
ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 3.
ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 3
●●●
sᴡᴇʟʟᴠɪᴇᴡ, 04 ᴅᴇ ғᴇʙʀᴇʀᴏ.
La mirada totalmente desconcertada de Henry, me dejaba ver muchas cosas en un segundo. Y la primera, era que no me creí en lo absoluto.
¿Quién me iba a creer?
¡Era imposible que tuviera pareja para la jodida fiesta!
Principalmente porque, cuándo me enteré tenía poco tiempo para conseguir pareja. O al menos un mes y medio era poco tiempo para mí, y segundo, nadie. Pero nadie, absolutamente nadie se fijaba en mí.
-Hagamos un trato.-luego de un par de segundos bastantes incómodos. El rubio hablo mientras se acercaba un poco más-
-¿Qué clase de trato podríamos hacer? Ambos tenemos objetivos distintos.-indiqué. aunque parecía una idiota, no lo era.-
El famosísimo Henry Hart no se acercaba así a las personas sin pedir algo a cambio.
-Por la cantidad de dinero que sea, tú me dejarás entrar a la fiesta como tú pareja.-hizo comillas en la última palabra.- Y cuándo yo lo vea necesario, tendrás que estar cerca de mí.
-Lo siento Hart, pero eso sería bastante humillante para mí.
Cada palabra, o mejor dicho pero que le ponía en la conversación, parecía ponerlo de más malhumor.
-Se lo mal que te cae Chloe, piénsalo. Su cara al ver a su prima estar con la persona que fue anteriormente alguien muy importante.
-Me parece cruel.
-Seria una forma interna de arruinar su momento tan esperado, verme contigo va a ser una gran sorpresa.
-¿Tratas de decirme que soy muy fea para estar junto al popular Henry Hart, no?-le pregunté un tanto ofendida, frunciendo mi ceño.-
-No, o sea. No quise decir eso, capaz fue un simple malentendido de palab....-quedo a medio hablar, en el momento que decidí hablar por sobre arriba de él.-
-Déjame decirte algo Hart, aceptaré este patético trato. Con tal de ver la humillación que sentirás al estar cerca de mí. Y además de eso, quiero como pago cien dólares.
-¡¿Hablas enserio?!
-Sí. ¿No era eso lo que querías? Entrar a la dichosa fiesta.
-No, o sea sí. Pero, ¿Cien dólares?-pregunto sorprendido.
-¿Acaso creías que te pediría diez dólares por esto?-solté una pequeña risa, y decidí irme finalmente en ese momento.-
Vaya.
Sin pensarlo, tenía pareja para esa maldita fiesta. Y sin pensarlo, era él chico que me traía loca hace años.
¿Había sonado muy desesperada con él?
¿O muy repugnante?
Él se había comportado de una forma algo grotesca, y devolverle algo de eso no era algo muy malo. Aún así no quería generar una mala imágen.
Ahora había un drama aún peor.
¿Que rayos iba hacer mañana?
Nunca había estado en una fiesta organizada por Chloe, la cuál trae como consecuencia un descontrol de todos los adolescentes ahí. Y ir junto a un chico, él cuál se que ni siquiera me va a dar la hora en toda la noche. O solamente me utilizará cuando vea necesario pelearse con Chloe. Me parece algo desesperante y aburrido.
Definitivamente necesitaba invitar a alguien que aunque sea, se siente al lado mío hacerme compañía para no verme tan patética. Y del sexo femenino en lo específico.
¡Ya sé!
¿Piper? No, ella definitivamente no iría a menos que no sea para estar con Chloe y su novio francés famoso, ese cumpleaños será un gran ingreso de seguidores para su cuenta.
¿Bianca? Naah, muy estúpida si hago eso. Es otra de las ex's de Henry. Y con seguridad no acepté, además tampoco la conozco lo suficiente. Y capaz mutuamente nos odiemos, es muy superficial y hueca para mí gusto.
¡Charlotte!
Si.
Ella era mi opción más coherente, era alguien agradable y tranquila, con una pizca de sarcasmo en su personalidad. Y dudaba bastante que se negará a rechazar mi propuesta.
-¡Char! ¡Charlotte!-sin darme cuenta, ya estaba en el salón de química. Y entrando algo desesperado iba Jasper, con un balde mediano en su mano derecha.- Conseguí otro balde.
-Uuh, que novedad.-la morena le contesto algo cansada, sin despegar la mirada de su libro.- Ve y guárdalo Jasp. La clase va a comenzar en menos de cinco minutos.
-Es exclusivo de Manhattan. ¿No es grandioso?-pregunto entusiasmo, y una mirada de incredulidad apareció en la cara de Charlotte.-
-¡Jasper! Por favor ve y guarda eso, hablamos luego de tu problema con los baldes extranjeros.
Jasper tan emocionado por su balde, le daba igual cada palabra de la chica. Y se fue entusiasmo escaleras abajo a guardarlo seguramente en su casillero.
-Es extraño, lo sé.-murmuro ella atrás de mí, dónde estaba sentada.- Es una rara obsesión que tiene desde hace años.
-Parece entretenerse con eso.-le respondí. Sin sacar mi mirada de la puerta abierta.-
-Los chicos son sumamente estúpidos.
Oh, dímelo a mí.
En menos de cuarenta y ocho horas tenía una fiesta donde iría con su mejor amigo Hart por medio de un trato ridículo que involucraba la crueldad, seguramente celos y unos cuántos dólares, dónde ambos nos veíamos beneficiados.
▌│█║▌║▌║║▌║▌║█│▌▌│█║▌║▌║║▌║▌║▌║
05/09/22
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro