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Evimeria.Zona Norte
Club "Notte di fuoco"
(Noche de fuego)

Al entrar,no pude hacer otra cosa que mirar mi alrededor y el techo.Era una mansión muy lujosa,grande y totalmente impecable.

-Que pasa,¿este sitio no te da pasta,Giulio?Esta intacto todo.

-No.Es esta città di merda (pueblo de mierda) . Está vacía y casi sin gente de alto estamento.¿Crees que un sucio pobre va a venir aquí,a aprovecharse de mis lujos?Oh no,no si yo sigo aquí para impedirlo.-tras decir aquello,dejo escapar un hilo de humo por sus labios,dando toques con sus dedos al cigarrillo.La ceniza que este creaba cayó al suelo,sin ningún arrepentimiento por parte del puto Giulio.La soberbia era el líder de su cabeza,y sabía que aquello,tarde o temprano,cobraría venganza.

-Eh tu.La ceniza.-dije,mirándola,observando como aquel tan temible mafioso subía las escaleras.Me dirigió una mirada fría y carraspeo.

-Andreii,  ves a tu habitación privada y deshaz lo poco que tengas de maleta.Si no haces un debut correcto...-dejo caer el cigarrillo por el espacio que mostraba la barandilla que decoraba unas largas y rectas escaleras.-...tendrás un castigo.-se dio la vuelta y siguió subiendo las escaleras.

-Tindris in quistigui...-murmure en un tono de burla.Una de las mujeres que estaba allí para limpiar dejó escapar una suave risilla, audible solo para ella y para mi.Sonriendo,le mire de reojo,y en un acto de bondad,recogí lo que pude de la mierda que había dejado Giulio. -Lo siento.No mereceis estar aquí.-murmure.

-Oh no,el señor Nascosto es amable y considerado.Nosotras no...-no deje que acabara. Su ensayada y falsa sonrisa no colaba conmigo,por lo que saque de mi cartera unos billetes.

-Esto es mi propina.Es muy triste,pero es algo mio.Si te pregunta Giulio,te lo ha dado el dulce y educado Andreii. -le guiñe el ojo,y tras oír una suave carcajada por su parte y una reverencia que devolví con una negación y dos besos por su parte de agradecimiento, salí a despejarme.Trabajar de anfitrión tan joven era totalmente insano.¿Que si había querido escaparme?¿Pensáis que no lo he intentado alguna vez o qué?Los gorilas de Giulio saben donde estoy a todas horas.
Decidí salir a uno de los miles barrios desiertos de la zona norte.Todo sucio,destrozado:despejado y solitario.En un ataque de furia,apreté demasiado una de las verjas de hierro que estaba agarrando,y con ello,solté involuntariamente una suave descarga.No me fije de que había un chico apoyado en esta.Estaba... ¿Llorando?Solo se que me vio,y que ambos nos vimos.Esboce una suave sonrisa y murmuré:

-¿Tienes alergia?Por los ojos,digo.

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Evimeria.
Zona norte.

No conseguía sacar de mi cabeza a aquel chico.Era tan...embelesante. Mis ojos estaban totalmente perdidos en el suelo,recordando aquellas manos que me protegieron en cierto momento.Si,unas manos que sujetaban un arma,pero de la manera más elegante y sutil que jamás había visto.Aquellos ojos,que podrían despertar la esperanza de cualquier persona con un solo pestañeo.Era...diferente.
Al llegar a aquello que llamaba hogar,escuche a Lydia alzar su voz con mi nombre.

-¡Benjamin,me habías asustado!-dijo abrazándose a mi,acariciando mi cabello.

-Estoy bien,estoy bien.-murmure.

-¡Si te vas,al menos dime algo!

-Pero...estabas dormida,y necesitabas descansar.-me defendí.Vi a Keith en el sofá,afinando lo que era su guitarra.Estaba algo vieja,pero notaba como le tenía cariño.Al verme,sonrió.

-Hey chaval.¿Has comprado algo?

-¿Qué?.. -recordé el dinero,y al buscar en mi bolsillo,saque todos los billetes que había tomado prestados.-Ah...no.No compre nada.-iba a dirigirme a mi cuarto cuando recordé.-Keith,¿que hay en lo alto de la zona norte?-el moreno frunció su ceño.Repitió aquellas últimas palabras en voz baja,para fruncir su ceño y dejar de tensarlo al saber de qué hablaba.

-Ah,en la lejanía.Creo que un club de alterne o una casa de citas.Ni idea,no la he pisado jamás.

-¿Por qué jamás la has pisado?

-Bueno,soy valiente,pero tengo límites.Es tan...intimidante.-fijó de nuevo sus ojos en las cuerdas de la guitarra.-Me gustaría ir,es de los pocos sitios que no he investigado a fondo.-dijo con una suave sonrisilla.

-¿Podemos ir todos?-me atreví a pronunciar aquellas palabras,como si estuviera pidiendo permiso a mi madre para salir.Me miro,para desviar su mirada a su faena,tensando con suavidad su ceño.

-Bueno,podríamos ir.Pero...no te crees muchas ilusiones.Dudo que podamos entrar o hablar con alguien de alto estamento.Como mucho un "Hola" y un "Iros,por favor".

-Tenemos que intentarlo...-susurre.

-Pero...-me miro,dejando la guitarra a un lado.-¿A que viene esto,Benjamin? ¿Y esa curiosidad?.-nervioso desvie mi mirada.

-No se...es solo que...he visto a un chico muy educado subirse a un coche negro y dirigirse allí.-le mire,insistiendo en que me creyera,pensando que no lo hacía ni mucho menos.-El es muy majo.Podríamos...llevarnos bien con el.-Estaba mintiendo.Queria saber de él,que había sido aquel calambrazo.Queria saber por qué estaba en esta zona si era tan privilegiado estamentalmente, o por qué sabía Italiano.

-¿Tienes curiosidad por alguien que se sube a un coche negro?Eso es raro,Benjamin.-baje mi mirada,totalmente desilusionado.Tenia razón,era estúpido,totalmente estúpido y patético. -Podemos ir.No perdemos nada.-oírle decir aquello hizo que levantara mis ojos y le mirase.

-¿De verdad?

-Claro,a mi no me importa. Solo hay que hablarlo con las chicas.Bueno...con la chica y con Jane.-dijo rodando sus ojos,riendo.

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-¿Vosotros habéis pensado eso bien?-la morena estaba cruzada de brazos,encogida en el sillón que se encontraba en el salón.

-Si,está decidido.Iremos a la alto de la zona norte.-pronunció el moreno,recogiendo su cabello en una pequeña coleta.Todo su cabello era similar a trenzas o rastas,y solía llevarlo recogido.De momento,no le había visto con el cabello suelto.

-No,no está decidido.No quiero ir.-dijo algo enfadada.

-Jane,no seas infantil...

-¿Infantil? ¡Jah!, ¿estas oyendote?Keith, somos 4 chicos,raritos con fuerzas raras.No quiero que nadie sepa de ninguno de nosotros,o por lo menos de mi.

-Jaaaaane...-murmuró el moreno,yendo hacia ella.Se sentó en el reposa brazos para mirarle a los ojos y ladear su rostro.-¿Quien ha dicho que alguien va a saber algo de nosotros? Solo iremos para ver la zona,y si alguien quiere entrar...entrará solo o con quien decida acompañarle.-Sabia que aquello iba por mi,por lo que asenti,tragando saliva.-¿Os parece bien?-el moreno había suprimido su típica sonrisa por una mueca de seriedad e intento de entendimiento.

-S-si,creo que esta bien.¿Lydia,que piensas?-mi amiga estaba a mi lado,y con su típica sonrisa inocente,asintió.

-Si,me parece bien.

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