No se podría decir que todo era pacífico.

Luego de la ceremonia de caza y que el pelirrojo quedará ganador por llevar el premio más grande yodo volvía a su monotonía.

Jimin seguía intranquilo antes las miradas, incluso como emperador esas miradas lo juzgan.

En el Harem las cosas eran diferentes, dos alfas discutiendo a gruñidos y amenazas por décima vez en el día.

— ¡Cómo puedes ser tan cínico Lee!

— Solo expresé la verdad, era una basura de alfa, ¡por eso el emperador no te presta atención!

— Si vamos en esas a ti tampoco te da atención.

Otra vez los alfas se mostraron los colmillos, sus ciervos trataban de dejar lo más lejos posible a los alfas; lo menos que se buscaba era una pelea.

ㅡ Siempre eres así, no cambiarás.

ㅡ ¡Yo cambiar! ¡Tú DEBERÍAS ESTAR AGRADECIDO CONMIGO!

Hoseok dio una risa sarcástica, se paró recto soltándose dé sus siervos, luego arreglar sus vestimentas. ㅡ No estaré agradecido con un Alfa de doble filo.

ㅡ ese omega te estaba usando, yo te ayudaba maldito, desquiciado.

ㅡ ¡No me ayudaste! ㅡ Hoseok volvió a gruñir. ㅡ nada más te revolcaste con él en mi habitación, dentro de mi casa.

— Eso demostró que no era para ti.

— Eso no se le hace a un amigo.

Hoseok finamente salió de allí, los demás alfas concubinos murmuraban y reían por la reciente confección de los consortes.

Namjoon por su lado únicamente se había limitado a mirar, se dio cuenta de que pelearse con esos dos alfas no era la mejor opción, simplemente seguía la técnica del pálido. Leer un libro y comer algo en un rincón.

Incluso le pareció interesante el libro que estaba leyendo y ahora no podía parar, siempre algo debe de salir mal y mientras pasaba a la siguiente página el libro fue arrancado de sus manos. — Que interesante, ¿puedo acompañarte?

ㅡ suspiro, debía ser sereno pero no caer en la trampa. ㅡ Claro.

Hoseok gruñía molesto en los jardines imperiales, estaba colérico y quería algo con que desquitar su ira.

Lee Taemin era un hijo de puta.

Hoseok lo insultaba una y otra vez en su mente, realmente lo odiaba.
Sentía su sangre hervir al ver la cara de su ex amigo que terminó acostándose con su prometido y para colmo era tan cínico para volver al siguiente día a pedir perdón.

ㅡ Oye, apestas.

Hoseok giro su cabeza para poder observar al otro consorte que lo miraba aburrido. ㅡ Que demonios quieres ¿Vienes a hacer burla?

ㅡ No entiendo lo que se siente, pero ¿no crees que estás haciendo rabietas estúpidas?

ㅡ Lo dice el idiota que tocó el pecho del hijo del conde. ㅡ Hoseok no tenía ánimos y Yoongi no quería lidiar con un completo idiota.

ㅡ Pelearon por Kain, ¿verdad?

ㅡ ¿Cómo sabes eso?

ㅡ La sangre es aún más fácil de limpiar que un chisme.

ㅡ ¿Si ya sabes entonces para qué me molestas? ㅡ Yoongi tomó asiento a lado de Hoseok, este no hizo nada para impedirlo.

ㅡ Si de algo te sirve, Lee Taemin es una completa basura, un Alfa que roba la pareja de otro alfa aun siendo amigo. ㅡ Min chasqueo la lengua. ㅡ Hay formas menos estúpidas.

ㅡ Sí.

ㅡ No te amargues, hacerlo solo le hace saber que realmente te importa lo que dice y le da luz a seguir hablando.

ㅡ Soy Jung Hoseok, no nos habíamos presentado formalmente antes. ㅡ Hoseok miró al pálido mientras le extendía la mano. Se había presentado sin honoríficos, por lo que Yoon hizo lo mismo.

ㅡ Min Yoongi, nada más nos habíamos topado en el Harem. ㅡ ambos estrecharon sus manos.

ㅡ tenemos las flechas envenenadas, pero ¿realmente crees que no lo matarás?

ㅡ Probamos con la otra bestia demoniaca y no le sucedió nada, parece estar drogado. ㅡ explicó apuntando al cuerpo vivo. ㅡ únicamente necesitamos al omega y lo demás son pequeñeces.

ㅡ Bien, me iré de vuelta, no quiero que me vean contigo aquí, dile a Taemin que más le vale seguir el plan.

ㅡ No juzgo que Lee sea tan estúpido para pasar de nosotros.

El encapuchado de menor estatura solamente asintió antes de salir de las lejanías, montado a caballo con rumbo a Type.

ㅡ Donghae, pobre alfa. ㅡ el nombrado levantó su mirada apenas, estaba a plena trasformación como si fuera un híbrido de humano y un lobo negro.

ㅡ Por favor, ya. ㅡ Apenas podía formular palabra, el veneno no lo mataría, pero lo mantenía drogado a tal punto de no poder sostenerse.

ㅡ cállate fenómeno, espero que seas de utilidad, aunque no te doy fe a que el omega te mate antes de poder hacerle un hijo.

— Nosotros no hicimos nada, solo quiero ser libre. ㅡ nuevamente el alfa se removió tratando de poder soltarse, juraba que cuando pudiera le arrancaría la garganta.

Apenas era un muchacho de 15 años y ya era un Alfa en todo su esplendor, bastante fuerte, parte de las cuatro bestias divinas.

Su captor nada más empezó a reír mientras se alejaba a pasos cortos. ㅡ ¿Libertad? ㅡ cuestionó. — ustedes son solamente animales, no tienen libertad.