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Tiene una semana, en esa semana no pensará en nada mas que buscar una ciudad lejana en la cual estar,  ahora estaba feliz de tener una "amistad" con Dabi, pues con sus contactos sería por lo menos un poco fácil poderse hacer una nueva identidad. 

Pero ahora solo quería dormirse e intentar soñar con un futuro lleno de luz.

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Cuando despertó y vio el sol que salía entre las nubes, supo que realmente se había quedado dormido, no, lo mas exacto sería decir que se quedó  inconsciente por todo un día una vez que tanto su cuerpo como mente sintieron la paz en el lugar al no estar con sus padres y compañeros, sin perder tiempo y solamente cepillándose los dientes antes de de sacar una maleta llena de polvo bajo su cama, metiendo ropa necesaria al igual que todo su dinero ahorrado a lo largo de los años y viendo que todo lo útil ya estaba listo asintió satisfecho y por fin, después de unas dos largas horas, fue a prepararse un desayuno. 

Comió, vistió e hizo como todo ser humano sus cosas básicas de limpieza, se dispuso a mirar un poco de televisión y esperar que Dabi le regresara el mensaje, porque sí, decidido más que nunca le escribió que necesitaba el favor de falsificar su identidad e incluso dentro de una hora se iría para un nuevo corte de cabello, en su mente, Katsuki quería ser alguien irreconocible.

— Cambia de apariencia, envíame la foto de tu nuevo "yo" y en un día lo tendrás listo — Diez minutos después, esa fue su respuesta —

Contestándole con un simple "bien", entro a la habitación de sus padres y sacó el dinero que ellos tenían guardado en el fondo de su closet, después de todo ellos no lo necesitarían.

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Después de quien sabe cuánto tiempo, su nuevo peinado estaba listo: Su cabello ahora era lacio — que es así como queda cuando su cabello esta húmedo —, y era de un color rojo vino, tenia pupilentes color morados claros que quedaban obscuros al contrastar con el rojo original de sus ojos y en su oreja izquierda llevaba un percing con tres cruces, incluso se había comprado ropa nueva y cambiado a una combinación completamente negra exceptuando los tenis blancos.

Llegando a su casa, hizo los preparativos necesarios y se tomo la foto de la cabeza hacia los hombros, mandándosela al de quemaduras.

— Buen look, te ves genial — El audio sacaba la ronca voz del mayor, parecía que incluso había un toque de risa —

Sin contestarle nada, salió de su casa por la puerta trasera directo hacía la estación del tren y compraría el boleto hacia el lugar mas remoto posible de Musufatu.

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Llegando a la estación se le metió la idea de que podrían rastrear su paradero si desaparecía así como así, regresando unas cuadras mas y yendo a comprar un nuevo celular, apuntó el único numero que necesitaría y exploto el chip después de unos momentos de pensarlo, desechando el celular a la basura, regresó a la estación con la conciencia tranquila.

Su parada fue un pueblo llamado Ike no hikari  un bonito lugar rural para nada conocido y libre de contaminación de los autos y  el bullicioso mar de gente,  casi nada de criminales a menos de que quieran robar pollos y patos. Su nombre viene de un hermoso estanque de lirios de colores parecidos al cristal y cuando los rayos del sol caen sobre los lirios hacen que todo el lugar brille con luces de colores dando un bellísimo espectáculo. 

Ese lugar tranquilo y lejano de los suburbios seria su nuevo hogar

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*Ike no hikari  pueblo inventado por mi equiz. Del significado: Estanque de luz. Aunque en Coahuila (si no me equivoco) hay un lugar llamado: "Estanque de la luz", así que bueeee.

Llevo quien sabe cuanto tiempo con el borrador y no obtuve ninguna nueva ideaaaaa. La próxima tal vez la pause, ah.