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El día estaba igual de bueno, el cielo estaba muy despejado por lo que todo mantenía iluminado, sin embargo no calentaba, estaba todo muy fresco y por si fuera poco, todo eso acompañado de una suave brisa, el lobo gris continuaba durmiendo en medio de las piernas de su mejor amigo, mientras que este solo acariciaba lentamente la parte trasera de su cabeza y de vez en cuando las orejas, él disfrutaba mucho de hacer eso, le encantaba ver como su amigo movía la cola o formaba una leve sonrisa aún estando este dormido ¡Amaba ver que el lobo disfrutara de sus caricias!

Mientras hacía eso aclaraba un poco sus pensamientos sobre algunas cosas, mayormente con respecto a su rendimiento académico y lo que sería de este en el futuro, le faltaba un año y listo, podría ingresar a una universidad, ya tenía una en mente, la segunda mejor del país, no quedaba tan lejos de su hogar, estaba en la siguiente ciudad, mientras que la mejor estaba en el norte del país, bastante lejos de esta ciudad. 

Sabía que sin problema ingresaría, al fin y al cabo su "defecto" lo permitiría. Odiaba ser de la misma familia de grandes cánidos y que no tuviera mucha fuerza, pero en cambio tiene inteligencia, la cual la considera un defecto a pesar de no ser nada de eso. 

 〖...🌹〗

La campana estaba a pocos minutos de sonar, el labrador procedió a mover un poco los hombros del lobo con la clara intención que este despertara, sin embargo este no reaccionaba. Decidió soplar un poco la oreja de este, viendo como poco a poco sus enormes y oscuros ojos comenzaban a abrirse. —Hey, ya despertaste amigo.— Mientras este hablaba el enorme lobo se trataba de poner de pie. —Ugh... Sí, dormí bastante bien.— Dijo mientras frotaba sus ojos. Ambos se dirigieron al bebedero mas cercano, morían de la sed.

—No lo intentes, si tanto quieres lavarte el rostro mejor vayamos al baño mas cercano. De igual manera apenas sonará el primer aviso de la campana, recuerda que al segundo ya todos debemos estar en nuestras aula, aun tenemos tiempo Legosi.

Salieron de las canchas para entrar al bloque que les correspondían e ir al baño mas cercano. Cada uno provechó para hacer sus necesidades y limpiarse un poco el rostro con agua y jabón. —Ahora ya no tienes excusa para dormirte el resto del día.— Jack le dio un pequeño codazo a su compañero. —Sí, sí, tu tranquilo, fue corta sin embargo logré descansar demasiado je.— 

Ambos entre bromas entraron al aula de dicha clase, no eran los primeros en llegar, ya habían otros animales sentados esperando a que inicie la clase. Ambos entraron como de costumbre y siguieron con su plática, pocos minutos después la maestra entró e inició la clase. 

   〖...🌙〗 

La noche ya había llegado a la Academia Cherryton hace unas cuantas horas y en la habitación 701 ya estaban todos sus estudiantes pasando un buen momento entre ellos jugando poker junto con algunas botanas en un pequeño bol. —¡Esa seriedad entre ustedes tres me está matando ja, ja, ja!— Tanto Jack, Voss y Collot ya habían perdido, solo quedaban el lobo gris, el coyote y la hiena; los cuales pensaban demasiado sus movimientos.

Al final de las cinco rondas que se echaron, Durhan fue el que mas veces ganó en la primera y la segunda y por ultimo en la cuarta. —Ya me aburrí de tu actitud, ¡bien, ganaste! sin embargo eso no es motivo para que nos lo restriegues en la cara. Juguemos otra cosa.— Molesto y siendo sincero ante la actitud de Durhan, Miguno propuso cambiar el juego por uno no tan competitivo. 

—Espera, dame eso.— Jack estaba dándole el ultimo sorbo a la enorme botella de refresco, a lo que Collot se la quitó. —Listo, ya está juguemos a la botella.— 

Entre todos formaron un circulo dejando la botella en el medio, Miguno la movió pues fue idea suya el juego, la botella giró y giró, hasta que finalmente esta quedó señalando a Voss por la punta y a Durhan por atrás de la botella. —Venga, ¿verdad o reto Collot?— Este le dirigió una mirada desafiante esperando la respuesta por parte del peliblanco.

—Verdad.— No tardó mucho en pensarlo, pues este es casi un libro abierto, todos saben lo que a este le ha pasado, ya sea por que le han preguntado o simplemente este les haya dicho. —Genial... Hmm veamos... Ya le has echad-...—

—Sí y ya se los he dicho varias veces.— Bajo ese enorme fleco, se sabía que tenía una mirada victoriosa, de paso que su sonrisa ya lo dejaba más que claro. —Maldito y... ¿ya has marcado a una hembra por casualidad?— Este elevó una ceja como respuesta al gesto generado por el contrario anteriormente. —Tranquilo, estoy seguro que mas tarde nos tocará de nuevo y será al contrario; y con respecto a lo anterior, dejémoslo como probablemente.— Se cruzó de brazos y giró la botella con fuerza.

Esta vez el turno cayó para Voss y Jack. —¿Por qué contigo Jack? Eres demasiado... Ugh ¿normal? Je, je ¡no se me viene a la mente ninguna pregunta!— El pequeño zorro se llevó la mano al mentón tratando de pensar en alguna cosa para el labrador —Contigo sería un "¿qué probabilidad hay de qué?..."— El contrario solo asintió como respuesta manteniendo un rostro feliz como siempre. 

—Perfecto entonces, ¡¿qué probabilidad hay del uno al tres de qué... Vayas a la cafetería y nos traigas dos refrescos?!— Ambos se miraron a los ojos por pocos segundos. —¡Tres!— Dijeron al unisono, haciendo que Jack frunciera el ceño y golpeara el suelo con uno de sus puños. —Qué mal... Bien iré, solo dame el dinero.— se puso de pie mientras le extedía la mano al otro esperando la plata.

 —¿Perdón? Debes sacar del TUYO, ¿porque sino cuál sería el chiste?— Este levando ambas cejas por dos veces en forma de burla, molesto ante dicha acción sacó de su mochila la billetera y procedió a ir en dirección a la cafetería. —Se nos enojó el cachorrito JA, JA, JA, JA.— Se echó a reír la hiena con dicha risa tan característica en su especie. —Al rato se le pasará, ya sea al momento de darnos los refrescos o bien, mas tarde lo hará en privado conmigo. El chico es muy educado.— Comentó Voss.

—Sí tienes razón, pero igual creo que no debería ser tan... Pues como lo digo ¿decente? somos sus amigos y compañeros, ni que nos fuéramos a molestar con él.— Este simplemente ladeó la cabeza a un lado mientras alzó los hombros confundido. —Durhan, al igual que él es un perro, es normal que sea así, de pasó es un labrador, tú sabes perfectamente a que me refiero, mayor inteligencia y afinidad a cambio de menor rudeza.— 

—Esto está mal, d-digo... El chico es demasiado tierno con cada uno de nosotros, no deberíamos de hablar mal a las espaldas de él, ¡en más de una ocasión nos ha ayudado a todos! ¿o me equivoco?— Pregunto un tanto nervioso Legosi, nunca le gustaba meterse en discusiones o este tipo de conversaciones, le parecía demasiado feo. —Sí, claro que lo ha echo ¿a quién Jack no le ha salvado el pellejo mas de una vez?— 

—Especialmente a tí, ¿o me lo negarás Legosi? El chico está demasiado encariñado a ti y no te juzgo por ello.— Decía con completa tranquilidad el ovejero. —El pobre debe estar aprovechando sus últimos momentos contigo, por eso están juntos casi siempre.— Dicho comentario hizo que las orejas del lobo bajaran lentamente al igual que su cabeza. —Legosi... ¡¿acaso no le has dicho a Jack que tu-?!...—   

—¿Decirme qué?— 

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