Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

trєcє

Akaza: ¡Hoy es el cumpleaños de Kyojurou!

Douma: ¡Oh! ¿Y qué le darás de regalo?

Akaza: Algo que solo yo puedo darle, algo increíble y trascendental

Kokkushibou: Son patatas ¿Verdad?

Akaza: ...Si...

Douma: Akaza-dono no se arriesga en sus opciones ¡Da pena!

Por más que le llegará a enojar el comentario de Douma, y que le tiro a un contenedor de basura por el enojo. Ese estúpido tenía razón

No se arriesgó con respecto a su regalo

Así que pediría ayuda, al único ser que siempre esta dispuesto a ayduarle; quiera o no

Akaza: ¡No se que hacer, Hakuji!

Hakuji: ¡¿Y tú que haces en mi casa?!

Akaza: ¡No se que poder regalarle a Kyojurou de cumpleaños! ¡Ayúdame!

Luego de sus ruegos, Hakuji le dio una buena sugerencia de que poder darle, pero debía hacerlo rápido, pues esta noche era la celebración

Nakime: ¿Quieres qué te ayude en eso?

Akaza: ¡Por favor! Si lo haces prometo darte un biwa nuevo

Nakime: ...De acuerdo. Usa mi cocina

Akaza: ¡Gracias, Nakime!

Akaza: ¿K-Kyojurou? ¿Qué ocurre?

Kyojurou: ¡Hola, Akaza! Esta noche llegaré un poco tarde, los chicos me invitaron a una cena

Akaza: O-Oh... ¿Enserio? Bueno... ¡Diviértete!

Kyojurou: ...Si... te veré después

El peli rosa colgó la llamada, y la de hebras negras se le quedó mirando unos momentos

Nakime: Dudo... que lo coma

Akaza: Descuida ¡Le gustará! ¡Todos aman los pasteles!

Ya era tarde y el de ojos amarillos lo sabía. En verdad que se había retrasado por estar en aquella cena, pero, algo le sabía mal

Akaza no se había quejado porque mencionó que estaría con sus amigos en lugar de él, algo tenía entre manos ese chico; lo podía hasta jurar. Llegó a su hogar, las luces estaban apagadas, todas menos en la cocina

Fue hasta ahí, notando una nota sobre la mesa con una simple oración

«Feliz cumpleaños Kyojurou, cómeme»

Conocía esa letra como ningún otro, pero, quien la porta no estaba. Hasta ahora

Akaza: ¡Oh, Kyojurou! ¡Bienvenido! ¡Leíste la nota!

Sin decir nada, el rubio se dio la vuelta, encontrándose a su pareja solo toalla que parecía recién duchado. Se acercó y con la misma tomó de la cadera al peli rosa, llevándolo a la habitación

Akaza: K-Kyojurou... ¿Qué estás haciendo?

Kyojurou: Solo estoy obedeciendo a lo que dice la nota

Akaza: P-Pero, la nota es para-...

Kyojurou: No te preocupes. Prometo no desperdiciar nada~

Ese día, Akaza aprendió la lección. No volvería a dejar una nota para Kyojurou si el pastel sigue dentro del refrigerador

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro