Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

(🫧) ━━ OO2; butterflies

╭╾๋╾๋┽๋ ❛𝐆𝐔𝐘𝐒 𝐌𝐘 𝐀𝐆𝐄 ❜ ┽๋╼๋╮
𓄹 🕯! 𝖼𝖺𝗉. 𝖽𝗈𝗌 | 𝗺𝗮𝗿𝗶𝗽𝗼𝘀𝗮𝘀 🥀﹆
┽╌๋╾╮ 𝐰𝐫𝐢𝐭𝐭𝐞𝐧 𝐛𝐲 sprouthyun╰╌๋╌๋┽

El transcurso de la noche siguió bien, en pocas palabras, no había sido de mucha ayuda en la cocina como pensé que lo sería ya que Hyerin se encargó de preparar la cena mientras yo solo me dedicaba a pasarle algún que otro ingrediente o utensilio. La charla en la cocina había sido algo entretenida ya que la pelinegra me contaba lo que habían hecho en el transcurso de la tarde antes de ir al aeropuerto a recoger al mejor amigo de Felix y agradecí que en ninguno momento haya tocado ni un tema mío en particular que no sea el pequeño ataque de hiperactividad en su ausencia.

Cuando la cena estuvo lista y servida en las bandejas más caras, que solo usaba en ocasiones especiales, salimos de la cocina con ellas en manos hasta el comedor mientras que el rubio de mi hermano y su amigo nos ayudaban a traer los platos, vasos y cubiertos.

───¿Pudiste escribir algo?

───Eso no es de tu importancia.─── respondí tosca dejando la bandeja sobre la mesa.───No quiero hablar de eso... Por ahora.

───¡Oye.!───ruedo los ojos al oír venir el regaño.───No porque tengas confianza puedes responder así.───reprendió Felix acercándose con los platos.───Muchos menos a quién te ayuda.

───Es que esos tontos capítulos me estresan y me pone molesta no poder escribir una sola palabra.───me quejo sentándose en la silla de la mesa, tirando de mis cabellos bajo la antena mirada de la pareja.───Lo siento, Hyerin.───me disculpé una vez que el rubio había cruzado el marco de la puerta de la cocina.

───No te preocupes, Yuna.───sonrío pasándome las servilletas restando completa importancia.───Sabes que no me molesta que me hables así de todas formas es nuestra forma de tratarnos solo que aún Felix no lo comprende.

Suspiro cansada y cruzó los brazos sobre mi pecho esperando a que los demás se unieran a nosotras, hoy estaba cien por ciento segura que apenas tocara la cama caería dormida gracias a todo el ajetreo que estuve haciendo en la tarde con tal de evadir mis obligaciones pero mentiría si dijera que no había intentado escribir en ese transcurso de la tarde solo y por eso preferí ponerme a mover muebles en vez de perder dos horas sentada enfrente de mi computadora tratando de terminar y escribir algunos capítulos pero lamentablemente no lograba concentrarme o mantenerme inspirada por mucho tiempo.

No estaba prestando la suficiente atención que merecía la charla que se había creado entre la pareja que no supe en qué momento la conversación había tomado entorno hacia mi ya que había sido un logro para ellos que pasara un buen rato afuera de mi habitación y de mi computadora.

───¿Capítulos? ¿De qué me perdí?

Di un brinco del susto al oír la voz del hombre, había estado tan sumergida en mi mente que no me había siquiera percatado que Changbin aún nos brindaba la noche con su presencia y rogué a Dios para no ser avergonzada por mi hermano pero mi petición esta noche no había sido escuchada.

───¡Cierto! Eres nuevo por aquí.───comentó el rubio haciendo comillas con sus dedos en sus últimas palabras.───Estas a lado de una escritora estrella, amigo.───explicó con una sonrisa de oreja a oreja haciendo que la mirada del mayor se centrará en mí.

───No es la gran cosa, Felix, así que deja de...

───¿No es la gran cosa.?───preguntó ofendido.───Siempre nos hablas de cómo tus libros aumentan sus vistas y cómo la gente pide por más.───recrimino acomodándose mejor en su asiento.───Está en su modo vergonzosa sino estaría alardeando ahora mismo.───hablo hacia su mejor amigo antes de volver a dirigir su mirada a mi.───¡Hasta fuiste contactada por tres de las más famosas editoriales del mundo.! Así que por favor, no me digas que no es la gran cosa.

───Bien, ¿Ahora puedes dejar de...

Una vez más fui interrumpida pero esta vez por el hombre a mi lado haciéndome sentir más pequeña de lo normal: ───¡Eso es asombroso.! Pero ¿Por qué no nunca leí nada de ti.?

───Oh, puede que lo hayas leído sin darte cuenta.───explicó el rubio sirviendo un poco de vino y no me queda de otra que apretar los labios al ser interrumpida por tercera vez en la noche.───Yuna escribe bajo un seudónimo.

───¿Y sobre qué escribes?

───Yo... Este... Yo... ───tartamudeo nerviosa al sentir su mirada y la mente se me queda en blanco ante su pregunta ya que no podía responder que escribía sobre gente dándose como conejos, realmente no podía.───Este... E-es sobre... ¡Romance.! Escribo, bueno intento escribir sobre romance y otras cosas.

───Sus libros no giran en torno a eso, escribió varios pero el más famoso es...

───¡¿Por qué estamos hablando de mi cuando la visita es él y tú estás a punto de casarte?!───interrumpí de repente con la esperanza que me dejara de lado.

───Ella tiene razón, Lix.───apoyo la pelinegra.───Ya sabemos que eres un hermano orgulloso pero debes controlarte y dejar de avergonzar a tu hermana, cariño.

───Lo siento, solo es que aún no puedo creer que ésta tonta haya rechazado poner su nombre real y también a esas editoriales.

───No las rechace, solo pedí un tiempo para reescribir algunas cosas.───comente incómoda por la atenta mirada del hombre sentado a mi lado.───De todos modos, ¿Ya han pensado dónde será la luna de miel.?

Y creando un nuevo tema de conversación doy por terminada la atención a mi persona y, agradezco a Hyerin que haya tomado las riendas y ahora nuestra atención esté sobre ellos y su compromiso; bebo un poco de agua escuchando atentamente a cada pequeño detalle y sonrió algo embobada por la forma en que mi hermano observa a su futura esposa y, por alguna razón me siento extraña, haciéndome cuestionar qué estaba haciendo mal en mi vida y porqué mis relaciones no podían pasar más de tan solo dos meses.

Si era sincera la mayoría de mis rupturas se debían a mí y en cada una de ellas me preguntaba porqué seguía intentándolo sabiendo como terminara eso pero, en el fondo, quería creer que algo podía cambiar pero siempre terminaba arruinando.

La noche transcurrió serena, la cena estuvo deliciosa y los temas de conversación no fueron para nada escasos, en ese transcurso conocí un poco más del hombre de treinta y cuatro años que se encontraba sentado a lado mío como por ejemplo; que había dejado Seúl apenas había terminado la universidad, que era contador en una de las empresas de su padre y que actualmente no estaba atado sentimental con nadie.

Cosa que se me hizo bastante raro y curioso, los hombres a su edad solo estaban solteros por dos razones, la primera era por raros y actitudes poco cuestionables, infieles y mentirosos y, la segunda era porque realmente solo estaban bien teniendo algún que otro encuentro ya que estaba "enfocados" en sus trabajos y a vivir solos.

Agregó un poco más de jabón en la esponja y la mojo con bastante agua a la espera que la espuma apareciera, suspiro cansada oyendo mi celular sonar por incontable vez en la noche

───¿Puedo ayudarte en algo?

El susto que me provocó hace que suelte la cuchara que sostenía y cayera al suelo, intentó recogerla pero él es más rápido que mi tomándola en su mano y extenderla hacia mí; con lentitud agarro el cubierto de entre su mano rozando casualmente sus dedos contra mi piel sin romper el contacto visual que manteníamos.

───Lo siento, no fue mi intención asustarte, Yuna.───asegura apoyándose contra la mesada sin dejar de prestar atención a mis movimientos.───Entonces... ¿En que te ayudo?

───N-no es nada.───dije acomodándome más cerca del lavaplatos, como si fuese algún tipo de escudo.───Puede ayudar a secarlos.

Sin esperar otra palabra más tomó el trapo que se encontraba a su derecha y empezó a secar los platos que había colocado en el seca platos, el silencio se me hacía un tanto incómodo, no, en realidad su presencia me lograba incomodar sin motivo alguno quizás era por el repentino acto de ayuda o porque sentía que iba a invadir mi espacio en cualquier momento, fuera lo que fuese solo me concentre en lavar los platos con su presencia a mi lado.

───Así que eres escritora.───habló luego de un largo silencio, sacando el peor tema de conservación.

───Eso intento.

───¿Intentas?───inquiere tomando otro plato.───¿Estás siendo modesta.?

Por una razón esa pregunta me causa gracia y soltando una risita extendiéndole un vaso: ───La modestia no va conmigo, señor Seo.

───No soy tan viejo, Yuna, puedes llamarme por mi nombre.

Reprimo una sonrisa y solo me mantengo con la mirada fija en el agua que llena la bandeja de cristal, como si fuera la mejor vista que había en esta cocina. La presencia del hombre me ocasiona un nerviosismo que no había experimentado nunca, quizás era la cercanía o el interés de mantener una conversación alguna conmigo.

Quizás solo era educado pero quería creer que era más que simple educación y la forma en que sentía su mirada encima mío me hacía pensar en todo menos lo debido; con una sonrisa le extiendo la fuente que había lavado y como un "accidente" derrame el agua que contenía encima de mi camiseta, la cual no tardó en absorber el agua y volverse transparente dejando a la vista un poco de mis pechos.

───Mierda.───maldije aparentando inocencia bajo su mirada.

Una vez más me pongo frente al lavabo de la cocina haciendo un puchero por haber mojado mi remera y por nada en el mundo dejo de sentir su mirada intensa en mí o por lo menos hasta que mi cuñada hace presencia con mi hermano detrás en la cocina trayendo los últimos platos que se usaron para el postre.

───Hay alguien en la puerta de entrada.───explicó Hyerin dejando los platitos en el lavabo.───No esperábamos a nadie, ¿Tú sí.?

───Seguro es Chaewon, quedamos para ver la función de medianoche.

───¿Vas a salir?───pregunto esta vez mi hermano apoyándose detrás de su prometida.

───No me queda de otra.───con una mueca término de enjuagar el último plato que Hyerin trajo, me secó las manos con el trapo que me extendía el hombre a mi lado y sonrió en agradecimiento por su acción.───Chaewon planeo esto desde hace más de una semana y no pude negarme luego de darle un millón de excusas para no salir.

───Sabes que salir puede ayudarte, ¿No?

───Y aún más si estás estancada, puedes ver algo que reviva tu inspiración.

Oh, no era necesario salir de mi casa para tener inspiración porque él hombre a mi lado me la había dado con tan solo verlo parado en mi sala de estar vistiendo completamente de negro.

───¿En que irán?

───Tomaremos el último autobús y supongo que al final volveremos en un taxi.

───Puedo acercarlos si gustas

───No, no.───negué rápidamente.───Debe estar cansado, señor Seo y no sería justo que tenga que llevarnos.

───No lo es, puedo llevarlos ya que me queda de paso a mi departamento.

¿Departamento.? ¿Acaso no iba a quedarse aquí.? Bueno, tener un lugar dónde pueda dormir tranquilo y hacer sus cosas sin molestar a nadie era lo mejor. Sin negarme más acepto su propuesta sonriendo con pena hacia él y hacia la pareja.

───Bien, entonces voy a buscar mi cartera y nos vamos.

Realmente corro hacia mi cuarto para cambiarme la blusa mojada, tomo mi bolso que se hallaba colgado en el respaldo de mi cama, me coloco un poco de rubor y brillo labial antes de volver a la sala donde ambos hombres se encontraban a mi espera; me despido de Felix con un abrazo y salgo del departamento con Changbin detrás mío hasta llegar al ascensor.

El camino hacia el cine estaba siendo tranquilo adornado por la música que se reproducía por la radio del automóvil que el señor Seo había rentado hasta que su estadía aquí terminará, por lo que sabía Changbin había venido para la boda de Felix, ya que era su padrino y de paso por algunos asuntos en la empresa de su padre que era administrada por su hermana mayor.

Mientras él y mi amigo mantenían una conversación, de la cual no estaba al tanto, yo me dedicaba a observar por la ventana y dar algún que otro gesto afirmativo cuando mi amigo me lo pedía.

───Yuna ¿Por qué no me dijiste que el mejor amigo de ti hermano era tan genial?.

───No puedo decirte algo que no sé, Chae.

───Claro que me conoces.───comentó el hombre despegando su vista del camino por unos segundos.

───Conocía su versión de los veinte, Señor Seo, pero no conozco la de ahora.───respondí viéndolo con un toque de diversión..───Sería una mentira sí dijera que lo conozco.

───Bueno, en eso tienes razón.

Por primera vez el silencio acapara nuestro alrededor y era tan tranquilizador pero a la vez peligroso, porque por más que hubiera silencio una mente como la mía parecía no conocerlo y usaba eso para comenzar a maquinar todo el recorrido y eso era una total mierda pero gracias a Dios no paso ya que habíamos llegado a nuestro destino.

───Puedo pasar a recogerlos luego.───habló el adulto viéndonos bajar de su auto.

───No es...

───Sería estupendo, señor.───interrumpió apresurado y más emocionado que nunca.───Así podemos seguir hablando de su viaje a España.

───Ya vámonos Chaewon, la función ya va a empezar.───dije entrelazando nuestros brazos para comenzar a caminar hacia el lugar.───Muchas gracias por traernos, Señor.

Sin esperar ni un palabra de su parte comencé arrastrar a mi amigo hacia la entrada del cine pero el hombre llama por mi nombre antes de que pueda dar otro paso y un escalofrío recorre mi cuerpo cuando pide que me acerca hacia la ventanilla del conductor; doy varios asentimientos hacia mi amigo haciéndole saber que estaba de acuerdo a que se adelantara y sin más me acerco con tanta cautela hacia el hombre como si estuviera a punto de comerme vida y cuando quedó a tan solo centímetros de la ventanilla me extiende una tarjeta con su número escrito en ella y, siento que un remolino de mariposas en el estómago cuando por segunda vez en la noche sus dedos rozan la piel de mi mano.

───No importa la hora, solo llámame.

───Buenas noches, Señor Seo.

segundo capítulo, espero que les
guste ^-^

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro