28:JUNGKOOK
CAPÍTULO 28
Jungkook
Me desperté a mediodía y después de comer algo ligero en el bar-cafetería de la piscina y pasear un poco por el hotel, me fui a la suite para hablar un poco con los chicos y mis padres. Les mandé fotos de la gala de la noche anterior y todos me dijeron lo bonito que me quedaba la ropa, todos menos mi hermano que me reprochó por robarle el traje cuando ni siquiera se lo había estrenado.
Pero poco me importa si el vive robándose mis cosas.
Para las dos de la tarde una llamada interrumpió mi tranquilidad. Era Taehyun, así que contesté.
—¿Qué tal principito? —canturreo mientras respondo la llamada.
— Bien, huracán. —sonreí auqnue no me viera ante la mención del sobrenombre— ¿Te vienes a la playa conmigo? Tengo ganas de caminar un rato por allá, mis padres están en el bar del hotel. Pensé que sería bueno invitarte.
Respiré durante unos segundos y estuve dubitativo acerca de lo que iba a responderle.
—¿Sigue ahí?
— Si, si. Espérame. Me cambiaré. —susurré.
—Te espero en el lobby, no demores.
Colgué para salir a buscar en mi maleta algo para la ocasión.
Me decanto en ponerme rápido un short cómodo de nailon y una camiseta mangas corta también de color negro, agarro una gorra para ponerla sobre mi cabello, con la visera hacia atrás rosando mi nunca y me calzo unas sandalias de playa.
Gafas, protector, toalla, dinero por si las moscas y celular. Todo listo.
Cuando bajé hacia el lobby del hotel, ya Taehyun se encontraba esperándome. Vestía un pantalón de hilo blanco a juego con la parte superior de lo que le tapaba su dorso, la camisa tenía dos botones sin abrochar dejando un poco expuesto el pecho del castaño, el pantalón resaltaba el trasero del chico de piel acanelada, lo cual me llevaba a detallar más, lo bien que se le veía aquel outfit.
Bonito. Pensé.
Lleva también unas espléndidas gafas Dior con el cristal ámbar, y una cartera pequeña que le cuelga del hombro y le llega hasta el inicio de su cadera . Su pelo se regaba por su frente alborotado, dándole un aspecto despeinado y despreocupado, pero aún así de "sencillo" por así decirlo, todavía emanaba superioridad y ostentosa presencia.
Llegué a su lado y él levantó una ceja cuando se dio cuenta de que había llegado.
— ¿Iras así a la playa?
— Por supuesto, ¿que tiene? —reclamé.
— Nada, nada. —entrecerré mis ojos con desconfianza. —Vamos.
Después de alquilar el auto, el trayecto no fue tan largo, así que llegamos en cuestión de media hora.
El olor a mar inunda mis fosas nasales, cuando salgo del interior del auto, se me hace una agradable vista y un relajado ambiente. Me encanta. El sol picaba en todo mi cuerpo y la calidez que provocó me hizo sentirme perfectamente vivo.
Ensimismado en el bonito paisaje me quito las sandalias para dejar que mis pies se entierren en la arena, los granos de estas se sumergen entre mis dedos dándole una placentera sensación de comodidad a mis pies.
Cierro mis ojos para tomar una bocanada de aire y sonreír, siento los pelos de mi flequillo que agazapados por la parte trasera de la gorra intentan moverse con la brisa.
Amo el mar, definitivamente.
— Ven, sentémonos bajo una sombrilla. —Taehyun manoteó hasta sacarme del momento de trance.
Yo asentí y caminé detrás de él.
Tendí la toalla en la arena y dejé allí mis cosas. El castaño adaptó mi acción, se negó a meterse al agua y yo sien embargo si disfruté un poco de ello.
Luego de un rato salí del mar y el me dio una mirada, me senté un poco en la arena y tras una charla amena con él de cosa banales, la ropa se secó por completo y pude volver a sentarme en la toalla sin dejarle arena a esta.
Sin embargo vi al castaño un poco desesperado mientras buscaba algo entre sus cosas.
— ¿Qué sucede? —pregunto.
Taehyun me mira por algunos segundos.
— Es.. hace mucho sol ya, y siempre utilizo una paletita de plástico para embarrar el bloqueador solar, pero al parecer no la traje.
Suspiré.
— Usa tus manos. — dije y el negó.
— No quiero ensuciar mis manos, después no puedo tocar mi celular y tendría que meterme al mar para lavarlas, aún haciendo eso mis manos se quedan con residuos de crema.
Bufé.
— Eres tan tiquismiquis. — él sonrió.
Me acerqué hacia el hasta quedar muy cerca.
— ¿Que.. qué haces?
— Yo no tengo problema con aplicarte la crema solar con mis manos. —dije.
Asintió. Agarré el bloqueador y derramé un poco de la crema en mis manos. Estaba un poco fría, el olor era agradable. Deslicé mis dedos dejando un poco de crema solar en su frente, nariz, mejillas y barbilla.
Me encontraba tan concentrado en desaparecer la crema de su piel que no había notado la intensa mirada que estaba dándome.
Me detuve por unos segundos y lo miré a los ojos, sus pupilas se dilataron un poco más y sus ojos brillaron con intensidad.
Quizás es momento de saber que es lo que sientes. Me empujó mi subconsciente.
¿Debería?
Miré sus labios, y el se los relamió dejándolos brillantes debido a la saliva.
— Jung..kook— el barítono de su voz se escuchó como un jadeo de desespero.
Bajé mis manos con lentitud, con la mirada puesta en sus ojos, le tome de las mejillas con suavidad y firmeza para besarle con determinación. Los labios se abultaron ante la acción.
El primer contacto entre sus labios y los míos fue un suave choque, un escalofrío me recorrió la columna vertebral. La sensación que me recorrió el cuerpo fue explosión.
Me separé un poco y lo miré a los ojos. El levantó la vista de los labios a mis ojos, sus pupilas volvieron a dilatarse y agarrándome del cuello de la prenda superior que llevaba, volvió a pegar sus labios a los míos.
Este segundo choque fue más intenso que el casto beso anterior. En el vientre y el estómago se me pegaron dos diferentes sensaciones, pero ninguna de estas era mala.
Sentía..
De todo. Si, eso. Sentía de todo con los labios de ese castaño insoportable encima de los míos.
Taehyun ladeó un poco el rostro, y tomó mi labio inferior con suavidad, sus manos pasaron a acariciar los largos cabellos que tocaban en mi nunca, rosando también la visera de la gorra. Exigió la entrada de su lengua en mi boca, y lo dejé.
Maldita sea. Que gusto.
Hubo un momento en el que interrumpí el beso para volverle a mirar a los ojos, necesitaba observar cómo brillaban de deseo ante mi. Después de volver a besarlo con efusividad, me separé con lentitud pero juntando nuestras frentes y narices.
Mi respiración estaba más que errática, la de él también, podía sentir como su pecho bajaba y subía.
— ¿Que.. fue eso? —logró susurrar mientras levantó su cabeza para mirarme con controversia.
— No.. no sé... —separé un poco mi frente de la de él, aún mis manos estaban en sus mejillas.
Mejillas que ahora estaban con un leve tinte carmesí.
No tenía ni idea de lo que estaba sintiendo pero algo si tenía claro y es que, me había gustado el beso. Se sintió diferente, muy diferente a otras veces.
Taehyun me miró con nerviosismo y se separó de mi con rapidez. Levanté una de mis cejas. Su aptitud había cambiado drásticamente y su mirada también. Se le veía a leguas que estaba incómodo y quería retirarse lo antes posible.
— Deberíamos.. —quedé quieto al ver como se levantaba con prisas.— Esto no... —llevó sus manos a la cabeza. Se agarró los pelos y los jaloneó.
— ¡Oyeee! Te harás daño, por favor tranquilízate. —pedí pero sus ojos se volvieron acuosos. —¿Que es lo que te sucede? —pregunté con preocupación.
— Jungkook, hay algo que tú debes saber. —palidecí un poco cuando soltó eso de la nada. —Creo que no es mi deber contártelo.. ¿sabes? Pero..carajo, nos hemos besado y no puedo evitar pensar en.. él.
— Taehyun..—le llamé— ¿de él quien?— el pareció dubitativo.
Su mirada se perdía en la nada. No tenía idea de lo que le pasaba por la cabeza, pero jamás creí ese nombre salir de sus labios.
— Tengo que contarte algo sobre Tae Ho, —abrí mis ojos en sorpresa—, pero tú deberás contarme lo que realmente sucedió con Ho Baek.
Me había dejado perplejo la mención de mi exnovio por parte del castaño. Estaba alucinando.
— ¿Pero.. pero como.. como sabes sobre él? No recuerdo haberte contado absolutamente nada. —el bajó la mirada.
— Ese es el problema. Que se quien es. Me temo que..
— ¿Jimin te contó? ¿No es así? —le interrumpí—. Porque dudo mucho que haya sido Namjoon, el único que a veces se va de lengua sin querer, es a mi mejor amigo, con Yoongi no te llevas y Seokjin apenas se integra al grupo.
El negó rápidamente. Su estado de intranquilidad no retrocedía. Y el mío comenzaba a aumentar.
— No, no, no. —colocó su manos en mis hombros y el solo toque me electrizó.
No entiendo porque siempre era así. Algo tenía que cagar el momento de tregua entre el y yo. Todo estaba normal entre él y yo, pero, de momento todo se exasperaba de una manera descomunal.
— ¿Entonces como lo sabes? ¿Como sabes que mi ex pareja es Ho Baek?
El trago con fuerza, se soltó de mis hombros y se sentó mirando al mar, palmeó su costado para que me sentara y cuando lo hice dijo:
— Prometo contarte el porqué de todo. —esta vez si me miró a los ojos, y pude sobre todo notar que había mucha tristeza en la mirada. —De verdad, solo necesito saber como terminaron las cosas con él.
Y por un momento lo pensé, si, quizás era él. El chico con el que Ho Baek me había sido infiel.
Porque ese maldito hijo de puta, se había marchado de mi vida sin mas acá ni mas allá dejando una simple carta que ni el valor tuvo de entregarme, la dejo con Jimin y se largo ese mismo día del pueblo.
— ¿Eres el chico con el que me traicionó? —comenté con furia mirándolo con enojo.
El abrió los ojos.
— ¡No! —se exaltó y negó con sus manos. —Asi que.. fue lo que te dijo..
— Basta de reabrirme las heridas Kim, y déjate de rodeos.
— Solo soy amigo Ho Baek, —el castaño miró a la arena y comenzó a jugar con la esta. Suspiró.— Tae Ho, mi hermano... —vi sus ojos llenarse de lágrimas y se me apretujó un poco el corazón.
No entendía nada del punto al que quería llegar, pero de cierto modo. Si me daba un poco de cosita verlo llorar. Pero la furia y la consternación que estaba sintiendo no me dejaban amedrentarme para consolarlo.
— Ya se que murió.. ¿que tiene que ver con Ho Baek, Tae?—indague con desespero ante el silencio que se formó.
Nada me llevaba a alguna conclusión, todo estaba siendo confuso. El pareció concentrado de escoger las palabras para contarme.
— Mi hermano esta muerto Jungkook, como ya sabes... —soltó un sollozo en silencio.
— Lo siento yo.. si, me dijste anoche..
El retornó su vista al mar mientras asentía. Por suerte desde que habíamos llegado la playa parecía estar deshabitada, quizás porque no era época de verano.
— Es necesario contarte. —pasó una de sus muñecas por la mejilla derecha y se limpió un poco las lágrimas.— Ho Baek te mintió, pero no de la forma en la que crees. —susurró, arrugué mi entrecejo—. Mi hermano murió porque tenía la enfermedad de la arteria coronaria anómala.
— Entonces eso quiere decir que.. —los ojos me escuecen ante lo que estoy pensando, pero Taehyun niega con rapidez y no da tiempo a que las lágrimas se me salgan de las cuencas de los ojos.
— No, el no murió. —un alivio recorrió mi cuerpo— Él está vivo, está bien, —suspiré agradecido— la cosa es que para el mismo tiempo que te dejó fue el mismo tiempo en el yo lo conocí. —comenzó a contar— Era compañero de mi hermano en la clínica a la que asistían cuando tenían alguna recaída, esta enfermedad tiene que ver con el paso de sangre hacia el corazón. —explicó resumiendo— Me contó sobre el chico que era el amor de su vida, nunca me mencionó su nombre, o me mostró alguna foto ya que hyung era bastante reservado para si mismo. Pero me contó su historia, y no quería que sufrieras con el, o eso fue lo que me contó en aquella horrible habitación de hospital, estaba muy triste por hacer aquello, y pretendía buscarte luego de controlar la situación, pero sentía que era muy tarde..
— Lo es. —comenté con aspereza.
— Hyung quería.. quería que llegases a cumplir todos tus sueños sin tener que cargar con él y su enfermedad. Por eso se alejó dejando una infidelidad como excusa. Yo le dije que no había hecho bien, pero para cuando me lo contó.. ya había pasado algún tiempo.
Atónito.
Estaba atónito con la cantidad de información. Se supone que esto iba a ser un viaje agradable. Pero estaba siendo lo contrario.
No podía pronunciar nada y estaba aún procesando todo lo que el castaño acababa de soltarme.
Entonces.. ¿todo fue una mentira? ¿Todo lo de la infidelidad fue una completa mentira?
— Entonces al ver la pintura de el que tenías en su cuarto, que también me aclaró que amas pintar, y amas el arte, y que eres insoportable per de buen corazón.. muy obstinado.. y muchas cosas más.. descubrí que tú eras ese chico. No me hizo falta saber tu nombre o ver alguna foto. Atar cabos fue fácil y deduje con rapidez que eras tú le pueblerino por el que mi amigo sufría... —continuó sin mirarme.
— Si, fui su novio. Pero ya no soy el amor de su vida, ese tiempo se acabó. —murmuré.— Te repito, es demasiado tarde para eso, ya hace un año desde que se fue y a pesar de que me alegra oír que esta bien, no me interesa en lo absoluto.
Por mucho que me doliera recordar a Ho Baek sentía rencor, y me había empeñado en odiarlo con todo mi corazón en los primeros meses como para que así de la nada todo ese rencor se derrumbe por descubrir que su mentira no fue serme infiel, sino, ocultarse bajo eso para que yo no sufriera su enfermedad.
Si me sentía dolido por la mentira, pero más me dolía el saber que solo fue un plan para que "cumpliera mis sueños".
¿Que acaso las parejas apoyarse?
Es verdad que Ho Baek es mayor, pero no tenía derecho a decidir eso por mi. Y ya todo estaba acabado.
— Hyung me dijo que eras obstinado. Y la mejor forma de que no sufrieras mucho si el.. —hizo una pausa—..moría, era haciendo eso, alejándote para que no supieras.
— ¡Pero si moría lo iba a saber de todo modos! —solté un gritito sin poder contener mis lágrimas.
— Eso tendrías que reclamárselo a él. —negué—..Solo te he contado esto..—pasó una de sus manos por mis hombros para abrazarme un poco. El olor de la crema solar y su caro perfume me inundó la nariz.
Respiré un poco, no estaba molesto con Taehyun, mas bien, agradecía que se dignara a contarme, cierto que quisas no le correspondía a él sacar esa verdad a la luz, pero de cierta forma me sentía ¿bien?
Miré en dirección al horizonte, después cambié mi rostro hacia el cuello de Tarhyun, necesitaba calmarme u dejar de llorar. El sobaba mi brazo tatuado con delicadeza para que me tranquilizara.
—Jungkook, —llamó, yo levanté mi rostro para mirarlo—, yo nunca creí que llegara a decirte algo como esto, —se separó y con el rostro serio me miró a los ojos–, pero siento atracción hacia ti, me gustas mucho y me he puesto siento mal porque conozco a hyung, siento que lo traiciono. Si no fuera necesario no lo explicaría pero no puedo evitarte la verdad cuando se trata de mis sentimientos y los tuyos.
Negué.
— Estoy, creo que estoy bien. Solo necesito asimilarlo.. regresemos al hotel, no deseo... necesito darme una ducha y dormir, podemos hablarlo después.
— Está bien, vamos. —respondió levantándose.
Tenía mucha bruma en mi, había sido mucha información. El momento eclipsado y bonito que estábamos teniendo se fue por el caño cuando mencionó a Ho Baek, de cierto modo entiendo su punto. No lo juzgo mas se lo agradezco.
Pero ¿que es lo que siento yo realmente hacia él?
¿Me atrae?
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