronto.

Mientras que afuera de la casa Choi Mu Jin subía a su auto y sacaba su teléfono.

—No me reconoció, pero será mejor que no nos arriesguemos, quiero a Park Jimin muerto, y no quiero errores.

El misterio crece...

Y ya hizo su aparición el villano de la historia o por lo menos uno, les dejo su ficha.

Choi Mu Jin.
52 años.
Empresario y traficante de armas y sustancias ilicitas.
Hombre astuto e inteligente, tiene nexos con las grandes mafias del continente Asiático.
Tiene relación con la muerte de Jungkook.

Nos leemos bellezas...
         Besitos 😘😘😘