Otra semana más.

Taehyung ya estaba a punto de colapsar.

Habían recibido noticias de un carruaje salir del imperio ese día a esa hora, pero eso no decía nada.

También estaba el constante acoso que le daban los alfas de altos rangos y la insistencia de ver a su majestad.

Incluso recibió la carta de los grandes líderes para la visita a su alteza ese día.

Estaba perdido, su cabeza rondaría por las calles del reino y su sangre adornaría la plaza.

Kim Taehyung seguía danos, vueltas frente a las puertas de la oficina del emperador, intentaba pensar en que hacer.

Los alfas consorte estaban cada día más descontrolados por la desaparición del omega pelirrojo.

ㅡ Si existen los milagros que aparezca el mío.

Casi grito frustrado, suspiro.
Luego de eso trato de ingresar por la puerta de la oficina, pero fue empujado hacia el interior de esta misma y la puerta cerrada de manera rápida.

Taehyung gruñó molesto y como instinto de defensa paso su mano bajo sus finas ropas para tomar el mango de una pequeña daga que traía siempre consigo.

Ser el amigo del emperador, su consejero y ahora secretario le hizo conocer el significado de "cuídate las espaldas"

Cuando estuvo a nada de lanzar ce sobre quien fuera que lo había empujado hacia el interior de la oficina imperial, soltó la daga, su rostro se volvió un libro abierto donde podías leer tristeza.

El omega que él anhelaba día y noche estaba allí frente a él.

ㅡ No tenemos tiempo, debes creerme.

ㅡ ¿intentas lastimarme más? ㅡ ignoro completamente las palabras del omega. ㅡ Por favor, tengo suficiente con verte junto a otro y saber que no eres mío.

ㅡ Kim, no es momento de eso. ㅡ Jungkook se acercó y tomó de los hombros al alfa. ㅡ Debes de salir de este lugar, mi padre... Su majestad, ¡Mi propio hermano!

ㅡ No entiendo.

ㅡ Escuche a mi hermano hablar con alguien, él tuvo que ver con la desaparición del emperador. ㅡ el omega estaba claramente alterado y el temblor de sus manos lo había notado mucho. ㅡ Y mi padre está junto a los grandes alfas con dirección a los aposentos de su majestad, ya empezaron a preguntar.

ㅡ Pero...

ㅡ ¡SOLO LO SÉ! Debes irte o te condenarán a muerte por traición. ㅡ La voz del omega empezó a romperse. ㅡ Sí... Si tengo que ver como te decapitan en la plaza, no lo soportaría... Moriría contigo.

ㅡ Tú tienes a alguien más, no deberías de estar aquí... Pueden pensar cosas raras. ㅡ dolía decirlo, Taehyung estaba esforzándose para decir aquellas palabras. ㅡ puedes irte, gracias por avisar tomaré en cuenta esto para seguir investig...

El sonido conciso de la palma del omega impactando con la mejilla del alfa dejó en completo silencio todo, Taehyung se mantuvo con su rostro a un lado sin siquiera moverse.

Las lágrimas de Jeon empezaron a rodar. ㅡ cómo puedes ser tan insensible a mis palabras ¡Es tu vida!

ㅡ Es mi vida, no puedes meterte en ella cuando no eres parte.

No pudieron responder, la puerta empezó a ser azotada y ambos se miraron. ㅡ ¡KIM!

ㅡ Jungkook, siéntate.

ㅡ ¡No!

ㅡ si no abro esa puerta seré aún más sospechoso, por favor.

Los golpes continuaron con insistencia y pronto se convertirían en forcejeo, Jungkook, con todo el dolor que podía contener, se sentó frente al escritorio dando la espalda a la puerta y sobre todo a Taehyung.

El alfa de cabello rozado abrió la puerta. ㅡ Caba...

El sonido sordo del cuerpo del alfa siendo estrellado contra el suelo, siendo rodeado por más alfas, Jungkook se mantuvo mirando al Ventanal mordiendo su labio para no decir nada, pero nada quitaban las lágrimas al escuchar el dolor en las quejas de su alfa.

ㅡ Kim Taehyung, queda usted arrestado en el nombre de la diosa lunar y el imperio por traición, sobre todo por encubrimiento en la desaparición del emperador.

ㅡ No creí que una alimaña como tú tuviera el descaro de acaparar el trono de esa manera tan vulgar.

ㅡ Yo no hice nada, lord... ¡Ah! ㅡ sintió más presión en su espalda, una presión aplastante por pasarte de los soldados que lo tenían atrapado.

ㅡ Silencio, la iglesia tomará cartas en este asunto.

ㅡ ¿Qué?

El trío de alfas estaban sentados en el jardín dentro del Harem cuando uno de los concubinos se le acercó.

ㅡ Los miembros de la iglesia se están haciendo cargo del secretario imperial.

ㅡ Kim no tiene la culpa de esto.

ㅡ Sobre eso no se puede saber, pero por ahora me dijeron que Kim quería verlos a ustedes.

Los alfas consorte, después de que prácticamente se drogaran para poder mantenerse en calma por la desesperación de sus almas al no saber nada de su omega, llenaron una solicitud para tener una audiencia con el secretario Kim.

Aunque ellos también estaban siendo potenciales sospechosos, la verdad es que cierto Lord estaba más empeñado en usar su influencia en que el alfa se hundirá, que en encontrar al emperador.

Los tres alfas ya se encontraban en un salón donde también tenían cada uno un siervo a su lado. Cada siervo cuidando a sus señores al haberles dado sprit en muy pequeñas cantidades para mantenerlos serenos solo ese día.

Prácticamente, se habían drogado y envenenado mínimamente por un bien mayor.

Había sido difícil el poder obtener esa audiencia con un "criminal de alta prioridad"

En total habían pasado 2 días.

Las puertas se abrieron par a par, los consortes alfas, sentados en un mueble individual, cada uno levantaron sus miradas hacia el mismo punto.

Dos betas con uniformes de guardias traían tras de él a un Alfa de cabello rizado, a simple vista no parecía tener nada.

Cuando los guardias dejaron al alfa; el cual había permanecido con la mirada hacia el suelo todo el tiempo; en una silla de madera frente a los tres consortes, estos mismos guardias se reverencia, ron y salieron, quedando custodiando las puertas.

Ahora, los 6 pares de ojos que observaban al alfa parecían no creer el estado del alfa.

ㅡ Señor Kim.