Evimeria.Zona norte.
Club "Notte di fuoco"
(Noche de fuego)

Tras dejar a aquel mentiroso dormir plácidamente en el sofá,salí por la puerta sin decir nada.Me había mentido.Me había hecho besarle,había conseguido hacerle sentir bien.Me había enrollado con un puto chico,un chico que jugaba a los disfraces de seducción por la noche,en mansiones de la mafia.Sus malditas caderas me habían conducido a la locura,de verdad.Y aquel trasero...joder.

Pero no.No no no.No iba a estar con un chico.Me negaba.Era hetero,100 % hetero.Solo chicas,si.Aquello...aquello había sido un desliz pasajero.Eso de sentirme bien sabía que era psicológico.

Entré en la mansión de forma sigilosa.Las pobres criadas limpiaban el estropicio que habían dejado los invitados y mujeriegos que había visitado la mansión en busca de fiesta y desahogo.Gesticulé con mi dedo índice la señal de silencio.Las criadas me miraron preocupadas.Tan solo comentaron cosas en voz baja y continuaron con sus tareas.Subí en silencio las escaleras,buscando mi preciada habitación.Algo me paró:un olor característico.Olia a tabaco caro,y sabía que era Giulio.Me asomé con precaución,asegurandome que no había nadie.Y así era.Aquello probablemente había sido una trampa.Camine de nuevo hacia mi habitación para suspirar y mirar mi puerta.Note aquel olor de nuevo.

-Mierda...-tan sólo sentí un empujón contra la puerta desde la zona de mis riñones.Cai de rodillas,apretando mis dientes.

-Andreii... ¿Vas a aprender o no?

-Estaba haciendo...unas cosas pendientes...-prácticamente jadee aquellas palabras.Giulio negó con varios chasqueos de lengua.

-No me vas a tomar mas el pelo,Andreii.Y se como...-note como me agarraban de los brazos,alzándome. Miré a Giulio de forma seria y seca.

-No te he tomado el pe...-su dedo me interrumpió.No quería que me tocara alguien como el.

-Dame tu pistola.

-No...-susurré. Mi compañero comenzaba a ponerse tenso.

-Dame tu arma,Andrea.

-No,Giulio.-susurré.Podia quitarme un dedo de la mano,pero no mi Scintilla.Era mi fiel aliada,y era lo único que me aseguraba unos segundos más de vida en cualquier lugar.

-¡ANDREA, DAMMI LA CAZZO DI PISTOLA! (¡Andrea,dame la puta pistola!) -Giulio comenzaba a tensarse ya que ahora había agarrado mi camisa.

-¡TE HE DICHO QUE NO,JODER!-el puto Giulio respiró hondo,indicó a sus gorilas que me dejarán en el suelo y que se pusiesen tras el.

-Bien Andreii.Haremos una cosa...-alzó su arma,apuntándome. Tragué saliva.Solia ser macabro y sanguinario,pero aquello se estaba pasando,y más con mi persona.-Quien dispare y dé al contrario se quedará con su arma.Y además...acabará con su vida.¿Que me dices,jugamos y me das tu arma?...-susurró.

-No eres capaz de dispararme. Soy tu fuente de dinero.-dije confiado,soltando una suave risa.El contrario disparó en el suelo,cerca de mi pie.Tan solo lo aparté de forma involuntaria.

-Chicos guapos con dotes de seducción hay.Gente como tú que estafa y no está en el infierno,hay poca.Hay que hacer justicia...Andreii...-susurró mirándome. Empuñé mi arma,dirigiendola a su pecho.-Vamos,juguemos...Andreii...

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-Tenemos que buscarle...-musite. Keith me separó de el para mirarme a los ojos.En aquellos momentos iba en serio.Intente hacerme el digno,mirando sus ojos,aguantando las ganas de llorar.Si,era un debilucho y un sensiblon.

-Benjamin...¿otra vez quieres ir a...-le interrumpi.

-¡El puede ayudarnos,tengo un presentimiento!...

-Benjamin,no sabemos prácticamente nada de el.Solo que está en propiedades de la mafia.Y además,allí hay cámaras.La última vez nos la dejo pasar por que queríamos hablar expresamente con él...y por que le sedujiste.-mire el suelo y totalmente decidido,me gire.

-Entonces iré yo a buscarle.

-Benjamin,no hagas tonterías...-aquellas palabras.Aquellas palabras habían sido pronunciadas numerosas veces por mi madre.

-Benjamin, no hagas tonterías...-decía mi madre mientras saltaba en el sofá.Yo le miraba y me reía,mientras aspiraba a tocar el techo en alguno de mis saltos.

-¡Mira mamá,llegaré al techo, muy muy alto!

-Benjamin..-mi madre me cogió,alzandome en sus brazos.-No necesitas llegar a lo más alto para ser el mejor.-me envolvió en sus brazos,haciendo que su aroma me adormilase y me dejase totalmente calmado.

-Te quiero...mamá.

Tragué saliva en seco al oír aquellas palabras en mi cabeza,aquella situación de cuando era pequeño.Me gire y mire a Keith.

-Quiero ver a mi madre...otra vez...-dije,aguantando una vez más mis ganas de llorar.-Seguro que todos queremos ver a nuestras madres.-vi como Keith bajaba su mirada al suelo,y como Jane la desviaba de forma seria.

-Me gustaría Benjamin.Pero hay veces que es mejor que todo se quede como esta...-de fondo,casi como un eco en la lejanía,se escuchaba algo similar como el himno de Eiemeria. Keith miro el suelo serio,frunciendo su ceño.Al terminar de resonar aquella frase,me miro.-No se quien es Andrea,y me da igual saberlo.Pero pienso saber que hay tras Evimeria.

-¿Evimeria?...-murmure.

-Créeme,allí hay cosas que la gente como nosotros no sabe.-suspiro y me miró. -Buscaremos a Andrea.Estoy seguro de que sabe algo de Evimeria.

-¿Que tiene que ver Evimeria en esto?-murmure.

-Allí te encontraste a Lydia. Lydia es prácticamente como nosotros,tiene un defecto.¿Crees que Evimeria no tiene nada que ver?Te aseguro que si.Algo me huele mal desde hace tiempo.-Keith suspiro y me miró. -Buscaremos a Andrea.Despues,dejaremos la zona Norte. Esto no se va a quedar así.