Eran como las diez de la noche, y el grupo uno estaba en la planta alta de la casa.
Hapless veía la televisión de su cuarto, y Dippy dormía en la cama de Pillock, que estaba viendo unas cosas de su trabajo.

Numpty estaba en la planta baja viendo la televisión, no tenía muchas ganas de subir a su cuarto.

En eso, suena el timbre de la casa, este se acercó a la puerta y abrió.

Se atemorizo un poco al ver la máscara de hockey que tenía cierto peliverde, Numpty no lo notaba, pero el verde apretaba la mano de alguien, además de escucharse quejidos.

─ ¿Clod? ¿Qué haces aquí? ─ Preguntó el peliazul, confundido.

─ No hay nadie en la casa del grupo cuatro, así que acudo al tuyo por un teléfono ─ Comento el sicario, levantando su máscara ─ Cierta personita necesita ayuda ─

Numpty dejo entrar a Clod...

Y a Mishap...

Este se tapaba los ojos mientras soltaba quejidos, tenía un grande rasguño de buena profundidad en esa zona, además de que algo de sangre recorría su pantalón.

También noto algo, el sicario tenía enroscado a Udon en el brazo.

─ ¡Clod! ¿¡Qué le hicieron!? ─ Preguntó casi a gritos.

─ Lo intentaron asaltar ─ Comento ─ Ya me encargue de que no se llevarán sus cosas ─

Numpty estaba en lágrimas, le aterraba el imaginarse lo que le hayan hecho.
Se fue corriendo y llamó a gritos a Pillock, pidiendole que llamé una ambulancia.

Aquella persona que Numpty amaba necesitaba ayuda...