Chip se había quedado dormido en el sillón al estar trabajando en algunas canciones nuevas. El cansancio le había ganado y terminó por dormirse ahí mismo, dejando todo de lado. Según solo iba a descansar unos minutos y ese descanso se convirtió en dormir por una hora o más. Era común que ocurriera, así que no se sorprendería si se despierte y ve que está casi en el suelo durmiendo.

Freddy llegó a casa de la empresa, abriendo con cuidado la puerta en espera de que su esposo llegue como siempre para agarrarlo en brazos y darle besos como todas las tardes. En eso estaba, cuando no pasó. Confundido, fue a buscarlo para preguntarle porque no había ido a abrazarlo como siempre.

Cerrando la puerta, fue hasta la sala de estar y ahí encontró a Chip durmiendo tan tranquilo con la guitarra a un lado y los papeles que usaba desparramandos en el suelo. Suspirando, fue recogiendo cada uno de ellos con cuidado de no despertarlo, dejando después todos los papeles acomodados sobre la mesa de café. Mirando a Chip, se acercó para sentarse a un costado de su cuerpo suavemente. Cruzando sus piernas como siempre al sentarse, se le quedó viendo unos segundos hasta inclinarse hacia él para darle un beso en la frente.

Tapándolo con una sábana que estaba ahí doblada, lo dejó descansar un poco más, yéndose a la habitación a cambiarse la ropa y hacer un poco más de su trabajo en lo que Chip despertaba.