TaeHyung se quedó mudo, ahora que no había llamado la atención de ninguno de los dos el olor era totalmente distinguible, y sabía perfectamente que YoonGi no era su omega... Eso sólo dejaba al cuatro ojos, eso no era posible.

Pero el sabía que no había equivocacion, su lobo estaba ansioso pero el apenas y lo estaba dirigiendo.

Taemin y Jackson se acercaron por atrás de él y lo vieron dispuestos mientras se iban acercando a los dos pero el los detuvo.

—YoonGi—. Habló suavemente, aún estába impactado, YoonGi se paró rápidamente y puso a JungKook atrás de él. Estaba llenó de moretones, los labios cortados, un yeso en su muñeca y apenas y podía mantenerse bien de pie.

A TaeHyung lo revolvió la culpa, se suponía que el tenía que cuidar a su omega y ser respetuoso pero ayer el mismo había permitido que lo golpearan e incluso que le rasguñaran. Quiso acercarse pero la voz potente de YoonGi lo detuvo.

—No se acerquen—. JungKook se escondía lo más que podía en la espalda de YoonGi, pero en su mente el ya se encontraba siendo golpeado, porque ¿A quien engañaba? Nadie iba a sacrificarse por el, sus ojos picaron por las lagrimas. Pero un gruñido hizo que volteara.

—No vamos a lastimarlo—. Taemin y Jackson voltearon confundidos— Necesito hablar contigo, es urgente.

—No voy a dejarlo aquí solo, mucho menos con ustedes aquí—. Solo suspiro.

—Prometemos que no le haremos nada—. Bueno el nunca lo haría, al menos ya no. Codeo a los chicos y ellos asintieron pesadamente. YoonGi era importante para ellos.

YoonGi asintió y dejó en vista a un lloroso JungKook mientras lo ayudaba a sentarse y este se quejaba. A TaeHyung le dieron unas ganas enormes de ir hacia el y cuidarlo, pensando: "cuidarlo de las heridas que yo mismo le hice".

YoonGi lo tomo de los antebrazos y se dirigió a un lugar un poco alejado.

—¿Que quieres?—. Habló cortantemente mientras alzaba una ceja.

—Al menos yo... yo... estoy muy arrepentido de lo que hice ayer—. Taemin y Jackson simplemente se lanzaron una mirada y se encogieron de hombros.

—No sabes—. La voz de YoonGi se cortó un poco y sus ojos lo miraron intensamente.—. No sabes lo que para mí pensar que mis amigos ¡Casi matan a una persona—. Grito YoonGi. Los vellos de TaeHyung se erizaron, pudo a haber matado a su omega, su otra mitad, sus ojos se humedecieron y YoonGi lo miro sin entender.

—El es mi omega—. La respiración de todos se atoro y el silencio reino el grupo.

—No te acercarse a el—. Habló YoonGi después de reflexionar.

—¡Pero es mi omega!—. Habló desesperadamente TaeHyung, el estaba a punto de enloquecer.

—Pero no te lo mereces,lo ibas a matar, lo golpeaste, le rompiste tres costillas y una muñeca TaeHyung—. TaeHyung comenzó a llorar mientras Taemin y Jackson lo reconfortaban sin saber muy bien que hacer.

—Todo estará bien TaeHyung, ya verás como te lo ganas—. Le susurró Jackson. TaeHyung se quitó las lágrimas y se enderezó.

—Dejame hablar con el—. YoonGi a pesar del resentimiento con sus amigos, sabía que tarde o temprano ellos tendrían que hablar así que asíntio. Hizo una seña con la mano para dirigirse a dónde estaba el pelinegro.

—No le hables muy fuerte o violentamente, y no esperes a que te responda o hablé muy fuerte porque... ¿Donde está JungKook?—. Todos volteaban a ver a todos lados buscándolo, todos se preguntaban cómo había desaparecido tan rápido en su condición aunque todos sabían la respuesta. Muchas veces lo habían dejado tirado en medio del pasillo y el niño siempre estaba de pie el siguiente día.

—No puedo sentir su olor—. Se alteró TaeHyung—. ¡No lo siento YoonGi!—. Sus manos jugaban nerviosas, nunca se había sentido así, la opresión en su pecho y su lobo quería saber si su pequeño omega estaba bien.

—Tranquilo TaeHyung, hay que dividirnos y buscarlo—. Todos se transformaron en su forma lobuna, comenzando a olfatear y recorrer cada centímetro fuera de su colegió claro está, se habían asegurado que JungKook no estuviera allí.

El pelinegro se encontraba de espaldas a un árbol, no podía caminar hasta casa, su abdomen dolía y todo de él también. No tuvo más remedio que escapar, sabía que ellos iban a regresar a ser amigos y cuando eso pasara, adiós protección, hola segura muerte. Jugaba con las atractivas flores que el árbol botaba pero un sonido de ramas secas y un aroma picante lleno sus fosas nasales.

Un alfa, temblo, se quedó lo más quiero que podía, los alfas en general no eran muy amistosos con alguien que no fuera de su misma clase, si lo encontraba estába perdido.

Su corazón latía desbordado y escuchaba al lobo acercarse mientras olisqueaba, estaba perdido, se aferró a la pequeña flor cuándo un lobo de pelaje café oscuro se acercó a dónde estaba y lo observo de frente. El pelinegro sollozó y se acercó un poco al árbol sintiendo cómo sus costillas tronaban.

El lobo se perdió entre la maleza y el casi suspira de alivio antes de escuchar el gran aullido que brotaba de allí. Y casi al instante salió uno de sus agresores, TaeHyung.

—JungKook—. Su voz sonaba potente instalando un temblor en todo el cuerpo del mancionado.

TaeHyung solo observaba como su pequeño omega sollozaba por la paliza que pensaba iba a recibir. Pero no hablaba, solo se quedaba sosteniendo una pequeña flor y le dolía, le dolía ver cómo su omega se deshacía de miedo al verlo y en el estado que estaba.

Taemin y Jackson salieron de la misma maleza de dónde salió TaeHyung. TaeHyung vio como la mirada del pelinegro se vió derrotada y soltaba la flor.

—¿JungKook...?—. YoonGi salió de la maleza.