4
Clint ayudaba a los Vengadores a llegar a la nave. Todos habían sufrido daños graves.
Suspiró.
La chica era fuerte, demasiado. Si seguían a ese paso, perderían mas rápido de lo que esperaban.
Tenía fe.
Fe en que Pietro y Wanda se arrepintieran y dejaran a Ultron. Sólo si ellos renunciaban tenían mas oportunidades de ganar. Ambos eran fuertes y por más que eran niños, eran buenos rivales. Aparte de que no lo iba a negar, no quería lastimar al niño, ni a la hermana, pero sobretodo a él. Había algo que le cautivaba de él.
—¿Quieres que te releve? — Las voz de Tony lo saco de sus pensamientos.
—No, así esta bien. Si quieres dormir un poco, hazlo ahora, todavía faltan algunas horas. — informó.
—¿Para llegar a dónde? — preguntó.
—Un refugio. — contestó.
Tony se quedó en silencio unos segundos, pero luego asintió y se marchó.
Él siguió pensando.
*****
Los rayos del sol caían sobre el bosque, era una vista maravillosa. Sobretodo porque hacía una excelente mañana.
Aterrizó lejos de su casa y llevó al resto del equipo hacía esta caminando.
—¿Dónde estamos? — escuchó que Thor le preguntaba a Tony.
—Un refugio. — Tony contestó.
—Eso espero. — Él contesto, recordado que Nat había dicho que Ultron probablemente sabía mas de ellos que ellos mismos. Abrió la puerta y pasó, su brazo derecho iba sobre los hombros de Nat.
—Cielo...— habló, esperando que Laura saliera. — Ya llegue. Hola, no vengo solo. Perdón, no pude avisarte. — sintió que no se estaba disculpando por llevar a el equipo, donde habitaban las personas mas importantes de su vida.
—Hola. — Laura se acercó y lo besó.
Luego lo abrazó.
—Es otra agente, obviamente. — Tony dijo, tratando de convencerse a sí mismo. Clint sonrió internamente.
—Caballeros, ella es Laura.
—Si, conozco sus nombres. — él pudo percibir el nerviosismo de ella y sonrió mas cuando Tony levantó levemente la mano para saludarla.
Todos se miraban sorprendidos.
—Woah, aquí vienen. — habló, antes de que sus hijos llegaran corriendo hacía él.
—Papá...— su hija dijo.
—Hola linda. — contestó mientras la alzaba. Luego abrazo a su hijo. — Hola, campeón, ¿cómo han estado? — preguntó.
—Ellos son los...mini-agentes. — escucho que Tony decía.
—Mira tu cara. — dijo al mismo tiempo que Tony.
—¿La tía Nat vino contigo? — su hija preguntó.
Todos los vengadores miraron a Nat.
Él asintió.
—Dame un abrazo de oso...— Nat dijo y la alzó.
—Perdón por llegar de imprevisto. — Steve se disculpó, Clint se abstuvo de rodar los ojos.
—Habríamos llamado antes, pero estábamos ocupados, no sabiendo se existían. — Tony reprochó.
—Sí, Fury aceptó ayudarme cuando me uní a S.H.I.E.L.D., lo mantuvo en secreto y así lo quiero conservar. — confesó.
Nat se acercó a Laura y comenzaron a charlar.
Vio de reojo como Thor salía y el Cap lo seguía.
Suspiró.
*****
Sintió las manos frías de Laura sobre su abdomen.
Le había contado sobre el incidente y ella quería ver si ya estaba bien.
—¿Ves? Te preocupas lo nada, no sientes la diferencia, ¿o si? — preguntó, ella lo seguía tocando.
Ella dejo de revisar y lo miro a los ojos.
—Si van a dormir aquí, deben compartir habitación.
Él rió nervioso.
—Sí, no creo que les guste. — comentó.
El se alejó de ella, no la quería tener cerca.
—Cuentame de Nat y el Dr. Banner. ¿Hace cuanto empezó eso? ¿eh?. — ella preguntó, y él no entendió. La volteo a ver.
—¿Que cosa?. — preguntó, extrañado.
Ella rió.
—Corazón eres tan tierno. — ella se burló.
—¿Nat y Banner? — preguntó extrañado.
Ahora que lo recordaba, ambos habían estado extraños, pero él no les había puesto atención por estar pensando en...
—Te lo explicaré cuando crezcas, Hawkeye. — ella se burló.
—Bueno, si tu lo dices. — respondió mientras se comenzaba a poner una camisa.
Ella se acercó.
—Fue grave, ¿verdad? Nat se ve aturdida. — la cara de ella era de preocupación.
Él no quería contestar.
—Ultron tienes dos aliados...— comenzó — Son unos...niños. — dijo la ultima palabra con dificultad. — Rufianes, ambos...— bajo la vista acordándose de ambos, pero mas de uno. Luego alzo la mirada nuevamente. — Pero los dos son muy poderosos. Y le hicieron daño a Nat. — dijo, aceptando de una vez por todas lo que había tratado de negar. Una idea se le cruzó por la mente, sumamente inapropiada. — Pero alguien tiene que enseñarles modales.
Se alejó de Laura, nuevamente.
—Y supongo que ese seras tú. — Laura dijo, ella lo siguió hasta la ventana.
—Sé que es un honor que seas parte de los Vengadores y estoy orgullosa de ello...pero veo a los otros, esos dioses...
—¿Crees que no les hago falta? — preguntó, temiendo la respuesta.
—Yo creo que si...— él la miró. — Y me aterra la idea. — ella confesó. — Son un desastre.
—Si...— aceptó él. — Pues ahora son mi desastre. — comento, viéndolos distraídamente. La idea anterior no se iba de su cabeza.
—Debes estar seguro, de este equipo, es realmente un equipo. — ella aconsejo, él le dio la razón en su mente. — Que te va a apoyar. — se puso de pie. — Todo cambiara para nosotros, en pocos meses. Nos van a superar en numero y...debes este seguro.
—Si amor...— él la beso.
—Si siento la diferencia.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro